El maderismo fue el primer movimiento de la Revolución Mexicana, liderado por Francisco I. Madero entre 1909 y 1910, cuyo objetivo principal era regenerar la democracia mediante el sufragio efectivo y la no reelección de funcionarios. La insurrección comenzó con el Plan de San Luis, que convocó a un levantamiento armado el 20 de noviembre de 1910 para derrocar el régimen de Díaz y restituir tierras a los campesinos. A pesar de su éxito inicial, los maderistas se enfrentaron a la oposición de diversos grupos y eventualmente se disolvieron, dando paso a una lucha por diferentes ideales políticos en el país.