El documento presenta una historia de la pena de muerte desde las primeras civilizaciones. Explica que la pena de muerte existió en la antigua Grecia y Roma, donde se aplicaba por delitos como homicidio, delitos sexuales y delitos políticos. También existió en las culturas precolombinas como los aztecas y mayas, donde se aplicaba por delitos y traición. La pena de muerte continuó aplicándose en México después de la independencia en 1821.