El profesor llenó un frasco de vidrio con pelotas de golf, perdigones y arena para demostrar a sus estudiantes que aunque pensaran que el frasco estaba lleno, siempre había espacio para más. Luego les explicó que las pelotas de golf representan las cosas más importantes en la vida como la familia y la salud, los perdigones son otras prioridades como el trabajo, y la arena son las pequeñeces. Les aconsejó ocuparse primero de lo que realmente importa para no quedarse sin espacio.