SlideShare una empresa de Scribd logo
10. Hematología clínica
                             M. L. SALA
                             B. BLANCO
                             M. PÉREZ
                             M. PÉREZ




 1   LEUCEMIAS AGUDAS                                           La patofisiología de la LMA es por transforma-
                                                            ción de una celula hematopoyética mieloide en ma-
1.1. Leucemia Mieloide Aguda (LMA)                          ligna y la consiguiente expansión clonal de células
                                                            con supresión de la hematopoyesis normal. La inves-
    La leucemia mieloide aguda, que también se co-          tigación de anomalías en los cromosomas clónicos
noce como leucemia aguda no linfocítica, es una ne-         ha ayudado a entender las bases genéticas de la leu-
oplasia de células mieloides que se produce por tras-       cemia. En un 65% de las leucemias agudas (LA) se
formación y proliferación clonal de progenitores            han identificado inversiones o translocaciones cro-
inmaduros que desplazan e inhiben el crecimiento de         mosómicas adquiridas. Estas reorganizaciones es-
la hematopoyesis normal.                                    tructurales afectan la expresión genética y alteran el
    Esta patología relativamente rara, se presenta en al-   funcionamiento normal de la proliferación celular, di-
rededor de 2,5 pacientes, por 100.000 habitantes y          ferenciación y supervivencia.
año en Estados Unidos. La LMA afecta a personas
mayores, con una edad media de diagnóstico de 65            1.1.2. Características clínicas y pronóstico
años. El origen de la LMA es en parte desconocida, pe-
ro hay factores identificados como predisponentes.              La LMA se manifiesta con signos y síntomas re-
Estos factores son haber estado expuesto de forma           lacionados con la ineficacia de la hematopoyesis (in-
accidental a radiaciones, los supervivientes de bombas      fección, hemorragia y alteración de la capacidad del
atómicas, la exposición a benceno o derivados, los fu-      transporte de oxígeno). Los signos y síntomas co-
madores de cigarrillos, algunas etiologías víricas, la      rrientes en las LA (ya sea mieloblástica o linfoblástica)
herencia y algunos fármacos (fenilbutazona, cloran-         son dolor óseo, cansancio, fatiga, acortamiento de la
fenicol, hidroxiurea, etopósido y agentes alquilantes)      respiración, mialgias y sangrado de encías. En la
se han asociado a leucemogénesis.                           LMA los datos de laboratorio incluyen un hemogra-
                                                            ma completo que presenta anemia, trombocitopenia,
1.1.1. Patofisiología                                       leucocitosis o neutropenia. Una coagulopatía pareci-
1032         FARMACIA HOSPITALARIA
da a la intravascular diseminada, que se manifiesta         podiploide; las translocaciones cromosómicas que
con bajo fibrinógeno y elevación del tiempo de trom-        llevan a la formación de genes de fusión transforma-
boplástina parcial activado. En el examen de sangre         dos o disrregulación de la expresión genética; y a la
periférica se observan mieloblastos con bastones de         inactivación de la función del gen supresor de tumo-
Auer, que son piezas alargadas de cromatina.                res.
    El diagnóstico de la LMA comprende una valo-
ración del estado físico, los datos del hemograma, el as-   1.1.3. Clasificación
pirado de la médula ósea y la biopsia. El examen de la
morfología de la médula nos permite calcular el por-             La forma de presentarse y las alteraciones hema-
centaje de blastos en el espacio medular y datos mor-       tológicas son la base para la clasificación de la LMA,
fológicos que distinguen entre los blastos linfoides y      pero el diagnóstico depende de la biopsia de la mé-
mieloides. Se hacen tinciones específicas, inmunofe-        dula ósea. Esta se hace a partir de una muestra que se
notipos y análisis citogenéticos para confirmar el          obtiene con una aguja que se inserta en la médula
diagnóstico. Las características inmunofenotípicas y        ósea en la parte posterior de la cresta ilíaca. Un aspirado
anomalías citogenéticas para las LA están represen-         con más de un 30% de células blásticas se diagnosti-
tadas en la Tabla 1. El análisis citogenético nos permite   ca como leucemia aguda.
examinar los cromosomas de las células leucémicas                La LMA se clasifica en base al sistema Franco-
para las anomalías genéticas. Las lesiones genéticas        Americano-Británico (FAB). Esta clasificación se uti-
responsables de la forma de crecimiento aberrante           liza para señalar subtipos morfológicos, para realizar
del clon leucémico incluyen pérdidas o ganancias            estudios clínicos y para determinar el pronóstico. La
cromosómicas, dando lugar a un hiperdiploide o hi-          clasificación FAB de las LA se muestra en la Tabla 2.


    Tabla 1. Leucemias agudas: características citogenéticas e inmunofenotipo.

                          Tinciones Citoquímicas       Inmunofenotipos              Anomalías Citogenéticas

     LMA                  MPX (+)                      CD 33 (+)                    T (15;17)
                          Negro Sudan (+)              CD 13 (+)                    T (8;21)
                          PAS (-)                      CD 117 (+)                   Inv (16)
                          Estearasa (+)                                             Citogenética normal
                          Tdt (-)                                                   5q-
                                                                                    7q-
                                                                                    11q23

     LLA                  MPX(-)                       CD 10-CALLA (+)1             t (9;22)
                          Negro Sudan (-)              CD2 (+)2,3                   t (4;11)
                          PAS (+)                      CD3 (+)3                     t (8;14)
                          Estearasa (-)                CD4 (+)3                     t (1;19)
                          Tdt (+)                      CD7 (+)2,3                   t (11;19)
                                                       CD19 (+)4,5                  t (17;19)
                                                       CD20 (+)4,5
     1
       Presente en LLA células B y T.
     2
       Presente en LLA con pre células T.
     3
       Presente en LLA con céulas T.
     4
       Presente en LLA con pre células P.
     5
       Presente en LLA con células B.
     MPX = Mieloperóxidasa
     PAS = Ácido Periódico de Shiff.
     Tdt = deoxinucleotidil transferasa terminal.
     CALLA = Leucemia linfocítica aguda común.
     Antígeno; (+) = presente; (-) = ausente
HEMATOLOGÍA CLÍNICA                   1033

    Tabla 2. Clasificación de las leucemias agudas según el Grupo Franco-Americano-Británico.

                 Categoria                                               Comentarios

      LMA
      M0         LMA no diferenciada                                     Pobre pronóstico
      M1         LMA con diferenciación mínima                           Bastones de Auer en blastos
      M2         LMA con maduración                                      Pronóstico favorable en jóvenes
      M3         Leucemia promielocítica                                 Blastos granulados; coagulopatías
      M4         Leucemia mielomonocítica                                Diferenciación mieloide/monocítica
      M4eo       Leucemia mielomonocítica con eosinofilia                Relativo buen pronóstico
      M5a        Leucemia monocítica, poco diferenciada                  Enfermedad extramedular
      M5b        Leucemia monocítica, bien diferenciada                  Igual que la M5a
      M6         Leucemia eritroide                                      Rara; pronóstico pobre
      M7         Leucemia megacariocítica                                Rara; médula ósea fibrótica; pronóstico pobre

      LLA
      L1         LLA infantil                                            Los blastos son células pequeñas con citoplasma pequeño
      L2         LLA adulto                                              Los blastos son células grandes con citoplasma medio
      L3         B-células maduras                                       Los blastos son células redondas con citoplasma basófilo

      LMA = leucemia mieloide aguda; LLA = leucemia linfocítica aguda.



     El pronóstico de la LMA es pobre, con una super-                     to normal de sangre periférica y por la celularidad nor-
vivencia media de 12 meses, y que a los 3 años sólo viven                 mal de la médula ósea, con menos de un 5% de mielo-
un 15% de pacientes. Los factores pronóstico que pro-                     blastos. Esto no demuestra que haya leucemia en sangre
ducen pobre respuesta a la quimioterapia y un alto ries-                  y el estadio de remisión debe mantenerse durante 4 se-
go de recaída son edad superior a 60 años y anomalías ci-                 manas. La remisión con quimioterapia de inducción, en
togenéticas desfavorables, que la LMA sea secundaria a                    las LMA, es del 60-70%. A pesar del estado de remisión
otros procesos patológicos previos a la quimioterapia,                    aparente, pueden encontrarse células leucémicas inde-
resistencia a varios citostáticos, recuento de leucocitos                 tectables, que forman lo que se denomina enfermedad
en el momento del diagnóstico superior a 20.000                           residual mínima, que necesitará ciclos posteriores de
cel/mm3, una baja remisión completa (RC), y que la to-                    consolidación para alcanzar la curación.
lerancia a la quimioterapia de los pacientes de más de
60 años sea peor. Los cariotipos que se asocian a un                      1.1.5. Tratamiento de inducción
diagnóstico favorable incluyen el t (8;21), el t (15;17) y la
inversión del 16. La citogenética normal predice una pa-                      La citarabina (arabinosido de citosina: Ara-C) es
tología con un riesgo intermedio. Las anomalías citoge-                   el principal citostático utilizado en la quimioterapia de
néticas que se asocian a un pobre pronóstico incluyen al-                 inducción a la remisión. Las dosis de citarabina son
teraciones de los cromosomas 5, 7 o 9, inversión del 3,                   de 100-200 mg/m2, por vía intravenosa y en infu-
o el t (11q23).                                                           sión continua durante 7 días. A ésta se añade una an-
                                                                          traciclina: la daunorubicina a dosis de 30-60 mg/m2
1.1.4. Tratamiento de la LMA                                              o la idarubicina(1) 12 mg/m2, por vía intravenosa los
                                                                          primeros 3 días, siguiendo el acrónimo 7+3. La an-
     El tratamiento estándar para la LMA es la poliqui-                   traciclina óptima aún no se sabe cual es, ya que es-
mioterapia inmediatamente después del diagnóstico. El                     tudios randomizados que comparaban daunorubi-
tratamiento se divide en dos fases: inducción a la remi-                  cina e idarubicina sugieren que esta última es más
sión, seguido por el de post-remisión (consolidación).                    eficaz en pacientes jóvenes; pero que la duración de
El objetivo del tratamiento es erradicar el clon leucémi-                 la aplasia de la idarubicina, es más prolongada que
co y así alcanzar la RC, que se manifiesta por el recuen-                 con daunorubicina(1). También se ha utilizado el mi-
1034          FARMACIA HOSPITALARIA
toxantrone, una antracenodiona, pero aún no hay                   tos malignos. La LPA es una entidad distinta en su pre-
estudios que definan su papel real. La adicción a la ci-          sentación clínica, respecto a las leucemias mieloides. La
tarabina de otros citostáticos como la 6-tioguanina,              presencia de gránulos en los promielobastos que con-
etopósido y mitoxantrone no mejora la superviven-                 tienen factores procoagulantes, como el tromboxano,
cia si se compara con el 7+3. Los regímenes para la               produce una coagulopatia intravascular diseminada con
LMA se listan en la Tabla 3.                                      episodios de sangrado y una alta mortalidad (10% en
                                                                  algunas series) hasta que se produce el diagnóstico.
1.2. Leucemia promielocítica aguda (LPA)                               Los RAR1 actuan como una diana terapéutica.
                                                                  La tretinoina (ácido all-trans retinoico: ATRA), es un
    La leucemia promielocítica aguda (LPA, LMA-M3)                compuesto retinoide que se une al RAR1 para indu-
es una forma de LMA caracterizada por la transloca-               cir la diferenciación de los promieloblastos en una
ción de los cromosomas 15 y 17(2). Esta translocación             forma madura que sufre una muerte programada
da como resultado la expresión de un receptor el ácido-           (apoptosis). La LPA tiene un pronóstico más favora-
1 retinoico (RAR1) en la superficie de los promieloci-            ble que otros subtipos de LMA, se está intentando

   Tabla 3. Pautas de quimioterapia para la Leucemia Mieloide Aguda (LMA).

      Inducción

      7+3                 Citarabina 100-200 mg/m2/día en infusión intravenosa contínua, días 1 a 7;
                          Daunorubicicina 45-60 mg/m2/día, intravenosa, días 1 a 3;
                          o
                          Idarubicina 12 mg/m2/día, intravenoso, días 1 a 3;
                          o
                          Mitoxantrone 12 mg/m2/día, intravenoso, días 1 a 3.

      5+2                 Citarabina 100-200 mg/m2/día en infusión intravenosa continua, días 1 a 5;
                          Daunorubicina 45-60 mg/m2/día, intravenosa, días 1 a 2.

      7+3+3               Citarabina 100-200 mg/m2/día en infusión intravenosa contínua, días 1 a 7;
                          Daunorubicina 45-60 mg/m2/día vía intravenosa, días 1 a 3;
                          Citarabina 2-3 g/m2 intravenoso cada 12 horas, días 8 a 10.

      7+3+6TG             Citarabina 100 mg/m2 intravenoso cada 12 horas, días 1 a 7;
                          6-tioguanina 100 mg/m2 oral cada 12 horas durante 7 días
                          Daunorubicina 60 mg/m2 intravenoso cada día, días 5, 6 y 7.

      7+3+7               Citarabina 100 mg/m2/día, intravenoso en infusión continua, días 1 a 7
                          Daunorubicina 50 mg/ m2/día, intravenosa, días 1 a 3
                          Etopósido 75 mg/m2/dia, intravenosa, días 1 a 7.

      ATRA                Tretinoína 45 mg/m2/12 horas, por vía oral.

      Consolidación:

      5+2                 Citarabina 100-200 mg/m2/día, en infusión continua, días 1 a 5
                          Daunorubicina 45-60 mg/m2/día, intravenosa, días 1 a 2.

      Dosis altas         Citarabina 1-3 g/m2/12 horas, intravenoso, 8-12 dosis, durante 2-4 ciclos
                          con o sin
                          Etopósido 400 mg/m2, intravenoso, los días 1, 3.
HEMATOLOGÍA CLÍNICA               1035

averiguar cuál es el papel de la tretinoina comparada           Group B), que mostró una supervivencia libre de en-
con o en adicción al 7+3. Un estudio randomizado                fermedad(4) de un 40% de pacientes, durante 4 años,
llevado a cabo por el Eastern Cooperative Oncology              comparado con el 20% usando dosis más bajas de cita-
Group (ECOG) dió una supervivencia mayor a los                  rabina. Los pacientes con edad inferior a los 40 años tu-
pacientes que recibieron tretinoína en la inducción,            vieron una supervivencia sin enfermedad mayor y ex-
respecto a los que sólo recibieron 7+3(8). El trata-            perimentaron menor toxicidad. Las dosis altas de
miento de mantenimiento con tretinoina demostró                 citarabina, se asocian con toxicidad mayor respecto a las
un periodo de supervivencia mayor, después de 3                 dosis bajas de inducción. Esta toxicidad incluye efectos
años de seguimiento. Hay quien combina tretinoína y             cerebelosos, conjuntivitis química, náuseas y vómitos,
7+3 en el tratamiento de inducción de la LPA. La tre-           diarrea, descamación palmar y alteración hepática. Si la
tinoína actúa como inhibidor y sustrato del citocromo           toxicidad cerebelosa es irreversible se ha de suspender el
P450, lo que puede potenciar las interacciones entre            fármaco. La toxicidad es más frecuente en personas ma-
fármacos. Los alimentos aumentan la biodisponibi-               yores.
lidad de la tretinoína, pero aún no se conoce bien su                La citarabina a dosis altas se acompaña de un au-
significado clínico. Los principales problemas de la            mento de la neurotoxicidad cuando se administra con an-
tretinoina son la toxicidad pulmonar, neurológica               fotericina-B u otros fármacos que alteran la función re-
(dolor de cabeza), hepática y cutánea. La leucocito-            nal, a pesar de ajustar las dosis. La conjuntivitis puede
sis es otro efecto de la tretinoina, que diferencia los         prevenirse con la administración de colirio de dexame-
blastos promielocíticos en formas maduras. Un 25%               tasona en cada ojo cada 6-8 horas. Si hay alteración he-
de pacientes, en estudios randomizados, presentan               pática ajustaremos la dosis de citarabina.
un síndrome de estrés respiratorio llamado “síndrome
ATRA” (también síndrome del RA-LPA). Este sín-                  1.2.2. Trasplante de médula ósea (TMO)
drome que se manifiesta con fiebre, disnea, edema
periférico, ganancia de peso, efusiones pleurales y pe-              El éxito de la intensificación con citarabina a do-
ricárdicas puede ser mortal. El reconocimiento tem-             sis altas ha abierto la posibilidad de utilizar, como
prano de los signos y síntomas de la alteración respi-          tratamiento curativo, dosis más altas de citostáticos,
ratoria y el tratamiento con dexametasona 10 mg,                si después se realiza un alo-trasplante de médula
por vía intravenosa cada 12 horas, mejora este cua-             ósea (TMO). El TMO se realiza después del trata-
dro. La tretinoína puede reiniciarse al 75% del valor de        miento mieloablativo y el acondicionamiento con o
la dosis inicial, después de la resolución de los signos        bien irradiación corporal total combinado con do-
y síntomas del problema pulmonar. Pasados 3-5 días,             sis altas de ciclofosfamida o bien una combinación de
la dosis puede aumentarse hasta la dosis inicial, si los        ciclofosfamida y busulfán. Una vez erradicada la
síntomas respiratorios no remiten.                              MO, se infunden las células progenitoras hemato-
                                                                poyéticas del mismo donante o de un donante com-
1.2.1. Tratamiento post-remisión
                        r                                       patible con antígeno leucocitario humano (HLA) no
                                                                relacionado. Las células hematopoyéticas del do-
     El tratamiento de inducción no produce la muerte           nante producen unos efectos inmunológicos que
celular total, no consiguiéndose la curación, por este          contribuyen a la reconstitución hematológica del
motivo se han desarrollado varias estrategias para in-          huésped. La enfermedad del injerto contra el huésped
tensificar la quimioterapia y así eliminar las células leu-     (EICH) es una complicación habitual donde las cé-
cémicas que sobreviven a la inducción. De forma simi-           lulas-T atacan a los epitopes en el tejido huésped, ya
lar a la inducción, la citarabina es el principal citostático   sea piel, mucosa gastrointestinal o hígado, produ-
de la terapia post-remisión de la LMA, si comparamos            ciendo una morbilidad y mortalidad asociada a esta
con la inducción que utiliza dosis de 100 mg/m2, en el tra-     población trasplantada. Las complicaciones del
tamiento post-remisión se administran dosis del orden           EICH, las infecciones, la toxicidad del régimen de
de 2-3 g/m2, en combinación con una antraciclina o              acondicionamiento y la hemorragia dan una morta-
etopósido durante dos ciclos sucesivos para alcanzar la         lidad del 40%, en el día 100 del transplante. Un fe-
erradicación de la patología residual mínima y alcanzar la      nómeno inmunológico que procede de las células
curación. Esta hipótesis fue valorada por un estudio del        del donante es el ataque de estas contra las células
grupo cooperativo CALGB (Cancer and Leukemia                    de leucemia residual que sobreviven al régimen de
1036        FARMACIA HOSPITALARIA
acondicionamiento llamada enfermedad residual               1.2.3. Tratamiento de la recaída de la LMA
mínima, a la que nos referiremos como injerto con-
tra leucemia (ICL), y que es la responsable de la ba-            Los pacientes con LMA que recaen, tienen un
ja recaída, de un 10 a un 20% de los alo-TMO. Es-           pronóstico pobre. La reinducción con citarabina y
tudios randomizados con alo-TMO versus dosis                otros citostáticos a dosis convencionales no produ-
altas de citarabina, como parte de las poliquimiote-        cen la curación. El alo y auto TMO son los están-
rapias de consolidación no han demostrado una su-           dares del tratamiento y han demostrado largos pe-
pervivencia mayor para el alo-TMO(5), dada la alta          riodos de supervivencia sin enfermedad, en
mortalidad asociada con el régimen de acondiciona-          alrededor de un 30-40% de pacientes. Se están in-
miento y subsiguientes complicaciones de aplasia y          vestigando nuevas estrategias como utilizar fármacos
EICH. Por otra parte, estos estudios han demostra-          nuevos que actúan inhibiendo la resistencia a multi-
do una supervivencia libre de enfermedad y una re-          fármacos (MDR) expresados en las células leucé-
caída menor en los brazos del alo-TMO.                      micas. Los genes MDR-1 producen una proteína
     La mayoría de centros utilizan el alo-TMO tras la      transmenbrana (P-glucoproteína), que disminuye
primera remisión completa. A los pacientes con bajo         las concentraciones intracelulares de algunos de los
riesgo citogenético, edad inferior a los 50 años y un do-   fármacos quimioterápicos, tales como el etopósido,
nante histocompatible se les suele ofrecer la posibili-     antraciclinas y taxanos. Fármacos como la ciclos-
dad de un alo-TMO para alcanzar un largo periodo li-        porina, quinina y verapamil inhiben la actividad de la
bre de enfermedad. La mejora de las medidas de              P-glucoproteína. Más de un 70% de pacientes que re-
                                                            caen o presentan enfermedad refractaria tienen
soporte y la introducción de tratamientos más eficaces
                                                            blastos leucémicos con el fenotipo MDR. El grupo
para el EICH pueden hacer del alo-TMO una opción
                                                            Southwest Oncology Group (SWOG) presentó un
mejor en los pacientes con LMA.
                                                            estudio de evaluación en que el hecho de añadir ci-
     La función del auto-TMO, después de la consoli-
                                                            closporina a un tratamiento de reinducción para re-
dación de la LMA, está aún en discusión. El beneficio
                                                            caídas de LMA producía una supervivencia de dos
de la quimioterapia, a dosis altas, sin la morbilidad que
                                                            años, en el brazo de ciclosporina, a pesar de que no
provoca el EICH(5), es una opción que hace dudar a los
                                                            haber diferencia en la RC. En estos momentos hay
pacientes sin donante histocompatible. Las células ma-
                                                            varios fármacos que son inhibidores de la MDR y
dres autólogas pueden obtenerse por dos vías. La opción
                                                            que están en estudio para ver si mejoran la eficacia de
tradicional es extraer del propio paciente una muestra
                                                            la quimioterapia en la LA.
de médula cuando este está en RC. Una segunda opción
es utilizar la quimioterapia en combinación con facto-      1.2.4. Tratamiento de soporte
res estimulantes de colonias que movilizan a las células
madres pluripotenciales de la médula ósea en sangre              La importante toxicidad de la poliquimioterapia
periférica, permitiendo recoger estas células por afére-    necesita de una aproximación multifactorial a la hora
sis. La desventaja de estos dos métodos es el poder         de aplicar medidas de soporte. Las medidas para evitar
contaminar el injerto autólogo (células madres) con cé-     el riesgo de aplasia incluyen la transfusión de concen-
lulas leucémicas indetectables. Los estudios que se han     trados de hematíes y plaquetas para evitar el sangrado
hecho trabajando con genes marcados han confirma-           y la hipoxia. La clínica marca una cifra de hemoglobina
do la contaminación del injerto autólogo.                   inferior a 8 g/dl y plaquetas inferiores a 10000/mm3
     Se utilizan varias técnicas para la descontaminación   para transfundir concentrados de hematíes y plaque-
del injerto, como el purgado de la médula ósea con          tas. La eritropoyetina-alfa no se utiliza, ya que en estos
sustancias citotóxicas, como el 4-hidroxiciclofosfamida,    pacientes es urgente la transfusión. Para mujeres en
técnicas inmunológicas o procedimientos más especí-         edad fértil, la supresión de la menstruación está indi-
ficos con que obtener células madres que reduzcan el        cada por el riesgo de trombocitopenia, esto se obvia
riesgo de reinfundir un autoinjerto contaminado. Es-        con la administración diaria de anticonceptivos orales o
tudios randomizados no han confirmado el beneficio          estrógenos conjugados por vía intravenosa. La prácti-
del auto-TMO, si se compara con dosis altas de citara-      ca habitual es monitorizar el tiempo de protrombina
bina, que es la base del tratamiento de consolidación o     (PT) periódicamente (por ejemplo: cada semana), para
el alo-TMO.                                                 valorar el efecto potencial de una hipoprotrombine-
HEMATOLOGÍA CLÍNICA              1037

