La economía de España enfrentó una recesión desde 2008 debido a factores como la crisis financiera y la dependencia del sector de la construcción. El paro ha impactado diversas comunidades, siendo Andalucía y Extremadura las más afectadas, y se ha visto más en hombres, quienes están relacionados con el sector de la construcción. La situación se caracteriza por problemas estructurales y falta de competitividad en la producción nacional.