El expresionismo fue un movimiento artístico del siglo XX que reflejaba los sentimientos y el interior humano a través de la distorsión de formas y el uso de colores no naturales. Artistas expresionistas como James Ensor y Edvard Munch buscaban expresar la angustia interior a través de la línea y el color, influenciados por el arte primitivo. Munch, en particular, exploró temas como la enfermedad, la muerte y la ansiedad en obras como El grito.