La orientación al mercado se define como una cultura organizativa que se centra en satisfacer las necesidades y deseos de los clientes para lograr mayores resultados económicos. El mercado "uno a uno" busca establecer una relación personalizada con cada cliente a través del uso de bases de datos e interacción directa para ofrecer productos diferenciados que fomenten la lealtad. Esto requiere conocer detalladamente a los clientes, identificar a los más valiosos y personalizar los productos según sus necesidades individuales.