mia. Estos pacientes reciben tratamientos con antibió-         mento rápido del potasio sérico puede inducir disrrit-
ticos que alteran la flora gastrointestinal y esto altera la   mias y el aumento del fosfato que se une al calcio pro-
absorción de la fitomenadiona(6) (vitamina K). La ad-          duciendo un precipitado de fosfato cálcico en los ri-
ministración de fitomenadiona exógena, evita la vía in-        ñones y causando fallo renal. La administración de
tramuscular, que puede causar sangrado y corrige rá-           poliestireno sulfonato cálcico que se une al potasio o la
pidamente un elevación del PT debido a la deficiencia          administración de 1 g de gluconato cálcico, 10 unidades
de vitamina K.                                                 de insulina rápida y una ampolla de glucosa al 50% (25
     En el paciente neutropénico con fiebre, se utilizan       g de glucosa en 50 ml) para reintroducir el potasio in-
antibióticos de amplio espectro, cubriendo especial-           tracelularmente, se administran si se producen cam-
mente a los microorganismos gram negativos, como               bios en el electrocardiograma (ECG). El calcio o el
la Pseudomona aeruginosa. Si la fiebre persiste, a pesar       aluminio, por vía oral, se unen al exceso de fósforo,
de los antibióticos, se requiere la utilización empírica       dando lugar a una hiperfosfatemia que es de corta du-
de antifúngicos, generalmente anfotericina-B. Factores         ración en ausencia de fallo renal.
como la resistencia de los gérmenes, presente en los               Los pacientes con LPA y en menor grado otros
centros hospitalarios y los costes de adquisición, dic-        subtipos de LMA, presentan un riesgo elevado de pre-
tan la elección de los antibióticos que se usan como           sentar episodios de sangrado debidos a la coagulopatía
tratamiento empírico.                                          DIC. El riesgo de muerte por sangrado es de un 10-
     La quimioterapia que se utiliza para la inducción y       15% con LPA de novo. La patofisiología de este sín-
el tratamiento post-remisión puede variar de ser mo-           drome se produce por la liberación de factores proco-
derada a altamente emetógena; por este motivo los pa-          agulantes, como el tromboxano que se libera de los
cientes deben recibir profilaxis con antagonistas de los       gránulos de los promielocitos, esto se acompaña de
5-HT3 (ondansetrón, granisetrón) u otros antieméti-            trombocitopenia. La monitorización de este síndrome
cos que precisen para evitar las nauseas y los vómitos.        incluye valores de tiempo de protrombina (TP), INK,
La dexametasona, un antiemético eficaz, se utiliza con         tiempo de tromboplastina parcial activado (aPTT), fi-
precaución en pacientes con periodos prolongados de            brinógeno y productos derivados de la fibrina. La ma-
aplasia, para evitar enmascarar la fiebre que se presen-       yoría de centros evitan la utilización de heparina y en
ta durante el periodo de neutropenia y para no produ-          cambio confían en la utilización de plaquetas, criopre-
cir un riesgo añadido de infección fúngica.                    cipitados y plasma fresco. Cuando se inicia el trata-
     Una complicación durante la quimioterapia inicial         miento contra los promieloblastos el síndrome empie-
en los pacientes a los que se les acaba de diagnosticar una    za a solucionarse.
leucemia aguda es el síndrome de lisis tumoral, que se             La introducción de la utilización clínica de los
presenta en pacientes con cifras altas de leucocitos. Es-      factores de crecimiento mieloides (CSFs) ha dado
te síndrome es una urgencia oncológica y requiere una          lugar a la investigación de su uso en la LMA tanto
intervención rápida y adecuada. La muerte rápida de            como tratamiento de soporte como para potenciar
las células leucémicas inducida por la quimioterapia da        los efectos de la quimioterapia. La administración
lugar a la liberación del contenido intracelular en la cir-    de los factores de crecimiento antes de la quimio-
culación sistémica, aumentando de forma importante             terapia para estimular el reclutamiento de blastos
el ácido úrico, potasio y fosfato. El ácido úrico se de-       leucémicos de la fase G0 y G1 de los ciclos celulares
posita en las articulaciones dando lugar a artritis goto-      en la fase S. El aumento del número de células en fa-
sa o bien se deposita en el parenquima renal produ-            se S podría optimizar teoricamente la incorpora-
ciendo fallo renal. El riesgo más grave es que se              ción intracelular del ara-CTP dentro de los blastos
produzca el síndrome de lisis tumoral en las primeras 48       leucémicos, resultando en un incremento de la ci-
horas de haber iniciado la quimioterapia. Durante las 24       totoxicidad. Otros beneficios de esta aproximación
horas de la primera dosis de quimioterapia es funda-           incluyen el promocionar la apoptosis inducida por
mental una buena hidratación para mantener la pro-             quimioterapia, un aumento de la expresión de la
ducción de orina por encima de 150 ml/h, otro factor           Topoisomerasa II y la infra regulación del gen
a tener en cuenta es la alcalinización de la orina con bi-     MDR-1. Varios grupos cooperativos han llevado a
carbonato para favorecer la eliminación de fármacos y          cabo estudios randomizados para valorar el bene-
la administración de alopurinol (300-900 mg/día). El au-       ficio del filgrastín en el acortamiento de la duración
1038         FARMACIA HOSPITALARIA
de la neutropenia, durante el tratamiento de induc-                 Las características morfológicas e inmunofenotípi-
ción de la LMA.                                                cas se utilizan para clasificar a los pacientes con LLA.
                                                               La FAB las clasifica en tres subtipos: L1, L2 y L3 como
1.3. Leucemia linfocítica aguda (LLA)                          se muestra en la Tabla 2. El subtipo L1 está formado
                                                               por linfoblastos pequeños y uniformes y es el más co-
    La LLA es una proliferación neoplásica clónica de cé-      rriente en niños, si bien un 25-30% de casos de adultos
lulas linfoides inmaduras del sistema hematopoyético.          son clasificados como L1. El subtipo L2 consta de
La incidencia de la LLA es de 1,3 casos por 100.000 ha-        grandes linfoblastos pleomórfos, es el más corriente en
bitantes y año, o de alrededor de 4.000 pacientes por          adultos e implica a un 70% de casos. El subtipo L3, cu-
año en USA. Es una enfermedad básicamente infantil,            ya estructura es similar al linfoma de Burkitt, es la LLA
con una edad media de diagnóstico de 10 años; la LLA           de células B cuyos blastos expresan inmunoglobulinas de
puede presentarse a cualquier edad en los adultos y tie-       superficie.
ne un pequeño aumento de incidencia en personas de                  El pronóstico de las LLA es diferente según nos re-
más de 70 años.                                                firamos a niños o adultos. La quimioterapia actual pro-
                                                               porciona una curación de casi el 80% de niños, mien-
1.3.1. Características clínicas y pronóstico                   tras que los adultos se curan en un 25%. El análisis
                                                               citogenético de los blastos linfoides da anomalías en un
     La presentación clínica de la LLA es similar a la         60-75% de pacientes con LLA. Estas alteraciones cro-
LMA, pero la infiltración en diferentes tejidos, la invasión   mosómicas se utilizan para investigar la patogénesis de la
del sistema nervioso central (SNC), masa mediastínica o        enfermedad y dar información respecto al pronóstico. En
líquido pleural, y la implicación testicular son caracterís-   adultos, la diferencia en supervivencia resulta de la pre-
ticas de la LLA. De forma similar a los linfomas, la LLA       sencia de citogenética de riesgo bajo. Las anomalías ci-
puede presentarse en el momento del diagnóstico con es-        togenéticas asociadas con un pobre pronóstico inclu-
plenomegalia y linfadenopatía en la mitad de los pa-           yen LLA con T(9;22) (cromosoma Filadelfia), hecho
cientes. El diagnóstico de LLA requiere una valoración         que se observa en un 30% de pacientes L2, t(4;11) y
similar a la de la LMA respecto al examen físico, pruebas      t(8;14) diagnosticado como L3. Otros indicadores de
de laboratorio, aspirado medular y biopsia. En la LLA el       pobre pronóstico para la LLA incluyen un recuento de
inmunofenotipo es el principal medio de diagnóstico            leucocitos superior a 30.000/mm3 en el momento del
debido a la falta de distinción citoquímica y morfológi-       diagnóstico, edad superior a 35 años, inmunofenotipo de
ca. Las anomalías de la LLA inmunofenotípicas y cito-          células B maduras y un largo periodo de tiempo para al-
genéticas se muestran en la Tabla 1.                           canzar la remisión completa.
     En la LLA de células pre-B, el subtipo más fre-
cuente, con un 70% de pacientes. El nombre de pre-B se         1.3.2. Tratamiento de la LLA
refiere al hecho que el clon de células leucémicas esta
destinado al linaje de células B, como se pone de mani-             El tratamiento de la LLA se divide en cuatro fases:
fiesto por los marcadores tempranos, CD10 (el antíge-          inducción, intensificación (consolidación), manteni-
no común de la LLA: CALLA) y el CD19, y reagrupa-              miento y profilaxis del SNC. Los tratamientos se pueden
ciones genéticas de inmunoglobulinas de superficie. La         ver en la Tabla 4. Como en la LMA, el objetivo del tra-
LLA de células -T es el segundo subtipo de LLA. Esta           tamiento de inducción es erradicar el clon leucémico y al-
patología no se distingue del linfoma linfoblástico, un        canzar la RC, mientras se restaura la hematopoyesis nor-
linfoma no Hodgkin (LNH) de grado alto. Los pacien-            mal. La remisión se alcanza en el 98% de niños y en el
tes con menos del 30% de médula ósea se clasifican co-         90% de adultos. Pero en el caso de los adultos hay un
mo estadio IV del linfoma linfoblástico. Inversamente,         riesgo importante de recaída, después de los siguientes
una implicación medular de más del 30% le confiere le          ciclos de quimioterapia. El riesgo de recaída tiene en
designación de LLA de célulasT. El último subtipo de           cuenta factores de pobre pronóstico como edad, pre-
LLA es el de célula B madura que representa un 5% de           sencia del cromosoma Filadelfia, alto recuento de leu-
las LLA del adulto. Esta enfermedad se clasifica como lin-     cocitos en el momento del diagnóstico, inmunofenotipo
foma de Burkitt, en ausencia de implicación medular,           de células leucémicas, tiempo para llegar a la RC, también
mientras cualquier implicación de médula le confiere la        se tendrán en cuenta estos factores para determinar el tra-
designación de LLA de células B maduras.                       tamiento post-remisión.
HEMATOLOGÍA CLÍNICA   1039

Tabla 4. Poliquimioterapias utilizadas en la Leucemia Linfocítica Aguda (LLA).

 – Hiper-CVAD:
   Ciclofosfamida 300 mg/m2, intravenosa, cada 12 horas, días 1 a 3.
   Doxorubicina 50 mg/m2, intravenosa, día 1.
   Vincristina 1.4 mg/m2, intravenosa, días 1 y 11.
   Dexametasona 40 mg, oral, cada día, días 1 a 4, 11 a 14.

   Metotrexato 15 mg, intratecal, día 2.
   Citarabina 30 mg, intratecal, día 2.
   Hidrocortisona 15 mg, intratecal, día 2.

   Los fármacos anteriores en ciclos de 1, 3, 5, 7 días.

   Metotrexato 1000 mg/m2, intravenosa durante 24 horas, día 1.
   Citarabina 3000 mg/m2, intravenosa, cada 12 horas, días 2, 3.
   Leucovorín 25 mg, intravenoso, durante 1 día y luego 25 mg, oral, cada 6 horas, durante 7 dosis.
   Metotrexato 15 mg intratecal, día 2.

   Los fármacos anteriores se administran en ciclos de 2, 4, 6 y 8 días.

 – Inducción:
   Vincristina 1.4 mg/m2 (dosis máxima 2 mg), intravenoso, cada semana, durante 4 semanas.
   Prednisona 40 a 60 mg/m2, oral, cada día, días 1 a 28.
   o
   Dexametasona 6,5 mg/m2, oral, cada día, días 1 a 28.
   Daunorubicina 45-60 mg/m2, intravenosa, cada semana, durante 4 semanas.
   Ciclofosfamida 600 mg/m2, intravenoso, semanal, durante 4 semanas.
   L-asparaginasa 10.000 U/m2, intravenoso, cada 48 horas o bien del día 17 al 28.

 – Intensificación:
   Metotrexato 1 a 5 g/m2, intravenoso, semanas 1, 2, 4 (rescate con leucovorín)
   Etopósido 100 mg/m2, intravenoso, cada día, durante 5 días.
   Citarabina 75 mg/m2, intravenoso, días 1 a 4, 8 a 11, 15 a 18, 22 a 25.
   6-tioguanina 60 mg/m2, oral, cada día, días 29 a 42.

 – Intratecal:
   Metotrexato:                menos de 1 año                15 mg
   (con o sín                  1-2 años:                     20 mg
   citarabina,                 2-3 años:                     25 mg
   hidrocortisona)             más de 3 años:                30 mg

   Citarabina:                 menos de 1 año                15 mg
                               1-2 años:                     20 mg
                               2-3 años:                     25 mg
                               más de 3 años                 30 mg

   Hidrocortisona              menos de 1 año:                5 mg
                               1-2 años:                      7,5 mg
                               2-3 años:                     10 mg
                               más de 3 años:                12,5 mg

 – Mantenimiento:
   Metotrexato 20 mg/m2, oral, cada semana.
   Mercaptopurina 75 mg/m2, oral, cada día,
1040        FARMACIA HOSPITALARIA
1.3.3. Tratamiento de inducción                            sente en un 10-25% de pacientes tratados con vin-
                                                           cristina y prednisona. La utilización de dosis altas
     El tratamiento de inducción de la LLA en adul-        de citarabina o metotrexato(7) se combina con anti-
tos y niños, utiliza la vincristina más los corticoides.   metabolitos como la 6-mercaptopurina o 6-tiogua-
Esta combinación produce la RC en la mitad de los          nina, L-asparaginasa, ciclofosfamida o antraciclinas.
pacientes. Para aumentar la tasa de RC se han adi-         La dosis de metotrexato es del orden de 1 a 5 g/m2
cionado fármacos como la ciclofosfamida, antraci-          y requiere rescate con ácido folínico, para evitar la to-
clínas y la L-asparaginasa. Estudios no randomiza-         xicidad que suele ser fatal. La retención de fluidos
dos han demostrado la superioridad de 4 versus 5           (ascitis, líquido pleural, edema) enlentece el aclara-
fármacos combinados que contienen vincristina y            miento de metotrexato del compartimento central,
un corticoide en el tratamiento de inducción. La to-       debido a su distribución al agua corporal extracelu-
xicidad más habitual con el tratamiento de induc-          lar. La alteración renal produce una alta exposición
ción son la neuropatía y estreñimiento debidas a la        al metotrexato, dando toxicidades como citopenias
vincristina; la hiperglicemia e hiperexcitabilidad
                                                           o mucositis importantes. La monitorización seria-
causadas por los corticoides; la extravasación y náu-
                                                           da de los niveles de metotrexato y la administración
seas/vómitos          debidos       a     las     antra-
                                                           de ácido folínico están justificadas. Las dosis altas
ciclinas; la cistitis hemorrágica y náuseas/vómitos
                                                           de citarabina necesitan un control especial como ya
debidos a la ciclofosfamida; la DIC y pancratitis de-
                                                           se observaba en la LMA.
bidos a la L-asparaginasa. La monitorización de la li-
pasa, amilasa, fibrinógeno, PT, y el aPTT son los
                                                           1.3.5. Tratamiento de mantenimiento
que garantizan la duración del tratamiento con L-
asparaginasa. La L-asparaginasa puede dar lugar a               El tratamiento de la LLA es único por su pro-
reacciones anafilácticas, por lo que antes de iniciar-     longada administración de dosis bajas de quimiote-
la administraremos una dosis test al paciente por          rapia para optimizar la oportunidad de curación.
vía intradérmica. Para casos de intolerancia impor-        Mientras la patofisiología que requiere tratamiento
tante, se puede cambiar de L-asparaginasa, derivada        de mantenimiento es desconocida, la corriente ra-
de Escherichia coli (E. coli), a pegasparaginasa que       cional es que la constante exposición a los agentes
es un conjugado de polietilenglicol y asparaginasa         quimioterápicos de las células leucémicas sinergiza-
y tiene menos potencial inmunogénico. La aspara-           rá con el sistema inmune del huésped para inducir
ginasa, derivada de la Erwinia carotovora, puede
                                                           apoptosis. El tratamiento de mantenimiento du-
utilizarse en pacientes con reacciones de hipersen-
                                                           rante periodos de más de 2 años con mercaptopurina
sibilidad previas debidas a la L-asparaginasa de E.
                                                           diaria y metotrexato semanal es estándar. Se aconseja
coli.
                                                           la monitorización de metotrexato para evitar la to-
     Los pacientes que reciben tratamiento con cor-
                                                           xicidad hepática que produce. Algunos pacientes
ticoides durante largo tiempo, se aconseja que reci-
                                                           tienen una deficiencia de la enzima tiopurina s-me-
ban profilaxis para la prevención de la pneumonia
                                                           tiltransferasa, que es el responsable de catalizar la
por Pneumocystis carinii con cotrimoxazol, dapso-
                                                           inactivación de la mercaptopurina. En niños con
na o pentamidina dependiendo de las alergias de los
                                                           una deficiencia de esta enzima, la dosis estándar de
pacientes y del protocolo del centro. Los suple-
mentos con calcio deben tenerse en cuenta para             mercaptopurina causa una toxicidad hematológica
prevenir la necrosis aséptica inducida por corticoi-       mayor, que puede ser mortal. La identificación
des.                                                       prospectiva de estos niños permitirá reducir la dosis
                                                           y evitar la toxicidad.
1.3.4. Tratamiento de intensificación                           Si bien en niños es importante seguir con el tra-
                                                           tamiento de mantenimiento, la eficaciadel mismo
    La fase de intensificación de la quimioterapia de      es menos clara en adultos. Las poblaciones adultas
la LLA es esencial para exponer a las células leucé-       difícilmente se beneficiarán del tratamiento de
micas que quedan, a dosis altas de citostáticos con        mantenimiento, incluyendo pacientes con LLA de
varios mecanismos de acción antineoplásica, para           células-B maduras y pacientes con el cromosoma
superar la resistencia a los fármacos que está pre-        Filadelfia.
HEMATOLOGÍA CLÍNICA               1041

