Este documento describe varias intervenciones para abordar problemas espirituales y religiosos como el deterioro de la religiosidad. Propone utilizar la comunicación terapéutica y el apoyo espiritual para establecer confianza, demostrar empatía y ayudar al paciente a encontrar equilibrio a través de sus creencias. También recomienda facilitar la práctica religiosa coordinando servicios religiosos y rituales y respetando las creencias del paciente.