El documento describe el Trastorno Específico del Lenguaje (TEL), que afecta principalmente el lenguaje oral con deficiencias en la comprensión y producción de sonidos. Es importante diagnosticar el TEL tempranamente para iniciar una intervención adecuada, ya que los síntomas tienden a empeorar con el tiempo. Los niños con TEL no presentan déficits neurológicos, sensoriales o intelectuales, pero es importante realizar pruebas para descartar otras anomalías.