El documento discute el papel de la universidad en el desarrollo social a través de programas de vinculación con la sociedad, resaltando la importancia de la responsabilidad social y el aprendizaje continuo. Se aborda la necesidad de reconocer y dialogar sobre las necesidades regionales, así como la incorporación de metodologías participativas en la educación. Se enfatiza la formación de competencias y la deslocalización de la universidad como estrategias clave para un desarrollo sostenible en la Araucanía.