La Corriente Libertadora del Sur, liderada por José de San Martín, logró la independencia de Chile y Perú. San Martín desembarcó en Pisco, Perú en 1820 y estableció su cuartel general allí. Buscó reconocer la independencia de Perú y América durante la Conferencia de Miraflores, pero fracasó. Más tarde, el virrey Pezuela fue derrocado y reemplazado por José de la Serna durante el Motín de Aznapuquio.