El documento resume la caída del Imperio Romano de Occidente. En el siglo V d.C., varios pueblos germánicos invadieron el imperio debilitado. En 476, Odoacro depuso al último emperador Rómulo Augusto, marcando el fin formal del Imperio Romano de Occidente y el comienzo de la Alta Edad Media en Europa. El territorio se fragmentó en reinos germánicos independientes.