1.3.6. Tratamiento del sistema nervioso                      tas reinducciones es de algo menos de 6 meses. Los pa-
    central (SNC)                                            cientes que recaen durante la poliquimioterapia de man-
                                                             tenimiento tienen un pobre pronóstico si se compara
    La leucemia en el SNC está presente en un                con los pacientes que lo hacen después del manteni-
10% de pacientes adultos con LLA. Los pacientes              miento.
con más riesgo son los que tienen cifras altas de                 La quimioterapia con altas dosis altas es una opción
leucocitos, los que presentan enfermedad de las              de tratamiento para pacientes en recaída o leucemia re-
células-T y los del subtipo L3. La profilaxis en es-         fractaria o enfermedad con factores de pobre pronósti-
tos casos se hace administrando por via intratecal           co, como es el caso de los que tienen cromosoma Fila-
citostáticos, como el metotrexato y la citarabina.           delfia. Los pacientes con LLA en recaída pueden
Las características farmacocinéticas de la dexame-           esperar una supervivencia de un 10-20% con un alo-
tasona, incluida la penetración en el líquido cefa-          TMO. Los pacientes LLA con cromosoma Filadelfia +
lorraquideo y una larga vida media pueden prote-             a los que se les administra la quimioterapia estándar tie-
ger contra la recaída del SNC. El metotrexato se             nen una supervivencia de un 10 %, si bien hay quien ha
administra a dosis de 6 mg/m2 (máximo 15 mg),                citado una supervivencia libre de enfermedad tan alta
con o sin citarabina 30 mg e hidrocortisona 15               como de un 40% a los 2 años con alo-TMO. No menor,
mg; ambos se administran intratecalmente y sin               es la mortalidad y morbilidad asociadas al alo-TMO que
conservantes: la toxicidad de los citostáticos por           limita la utilidad de esta aproximación en algunos pa-
vía intratecal son dolor de cabeza y aracnoiditis            cientes. El papel del auto-TMO no está claro en la LLA,
química. Los diluyentes que llevan alcohol benzílico         dado el alto potencial para la contaminación leucémica
y metilhidroxibenzoato conservantes causan para-             de las células madre, a pesar de las técnicas de selección
plejía y deben evitarse en la administración de ci-          positivas o negativas.
tostáticos por vía intratecal. La recaída del SNC
después de haber hecho una profilaxis adecuada               1.3.8. Retos del tratamiento
disminuye a un 10%, de una recaída esperada del
40%, sin profilaxis. Otro sistema es la irradiación               En los niños que sobreviven a la LLA, las últi-
craneal que se utilizó para disminuir la recaída en          mas complicaciones pueden transformarse en un
SNC, pero la falta de un incremento en la super-             desafío médico. La exposición a las radiaciones da
vivencia cuando se combina esta con quimiotera-              lugar a un aumento de tumores cerebrales, estatura
pia intratecal y el riesgo de toxicidad retardada con        baja, obesidad, pubertad precoz y osteoporosis. La
pérdida de función cognitiva ha limitado su utili-           administración de hormona del crecimiento permi-
zación.                                                      te alcanzar la altura adecuada en estos pacientes; pe-
                                                             ro es en estos casos donde se ha registrado una ma-
1.3.7. Tratamiento de las recaídas                           yor asociación entre hormona del crecimiento y un
                                                             nuevo inicio de leucemia aguda, que coloca a estos
     La recaída de la LLA se combate con dos estrate-        pacientes en alto riesgo de recaída. El metotrexato in-
gias diferentes: la reinducción de la LLA con quimiote-      duce encefalopatía, las antraciclínas inducen cardio-
rapia convencional o el alo-TMO con dosis altas de qui-      miopatía tardía y la topoisomerasa II induce la
mioterapia. Una segunda remisión puede conseguirse           LMA, que son consideradas como toxicidades tardías
en aproximadamente la mitad de pacientes que recaen,         .
con los mismos fármacos utilizados para alcanzar la RC            Mientras los avances de las nuevas quimioterapias
inicial o con una combinación de quimioterapia alter-        en niños, dan ánimos, la falta de resultados paralelos
nativa, que incluye dosis altas de metotrexato que van       y la recaída en adultos, pone de manifiesto la nece-
de los 200 mg/m2 a los 6 g/m2. Este régimen presenta         sidad de nuevos tratamientos en adultos. La indivi-
una importante toxicidad hematológica y gastrointesti-       dualización de las dosis de quimioterapia, la inmu-
nal, a pesar del rescate con ácido folínico. Otros regí-     noterapia dirigida hacia células diana, el tratamiento
menes incluyen combinaciones de dosis altas de citara-       dirigido a la diferenciación celular, los inhibidores
bina con amsacrina y prednisona, o dosis intermedias         de la angiogénesis y la terapia génica son nuevas es-
de citarabina, con mitoxantrone y etopósido. La duración     trategias de investigación en niños y adultos con
media de las remisiones para los pacientes que reciben es-   LLA.
1042         FARMACIA HOSPITALARIA

 2   LEUCEMIAS CRÓNICAS                                      2.1.2. Tratamiento

2.1. Leucemia mieloide crónica (LMC)                              El objetivo inicial del tratamiento conservador es
                                                             conseguir un control de la enfermedad, mejorar la cali-
     Es un síndrome mieloproliferativo crónico caracte-      dad de vida y la supervivencia. Pero el objetivo final de-
rizado por una proliferación monoclonal mieloide que in-     be ser la curación, lo cual solo puede conseguirse con
volucra a la “stem cell”, lo cual significa que además de    el trasplante de precursores hematopoyéticos (TPH)
una marcada leucocitosis en sangre periférica a base de      alogénico.
neutrófilos, eosinófilos y basófilos, se ven afectadas            Se estima que el 50-75% de pacientes en fase cróni-
otras líneas celulares sanguíneas: megacariocitos, pre-      ca con donante adecuado pueden ser curados por el
cursores de hematíes e, incluso, linfocitos B y T.           TPH. Sin embargo, es fundamental determinar el mo-
     Fue la primera neoplasia en la que se descubrió una     mento ideal para llevarlo a cabo, puesto que la probabi-
alteración cromosómica característica, el cromosoma          lidad de éxito disminuye al aumentar el tiempo entre el
Philadelphia (Ph). Este cromosoma, que aparece en un         diagnóstico y el trasplante y sobre todo si la LMC no
85% de los pacientes, es producto de una translocación       está en fase crónica. En general se debe hacer en el pri-
adquirida entre los cromosomas 9 y 22. El punto de           mer año y se consideraría urgente en la fase acelerada(12).
ruptura en el cromosoma 22 está en la región bcr (bre-            Desde el momento del diagnóstico hasta la realiza-
akpoint cluster region) y en el cromosoma 9 implica al       ción del TPH y en aquellos pacientes que no sean sub-
protooncogén abl. El resultado es un oncogén bcr-abl.        sidiarios de un TPH, hay que administrar un tratamien-
     La LMC representa entre el 7% y el 15% de todas las     to convencional:
leucemias, con una prevalencia de 1-1,5 casos/100.000        – Busulfán. Se utiliza únicamente cuando no se toleran
habitantes y año. Es más frecuente en varones que en           o no son eficaces otros tratamientos La dosis es de
mujeres (2:1), y la mediana de edad en el momento del          0,1 mg/kg/día por vía oral, hasta que la cifra de leu-
diagnóstico es de 45 años. No obstante, puede apare-           cocitos se reduce al 50%. Después, la dosis se reduce
cer a cualquier edad, incluso en niños (3% de las leuce-       a la mitad hasta alcanzar los 20 x 109 /l y se suspende.
mias infantiles).                                              Presenta efectos adversos muy importantes como
     No se conoce la causa de la LMC, aunque la expo-          mielosupresión potencialmente mortal y fibrosis en
sición a radiaciones ionizantes aumenta su incidencia.         pulmón y corazón. Está contraindicado en potencia-
También se ha relacionado con ciertos HLA (CW3 y               les candidatos a un TPH, porque aumenta la toxici-
CW4). No se conocen factores hereditarios.                     dad orgánica del trasplante.
                                                             – Hidroxiurea. Se considera el tratamiento inicial de
2.1.1. Características clínicas                                elección para reducir la cifra inicial de leucocitos,
                                                               ya que produce menos efectos adversos que el bu-
– Fase crónica. Tradicionalmente dura entre 3 y 5              sulfán, prolonga la duración de la fase crónica, in-
  años, pero con el interferón se ha alargado. Un ter-         crementa la supervivencia global comparado con
  cio de los pacientes no presenta ningún síntoma.             el busulfán y además no compromete el éxito de
  El resto de pacientes presenta astenia, anorexia, su-        un posible TPH(13). La dosis es de 40 mg/kg/día
  dores, fiebre y fundamentalmente esplenomegalia.             por vía oral hasta alcanzar los 20 x 109/l leucoci-
– Fase acelerada. La presenta un 60-70% de los pacien-         tos, y después se reduce la dosis para mantener una
  tes tras la fase crónica y se caracteriza por una leuco-     cifra de leucocitos entre 2 y 5 x 109/l. Los efectos ad-
  citosis progresiva y resistente al tratamiento, acompa-      versos de la hidroxiurea son citopenias, ezcemas,
  ñada por fiebre, sudor nocturno y esplenomegalia             úlceras en mucosas y piel, náuseas y macrocitosis.
  progresiva. Esta fase dura, habitualmente, varios me-      – Interferón alfa (2a y 2b). Es el tratamiento de elec-
  ses.                                                         ción una vez reducida la cifra inicial de leucocitos
– Crisis blástica. Puede aparecer con o sin fase acelerada     con hidroxiurea. Se emplea a dosis de 2 a 5 x 106
  previa y se caracteriza por la presencia de síndrome         unidades/m2/día por vía subcutánea de manera
  anémico, infecciones, hemorragias, malestar general,         continua. El tratamiento debe iniciarse dentro del
  dolores óseos y esplenomegalia progresiva. La super-         primer año que sigue al diagnóstico para obtener ta-
  vivencia en esta fase es de 3 a 6 meses.                     sas de respuesta elevadas (70% de remisión com-
HEMATOLOGÍA CLÍNICA               1043

  pleta hematológica y 25% de remisión completa                centros con prolongada experiencia. La superviven-
  citogenética) ya que así se retrasa la llegada de la         cia libre de enfermedad a largo plazo se sitúa en el 40-
  crisis blástica(14). El tratamiento con IFN alarga la su-    70% si el TPH se efectúa en la fase crónica, pero des-
  pervivencia comparado con la hydroxiurea, sobre              ciende al 15-30% en la fase acelerada y al 10-20% en la
  todo en los pacientes que alcanzan alguna res-               fase blástica(17).
  puesta citogenética.                                         Los regímenes de acondicionamiento más utilizados
  Los efectos adversos agudos del interferón alfa con-         son ciclofosfamida más irradiación corporal total y
  sisten en un cuadro seudogripal, mielosupresión y ele-       busulfán más ciclofosfamida(18). Las dosis utilizadas
  vación de transaminasas. Los principales efectos a lar-      son: ciclofosfamida 60 mg/kg/día durante dos días,
  go plazo son depresión, neuropatía periférica,               busulfán 4 mg/kg/día durante 4 días y radioterapia 2
  hipertrigliceridemia e hipotiroidismo autoinmunita-          Gy/día durante 6 días.
  rio.                                                         Las complicaciones más graves derivadas del TPH
  Parece que la asociación de interferón alfa con hi-          son la enfermedad del injerto contra el huésped y las in-
  droxiurea o con citarabina puede incrementar la ta-          fecciones, siendo la mortalidad derivada del TPH de un
  sa de respuesta y la supervivencia respecto a inter-         20-30% en la fase crónica y de un 50% en la fase ace-
  ferón solo(15).                                              lerada. La mortalidad y las complicaciones son más
  Debido al elevado coste del interferón, algunos estudios     altas cuando el donante no es un familiar o no hay
  de coste-eficacia sugieren suspender el tratamiento si       identidad HLA.
  no se alcanza la respuesta citogenética en los dos pri-      La recaída postrasplante no es infrecuente. La opción
  meros años.                                                  más habitual en la recaída es el interferón, siendo otras
– Imatinib. Es un inhibidor de la bcr-abl tirosin ki-          alternativas disminuir o suspender la ciclosporina uti-
  nasa, indicado para el tratamiento de la LMC so-             lizada como profilaxis de la enfermedad del injerto
  bre todo en fase crónica tras fracaso del interferón         contra el huésped, y la infusión de linfocitos del do-
  alfa, aunque también puede conseguir respuestas              nante.
  en crisis blástica y en fase acelerada. Se administra        El minialotrasplante consiste en un trasplante alo-
  por vía oral a dosis de 400 mg/día en la fase cróni-         génico con un acondicionamiento de intensidad
                                                               reducida generalmente con fludarabina y busul-
  ca y de 600 mg/día en la fase acelerada y en crisis
                                                               fán. Es un procedimiento muy bien tolerado pero
  blásticas. En la fase crónica se han conseguido más
                                                               no exento de complicaciones. Su eficacia a largo
  de un 95% de remisiones completas hematológi-
                                                               plazo no se conoce.
  cas y un 30% de respuestas citogenéticas comple-
  tas(16). En fase acelerada y crisis blásticas mieloides     Tratamiento de la crisis blástica
  las tasas de respuestas hematológica y citogenética
                                                                   Se trata con quimioterapia intensiva, con los regí-
  completas han sido inferiores (28% y 14% respec-
                                                              menes empleados en las leucemias agudas. La elección del
  tivamente en fase acelerada y 4% y 5% respectiva-
                                                              esquema dependerá del fenotipo mieloide o linfoide de
  mente en crisis blástica). De momento se desco-
                                                              las células transformadas, alcanzándose remisión com-
  noce si puede mejorar la supervivencia. Es bien
                                                              pleta en un 60 % de los pacientes con crisis blástica lin-
  tolerado en general, siendo sus efectos adversos
                                                              foide y en un 20% de los pacientes con crisis blástica
  más frecuentes neutropenia, trombocitopenia,                mieloide. En ambos tipos de crisis debe ensayarse el
  náuseas, vómitos, diarrea, espasmos y calambres             TMO alogénico, a pesar de los pobres resultados obte-
  musculares, edemas superficiales y retención de lí-         nidos.
  quidos.
– TPH alogénico. Los mejores resultados se consiguen          2.2. Leucemia linfoide crónica (LLC)
  con un donante familiar HLA idéntico. Como fuente
  de células se puede utilizar la médula ósea o la sangre         Es un síndrome linfoproliferativo crónico que se
  periférica (movilización de precursores hematopoyé-         caracteriza por la proliferación y acumulación de
  ticos con G-CSF). Si el paciente no dispone de un do-       linfocitos B de aspecto morfológico maduro y
  nante familiar adecuado puede usarse un donante no          biológicamente inmaduros. Las manifestaciones clí-
  familiar y células de cordón umbilical. El límite de        nicas dependen de la acumulación progresiva de
  edad se sitúa en los 45 años o en 55 años en algunos        linfocitos B en la médula ósea, ganglios linfáticos y
1044         FARMACIA HOSPITALARIA
otros tejidos, así como de las alteraciones inmuni-             con fines curativos. La estrategia del tratamiento debe
tarias secundarias asociadas.                                   tener en cuenta, además, los diferentes grupos de riesgo
    La LLC es la forma más frecuente de leucemia, re-           establecidos según el pronóstico. Así, en los pacientes
presentando alrededor del 30% de todas las leucemias en         de bajo riesgo, cuya mediana de supervivencia es ma-
los países occidentales. Presenta una incidencia en es-         yor de 10 años, el tratamiento debe ser conservador y
tos países de 1,5 casos/100.000 habitantes y año, y la          muchos pacientes nunca necesitarán tratamiento. Los
mediana de edad de aparición es de unos 60 años.                pacientes de riesgo intermedio tienen una mediana de su-
    Se desconoce la causa de la LLC, no estando rela-           pervivencia de 5 años, pudiendo no necesitar trata-
cionada con radiación ni agentes químicos. Es una en-           miento si tienen escasa sintomatología y baja masa tu-
fermedad adquirida, no habiéndose observado un patrón           moral o necesitando tratamiento si la masa tumoral es
de herencia reproducible(19).                                   elevada. Por último, en los pacientes de alto riesgo, cuya
                                                                mediana de supervivencia es de 2 a 4 años, el trata-
2.2.1. Características clínicas                                 miento es obligado.

