El documento resume la historia de los géneros musicales occidentales. Sus orígenes se remontan a Grecia antigua, donde la música tenía un papel pedagógico y moralizador. En la Edad Media, la música fue cultivada principalmente por la iglesia católica, incluyendo el canto gregoriano. A finales del siglo XI surgió la lírica galante de los trovadores, y en los siglos posteriores aparecieron nuevos géneros como el motete, el ars nova y la polifonía.