El documento aborda la evolución de la televisión hacia un formato social y transmedia, donde la audiencia se convierte en parte activa de la narrativa. Se destaca la importancia de las redes sociales y la interacción de los espectadores en tiempo real durante programas y eventos, así como la necesidad de nuevas estrategias para medir la audiencia social. Además, menciona las iniciativas de contenido colaborativo y la adaptación de producciones para dispositivos móviles y plataformas digitales.