     El diagnóstico es casual en la mitad de los casos, por     2.2.2.1. Tratamiento inicial(21)
hemogramas de rutina. En un 30% de los pacientes la
causa de consulta es la aparición de adenopatías, y en el       – Clorambucilo. Es el tratamiento clásico de la LLC.
resto de ellos la causa es variada: astenia, anorexia, in-        La pauta continua es de 0,07-0,2 mg/kg/día (6
fecciones, etc. El hallazgo más frecuente en la exploración       mg/m2) por vía oral durante 3-6 semanas, dismi-
son las adenopatías (en un 90% de los pacientes), de ca-          nuyendo progresivamente hasta 2 mg/día cuando
rácter moderado generalmente e indoloras. El bazo                 se obtiene respuesta. Se usa más la pauta intermi-
puede palparse en un 60% de los casos en fases avan-              tente de 20-30 mg/m2 por vía oral cada 14 días,
zadas y en un 20-30% en el momento del diagnóstico. En            repartido en 2 días y asociando un corticoide oral
ocasiones pueden detectarse alteraciones secundarias a            a dosis de 40-60 mg/m2 durante los mismos días.
la infiltración por tejido linfoide de diversos órganos y te-     Las tasas de respuesta son de un 20-60% para la
jidos, siendo la infiltración cutánea la más frecuente.           pauta continua y de un 80% para la intermitente
     El hallazgo de laboratorio más característico es la          con corticoide. La duración del tratamiento suele
leucocitosis, habitualmente entre 20 y 50 x 109/l, con            ser de 12 ciclos o 1 año.
linfocitosis superior al 75%. La anemia se observa ini-         – Ciclofosfamida. Pauta continua: 2-4 mg/kg/día (80-
cialmente en un 15-20% de los pacientes, siendo la                120 mg/m2) vía oral durante 10 días, reduciendo pos-
trombopenia menos frecuente. En fases avanzadas la                teriormente la dosis hasta alcanzar la dosis mínima
neutropenia puede ser grave, favoreciendo la aparición            eficaz. Pauta intermitente: 600 mg/m2 vía intraveno-
de complicaciones infecciosas.                                    sa el día 1 con prednisona 40-60 mg/m2 vía oral du-
     Los pacientes pueden clasificarse, de acuerdo a los ha-      rante 4-5 días. Los ciclos se repiten cada 14-28 días. La
llazgos analíticos y de exploración en tres grandes grupos        aparición de cistitis hemorrágica es el principal efec-
pronósticos: de bajo riesgo (30% de los pacientes, lin-           to tóxico.
focitosis), de riesgo intermedio (60% de los pacientes, lin-    – CVP. Ciclofosfamida 400 mg/m2 intravenosa los dí-
focitosis más adenopatías o más organomegalia) y de               as 1 al 5, Vincristina 1,4 mg/m2 (máximo 2 mg) in-
alto riesgo (10% de los pacientes, linfocitosis más anemia        travenosa el día 1 y Prednisona 100 mg/m2 vía oral los
con o sin trombopenia)(20).                                       días 1 al 5. Los ciclos son cada 3 semanas, aunque
                                                                  posteriormente pueden ser cada 6 semanas para re-
2.2.2. Tratamiento                                                ducir la toxicidad, que consiste en mielosupresión, al-
                                                                  teraciones gastrointestinales y neuropatía periférica.
    Actualmente la LLC no tiene tratamiento curativo,             En caso de neutropenia, pueden asociarse los facto-
lo que unido al hecho de que suele tener un curso crónico         res estimulantes de colonias G-CSF o GM-CSF. La
indolente y a la edad avanzada de la mayoría de los pa-           duración del tratamiento CVP suele ser de entre 6 y 12
cientes, hace que un objetivo terapéutico razonable sea           ciclos.
la paliación de los síntomas y la prolongación de la su-        – CHOP y mini-CHOP. Ciclofosfamida 750 mg/m2
pervivencia. No obstante, los pacientes jóvenes con fac-          intravenosa el día 1, Adriamicina 50 mg/m2 (25
tores de mal pronóstico deberán recibir un tratamiento            mg/m2 en el mini-CHOP) intravenosa el día 1, Vin-
HEMATOLOGÍA CLÍNICA               1045

  cristina 1,4 mg/m2 (máximo 2 mg) intravenosa el día        – Otros tratamientos. En ocasiones es necesario re-
  1 y Prednisona 100 mg/m2 vía oral los días 1 al 5. Los       currir a la radioterapia o a la esplenectomía, es-
  ciclos son cada 21-28 días y suelen administrarse de 6       pecialmente en caso de esplenomegalia progre-
  a 8 ciclos. El principal efecto tóxico es la mielosupre-     siva gigante. Los anticuerpos monoclonales
  sión, apareciendo también toxicidad gastrointestinal         pueden conseguir alguna respuesta. Los mejores
  y neurológica.                                               resultados se han informado con Campath-1H
– Protocolo M-2. Melfalán 0,25 mg/kg/día vía oral los          pero con una toxicidad significativa (reacciones
  días 1 al 4, Carmustina (BCNU) 0,5 mg/kg intrave-            asociadas a la infusión, infecciones, etc). Tam-
  nosa el día 1, Ciclofosfamida 10 mg/kg intravenosa el        bién se ha utilizado en algunos casos el trasplan-
  día 1, Vincristina 1 mg/m2 (máximo 2 mg) intrave-            te de células progenitoras hematopoyéticas (au-
  nosa el día 1 y Prednisona 1mg/kg vía oral los días 1        tólogo, alogénico, mini-alotrasplante) pero la
  al 7 y 0,5 mg/kg vía oral los días 8 al 14. Los ciclos       experiencia es escasa pues la mayoría de los pa-
  se repiten cada 6 semanas y la toxicidad más grave           cientes no son candidatos a estas terapias por lo
  que se produce es la mielosupresión.                         avanzado de la edad(25).
2.2.2.2. Tratamiento de segunda línea
                                                              3   LINFOMA NO HODGKIN
– Fludarabina. Se utiliza a dosis de 25 mg/m2 intra-
  venosa durante 5 días consecutivos cada 28 días.               Los linfomas no hodgkinianos (LNH) consti-
  La misma dosis se ha utilizado durante 3 días              tuyen un grupo muy heterogéneo de neoplasias lin-
  con resultados similares y menor toxicidad(22). La         foides. La incidencia del LNH se situa entre 3 y 6
  tasa de respuesta oscila entre un 17 y un 74% en           casos por 100.000 habitantes/año. En general es
  pacientes previamente tratados, y en pacientes             una enfermedad de los adultos, aunque algunos
  no tratados se han alcanzado remisiones com-               subtipos son más comunes en niños y adultos jó-
  pletas en el 33%(23). También se utiliza asociada a        venes. La etiología en la mayoría de los casos es
  otros fármacos como el mitoxantrone y la ciclo-            desconocida. Algunos casos se asocian a estados de
  fosfamida. La toxicidad principal deriva de la             inmunodeficiencia congénita o adquirida, exposi-
  mielosupresión producida, observándose rara-               ción a ciertos productos químicos, exposición a ra-
  mente toxicidad neurológica y síndrome de lisis            diación ionizante, y ciertos virus(26).
  tumoral graves. Debe hacerse profilaxis antiin-
  fecciosa con cotrimoxazol. En ensayos clínicos             3.1. Linfoma no Hodgkin: clasificación
  se ha usado como terapia de primera línea, con-
  siguiendo una tasa de respuestas más alta que el               Las clasificaciones usadas actualmente son la
  clorambucilo pero no alarga la supervivencia.              REAL (Revised European-American Lymphoma
– Cladribina (2-CDA). Se usa habitualmente a do-             Classification) que apareció en el año 1994 y la re-
  sis de 0,05-0,2 mg/kg (2-8 mg/m2) intravenosa              ciente clasisficación patrocinada por la Organiza-
  durante 5 días, aunque también se utilizan pau-            ción Mundial de la Salud (OMS) que se muestra en
  tas de 7 días en perfusión continua. Las tasas de          la Tabla 5(27). Ambas se basan en definir entidades
  respuesta obtenidas en pacientes refractarios son          clínico-patológicas por estudios multiparamétricos
  similares a las obtenidas con fludarabina, aunque          (morfología, inmunofenotipo, cariotipo y estudios
  algunos pacientes refractarios a esta última tu-           moleculares). La mayoría de los linfomas son de lí-
  vieron alguna respuesta con cladribina(24). La to-         nea celular B.
  xicidad más importante es la mielosupresión,
  siendo frecuentes las infecciones como conse-              3.2. Linfoma no Hodgkin: clínica
  cuencia dicho efecto.
– Pentostatina. La dosis es de 2-4 mg/m2 intraveno-               Sería muy extenso hacer una descripción para cada
  sa cada 14 días. Las respuestas obtenidas en pa-           tipo de linfoma. Desde el punto de vista práctico tiene
  cientes refractarios oscilan entre un 25-30%. Sus          más interés enfocar la clínica en relación al pronóstico y
  principales efectos tóxicos son mielosupresión,            es tradicional hablar de linfomas indolentes y linfomas
  hapatopatía, nefropatía y neurotoxicidad.                  agresivos(28).
1046       FARMACIA HOSPITALARIA

  Tabla 5. Clasificación OMS de las neoplasias linfoides(27).

    Neoplasia de células B
            Neoplasia de células precursoras B
                     Leucemia/linfoma linfoblástico de células precursoras B
            Neoplasia de células B madura (periférica)
                     Leucemia linfocítica crónica B/Linfoma linfocítico de célula pequeña B
                     Leucemia prolinfocítica de células B
                     Linfoma linfoplasmacítico
                     Linfoma de célula B de la zona marginal esplénico (+/- linfocitos vellosos)
                     Leucemia de células peludas (tricoleucemia)
                     Mieloma/Plasmacitoma
                     Linfoma de célula B de la zona marginal extranodal-Linfoma tipo MALT
                     Linfoma de células B de la zona marginal nodal [+/- células B monocitoide]
                     Linfoma folicular
                     Linfoma de células del manto
                     Linfoma difuso de células B grandes
                             Linfoma de células B grande mediastínico
                             Linfoma primario de efusiones/cavidades
                     Linfoma de Burkitt y de célula tipo Burkitt

    Neoplasia de célula T y célula NK
            Neoplasia de células precursoras T
                     Leucemia/linfoma linfoblástico de células T precursoras
            Neoplasias de células T maduras (periférica)
                     Leucemia prolinfocítica de células T
                     Leucemia linfocitica de células T granular
                     Leucemia de células NK agresiva
                     Linfoma/leucemia de células T del adulto (HTLV+)
                     Linfoma de células T/NK extranodal, tipo nasal
                     Linfoma de células T tipo enteropatía
                     Linfoma de células T gamma-delta hepatoesplénico
                     Linfoma de células T subcutáneo seudopaniculítico
                     Micosis fungoide/síndrome de Sézary
                     Linfoma anaplásico de células grandes CD30+, primario cutáneo
                     Linfoma de células T periférico, sin especificar
                     Linfoma de células T angioinmunoblástico
                     Linfoma anaplásico de célula grandes, primario de tipo sistémico

    Linfoma de Hodgkin (Enfermedad de Hodgkin)
           Linfoma de Hodgkin nodular predominantemente linfocítico
           Linfoma de Hodgkin Clásico
                   Linfoma de Hodgkin esclerosis nodular
                   Linfoma de Hodgkin clásico rico en linfocitos
                   Linfoma de Hodgkin celularidad mixta
                   Linfoma de Hodgkin deplección linfocitaria


    Sólo se han incluido las categorías principales. Las formas más frecuentes se muestran en negrita.
    HTLV1: human T-cell leukemia virus; MALT: mucosa associated lymphoid tissue; NK: natural killer
HEMATOLOGÍA CLÍNICA                   1047

– Linfomas indolentes. La naturaleza indolente de                       células grandes B (LDCG-B), siendo este último el
  un linfoma se traduce en un largo periodo de                          más frecuente de todos los linfomas (33-40%). A di-
  tiempo desde la aparición del tumor hasta su                          ferencia de los linfomas indolentes que suelen estar
  diagnóstico, a veces con regresiones espontáne-                       extendidos, casi la mitad de los LDCG-B de novo es-
  as, a menudo con linfocitosis, y una relativa larga                   tán localizados (estadio I-II). Sin tratamiento son
  supervivencia. Sin embargo, son casi siempre in-                      mortales, pero con tratamiento se consiguen remisio-
  curables y el paciente finalmente fallecerá por el                    nes en un 60-80% y de estos pueden curarse un 45-
  linfoma. Se consideran linfomas indolentes el                         50%.
  linfoma folicular (22% de todos los linfomas), el
  linfoma de la zona marginal (10%), el linfoma de                         El linfoma de células del manto (8%) es una enti-
  linfocitos pequeños (5-7%), el linfoma linfo-                       dad dificil de asignar a un grupo de linfomas. Por su
  plasmacítico (1%) y la tricoleucemia (<1%). La                      corta supervivencia debería ser incluido entre los linfo-
  leucemia linfocítica crónica (LLC) y el linfoma                     mas agresivos pero con la salvedad de ser normalmen-
  linfocítico de célula pequeña (LLP) son a nivel                     te incurables. Los linfomas T son poco frecuentes, tam-
  biológico la misma enfermedad. Todos los lin-                       bién son un grupo muy heterogéneo y pueden tener un
  fomas indolentes pueden en algún momento                            curso indolente o agresivo.
  transformarse a un linfoma agresivo lo cual em-
  peora su pronóstico. En las actuales clasificacio-                  3.3. Linfoma no Hodgkin:
  nes (REAL, OMS) la Enfermedad de Waldens-                               estudio de extensión y pronóstico
  tröm no aparece categorizada, y puede
  corresponder a linfomas con pico M dentro de                            Junto a un diagnóstico correcto, el estudio de
  la categoría de linfoma de la zona marginal, lin-                   extensión es un requisito previo fundamental antes
  foplasmacítico o de linfocito pequeño.                              de iniciar el tratamiento de los pacientes con LNH.
– Linfomas agresivos. Son un grupo diverso de linfo-                  El estadiaje permite conocer la extensión de la en-
  mas que tienen en común su comportamiento clínico                   fermedad, pero también los factores pronósticos.
  agresivo y al mismo tiempo su sensibilidad a los ci-                Sigue utilizandose el sistema de Ann Arbor (Tabla 6)
  tostáticos, lo cual hace que una buena proporción se                a pesar de las muchas limitaciones pronósticas que
  puedan curar. Los principales tipos son el linfoma lin-             tiene para los LNH(29). La mayoría de los pacientes es-
  foblástico, el linfoma de Burkitt y el linfoma difuso de            tán en estadio III o IV en el momento del diagnós-


    Tabla 6. Clasificación de Ann Arbor
    Estadio       Descripción

    I             Una única región ganglionar o un único órgano extralinfático (IE).

    II            Dos o más regiones linfáticas en el mismo lado del diafragma, o de un órgano extranodal (IIE) y una o más re-
                  giones linfáticas en el mismo lado del diafragma.

    III           Afección de regiones linfáticas a ambos lados del diafragma, las cuales pueden estar acompañadas por una afec-
                  ción localizada de un órgano o sitio extralinfática (IIIE) , bazo (IIIS), o ambas (IIISE).

    IV            Afección difusa o diseminada de uno o más órganos extralinfáticos distantes con o sin afección de gánglios lin-
                  fáticos asociada.


    Se subdividen en A o B. B cuando hay síntomas B: fiebre inexplicada con temperatura superior a38 ºC, sudoración nocturna y/o pérdida
    de peso superior al 10% en 6 meses precedentes sin causa conocida
    Para la enfermedad de Hodgkin se usa la Clasificación de Cotswolds(29), basada en de Ann Arbor con algunas novedades. La más impor-
    tante es la introducción del sufijo X para masas voluminosas (bulky).
1048          FARMACIA HOSPITALARIA
tico, especialmente en los linfomas considerados                     3.4.1. Tratamiento de los linfomas indolentes
indolentes.
    Las pruebas mínimas para estadiar a un pacien-                   3.4.1.1. Estadios localizados
te son la historia clínica y el exámen físico, radio-                     (I y II sin masa voluminosa)
grafía de tórax, electrocardiograma, tomografía
computarizada (TC) abdominal y pélvico, pruebas                           La radioterapia es el tratamiento de elección de
bioquímicas de función hepática, renal, calcio,                      los estadios localizados lo cual supone menos del
LDH y ácido úrico, b2 microglobulina sérica, pará-                   20% de los linfomas indolentes. Cuando el estadia-
metros hematológicos, biopsia y aspirado de la mé-                   je es exhaustivo la radioterapia obtiene un 50-75% de
dula ósea en crestas ilíacas (bilateral)(30).                        supervivencia libre de progresión (SLP) a los 10
    Además del estadio hay otras variables pretrata-                 años, la mayoría de los cuales pueden considerarse cu-
miento que se asocian con el pronóstico. La Tabla 7                  rados. El añadir quimioterapia no mejora la super-
muestra el denominado International Prognostic Index                 vivencia global (SG). Algunos linfomas localizados
(IPI) diseñado para los pacientes con LNH agresivos(31),             pueden ser curados con cirugía especialmente los de
pero también puede aplicarse a otros linfomas. Según                 localización gastrointestinal.
el número de factores pronósticos adversos se indenti-
fican cuatro grupos de riesgo. Este índice se usa para               3.4.1.2. Estadios avanzados
desarrollar estrategias terapéuticas diferentes según el
                                                                          No hay ningún tratamiento que cure los linfo-
riesgo.
                                                                     mas de bajo grado en estadios avanzados (III-IV) ni
3.4. Linfoma no Hodgkin: tratamiento                                 que modifique sustancialmente la evolución clínica.
                                                                     Este hecho justifica la actitud de vigilancia sin trata-
    La elección del tratamiento en los linfomas no                   miento, sobre todo en los pacientes asintomáticos
hodgkiniano depende de la histología del tumor,                      de mayor edad, sin adenopatías voluminosas ni sig-
su grado de extensión, el estado general del pa-                     nos de progresión. En los pacientes más jóvenes o
ciente, la edad y otros factores pronósticos, pero la                cuando hay síntomas o factores de mal pronóstico,
mayoría de las decisiones terapéuticas dependen                      está indicado el tratamiento con quimioterapia. Los
de la adscripción del paciente a un grupo de los si-                 linfomas de bajo grado responden a una variedad de
guientes: los linfomas indolentes, los linfomas                      agentes como alquilantes únicos o poliquimiotera-
agresivos y los linfomas agresivos con extensión                     pia.
al sistema nervioso central (linfomas linfoblásti-                        Cuando la enfermedad tiene una progresión
cos y linfoma de Burkitt)(32). Al final de este apar-                lenta se recomienda el uso de agentes alquilantes
tado se describen algunos tratamientos más espe-                     únicos como el clorambucilo o la ciclofosfamida.
cíficos.                                                             Generalmente se prefiere el clorambucilo bien en
                                                                     pauta continua (2-10 mg/día) o intermitente (16
                                                                     mg/m2/día durante 5 días cada mes). En pacientes
   Tabla 7. Índice pronóstico internacional(31).                     con progresión rápida, síntomas B, masas adenopá-
                                                                     ticas compresivas, o cuando se necesita una res-
    Grupos                 Nº         RC         SG 5 años           puesta rápida se emplea la poliquimioterapia, habi-
    de riesgo           factores      (%)          (%)               tualmente el esquema CVP o CHOP (Tabla 8). El
                                                                     linfoma folicular es el más quimiosensible entre los
    Bajo                   0-1         87            73
                                                                     linfomas indolentes, consiguendo la poliquimiote-
    Bajo-intermedio         2          67            50
                                                                     rapia remisiones en el 54-88%. Con estos esquemas
    Alta-intermedia         3          55            43
    Alta                   4-5         44            26              se consigue un mejor control de la enfermedad que
                                                                     con la monoterapia pero sin ventajas en la super-
                                                                     viencia.
    Factores pronósticos adversos: edad > 60 años, estadio III-IV,        En los linfomas foliculares mixtos (tipo III), y
    LDH sérica alta, Performance estatus (ECOG)                      el linfoma indolente transformado a un linfoma
    de 2 ó mayor, y número de localizaciones extralinfáticos ma-     agresivo deben tratarse siempre con un esquema ti-
    yor de 1.                                                        po CHOP.
HEMATOLOGÍA CLÍNICA                 1049

Tabla 8. Esquemas de quimioterapia más usados en el LNH(33).
Esquema               Dosis                                          Comentarios

Ciclofosfamida        750 mg/m2 i.v. días 1º en 1 h                  CVP cada 21 días
Vincristina           1,4 mg/m2 (máx 2) i.v. día 1º en 10 m          Uso: linfomas indolentes.
Prednisiona           100 mg/m2 v.o/i.v./i.m. días 1º al 5º          Puede asociarse con Rituximab

Ciclofosfamida        750 mg/m2 i.v. día 1º en 1 h                   CHOP cada 21 días
Adriamicina           50 mg/m2 i.v. día 1º en 30 m                   CHOP cada 14 días con FEC-G desde el día +5
Vincristina           1,4 mg/m2 (máx 2) i.v. día 1º en 10 m          Puede asociarse con Rituximab
Prednisona            60 mg/m2 i.v./v.o días 1º al 5º                Uso: linfomas agresivos; LNH
                                                                     indolentes de mal pronóstico

Ciclofosfamida        750 mg/m2 i.v. día 1º en 1 h                   CNOP cada 28 días
Mitoxantrona          12 mg/m2 i.v. día 1º en 30 m                   Uso: linfomas agresivos; LNH
Vincristina           1,4 mg/m2 (máx 2) i.v. día 1º en 10 m          indolentes de mal pronóstico
Prednisona            60 mg/m2 i.v./v.o días 1º al 5º

Fludarabina           25 mg/m2 ev días 1º al 5º                      Uso: LLC recaída/resistente a alquilantes.
                                                                     Ciclos cada 28 días.

2-CDA                 0,1 mg/kg i.v. x 7 días                        Uso: tricoleucemia un solo ciclo.
(cladribina)                                                         En LLC (2ª línea) cada 28 días

DCF (pentostatina) 4 mg/m2 ev cada 14 días, 4-6 ciclos               Uso: tricoleucemia, 4-6 ciclos

Fludarabina           25 mg/m2 i.v. en 30 m días 1º al 3º            FCM cada 28 días.
Ciclofosfamida        200 mg/m2 i.v. en 30 m días 1º al 3º           Uso: LLC y linfomas indolentes.
Mitoxantrona          6 mg/m2 i.v. en 30 m día 1                     Orden de administración FÆCÆM

Fludarabina           25 mg/m2 i.v. en 30 m días 1º al 3º            FMD cada 28 días sólo o alternando con FC
Mitoxantrona          10 mg/m2 i.v. en 30 m día 1º                   Uso: linfomas indolentes
Dexametasona          20 mg i.v. o v.o. días 1º al 5º

Fludarabina           25 mg/m2 i.v. en 30 m días 1º al 3º            FC cada 28 días
Ciclofosfamida        250 mg/m2 i.v. en 30 m días 1º al 3º           Uso: linfomas indolentes

Ciclofosfamida        1500 mg/m2 i.v. día 1 en 1 h + MESNA           Mega CHOP. Ciclos cada 21 días.
Adriamicina           65 mg/m2 i.v. día 1º en 30 m                   MESNA: 150% dosis de CFM
Vincristina           1,4 mg/m2 (máx 2) i.v. día 1º en 10 m          repartida a 1, 4 y 8 horas
Prednisona            60 mg/m2 i.v./v.o. días 1º al 5º               Uso: LDCG-B con IPI intermedio/alto y alto.

