Las claves para una dirección de equipos exitosa incluyen dar ejemplo a través de la propia conducta, establecer normas claras e inculcar buenos hábitos, y escuchar activamente a los jugadores para anticipar posibles conflictos. También es importante motivar a los jugadores a través del diálogo y el convencimiento en lugar de la imposición, y mantener la calma y la objetividad tanto en los momentos de éxito como de fracaso. Un entrenador exitoso se rodea asimismo de un leal cuerpo técnico y valora la form