El documento narra la historia trágica de Amarca, una hermosa doncella indígena que vivía en Icod, Tenerife. Muchos hombres se enamoraron de ella, incluyendo al último rey Mencey de la zona, Pelicar, y un pastor llamado Garigaiga. Amarca rechazó los avances de Garigaiga, lo que lo llevó al suicidio. Posteriormente, Amarca se arrojó al mar atormentada por la culpa, siendo encontrada muerta en la playa. Su memoria continuó resonando en lament