Metotrexato           400 mg/m2 i.v en 4 horas S 2ª,6ª,10ª.          MACOP-B. El tratamiento dura 12 Semanas
Adriamicina           50 mg/m2 i.v. en 30 m S 1ª,3ª,5ª,7ª,9ª,11ª     El 25% del MTX en bolus y el resto en 4 horas.
Ciclofosfamida        350 mg/m2 i.v. en 1 h S 1ª,3ª,5ª,7ª,9ª,11ª     A las 24 horas del MTX se da Folínico:
Vincristina           1,4 mg/m2 (máx 2) i.v. S 2ª,4ª,6ª,8ª,10ª,12ª   10 mg/m2/6 h x 6 dosis
Prednisona            75 mg v.o./i.v. (dosis total) diaria           Uso: LNH agresivos.
Bleomicina            10 mg/m2 i.v. en 45 m S 4ª, 6ª, 11ª


Con los análogos de las purinas se hará profilaxis para infecciones oportunistas al menos con cotrimoxazol (Septrim Forte 1
/12 h v.o. dos o tres días a la semana más ácido fólico) manteniéndola pos tratamiento hasta la recuperación del número de
linfocitos CD4+.
1050         FARMACIA HOSPITALARIA
3.4.1.3. Nuevas aproximaciones al tratamiento                  una severa inmunodepresión. Se están ensayando
     de los linfomas indolentes                                anticuerpos monoclonales anti CD20 conjugados
                                                               con 90Yttrium (90Y) or 111Indium (111In), con
      Análogos de las purinas(34). Agentes como la cladri-     resultados muy interesantes en términos de res-
bina, la pentostatina o la fludarabina consiguen tasas de      puesta.
respuestas más altas que los tratamientos clásicos. Sin             Vacunas(37). Las vacunas con idiotipos de inmuno-
embargo la mediana de duración de la respuesta y tasa de       globulinas u otros antígenos asociados al linfoma está
progresión no parece ser diferente y no es esperable que       dando buenos resultados en el linfoma folicular. Por sí so-
modifiquen la superviencia. Se usan previo a un tras-          las pueden inducir remisiones, pero el mayor interés pa-
plante autólogo como método de “purging” y también             rece estar en alargar la remisión conseguida con la qui-
pueden utilizarse cuando otros tratamientos han fraca-         mioterapia, administrando la vacuna al finalizar la
sado. La droga más usada es la fludarabina, general-           quimioterapia.
mente en combinación con otros agentes, como el es-                 Quimioterapia en altas dosis(38). La quimioterapia en
quema FMD y FMC (Tabla 8).                                     altas dosis o trasplante de precursors hematopoyéticos au-
     Interferón(35). Muchos estudios randomizados              tólogo (TPH autólogo) se ha ensayado en el linfoma fo-
han mostrado el beneficio del IFN en la terapia pri-           licular en segúnda o posterior remisión. De todas for-
maria del linfoma folicular. Las aproximaciones han            mas el impacto del TPH en la superviencia global no
incluido el uso de interferón asociado con la qui-             está claro y por ello esta terapia sólo debería hacerse
mioterapia o bien como terapia de mantenimiento                dentro de ensayos clínicos. La única indicación clara del
con 2-5 millones tres veces a la semana durante 18-            TPH autólogo es el linfoma indolente trasformado a
24 meses. El IFN prolonga la duración de la res-               linfoma agresivo. El trasplante alogénico y el minialo-
puesta, y quizás la SG. El principal problema del              trasplante pueden plantearse en casos concretos.
IFN es la mala tolerancia.
     Anticuerpos monoclonales(36). Los mejores resulta-        3.4.2. Tratamiento del linfoma
dos se han conseguido con rituximab (anti CD20). La in-            de células grandes
dicación autorizada del rituximab es el linfoma folicu-
lar como terapia de segunda línea. La dosis estandar es        3.4.2.1. Estadio precoz: la radioterapia
375 mg/m2 semanalmente x 4. La toxicidad suele aso-
ciarse con la primera infusión: fiebre, escalofrios, astenia        La combinación de la radioterapia con un curso
etc. En pacientes con alta carga tumoral y con alto re-        corto de quimioterapia (CHOP x 3-4) es el tratamiento
cuento linfocitario puede producirse un síndrome de li-        de elección consiguiendo la curación en el 80% de los ca-
sis tumoral y una forma severa de síndrome de liberación       sos(39).
de citocinas (hipotensión y broncoespasmo). En el lin-
foma folicular (LF) como terapia de segunda línea el ri-       3.4.2.2. Estadio avanzado
tuximab consigue remisiones en el 46% de los pacientes             (II con masa voluminosa y estadio III-IV)
con una mediana de duración de la remisión de 10-13
meses. La tasa de respuestas es más alta cuando se usa co-         El régimen CHOP y CHOP intensificados. El
mo terapia de primera línea y cuando se asocia a CHOP.         tratamiento del linfoma agresivo avanzado debe ser
Es muy interesante la alta frecuencia de remisiones            con quimioterapia. El CHOP es el tratamiento es-
completas (RC) y remisiones moleculares en el LF pero          tándar (Tabla 8), es de fácil manejo y aceptable to-
de momento se desconoce si este progreso se traduce en         xicidad. Con 6-8 ciclos de CHOP administrados
una mejor supervivencia. La tasa de respuesta en la LLC        cada 21 días se consiguen un 40-60% de remisio-
y el LLP es baja (<15%). En el Linfoma de la zona mar-         nes, de los cuales un 60% permanecerán sin enfer-
ginal (LZM) no hay experiencia. En el linfoma de célu-         medad lo cual da una tasa de curación en torno al
las del manto (LCM) consigue una alta tasa de remisio-         35%. Durante los años 70 y 80 se desarrollaron es-
nes pero no está claro que mejore la superviviencia.           quemás más complejos denominados de segunda y
     Recientemente se dispone del Campath 1H                   tercera generación. Aunque inicialmente parecían
(alentuzumab), un monoclonal humanizado dirigi-                obtener un mayor porcentaje de respuestas, no se
do contra el antígeno CD52. Parece tener eficacia              han demostrado más efectivos que el CHOP, pero si
en la LLC pero no en los linfomas. Puede causar                más tóxicos(40).
HEMATOLOGÍA CLÍNICA                1051

     Las aproximaciones actuales exploran la inten-               RC pos trasplante y en el 36-44% la respuesta será
sificación del régimen CHOP. Un estudio rando-                    duradera. En paciente con linfoma refractario ini-
mizado parece demostrar la superioridad del                       cial y la recaída quimiorresistente el pronóstico es
CHOP dado cada 14 días sobre el clásico CHOP-21                   muy malo. El acondicionamiento suele realizarse
en pacientes de más de 60 años. También parece                    con esquemas como BEAC, BEAM o CBV (Tabla
ser superior el CHOEP (CHOP más etopósido)                        10)(42). También puede usarse la irradiación corporal
frente al CHOP en pacientes de menos de 60 años.                  total. El uso de anticuerpos monoclonales unidos
En pacientes jóvenes y datos de muy mal pronósti-                 a radioisótopos como parte del acondicionamien-
co suele usarse el mega-CHOP (dosis aumentadas de                 to es una aproximación experimental que parece
adriamicina y ciclofosfamida) seguido o no de TPH                 dar buenos resultados. El trasplante alogénico de
autólogo. Con estas intensificaciones es necesario                precursores hematopoyéticos y el denominado mi-
asociar la quimioterapia con FEC-G.                               ni-alotrasplante puede estar indicados en casos
     Inmunoterapia. Actualmente hay varios estudios               concretos.
randomizados comparando CHOP con CHOP más ri-
                                                                  3.4.3. Situaciones especiales
tuximab como terapia inicial en pacientes con linfoma de
                                                                      en el tratamiento de los linfomas
células grandes. Un estudio ha demostrado una mayor ta-
sa de RC y de supervivencia(41).                                       Profilaxis neuromeníngea: en los linfomas agresi-
     Tratamiento de la recaída: el trasplante de pro-             vos y el LCM debe hacerse neuroprofilaxis cuando hay
genitores hematopoyéticos. En el paciente que no                  infiltración de la médula ósea, testículo o senos cranea-
responde o que recae puede conseguirse otra res-                  les. En el linfoma linfoblástico y Burkitt debe hacerse
puesta con esquemas de quimioterapia de segunda                   en todos los casos. Suele utilizarse metotrexato intrate-
línea como DHAP, ESHAP, MINE, MINE-ES-                            cal (12 mg), junto a citarabina intratecal (30 mg) e hi-
HAP o mini-BEAM (Tabla 9), o con rituximab. Sin                   drocortisona intratecal (20 mg).
embargo todos los pacientes terminarán recayendo                       Prevención de la lisis tumoral: fundamental en todos,
si no se realiza a continuación una terapia de inten-             pero muy especialmente en el linfoma de Burkitt. Se re-
sificación con altas dosis. En la recaída quimiosen-              aliza con hidratación, alopurinol, control de iones, fun-
sible el 85% de los pacientes alcanzan una nueva                  ción renal, diuresis y pH en orina. También se dispone de


   Tabla 9. Esquemas más utilizados para linfomas agresivos en recaída y refractarios(33).
    Esquema             Dosis                                          Comentarios

    Dexametasona        20 mg/12 h i.v./v.o. días 1º al 4º             DHAP. cada 21-24 días.
    Citarabina          2 g/m2/12 h (2 dosis) i.v.en 3 h día 2º        Administrar vit B6 y colirio dexa.
    Cisplatino          100 mg/m2 i.v. en 24 h día 1º                  Uso: LNH y LH

    Ifosfamida          1,33 g/m2 i.v. en 1 h días 1º al 3º
    Mitoxantrone        8 mg/m2 i.v. día 1
    Etopósido           65 mg/m2 i.v. en 1 h días 1º al 3º             MINE/ESHAP. Se alternan cada 28 días.
                                                                       Administar mesna simultáneo a la ifosfamida
    Etopósido           60 mg/m2 i.v. en 1 h días 1º al 4º             a (100% de dosis) y 500 mg vo 4 horas después
    Metilprednisolona   500 mg i.v. en 15 m días 1º al 4º              Vitamina B6 y colirio dexa con el Ara-C
    Citarabina          2 g/m2 i.v. en 2 h día 5º
    Cisplatino          25 mg/m2 e.v. en 24 h días 1º al 4º

    BCNU                60 mg/m2 i.v. en 1 h día 1º                    Mini-BEAM
    Ara-C               800 mg/m2 i.v. en 2 h día 1º                   Uso: previo a TPH para reducir la masa tumoral.
    VP-16               300 mg/m2 i.v. en 1 h día 1º
    Melfalán            30 mg/m2 i.v. en bolus día 1º
1052         FARMACIA HOSPITALARIA

    Tabla 10. Esquemas más usados para el tratamiento de la Enfermedad de Hodgkin(47).
    Esquema                                 Dosis                                          Días

    ABVD: esquema estandar. Ciclos cada 28 días

    Adriamicina                             25 mg/m2 i.v. en 30 m                          1 y 15
    Bleomicina                              10 mg/m2 i.v. en 45 m                          1 y 15
    Vinblastina                             6 mg/m2 i.v. en 10 m                           1 y 15
    DTIC                                    375 mg/m2 i.v. en 45 m                         1 y 15

    Stanford V. No hay ensayos multicéntricos randomizados

    Doxorrubicina                           25 mg/m2 i.v. en 30 m                          1, 15, 29, 43, 57, 71
    Vinblastina                             6 mg/m2 i.v. en 10 m                           1, 15, 29, 43, 57, 71
    Mostaza nitrogenada                     6 mg/m2 i.v. en 30 m                           1, 29, 57
    Vincristina                             1,4 mg/m2 (máx 2) i.v. en 10 m                 8, 22, 36, 50, 64, 78
    Bleomicina                              5 mg/m2 i.v. en 45 m                           8, 22, 36, 50, 64, 78
    Etopósido                               60 mg/m2 i.v. en 60 m                          15, 43, 71
    Prednisona                              40 mg/m2 v.o.                                  A días alternos 12 semanas

    BEACOPP (básico) .Cada 22 días. En ensayo.

    Bleomicina                              10 mg/m2 i.v. en 45 m                          8
    Etopósido                               100 mg/m2 i.v.en 60 m                          1-3
    Doxorrubicina                           25 mg/m2 i.v. en 30 m                          1
    Ciclofosfamida                          650 mg/m2 i.v. en 60 m                         1
    Vincristina                             1,4 mg/m2 i.v. en 10 m                         8
    Procarbacina                            100 mg/m2 v.o.                                 1-7
    Prednisona                              40 mg/m2 v.o.                                  1-14

    BEACOPP (escalado). Precisa FEC-G desde el día +8. En ensayo.

    Bleomicina                              10 mg/m2 i.v. en 45 m                          8
    Etopósido                               200 mg/m2 i.v. en 60 m                         1-3
    Doxorrubicina                           35 mg/m2 i.v. en 30 m                          1
    Ciclofosfamida                          1250 mg/m2 i.v. en 60 m                        1. Administrar MESNA
    Vincristina                             1,4 mg/m2 (máx 2) en 10 m                      8
    Procarbacina100 mg/m2 v.o.              1-7
    Prednisona                              40 mg/m2 v.o.                                  1-14


la rasburicasa para una inmediata corrección de la hipe-        cuente. Se tratan inicalmente con fotoquimioterapia con
ruricemia.                                                      metoxaleno oral seguido de luz ultravioleta (puvoterapia)
     Cirugía: esencial en el linfoma de Burkitt con gran        o con radiototerapia de electrones. Actualmente se usa
masa abdominal resecable y en los linfomas intestina-           menos la mostaza tópica. Cuando la enfermedad es sis-
les primarios localizados.                                      témica se usa una amplia variedad de agentes, como el in-
     Linfoma MALT gástrico. Tiene la peculiaridad de            terferón, quimioterapia sistémica, fotoquimioterapia ex-
estar causado la mayoría de las veces por el Helycobac-         tracorpórea y los retinoides sistémicos.
ter pylori.La terapia erradicativa del H. pylori consigue re-        Linfomas primarios cerebrales. El pronóstico es
misiones en la mayoría de los pacientes con largas su-          muy malo. Se utiliza la dexametasona, la radioterapia y
pervivencias y se ha convertido en el tratamiento de            drogas que atraviesan la barrera hematoencefálica co-
elección.                                                       mo las altas dosis de citarabina, metotrexato y las nitro-
     La micosis fungoide es el linfoma cutáneo más fre-         soureas.
HEMATOLOGÍA CLÍNICA             1053

     Linfoma linfoblástico: los mejores resultados se han   del LH(28).
conseguido en niños con protocolos tipo leucemia agu-           Es un linfoma poco frecuente con una de inci-
da linfoblástica, con curaciones en el 50-70%. En los       dencia de 3,2 por 100.000 habitantes y año. Repre-
adultos los resultados son inferiores.                      senta un tercio del total de los linfomas. Hay bas-
     Linfoma de Burkitt: se usan protocolos expresa-        tante evidencia que señala al virus de Epstein-Barr
mente diseñados para este linfoma. Estos esquemas in-       como causa de alrededor del 40% de los casos de
cluyen siempre ciclofosfamida, metotrexato y trata-         LH que se observan en el mundo occidental(26).
miento intratecal, y se administran de modo intensivo           El motivo de consulta suele ser una adenopatía
durante un corto periodo de tiempo. En los niños los        indolora, generalmente cervical o axilar. Otras veces
resultados son excelentes con curaciones en más del         se consulta por los denominados síntomas B (25-
90% de los casos.                                           30%): fiebre tumoral, sudores nocturnos, pérdida
     Linfomas en el paciente VIH positivo. La aparición     de peso significativa. La anemia, linfopenia, au-
de un linfoma refleja una severa inmunodepresión. Se tra-   mento de la velocidad de sedimentación globular,
tan combinando la terapia antirretroviral con quimiote-     elevación de la fosfatasa alcalina y elevación de la
rapia, apoyada con FEC-G. La intensidad de la quimio-       LDH son las anomalías analíticas más habituales(43).
terapia se adapta al pronóstico del paciente y al número
de linfocitos CD4. Si el número de CD4 es >0,2 x 109/l      4.2. Linfoma de Hodgkin:
la terapia estandar es bien tolerada y puede producir re-       estadio y factores pronósticos
misiones
                                                                 El objetivo de la terapia en la enfermedad de
     Linfomas en el paciente sometido a trasplante de
                                                            Hodgkin es la curación. La curación puede conse-
órganos. Su frecuencia se asocia con la severidad de
                                                            guirse con varias estrategias, eligiendo la más ade-
la inmunosupresión. La primera etapa del trata-
                                                            cuada para cada paciente en función del subtipo
miento es reducir la inmunosupresión lo más posible.
                                                            pronóstico. El estadio es el parámetro fundamen-
Si esto falla el uso de anticuerpos monoclonales (ri-
                                                            tal y por ello el linfoma de Hodgkin se clasifica en
tuximab) puede ser la terapia de elección. El interfe-
                                                            enfermedad localizada cuando se tratan con radio-
rón en algunas ocasiones también consigue remisio-
                                                            terapia (+/- quimioterapia) e incluye los estadios I-
nes. Si lo anterior falla se usará la quimioterapia, pero
                                                            II sin síntomas B; y enfermedad extensa cuando se
el pronóstico es malo. El tratamiento de elección en
                                                            tratan con quimioterapia (+/- radioterapia) e inclu-
el paciente con linfoma pos trasplante alogénico de
                                                            ye los estadios III-IV, y cualquier estadio con sín-
PH es la infusión de linfocitos T del donante espe-
                                                            tomas B(43, 44).
cíficos para el VEB.
                                                                 Para estadiar se usa la clasificación de Ann Arbor
                                                            (Tabla 6) con algunas modificaciones conocidas co-
 4   LINFOMA DE HODGKIN.
                                                            mo Clasificación de Cotswolds(29). La metodología
     MANIFESTACIONES CLÍNICAS
                                                            para el estudio es similar a la descrita para los LNH.
     Y TRATAMIENTO
                                                            Es muy importante idenficiar las masas volumino-
4.1. Linfoma de Hodgkin:                                    sas (bulky), que son aquellas con un tamaño de 10
    epidemiología y clínica                                 cm o más y las masas mediastínicas que superan en
                                                            un tercio el diámetro torácico. La laparotomía ac-
    Las clasificaciones REAL y OMS por vez pri-             tualmente no se aconseja, en su lugar se usan los
mera incluyen la enfermedad o linfoma de Hodg-              factores pronósticos para predecir el riesgo de en-
kin (LH) en la misma clasificación que los linfomas         fermedad abdominal oculta.
no hodgkinianos. Ahora se sabe que la célula para-               El conocimiento de los factores pronósticos es
digmática de esta enfermedad, conocida como célula          otro aspecto fundamental en el estudio previo al
de Sternberg, se origina a partir de los linfocitos B de    tratamiento. Son factores de mal pronóstico la edad
los ganglios linfáticos. En la Tabla 5 se muestran las      mayor de 45 años, VSG >50 mm/h, histología ce-
entidades agrupadas con el nombre de LH según la            lularidad mixta, más de tres ganglios enfermos, ma-
clasificación OMS. Cada entidad muestra una mor-            sas voluminosas, síntomas B, estadio IV, hipoalbu-
fología distinta pero también se asocia con datos           minemia, anemia, sexo varón, leucocitosis y
clínicos y pronósticos reflejando la heterogeneidad         linfopenia(43, 45, 46).
1054         FARMACIA HOSPITALARIA
4.3. Linfoma de Hodgkin:                                             4.4. Linfoma de Hodgkin:
    tratamiento de los estadios localizados                              tratamiento de la enfermedad extensa

     Ningún método, radioterapia limitada o extensa,                      El primer avance en el tratamiento de la enfermedad
quimioterapia o tratamiento combinado (quimioterapia                 de Hodgkin extensa vino de De Vita et al en los años
más radioterapia) ha mostrado diferencias en la SG. Los              60 con el régimen MOPP. Con este régimen el 84% de
tratamientos que no incluyen quimioterapia se asocian                los pacientes en estadio avanzado alcanzaron la RC y el
con alta tasa de recaída (20-40%) pero esto no afecta a la           64% de estos seguían libres de enfermedad 20 años
supervivencia global pues en el momento de la recaída la             después. El régimen MOPP (mecloretamina, vincristina,
enfermedad sigue siendo quimiosensible. Actualmente                  procarbacina, prednisona) fue el estandar durante mu-
se curan el 75-95% dependiendo de los subgrupos pro-                 chos años pero tiene notable toxicidad de tipo neuro-
nósticos(45, 46).                                                    lógico, esterilidad y neoplasias secundarias. Además hay
     En los pacientes con ningún factor pronóstico                   un 20% de pacientes que no alcanzan la remisión y otro
desfavorable (una minoría) suelen tratarse sólo con                  20% van a recaer. Para solventar estos problemas surgió
radioterapia y el resto (la mayoría) suelen recibir radio-           el ABVD (Tabla 10) que mostró ser superior al MOPP
terapia más quimioterapia. El esquema de quimioterapia               en primera línea tanto en RC como en SLP, y probable-
                                                                     mente también en la SG(47). Sin embargo la principal
más utilizado es el ABVD, pero se han desarrollado
                                                                     ventaja del ABVD sobre el MOPP no es la mayor eficacia
otros que prescinden de agentes alquilantes con el ob-
                                                                     sino la menor toxicidad. Suelen administrarse entre 6 y
jetivo de minimizar el riesgo de neoplasias secundarias
                                                                     8 ciclos.
(VBM, NOVP).
                                                                          Los resultados del ABVD son buenos pero mu-
     Los pacientes con enfermedad mediastínica                       chos pacientes todavía no responderán o van a recaer. Por
grande (>10 cm) deben recibir siempre terapia                        ello han investigado otros regímenes sobre todo para
combinada, es decir quimioterapia más radioterapia.                  los pacientes con muchos factores pronósticos adver-
Aquellos con síntomas B se tratarán como los es-                     sos. Primero aparecieron los denominados regímenes
tadios avanzados, es decir con quimioterapia. Otra                   alternantes (MOPP/ABVD o similares) y los regíme-
opción terapéutica es usar solo quimioterapia. Se                    nes híbridos (MOPP/ABV o similares) pero no son
usa en niños para evitar los efectos adversos de la ra-              claramente superiores al ABVD y sí más tóxicos. Ac-
dioterapia sobre el crecimiento. En las series pu-                   tualmente el esquemás más prometedor es el BEA-
blicada en niños los resultados son excelentes pero                  COPP (Tabla 11). Este esquema se ha mostrado muy
en los adultos hay poca experiencia.                                 eficaz en un estudio randomizado, pero no parece que es-


    Tabla 11. Protocolos de acondicionamiento más utilizados para el trasplante en el LNH y LH(42).

