En las elecciones presidenciales de 1988 en México, Carlos Salinas de Gortari del PRI fue declarado ganador a pesar de las acusaciones generalizadas de fraude electoral. El conteo de votos fue cuestionado por todos los partidos políticos excepto el PRI. Aunque una encuesta confidencial mostró que Cárdenas del PRD y Clouthier del PAN obtuvieron cada uno casi una tercera parte de los votos, la Comisión Electoral anunció a Salinas como ganador.