Este documento resume la evolución histórica de la responsabilidad patrimonial del Estado y sus funcionarios. Inicialmente, el Estado no era responsable por los daños causados (el rey no se equivoca). Luego, se admitió responsabilidad limitada por daños causados por empleados públicos. Actualmente, el principio es la responsabilidad del Estado por daños antijurídicos causados por el ejercicio del poder público o por empleados estatales, de acuerdo con la Constitución y las leyes.