      Protocolo               Dosis                                             Comentarios

      Ciclofosfamida          1,5 g/m2 i.v. en 2 h días -6, -5, -4, -3          CBV.
      BCNU                    300 mg/m2 i.v. en 2 h día -6                      Uso en el LH
      VP-16                   150 mg/m2 i.v. en 1 h/12 h días -6, -5, -4

      BCNU                    300 mg/m2 i.v. en 2 h día -6                      BEAM.
      VP-16                   200 mg/m2 i.v. en 2 h días -5, -4, -3, -2         Uso en LH y LNH
      Ara-C                   200 mg/m2 i.v. en 2 h días -5, -4, -3, -2
      Melfalán                140 mg/m2 i.v. en 1 h día –1

      Ciclofosfamida          60 mg/kg i.v. en 1 h días -6, -5                  Uso: LNH indolente y Linfoblástico
      Irradiación CT          10-12 Gy en fracciones, días -3, -2, -1


      * Hay numerosas variantes de estos protocolos.
HEMATOLOGÍA CLÍNICA               1055

té exento de causar neoplasias secundarias. También se     tratamiento(43). Estas muertes son asociadas con tu-
ha informado de buenos resultados con el denominado        mores, pero también por infarto agudo de miocar-
régimen Stanford V. En relación a nuevas drogas, la vi-    dio, y por infecciones.
norelbina, la gemcitabina, la bendamustina y la idarubi-        El riesgo de desarrollar un leucemia mieloide aguda
cina se han mostrado activas en LH y tal vez se incor-     y un SMD en pacientes tratados con MOPP es de 0,3-
poren a los esquemas de poliquimioterapia en futuros       4% por año para los primeros 10 años. El riesgo se aso-
ensayos.                                                   cia al uso de alquilantes, a la necesidad de retratamiento
                                                           y la realización de trasplante de PH por recaída. No es-
4.5. Linfoma de Hodgkin:                                   tá claro que el ABVD sea leucemógeno.
    tratamiento de la recaída                                   En relación a los tumores sólidos parece que es más
                                                           carcinogénica la radioterapia que la quimioterapia pero
     Aproximadamente el 30-45% de los pacientes            ambos se asocian con el desarrollo de estos tumores. El
con LH en estadio avanzado que alcanzan la RC              más claramente aumentado respecto a la población
con quimioterapia van a recaen, generalmente en            normal es el LNH (4-5% a los 10 años) pero el riesgo ab-
los 3 años que siguen al tratamiento. La duración          soluto es pequeño. Son el cancer de pulmón y de mama
de la primera remisión es un aspecto fundamental:          los más frecuentes en términos absolutos, pero no los
si la recaída es tardía (> 1 año) y no se acompaña         únicos que se incrementan. El riesgo de aparición de es-
de datos de muy mal pronóstico, puede conseguir-           tos tumores continua incluso después de los 15 años del
se una nueva remisión en un 60-80% de los pacien-          tratamiento.
tes, bien con el mismo régimen usado al diagnósti-              La patología cardiaca consituye la segunda causa de
co o bien con un esquema alternativo y la mitad de         muerte tóxica después de las neoplasias. El riesgo aparece
estos pacientes no volverán a recaer(43).                  a partir de los 5 años, es mayor en varón y se asocia so-
     Los pacientes refractarios iniciales (10-15% de la    bre todo con el infarto de miocardio.
EH avanzada) y las recaídas precoces tienen mal                 Toxicidad pulmonar severa debida a la bleomicina se
pronóstico con quimioterapia convencional y de-            ve en el 1-3% de pacientes que han recibido 6 ciclos de
ben tratarse siempre con quimioterapia en altas do-        ABVD. El hipotiroidismo clínico se ve en el 6-25% de los
sis: TPH autólogo generalmente a partir de sangre          pacientes radiados.
periférica. Los regímenes de acondicionamiento                  La infertilidad es un problema con el MOPP y el
más usados son el BEAM y el CVB (Tabla 10) An-             TPH. La quimioterapia tipo MOPP produce azoosper-
tes del trasplante se intentará conseguir una remi-        mia completa en todos los pacientes y menos de un
sión al menos parcial, bien con un esquema estandar        10% se recuperan con los años. El MOPP produce
(ABVD, MOPP, BEACOPP, Stanford V) o con es-                amenorrea en el 40% de las mujeres. El ABVD da me-
quemas de segunda línea como el DHAP y el mini-            nor daño gonadal tanto en el varón como la mujer y el
BEAM (Tabla 9).                                            daño suele ser reversible. Los trasplantes habitualmente
     La eficacia del trasplante también depende de         dan esterilidad irreversible tanto en el varón como la
la calidad y duración de la respuesta al primer trata-     mujer. La irradiación infradiafragmática puede dar es-
miento. En remisión inicial menor de 12 meses,             terilidad irreversible pero puede ser evitada con técni-
con trasplante se consigue una SLP de 40-65%; si la        cas de protección.
remisión inicial fue superior al año la SLP pos tras-
plante es del 75%; en la refractariedad primaria es del     5   GAMMAPATÍAS MONOCLONALES.
20-40%; y en segundas o posteriores recidivas del               MIELOMA MÚLTIPLE
20%(48).
                                                               Las gammapatías monoclonales representan un
4.6. Efectos adversos tardíos                              grupo de diversos trastornos caracterizados por una
                                                           clona de linfocitos o células plasmáticas que tienen ca-
    La mortalidad relacionada con el tratamiento           pacidad de producir una inmunoglobulina o un frag-
es un problema enorme. A los 15 años del diag-             mento de ella, que puede detectarse en sangre y/o orina
nóstico la mortalidad no relacionada con la enfer-         en forma de una banda o componente monoclonal
medad de Hodgkin supera a la provocada por pro-            (CM). La Tabla 12 muestra la clasificación actual de las
gresión tumoral, y ello se debe a la toxicidad del         gammapatías monoclonales(49).
1056        FARMACIA HOSPITALARIA
                                                           Khaler, constituye el prototipo de gammapatía mo-
   Tabla 12. Clasificación de las gammapatías mo-
                                                           noclonal maligna. Se caracteriza por la proliferación
             noclonales.
                                                           neoplásica de una clona de células plasmáticas con
     – Gammapatía monoclonal de significado                producción de una inmunoglobulina de carácter
       indeterminado                                       monoclonal y lesión orgánica. Dicha proliferación
          Mieloma múltiple                                 da lugar a destrucción esquelética con osteoporosis
          Mieloma quiescente                               y/o osteolisis, hipercalcemia, anemia y, en ocasio-
          Mieloma no secretor                              nes, plasmocitomas extramedulares. De otro lado,
          Mieloma osteosclerótico                          el exceso de producción de la proteína monoclonal
          Plasmocitoma óseo solitario
                                                           puede conducir a una insuficiencia renal, infeccio-
          Plasmocitoma extramedular
                                                           nes bacterianas de repetición o a un síndrome de hi-
          Leucemia de células plasmáticas
                                                           perviscosidad. El componente monoclonal es de ti-
     – Macroglobulinemia de Waldenström
                                                           po IgG en el 53% de los casos, IgA en el 25% e IgD
                                                           o IgE en menos del 3%. El 20% de los MM no pre-
     – Enfermedades de las cadenas pesadas
                                                           sentan CM detectable en suero, pero se detectan ca-
     – Amiloidosis primaria
                                                           denas ligeras monoclonales en orina de tipo kappa o
                                                           lambda, denominándose MM tipo Bence-Jones.
     Respecto a la distribución por enfermedad se estima        La incidencia anual del MM es de 4 casos nuevos
que el 70% de los componentes monoclonales detec-          por 100.000 habitantes y año. El MM representa el 1%
tados en una población son gammapatías monoclonales        de todas las neoplasias y algo más del 10% de todas las
de significado indeterminado (GMSI) y el resto se dis-     hemopatías malignas. Se produce en todas las razas y
tribuye de la siguiente forma: el 17% para mieloma múl-    áreas geográficas, con una menor incidencia en las po-
tiple (MM), el 8% para la amiloidosis, el 8% linfomas y    blaciones asiáticas. Su incidencia en negros americanos
leucosis linfática crónica, el 2% plasmocitomas solita-    es el doble que en los blancos. No existe un claro pre-
rios y el 2% macroglobulinemia de Waldenström.             dominio sexual. La mediana de edad se sitúa alrededor
                                                           de los 65 años. Únicamente el 12 y el 2% de los pacien-
5.1. Gammapatía monoclonal de significado                  tes tienen menos de 50 y 40 años, respectivamente. En
     indeterminado                                         menores de 30 años el MM es excepcional (0,3 % de
                                                           los casos)(50).
     El hallazgo de una proteína monoclonal (PM) en el
suero o en la orina de una paciente no implica necesa-     5.2.1. Manifestaciones clínicas
riamente la presencia de una gammapatía monoclonal
maligna. La GMSI constituye el principal ejemplo al            Las principales manifestaciones clínicas se resumen
respecto. La GMSI se caracteriza por la presencia en       de la siguiente forma:
suero de un pico M <30 g/l, ausencia o mínimas canti-
dades de proteína M en orina (<50 mg/día), una plas-       1) Cuadro constitucional. Incluye la astenia, anorexia y
mocitosis medular inferior al 10% y ausencia de lesiones      pérdida de peso. Son frecuentes al inicio del proceso
líticas, anemia, hipercalcemia e insuficiencia renal. Su      o en algún momento de la evolución en la mayoría
frecuencia en la población normal se establece en un          de los pacientes.
3% de los individuos mayores de 70 años y en un 0,7-       2) Manifestaciones esqueléticas. Es la sintomatología
1,7% en estudios poblacionales amplios. La GMSI se            más frecuente (el 90% de los casos), y se debe a la
transforma en MM a un ritmo del 2% anual, con una             destrucción de la masa ósea debida a la proliferación
mediana de 10 años. De esta forma, a los 10 años del          de las células plasmáticas y al aumento de la actividad
diagnóstico un 15% de las GMSI serán MM y a los 20            de los osteoclastos. La sintomatología esquelética
años un 30%(49).                                              más frecuente consiste en dolor óseo (70%), defor-
                                                              midades (60%) y fracturas patológicas (50%). El do-
5.2. Mieloma múltiple                                         lor generalmente se localiza en columna vertebral y
                                                              parrilla costal y con menor frecuencia en extremida-
    El MM, también denominada enfermedad de                   des; es de características mecánicas, y aumenta con
                                                              los movimientos. La altura del paciente acostumbra a
HEMATOLOGÍA CLÍNICA               1057

   disminuir a lo largo de la evolución debido a aplasta-          meros meses tras inicio del tratamiento y en fases
   mientos vertebrales. En excepcionales ocasiones se              avanzadas de la enfermedad. Los gérmenes suelen
   observan lesiones osteoscleróticas, lo que se asocia            ser bacterias (90%) encapsuladas y gram-negativos,
   con frecuencia a polineuropatía, integrando el sín-             de localización respiratoria y urinaria; la infección por
   drome de POEMS (polineuropatía, osteosclerosis,                 el virus herpes- zóster aparece en el 50% de los ca-
   endocrinopatía, pico monoclonal y lesiones cutáneas).           sos.
3) Manifestaciones hematológicas. Este cuadro incluye
   anemia (80-90%), leucopenia y trombopenia. La ane-            5.2.2. Tratamiento
   mia es la alteración hematológica más constante, y
   puede ser severa y sintomática. Es una anemia multi-               La mediana de supervivencia de los pacientes con
   factorial, que además de relacionarse con la infiltra-        MM se sitúa entre 2 y 3 años. Sin embargo la supervi-
   ción medular, presenta un déficit de producción de            vencia varía mucho de unos pacientes a otros, ya que
   eritropoyetina (EPO). La anemia severa casi siempre           mientras algunos fallecen poco después del diagnósti-
   se corrige al alcanzar la remisión del mieloma, de mo-        co, otros gozan de una supervivencia superior a los 5
   do que la persistencia sugiere otras causas como déficit      años y una minoría sobreviven 10 o más años.
   de hierro, enfermedad crónica o insuficiencia renal.               El cuidado del paciente con MM es, a menudo, más
   La neutropenia, habitualmente leve, persiste incluso en       un arte que una ciencia. No hay una terapia curativa y
                                                                 la población de riesgo es típicamente mayor y con poca
   fase de remisión y el mecanismo no está claro. La co-
                                                                 tolerancia al tratamiento quimioterápico. Por ello, un
   agulopatía se observa en el 15-20% de los pacientes y
                                                                 objetivo importante es mejorar la calidad de vida del pa-
   es debida a la interacción del componente M con pla-
                                                                 ciente. La excepción está en los pacientes jóvenes, en
   quetas y factores de coagulación.
                                                                 los que es razonable el uso de terapéuticas intensivas,
4) Manifestaciones renales. El 50% de los pacientes pre-
                                                                 incluyendo el trasplante de progenitores hematopoyé-
   sentan insuficiencia renal al diagnóstico que puede
                                                                 ticos.
   ser plurietiológica: infiltración, excreción de cadenas li-
                                                                      Un concepto importante que debe tenerse en cuen-
   geras, hipercalcemia, hiperuricemia, etc. Suele ser de ti-
                                                                 ta es que los pacientes con mieloma quiescente (pacien-
   po crónico y excepcionalmente se origina fallo renal
                                                                 te que cumple criterios de mieloma pero que está asin-
   agudo. El 80% de los pacientes excreta proteína de
                                                                 tomático o con mínimos síntomas) no deben recibir
   Bence-Jones.
                                                                 tratamiento hasta que presenten datos inequívocos de
5) Manifestaciones neurológicas. Son frecuentes las
                                                                 progresión de la enfermedad. Estos pacientes deben ser
   neuralgias y radiculalgias por afectación vertebral.
                                                                 sometidos a controles periódicos frecuentes en los pri-
   Menos frecuentes son los cuadros de polineuropatía.
                                                                 meros meses.
   La progresión en el conducto raquídeo de las masas
                                                                      La valoración de la respuesta terapéutica en los
   mielomatosas puede originar un cuadro de compre-              pacientes con MM es difícil, ya que con quimioterapia
   sión medular, verdadera emergencia debido al riesgo           convencional casi nunca se consiguen remisiones
   de paraplejía secundaria.                                     completas, sino diversos grados de remisión parcial.
6) Alteraciones metabólicas. Entre ellas destaca un              Los agentes alquilantes son los principales fármacos,
   síndrome de hiperviscosidad (5-10%) debido a la hi-           siendo melfalán el de elección, pudiéndose sustituir
   perproteinemia, hipercalcemia con cuadro carac-               por ciclofosfamida en casos de insuficiencia renal o
   terístico de deshidratación, estreñimiento, naúseas           pancitopenia. Los corticoides aumentan la tasa de
   y estupor e hiperuricemia por elevada replicación ce-         respuesta de los anteriores, pero no prolongan la su-
   lular, pudiendo originar litiasis renal por depósito de       pervivencia(50, 51).
   uratos.
7) Infecciones. Las infecciones recurrentes, sobre todo          5.2.2.1. Tratamiento citostático inicial
   bacterianas, son una de las mayores causas de mor-
   bi-mortalidad. Se asocia con la inmunodeficiencia de-             Antes de disponer de los agentes alquilantes, la
   bido a hipogammaglobulinemia, pero también influ-             mediana de supervivencia de los pacientes con MM
   ye la neutropenia, la quimioterapia, edad avanzada y          era inferior a 1 año. La introducción del melfalán re-
   fallo renal. La incidencia es de 0,5-3 episodios/pa-          presentó el primer avance en el tratamiento de la en-
   ciente/año. Los periodos de más riesgo son los 2-3 pri-       fermedad. La proporción de respuestas se sitúa alre-
1058         FARMACIA HOSPITALARIA
dedor del 50% y la mediana de supervivencia desde el               melfalán y prednisona. Los esquemas de poliquimiote-
inicio del tratamiento oscila entre 2 y 3 años. Estos re-          rapia más empleados en el tratamiento del MM se resu-
sultados se han intentado mejorar empleando pau-                   men en la Tabla 14. La duración de la quimioterapia de-
tas poliquimioterápicas en las que se combinan los                 pende del plan terapéutico. Si el paciente es candidato
agentes alquilantes con vincristina y prednisona, con              a trasplante deben darse 4 ciclos de quimioterapia se-
o sin adriamicina. Sin embargo, la supervivencia es                guido del trasplante. En caso contrario se mantiene el
similar a la de los pacientes tratados con otros tipos de          tratamiento durante largo tiempo, incluso un año. La
quimioterapia.                                                     elección de uno u otro régimen debe basarse en carac-
     En la Tabla 13 se expone la pauta terapéutica de              terísticas individuales de los pacientes y en el plan global
                                                                   de tratamiento. Se aconseja poliquimioterapia en pa-
                                                                   cientes no ancianos que serán sometidos a un trasplan-
    Tabla 13. Pauta terapéutica de melfalán                        te de progenitores hematopoyéticos (TPH). El VAD es
              y prednisona*.                                       la terapia de elección en el paciente con insuficiencia re-
    Melfalán                    0,25 mg/kg v.o. días 1-4           nal y cuando interesa una reducción rápida de la masa
    Prednisona                  60 mg/m2 v.o. días 1-4             tumoral.

    Cada 4-6 semanas según tolerancia hematológica                 5.2.2.2. Tratamiento de mantenimiento

                                                                        La mayoría de pacientes con MM que responden al
    * En los pacientes de edad muy avanzada y en los que pre-
                                                                   tratamiento inicial entran en la denominada fase de me-
      sentan neutropenia y/o plaquetopenia se iniciará el trata-
                                                                   seta, caracterizada por un periodo de estabilidad clínica
      miento con melfalán a dosis 2/3.
                                                                   y biológica en la que la masa tumoral permanece estable
                                                                   a pesar de la persistencia del componente monoclonal y

    Tabla 14. Pautas poliquimioterapéuticas más utilizadas en el mieloma múltiple.

