(1) Pablo escribe a los romanos declarando que es siervo de Jesucristo y apóstol llamado a predicar el evangelio de Dios. (2) El evangelio había sido profetizado en las Escrituras y se refiere a Jesucristo, descendiente de David, que fue declarado Hijo de Dios por su resurrección. (3) Pablo da gracias a Dios por la fe de los romanos y expresa su deseo de visitarlos para fortalecerlos espiritualmente mediante dones del Espíritu.