El documento aborda la crisis mundial del agua, destacando su gravedad y la necesidad de acción para gestionar los recursos hídricos adecuadamente. Se identifican varios desafíos, como satisfacer las necesidades humanas básicas, proteger los ecosistemas y asegurar el suministro de alimentos, y se menciona que la gestión inadecuada del agua afecta especialmente a las poblaciones pobres. También se subraya la importancia de la cooperación internacional y el papel del agua en el desarrollo sostenible, así como la creación de indicadores para evaluar el progreso en la gestión de recursos hídricos.