      Poliquimioterapia VCMP/VBAP (ciclos alternantes cada 4 semanas)

      VCMP                                                         VBAP
      Vincristina 1 mg i.v. día 1                                  Vincristina 1 mg i.v. día 1
      Ciclofosfamida 500 mg/m2 i.v. día 1                          BCNU 30 mg/m2 i.v. día 1
      Melfalán 6 mg/m2 días 1-4                                    Adriamicina 30 mg/m2 i.v. día 1
      Prednisona 60 mg/m2 v.o. días 1-4                            Prednisona 60 mg/m2 v.o. días 1-4

      Protocolo M-2 o VBMCP (cada 5 semanas)
        Vincristina 0,03 mg/kg (máximo 2 mg) i.v. día 1
        BCNU 0,5 mg/kg v.o. día 1
        Melfalán 0,25 mg/kg v.o. días 1-4
        Ciclofosfamida 10 mg/kg i.v. día 1
        Prednisona 1 mg/kg v.o. días 1-4, 0,5 mg/kg días 5-8 y 0,25 mg/kg días 9-12

      VAD (cada 4 semanas)
        Vincristina 0,4 mg/día en perfusión continua días 1-4
        Adriamicina 9 mg/m2/día en perfusión continua días 1-4
        Dexametasona 40 mg v.o. días 1-4 y 9-12

      VBAD (cada 4 semanas)
        Vincristina 1 mg i.v. día 1
        BCNU 30 mg/m2 i.v. día 1
        Adriamicina 30 mg/m2/día i.v. día 1
        Dexametasona 40 mg v.o. días 1-4 y 9-12
HEMATOLOGÍA CLÍNICA                     1059

células plasmáticas mielomatosas en la médula ósea.           trarse ciclofosfamida (800 a 1200 mg) cada 3 semanas
Una vez que se ha alcanzado esta fase, el tratamiento de      junto a prednisona (30 a 50 mg) a días alternos. Aunque
mantenimiento con quimioterapia no es útil. El único          este tratamiento produce respuestas objetivas en muy
fármaco que puede retrasar la progresión de la enfer-         pocos pacientes, constituye un excelente tratamiento
medad es el interferón alfa. La dosis habitual de inter-      paliativo que puede controlar temporalmente la enfer-
ferón como tratamiento de mantenimiento en el MM              medad con una toxicidad muy baja.
consiste en 3 millones de unidades por vía subcutánea 3             Un agente muy prometedor, con el que se han referido entre
veces por semana. Sin embargo, no está bien demos-            un 30 y un 40% de respuestas objetivas en pacientes con MM re-
trada la eficacia de este tratamiento, la toxicidad es sig-   sistente o en recaída, es la talidomida a través de un mecanismo su-
nificativa y el coste alto. Además, sólo parece ser efecti-   puestamente antiangiogénico. Se usa a dosis entre 200-400 mg al
vo cuando se ha conseguido una respuesta completa             día. Sin embargo, este tratamiento debe estar sometido a una es-
con quimioterapia y no parece que alargue la supervi-         trecha vigilancia por sus efectos tóxicos, neurológicos (75%), gas-
vencia. Por ello, no es un tratamiento rutinario en el        trointestinales (66%) y constitucionales (60%). A pesar de esta to-
postrasplante.                                                xicidad debe ofrecerse a todos los pacientes con mieloma
                                                              quimiorresistente o con múltiples recaídas. Actualmente se está
5.2.2.3. Tratamiento de las recaídas                          ensayando su combinación con quimioterapia como terapia de
                                                              primera línea(52, 53).
    En los pacientes que recaen una vez que se ha sus-
pendido el tratamiento, la tasa de respuestas cuando se ad-
ministra de nuevo el tratamiento inicial se sitúa entre el    5.2.2.5. Trasplante de progenitores
50 y el 70% pero la duración de la segunda respuesta es           hematopoyéticos (TPH autólogo)
menor que la primera. En pacientes con mieloma en re-
                                                                   La limitada eficacia del tratamiento convencional ha
caída sensible a quimioterapia, la intensificación con au-
                                                              propiciado el empleo de tratamientos más intensivos
totrasplante constituye la mejor opción terapéutica
                                                              que incluyen quimioterapia a dosis elevadas, combinada
siempre que la edad y las condiciones del paciente lo
                                                              o no con irradiación corporal total (ICT), seguida de
permitan.
                                                              rescate con progenitores hematopoyéticos(54).
                                                                   El TPH autólogo a partir de progenitores obteni-
5.2.2.4. Tratamiento del mieloma
                                                              dos de sangre periférica se puede ampliar incluso hasta
    primariamente resistente y del mieloma
                                                              los 70 años. Con este tipo de trasplante como terapia de
    en fase avanzada
                                                              primera línea (consolidación postquimioterapia inicial) se
     La mediana de supervivencia de los pacientes con         logran tasas de respuesta de hasta el 80%, y lo que es
MM primariamente resistente a la quimioterapia es de 15       más importante, un 25-50% de remisiones completas.
meses. En esta situación el tratamiento de rescate más efi-   Por otra parte, la mortalidad relacionada con el proce-
caz es el autotrasplante, si bien su eficacia es menor que    dimiento es inferior al 5%. Sin embargo, el beneficio en
en recaída quimiosensible o como terapia de consolida-        términos de supervivencia es discreto. El tratamiento
ción. Cuando el autotrasplante no es factible, el trata-      de intensificación consiste, en general, en dosis eleva-
miento con VAD o con dosis elevadas de dexametaso-            das de melfalán asociadas o no a irradiación corporal
na produce una tasa de respuestas alrededor del 25%.          total (ICT), o bien en la asociación de melfalán/busulfán.
Los inconvenientes del tratamiento con VAD radican            La recogida de progenitores autólogos de sangre peri-
en la necesidad de colocación de una vía central y una to-    férica (movilización) se puede realizar con esquemas de
xicidad significativa debido al tratamiento con gluco-        quimioterapia (ciclofosfamida a dosis de 1,5-4 g/m2) se-
corticoides, particularmente en forma de infecciones y        guidos de factores de crecimiento o bien sólo con fac-
miopatía esteroidea. No obstante, con este régimen la         tores.
duración de la respuesta es muy limitada, con medianas             En los casos de respuesta favorable el manteni-
que no superan los 9 meses.                                   miento con interferón alfa a bajas dosis por vía subcu-
     Si el paciente con MM es resistente a todas las ac-      tánea hasta recidiva o progresión, se ha mostrado efi-
tuaciones terapéuticas descritas así como en aquellos         caz para alargar la supervivencia y el tiempo libre de
pacientes en que estos tratamientos no son factibles se re-   recidiva tanto en el trasplante autólogo como en el alo-
comienda un tratamiento conservador. Puede adminis-           génico.
1060       FARMACIA HOSPITALARIA
    Las limitaciones de edad y de disponibilidad de      mg en perfusión de 2 horas administrado cada 4 sema-
donante hacen que el trasplante alogénico sólo sea       nas) reduce la pérdida de masa ósea, el número de le-
aplicable a una minoría de pacientes. Además la          siones líticas, el número de fracturas y el dolor. Se ad-
mortalidad por toxicidad es muy elevada y la tasa        ministra junto a calcio y vitamina D oral(56).
de recaída normal, consiguiendo la curación sólo              La analgesia con AINE u opiáceos constituye una
un 10%.                                                  parte esencial del tratamiento. Además de aliviar el dolor
                                                         permite la movilización del paciente, lo cual es muy im-
5.2.2.6. Terapia de soporte y manejo                     portante para disminuir la pérdida de masa ósea. También
    de las complicaciones                                puede indicarse radioterapia local para tratar el dolor.
                                                         Puede ser aconsejable la utilización de corsés ortopédi-
    Incluye la hidratación, prevención de la lesión      cos y la pérdida de peso.
renal, analgesia, tratamiento de la anemia y de las           La eritropoyetina humana (EPO) es eficaz en el tra-
infecciones.
                                                         tamiento de la anemia, particularmente en los pacien-
    Una cuarta parte de los pacientes presentan in-
                                                         tes con valores bajos de EPO endógena.
suficiencia renal. La insuficiencia renal moderada
                                                              Las infecciones constituyen una causa importante
puede ser revertido con una adecuada hidratación y
                                                         de morbilidad y mortalidad en los pacientes con MM. Las
con el tratamiento de la hipercalcemia e hiperurice-
                                                         complicaciones infecciosas requieren un tratamiento
mia. Aproximadamente el 10% de los pacientes
                                                         enérgico y precoz, particularmente cuando el paciente se
con MM tienen una insuficiencia renal lo suficien-
                                                         encuentra granulocitopénico tras la quimioterapia. En
temente avanzada como para requerir tratamiento
                                                         los pacientes que presentan infecciones de repetición,
sustitutivo con diálisis.
                                                         puede resultar útil la profilaxis con penicilina oral, ci-
    El tratamiento de la hipercalcemia consiste en
hidratación con suero fisiológico (3-4 litros al día),   profloxacino o cotrimoxazol. La vacuna antineumocó-
furosemida y glucocorticoides (1-1,5 mg/kg/día).         cica está controvertida resultando útil en algunos pa-
Las medidas previas deben instaurarse en todos los       cientes.
casos, pero cuando la calcemia es superior a 14               La compresión medular ocurre en un 5-10% de los
mg/dl están indicadas otras medidas como el tra-         pacientes, en algún momento de la evolución, y requie-
tamiento con calcitonina o bifosfonatos. La calci-       re un tratamiento urgente. El tratamiento consiste en la
tonina (4 U/kg/12 h) tiene la ventaja sobre otras        administración inmediata de dosis elevadas de dexame-
medidas de su rapidez de acción, ya que reduce la        tasona (dosis inicial de 100 mg IV seguida de 25 mg ca-
calcemia en 2-4 h. Tiene el incoveniente de que su       da 6 horas) junto a radioterapia urgente.
eficacia sólo dura 48 h. Por ello, las indicaciones de
este fármaco son el tratamiento de las hipercalce-        6   FACTORES DE CRECIMIENTO
mias superiores a 16 mg/dl y sintomáticas, y siem-            HEMATOPOYÉTICO
pre asociada a otros agentes como los bifosfonatos.
Los bifosfonatos son fármacos muy eficaces y se-             Uno de los principales progresos de los últimos
guros, su acción no empieza hasta el segundo o ter-      años en el área onco-hematológica está relacionado
cer día pero tienen la gran ventaja de ejercer un        con el tratamiento de soporte hematológico con
efecto muy prolongado (superior a 3 semanas). De         factores de crecimiento hematopoyético. Los facto-
los bifosfonatos disponibles en la actualidad para el    res de crecimiento hematopoyético (FCH o CSF, del
tratamiento de la hipercalcemia inducida por tumor       inglés colony stimulating factors) son una familia de
el más utilizado y considerado hasta ahora de refe-      citocinas que regulan la proliferación, diferenciación
rencia es el pamidronato. Recientemente se ha co-        y viabilidad de las células de la sangre y de sus pre-
mercializado un nuevo bifosfonato, el ácido zole-        cursores en la médula ósea (MO). Se ha demostrado
drónico, caracterizado por un efecto más potente y       la existencia de más de 20 citocinas diferentes que
rápido, así como por su fácil administración. Pue-       actúan sobre el sistema hematopoyético(57, 58). Ac-
de administrarse en administración intravenosa de 15     tualmente se dispone en la práctica clínica diaria de
minutos de duración, lo que contrasta con las dos        factores estimulantes de colonias de granulocitos
horas necesarias en el caso del pamidronato(55).         (G-CSF, filgrastim, lenograstim) y de granulocitos y
    El uso del pamidronato durante largo tiempo (90      macrófagos (GM-CSF, molgramostim, sargramos-
HEMATOLOGÍA CLÍNICA               1061

tim), y de factores estimulantes de la eritropoyesis,               Tabla 15. Características generales
eritropoyetina (EPO).También ha sido aprobado                                 de los factores de crecimiento
por la FDA la interleucina 11 como factor estimu-                             mieloides y linfoides.
lador de la trombopoyesis, y en el futuro se prevé
la aprobación de otros FCH. En la Figura 1 se es-                     1. Glucoproteínas activas a muy bajas
quematiza la regulación de la hematopoyesis por                          concentraciones.
factores de crecimiento. En la Tabla 15 se muestran                   2. Activas in vitro e in vivo.
las características generales de los FCH.                             3. Producidos por muchos tipos celulares.
                                                                      4. Generalmente influyen en más de una línea
6.1. Factores estimulantes de colonias
                                                                      5. Generalmente activas a nivel de células proge-
    de granulocitos y macrófagos
                                                                         nitoras y de células funcionales finales.
     Los FCH inducen la proliferación y diferenciación de             6. Generalmente muestran sinergismo
las células progenitoras de granulocitos y macrófagos.                   o interacciones aditivas con otros factores
Se agrupan bajo esta denominación cuatro citocinas                       de crecimiento.
principales:                                                          7. Frecuentemente actúan como contrapartida
                                                                         neoplásica de las células normales.
– G-CSF: Factor estimulante de granulocitos.
– M-CSF: Factor estimulantes de macrófagos.
– GM-CSF: Factor estimulante de granulocitos-                 recogidos en la Tabla 16.
  macrófagos.                                                     Poseen una estructura glicoproteíca diferente, actú-
– Multi-CSF: Factor multifuncional (también llamado           an a través de diferentes receptores de membrana y son
  interleukina 3: IL-3).                                      obtenidos por técnicas de ADN recombinante. Su gen
                                                              responsable se localiza en el cromosoma 17 para el G-
    En España, actualmente están registrados los FCH          CSF y en el cromosoma 5 para el GM-CSF. Filgrastim es-


Figura 1. Esquema de la regulación de la hematopoyesis por factores de crecimiento. BFU-E, unidad formado-
          ra de brotes eritropoyetin-dependientes; CFU-GM, unidad formadora de colonias granulocíticas y
          macrofágicas; CFU-Mega, unidad formadora de colonias megacariocíticas.


          Autorrenovación                           Células madre
                                                   hematopoyéticas
                       Steel F
                       FIK2 lig
                       IL-3, IL-1


             Células progenitoras                 Células progenitoras                    Células progenitoras
                   BFU-E                               CFU-GM                                 CFU-Mega

                                                G-GSF
                                                GM-CSF ?                                  TPO
               EPO
                                                IL-4 ?                                    IL-11 ?
                                                IL-5 ?

                                                      Neutrófilos
                  Hematíes                                                                     Plaquetas
                                                      Eosinófilos
                                                       Basófilos
                                                      Monocitos
1062        FARMACIA HOSPITALARIA

    Tabla 16. Factores de crecimiento de colonias registrados en España (2001).
    Medicamento                        Origen                                             Naturaleza

    Factores estimulantes de granulocitos (G-CSF)

    Filgrastim                         ADN recombinante en E. Coli                        Proteína
    Lenograstim                        Cultivo de células de ovario de hamster            Glucoproteína

    Factores estimulantes de granulocitos-macrófagos (GM-CSF)

    Molgramostim                       ADN recombinante en E.coli                         Proteína


tá constituido por 175 aminoácidos y no está glicosilado.      un gran impacto en la terapia oncohematológica. Re-
Lenograstim contiene 174 aminoácidos y se encuentra            cientemente la Sociedad Americana de Oncología Clínica
glicosilado en el aminoácido 133. Molgramostim es el           (ASCO) ha actualizado una serie de recomendaciones en
factor estimulante de colonias de granulocitos y macró-        forma de guía de práctica clínica, basadas en la evidencia
fago (GM-CSF), constituido por 127 aminoácidos y no            científica, para su uso en pacientes no incluidos en en-
glicosilado. Se obtiene de una cepa de E.coli que posee        sayos clínicos controlados(59). Sería deseable que todas
un plásmido obtenido por ingeniería genética que con-          las indicaciones de G-CSF se ajustaran a criterios basa-
tiene un gen del GM-CSF humano.                                dos en la evidencia como los mostrados en la Tabla 17.
     Aunque se está investigando su uso en muchas in-          La indicación más habitual del G-CSF es la prevención
dicaciones, en España se encuentran autorizadas las si-        de la neutropenia febril postquimioterapia(60). Sin em-
guientes:                                                      bargo, igualmente puede conseguirse con una reduc-
                                                               ción en la intensidad de la quimioterapia siempre que
– Neutropenia: para reducir la duración de la neu-             no afecte al pronóstico del paciente. Además la mayoría
  tropenia y la incidencia de neutropenia febril en
                                                               de los tratamientos estándar no se asocian a tasas altas de
  pacientes con enfermedades malignas (con la ex-
                                                               neutropenia febril y el uso rutinario de G-CSF sería in-
  cepción de leucemia mieloide crónica y síndromes
                                                               necesario. En algunos tumores se ha analizado el posible
  mielodisplásicos) tratados con quimioterapia con-
                                                               impacto del G-CSF en la supervivencia sin encontrar
  vencional y en la reducción de la duración de la
                                                               mejora en la tasa de cura. Hasta ahora ningún estudio
  neutropenia en los pacientes sometidos a trata-
                                                               ha demostrado con claridad que el uso de G-CSF pre-
  miento mieloablativo seguido de trasplante de mé-
                                                               ventivo mejore la supervivencia en ninguna neoplasia. No
  dula ósea y que se considere que presenten un ma-
                                                               obstante, dentro de ensayos clínicos de aumento de in-
  yor riesgo de experimentar neutropenia grave
                                                               tensidad de dosis de la quimioterapia está plenamente
  prolongada.
– Movilización de células progenitoras de sangre peri-         justificado el uso de FCH profiláctico. También parece
  férica autóloga para acelerar la recuperación hemato-        justificado en circunstancias especiales como el linfoma
  poyética mediante la infusión de dichas células, tras el     en pacientes con sida, linfoma en el anciano aunque
  tratamiento de supresión o ablación de la médula             también puede optarse por reducir la intensidad de do-
  ósea.                                                        sis de la quimioterapia.
– En pacientes, tanto niños como adultos, con neutro-               El G-CSF es el método de elección para movilizar
  penia congénita grave, cíclica o idiopática grave, con un    precursores hematopoyéticos necesarios para realizar
  recuento de neutrófilos 0,5 x 109/l, y con una historia      un trasplante de sangre periférica y es una de las prin-
  de infecciones severas o recurrentes.                        cipales indicaciones en oncohematología. La movili-
                                                               zación se puede realizar con G-CSF (trasplante alo-
    Los CSF suponen un grupo de medicamentos de                génico o autólogo) o combinado con quimioterapia
origen biotecnológico, de coste relativamente elevado,         (trasplante autólogo). La combinación de quimiote-
con una amplia gama de indicaciones, que han provocado         rapia y G-CSF es más eficaz que únicamente con G-
HEMATOLOGÍA CLÍNICA                    1063

