El documento presenta diez ideas para construir un futuro, abordando tendencias económicas y sociales que emergen tras la crisis, como el cambio en valores, la relación entre individuos y organizaciones, y la tecnología como transformadora. Se destacan la necesidad de nuevos modelos de negocio enfocados en la satisfacción del cliente, el surgimiento de una clase emprendedora, y la importancia de lo local en un contexto globalizado. También se menciona el crecimiento de la economía colaborativa y la valoración de recursos intangibles en un mundo orientado hacia la abundancia.