El currículo de educación física en Ecuador se concibe como una construcción social que promueve la contextualización del conocimiento y el desarrollo integral del estudiante, abarcando diversas dimensiones físicas, emocionales y sociales. Se propone un enfoque crítico que favorece la participación activa en prácticas corporales significativas, resaltando la importancia de la salud y el autodominio en la práctica física. Cada nivel educativo contempla objetivos específicos que buscan fomentar habilidades motrices y la construcción de identidad a través de la práctica deportiva y lúdica.