Tabla 17. Recomendaciones para el uso de FCH (ASCO, 2000).
 1. Profilaxis primaria
    La administración de FCH como profilaxis primaria debe reservarse para pacientes sometidos a tratamientos de quimioterapia
    que presenten una incidencia de neutropenia febril mayor o igual al 40% con respecto al grupo control. Si la incidencia es infe-
    rior al 40%, la ASCO recomienda la administración de FCH si existe alguno de los siguientes factores de riesgo: radioterapia en
    previa >20% de médula ósea, neutropenia >1.500/µl el día 0, LNH en paciente VIH, estado general desfavorable y enfermedad
    tumoral avanzada. Por tanto, para pacientes previamente no tratados que reciben la mayoría de los regímenes de quimioterapia
    no se recomienda la administración primaria de FCH.
 2. Profilaxis secundaria
    La administración de FCH puede disminuir la probabilidad de neutropenia febril en pacientes que hayan presentado episodios
    de neutropenia febril en el anterior ciclo de tratamiento o que hayan sufrido un retraso o descenso de dosis por neutropenia
    prolongada. Sin embargo, aún no se ha demostrado una reducción en la mortalidad asociada a fiebre y neutropenia, ni tampo-
    co en la respuesta tumoral ni en la supervivencia cuando se mantiene la misma dosis de quimioterapia y sólo se realiza profilaxis
    secundaria. La ASCO recomienda que los clínicos consideren una reducción de dosis después de fiebre o neutropenia severa o
    prolongada tras un ciclo anterior de tratamiento, y que sólo se utilicen los FCH en situaciones donde es esencial mantener la do-
    sis de quimioterapia y su intensidad.
 3. Tratamiento con FCH
    A. Paciente afebril. Los FCH no deberían ser rutinariamente utilizados en estos pacientes.
    B. Paciente febril. La utilización de FCH en pacientes de alto riesgo debe ser considerada, ya que los beneficios en estas cir-
       cunstancias no han sido probados. Los factores de riesgo incluyen: neutropenia profunda (recuento absoluto de neutrófilos
       >100/m l), enfermedad primaria no controlada, infección fúngica invasiva, neumonía, hipotensión e indicadores clínicos de
       sepsis.
 4. Utilización de FCH para aumentar la intensidad de dosis
    No hay evidencia que apoye el uso de FCH para incrementar la intensidad de dosis de quimioterapia o el esquema o ambos
    fuera de un ensayo clínico.
 5. Utilización de FCH como adyuvante en trasplante de células progenitoras
    Se recomienda el uso de FCH para la movilización de células progenitoras periféricas y después de la infusión de éstas. La dosis
    óptima de FCH para movilización está en investigación, pero se recomienda una dosis de10 µg/kg/día para G-CSF.
 6. FCH en pacientes con leucemia aguda y síndrome mielodisplásico
    A. Leucemia mieloide aguda (LMA). El uso de FCH puede ser considerado en esta situación si el beneficio en términos de acor-
        tamiento de la estancia hospitalaria supera el coste del factor. Ningún estudio ha demostrado una mejoría significativa en la ta-
        sa de respuesta completa o en el resultado a largo tiempo. Si parece obtenerse algún beneficio (acortamiento de la duración de
        la neutropenia) después de una quimioterapia de consolidación para pacientes con LMA en remisión. La evidencia disponi-
        ble indica que los FCH pueden ser recomendados después de completar la quimioterapia de consolidación.
    B. Síndrome mielodisplásico. Indicado sólo en el subgrupo de pacientes con neutropenia grave e infecciones recurrentes.
    C. Leucemia linfoblástica aguda (LLA). Los datos son suficientes para recomendar la administración de G-CSF empezando
       después de completar los primeros días de quimioterapia de la inducción inicial o del primer curso postremisión, ya que
       acorta la duración de la neutropenia a menos que 1000/mm3 en una semana.
    D. Leucemia en recaída. Los datos disponibles no son suficientes para recomendar o no el uso de FCH en pacientes con LLA en
        recaída. Como no hay evidencia, deberían ser juiciosamente utilizados en subgrupos de pacientes.
 7. FCH en pacientes que reciben quimioterapia y radioterapia conjuntamente
    Deberían evitarse en pacientes que reciben conjuntamente quimioterapia y radioterapia. En ausencia de quimioterapia, el uso te-
    rapéutico de FCH puede considerarse en pacientes que reciben radioterapia que implique grandes áreas, si se esperan retrasos pro-
    longados secundarios a la neutropenia.
 8. Uso de FCH en población pediátrica
    Las guías recomendadas para adultos son generalmente aplicables para la población pediátrica. No obstante, las dosis óptimas no
    han sido establecidas.
 9. Dosis/vía y régimen de administración
    En adultos la dosis recomendada de G-CSF es 5 µg/kg/día y 250 µg/m2/día para GM-CSF (sargramostin). Para la movilización
    de células progenitoras hematopoyéticas se recomienda administrar 10 µg/kg/día para G-CSF. No está aconsejada la escalada de
    dosis y se recomienda ajustar la administración al contenido del vial como estrategia apropiada para maximizar la relación cos-
    te-beneficio. La vía preferida de administración es la subcutánea, aunque es aceptable, si las condiciones clínicas lo exigen, el
    empleo de la vía intravenosa.
10. Inicio y duración de la administración de FCH
    El tiempo de inicio y la duración óptima está todavía en investigación. Las recomendaciones de la ASCO de 1996 sugerían ini-
    ciar la ad ministración entre 24 y 72 horas después de la quimioterapia y continuar hasta que las cifras de neutrófilos sean igua-
    les o superiores a 10.000/µL. Sin embargo, una duración más corta puede ser suficiente para conseguir una adecuada recupera-
    ción clínica, considerando la conveniencia del paciente y el coste. Iniciar la administración de FCH 5 días después de la infusión
    de células progenitoras es razonable y está basado en estudios clínicos.
1064        FARMACIA HOSPITALARIA
CSF pero tiene una toxicidad significativa. El G-CSF       vo la eritropoyesis y tiene importantes aplicaciones clínicas
se administra a una dosis de 5 µg/kg desde el día +2       en situaciones de déficit de eritropoyesis atribuible a una
ó 5 y el momento de la citaféresis se decide según el      producción defectuosa de eritropoyetina, especialmen-
número de precursores hematopoyéticos en sangre            te en la anemia asociada a la insuficiencia renal. La defi-
monitorizados por citometría. La movilización con          nición de una producción de EPO defectuosa se basa en
G-CSF es sencilla y habitualmente eficaz. Se admi-         el bajo nivel de EPO para una hemoglobina en compa-
nistra G-CSF a 10-20 µg/kg/día durante 4 días y al         ración con la curva de referencia. Las condiciones clí-
quinto día se recogen por citaféresis los precursores      nicas con defectuosa producción de EPO son aparte
movilizados desde la médula a la sangre. La combi-         de la uremia las siguientes: anemia de la prematuridad,
nación de citocinas para mejorar la movilización se        anemia de la inflamación (artritis reumatoidea, enfer-
encuentra en investigación, sobre todo la asociación de    medad inflamatoria intestinal, infección crónica y sida) y
factor de célula stem con G-CSF. El G-CSF adminis-         anemia de la neoplasia (tumor sólido, mieloma, linfo-
trado postrasplante (10 µg/kg/día desde el día +5)         ma)(61).
consigue acortar la duración de la neutropenia pero             La anemia asociada al cáncer es una de las manifes-
el beneficio clínico es discreto puesto que no reduce      taciones que más negativamente inciden en la calidad
significativamente la incidencia de episodios febriles.    de vida del paciente oncológico. La etiología de la anemia
    Los efectos secundarios de los G-CSF recom-            es multifactorial. Por una parte está la toxicidad hema-
binantes son leves y de corta duración. El más ca-         tológica por los tratamientos de quimioterapia y radio-
racterístico es el dolor óseo, muchas veces generali-      terapia. Por otro lado asociados al tumor como puede ser
zado y normalmente de intensidad leve-moderada.            el sangrado, alteración en la ingesta de alimentos, pobre
El dolor no implica gravedad alguna y responde             estado nutricional o la infiltración tumoral de la médula
bien al tratamiento sintomático con analgésicos de         ósea. Pero además el propio proceso oncológico se aso-
potencia baja-moderada. La fiebre, el exantema y el        cia con anemia de modo intrínseco, asociado a una pro-
aumento de peso son efectos secundarios muy po-            ducción relativamente baja de EPO causada por citoci-
co frecuentes. Son características ciertas alteracio-      nas liberadas por el tumor o por monocitos activados.
nes bioquímicas como la elevación de la fosfatasa               El tratamiento clásico de la anemia en el paciente
alcalina. Los efectos tóxicos de los GM-CSF son
                                                           oncológico es la administración de concentrados de he-
más frecuentes y severos que los de los G-CSF.
                                                           matíes, pero este tratamiento presenta los riesgos aso-
    La eficacia de las citocinas no está totalmente
                                                           ciados a los tratamientos con derivados de la sangre, así
optimizada, debido a su rápida eliminación por vía
                                                           como la necesidad de la vía endovenosa y la atención
renal o a la proteólisis a nivel tisular. En el objetivo
                                                           hospitalaria. En estos casos la administración subcutánea
de mejorar las propiedades cinéticas se están inves-
                                                           de EPO humana recombinante (rHuEPO) se presenta
tigando ciertas modificaciones de la molécula con el
                                                           como una alternativa terapéutica y los ensayos realizados
fin de conseguir un efecto más prolongado. Los
                                                           han demostrado que eleva los niveles de hemoglobina,
mejores resultados se han conseguido mediante la
                                                           disminuye los síntomas asociados a la anemia y reduce las
conjugación con el polímero sintético soluble en
                                                           necesidades de transfusiones de hematíes. La eficacia de
agua: polietilenglicol (PEG) y mediante la hipergli-
cosilación. El pegfilgrastim podría ser aprobado           la rHuEPO no se asocia al tipo de tumor pero sí a la efi-
con las mismas indicaciones que la forma no pegi-          cacia de la quimioterapia sobre todo en las neoplasias
lada. Una sola dosis de pegfilgrastim por ciclo de         hematológicas (mieloma múltiple y linfoma).
quimioterapía consigue un efecto equivalente a las              Entre las indicaciones autorizadas en España, se re-
administraciones diarias de filgrastim en la mejoría       coge su uso para pacientes oncohematológicos: “trata-
de la neutropenia asociada a la quimioterapia.             miento de la anemia y reducción de los requerimientos
                                                           transfusionales en pacientes adultos que reciben qui-
6.2. Factor estimulador de colonias                        mioterapia para el tratamiento de tumores sólidos, lin-
    eritrocíticas: eritropoyetina                          foma maligno o mieloma múltiple y en los que la valo-
                                                           ración del estado general (ej.: estado cardiovascular,
   La EPO es una glucoproteína que estimula la for-        anemia previa al inicio de la quimioterapia) indique ries-
mación de eritrocitos a partir de los precursores del      go de transfusión sanguínea”.
compartimento de células progenitoras. Estimula in vi-          La dosis ideal y la pauta de administración de EPO
HEMATOLOGÍA CLÍNICA            1065

para el tratamiento de la anemia asociada al cáncer se          6.3. Trombopoyetina
ha establecido a lo largo de los últimos años. La posología
inicial recomendada se sitúa en las 150 UI/kg adminis-               La transfusión de concentrados de plaquetas es
trada por vía subcutánea 3 veces por semana. Se puede           el tratamiento del paciente con sangrado causado
duplicar la dosis si, tras 4 semanas de tratamiento, no se      por trombopenia postquimioterapia así como la
objetiva respuesta. En caso de producirse descensos de          profilaxis para pacientes con trombopenia severa
                                                                (<10 ó 20 x 109/l). La transfusión de plaquetas
hemoglobina superiores a 1 g/dl con el primer ciclo de
                                                                presenta una serie de problemas como la alta fre-
quimioterapia no se recomienda continuar con el trata-
                                                                cuencia de refractariedad y el riesgo de transmisión
miento. Si se producen incrementos mensuales supe-
                                                                de infecciones. Además el amplio uso del trasplan-
riores a los 2 g/dl se recomienda reducir la dosis al 50%.
                                                                te de médula y de órganos sólidos ha disparado las
El tratamiento debe mantenerse hasta 3 semanas de ha-           necesidades de este producto sanguíneo lo cual lle-
ber terminado la quimioterapia y no se recomienda su            va a frecuentes situaciones de desabastecimiento.
continuación en caso de sobrepasar los 14 g/l de he-            Estos problemas justifican la investigación en los
moglobina. En este último caso se reiniciará el trata-          factores estimuladores de la trombopoyesis. La
miento con el 50% de la dosis una vez que la hemoglo-           producción de plaquetas la realiza el megacariocito,
bina descienda por debajo de los 11-12 g/dl(58). Al igual       el cual deriva como de células precursoras dirigi-
que en la anemia de la insuficiencia renal, cuando se usa       das y ésta de la célula stem. Esta producción está
rHuEPO hay que asegurar un control o aporte de hierro.          controlada por varios factores de crecimiento: IL-
Se han usado otras pautas de administración de rHuE-            3, IL-6, GM-CSF, IL-11 y un factor específico de lí-
PO, y un estudio reciente ha demostrado la eficacia y           nea: la trombopoyetina (TPO) o c-Mpl. La TPO
tolerabilidad de la administración de ésta en dosis única       endógena es capaz de estimular el crecimiento de los
semanal de 40.000 UI(62).                                       megacariocitos, la maduración de su citoplasma y la
     Las tasas de respuesta informadas varían del 32 al         liberación de plaquetas(63). Por el momento, existen
85% probablemente como reflejo de los diferentes cri-           dos moléculas de trombopoyetina recombinante
terios usados para definir la respuesta. El alto costo de es-   en desarrollo clínico: el factor de desarrollo y cre-
te tratamiento hace deseable establecer unos crierios           cimiento de megacariocito humano recombiante
predictivos. Sin embargo, no se ha podido determinar un         pegilado que es una molécula de TPO truncada y
modo seguro de predecir la respuesta antes de iniciar el        pegilada (PEG-rHuMGDF, Amgen Inc) y una for-
tratamiento. Quizás el mejor criterio de baja probabilidad      ma completa de la TPO glicosilada (rhTPO, Ge-
de respuesta sea una subida de la Hb menor de 0,5 g/dl          nentech Inc). Hay varios ensayos con PEG-
a las dos semanas junto a un nivel de EPO sérico > 100          rHuMGDF             administrados         pre        o
U/l.                                                            postquimioterapia no mieloablativa mostrando un
                                                                acortamiento del periodo de trombopenia y un
     Los efectos secundarios parecen iguales que en la
                                                                menor nadir de trombopenia. Sin embargo con te-
población renal y por ello van asociados a excesivos au-
                                                                rapias mieloablativas, como en pacientes con leu-
mentos de la hemoglobina
                                                                cemia mieloblástica aguda no se ha demostrado
     La administración de rHuEPO en el trasplante
                                                                beneficio clínico. El PEG-rHuMGDF también se
alogénico de médula ósea produce una recupera-                  ha ensayado en donantes consiguiendo aumentar
ción eritrocitaria más rápida y asegura un periodo de           la recogida de plaquetas en las aféresis, lo cual se
dependencia transfusional más corto. En el tras-                traduce en una mayor incremento de la cifra de
plante autólogo, no aporta ventajas significativas              plaquetas postransfusión y reducción del número de
en la recuperación eritrocitaria ni en los requeri-             transfusiones necesarias para la profilaxis del san-
mientos transfusionales.                                        grado. Se ha comprobado la aparición de anticuer-
     Recientemente se ha comercializado una nueva               pos antitrombopoyetina endógena en voluntarios
proteína estimuladora de la eritropoyesis: darbepotin al-       sanos tras la administración de PEG-rHuMGDF,
fa con una semivida más larga, que implica que puede ad-        complicación que puede limitar el desarrollo de es-
ministrarse con menor frecuencia que rHuEPO. En la ac-          te fármaco. La forma completa de TPO (rhTPO)
tualidad, en España, no está aprobada para el                   parece ser más eficaz y segura pero la experiencia to-
tratamiento de la anemia asociada al cáncer.                    davía es escasa.
1066        FARMACIA HOSPITALARIA
6.4. Otras citocinas                                       provocar incluso el rechazo a un tratamiento poten-
                                                           cialmente curativo. Además, conlleva una serie de
     La capacidad aislada de la interleucina 3 (IL-3),     efectos colaterales indeseables como lesiones mecá-
también denominada factor multifactorial, sobre la         nicas, trastornos hidroelectrolíticos y metabólicos,
estimulación hematopoyética en humanos es míni-            efectos psíquicos, neumonía por aspiración y mal-
ma en el contexto clínico-terapéutico, aunque en           nutrición(65).
combinación con otros factores de crecimiento parece           Se desconoce el mecanismo exacto del vómito
ser más efectivo. Por ejemplo, la administración de        inducido por quimioterapia, pero se ha atribuido a la
IL-3 junto a GM-CSF aumenta la movilización de             estimulación directa de la zona gatillo quimiorre-
células progenitoras de la hematopoyesis. Sin em-          ceptora por el fármaco citostático, así como a qui-
bargo, la toxicidad de la IL-3 limita su desarrollo clí-   miorreceptores del tracto gastrointestinal que actú-
nico.                                                      an en el centro del vómito vía vagal .
     La FDA, recientemente ha aprobado el uso de               En función del momento de su aparición res-
interleukina 11 (IL11) para la profilaxis secundaria       pecto a la quimioterapia, la émesis se clasifica en tres
de la trombocitopenia después de quimioterapia. Sin        tipos(66):
embargo la eficacia es sólo moderada y la toxicidad
significativa. Quizás pueda ser más atractiva la com-      – Émesis anticipatoria. Es la que precede a la ad-
binación con rhTPO.                                          ministración de quimioterapia en pacientes que
     Estudios en animales han demostrado que el fac-         previamente habían presentado vómitos en ciclos
tor de crecimiento keratinocítico (FCK), un miem-            anteriores.
bro de la familia de factores de crecimiento fibro-        – Émesis aguda o inmediata. Ocurre dentro de las
blásticos, es capaz de proteger las células                  primeras 24 horas tras la administración de la qui-
epidérmicas, uroteliales y gastrointestinales de los         mioterapia.
efectos de la radiación y quimioterapia. Es una cito-      – Émesis tardía o retardada. Aparece después de 24
cina de gran interés pero no se dispone de ensayos           horas tras la quimioterapia, siendo de mayor in-
en humanos(64).                                              tensidad a los 2-3 días y persistiendo general-
     El factor de células stem o ligando del receptor c-     mente 6-7 días.
kit está implicado en la regulación de las fases más
precoces de la hematopoyesis. La forma recombi-                El correcto control de la émesis en el paciente
nante del factor de células stem o r-metHuSCF (An-         hematológico es complejo ya que existen una serie de
cestim, Amgen Inc) está en una fase de investigación       factores condicionantes: relacionados con el enfermo
clínica en dos campos, para la movilización asociada       (previa émesis posquimioterapia, previa émesis gra-
al trasplante de progenitores hematopoyéticos y en         vídica, susceptibilidad a la cinetosis, sexo, edad e in-
la insuficiencia medular: anemia aplásica, enferme-        gesta crónica de alcohol), relacionados con el trata-
dad de Diamond-Blackfan, fallo de injerto y en la          miento quimioterápico (capacidad emetógena del
neutropenia crónica grave. Se administra asociado          fármaco antineoplásico, dosis, pauta y tiempo de in-
con filgrastim. Parece que puede conseguir una bue-        fusión) y relacionados con el tratamiento antiemé-
na movilización en casi la mitad de los pacientes que      tico (fármaco seleccionado, esquema de administra-
habían fracasado con el método habitual de movili-         ción y asociación de fármacos sinérgicos)(67).
zación. El principal efecto secundario es la reacción      Destacar que los citostáticos con mayor poder eme-
alérgica.                                                  tógeno (cis-platino y ciclofosfamida a dosis altas,
                                                           dacarbacina y mecloretamina) son empleados habi-
 7   TRATAMIENTO DE LAS NÁUSEAS                            tualmente en los protocolos de hematología.
     Y VÓMITOS RELACIONADOS CON LA                             Las estadísticas más optimistas consideran que
     QUIMIOTERAPIA Y RADIOTERAPIA                          se ha pasado de una émesis posquimioterapia del
                                                           80% a un control aproximado del 75%, lo cual su-
    Las náuseas y vómitos posquimioterapia cons-           pone un gran avance. Sin embargo, los pacientes
tituyen el efecto adverso más frecuente e indeseable       sometidos a múltiples ciclos y durante tratamientos
que sufre el paciente oncohematológico. La émesis          intensivos, en una gran mayoría presentarán vómi-
disminuye la calidad de vida del paciente, pudiendo        tos a pesar del tratamiento antiemético preventivo.
HEMATOLOGÍA CLÍNICA             1067

7.1. Estrategias farmacológicas(68, 69, 70)                   Ortopramidas
                                                                  Bloquean los receptores dopamina y serotonina
     Si existe una causa desencadenante debe tratar-          inhibiendo el vómito tanto a nivel central como pe-
se la misma o corregirse el trastorno subyacente, pu-         riférico, presentando además efecto procinético. El
diendo, en cualquier caso, utilizarse un tratamiento          fármaco más representativo del grupo es la meto-
sintomático. El objetivo final debe ser prevenir la           clopramida, que fue el primero utilizado y el más
aparición del vómito postquimioterapia mediante               documentado. Hasta la aparición de los antagonis-
tratamiento profiláctico.                                     tas de la serotonina, la metoclopramida era consi-
     Existen muchos grupos de fármacos que han                derada el fármaco más efectivo frente a la quimio-
demostrado eficacia en el control de la émesis pos-           terapia altamente emetógena. Las dosis
quimioterapia. Su mecanismo de acción básico está re-         recomendadas son: 2 mg/kg vía oral y 1-2 mg/kg i.v.
lacionado con la inhibición de ciertos subtipos de re-        cada 2 horas (2 a 5 dosis, la primera 30 minutos an-
ceptores        (muscarínicos,       dopaminérgicos,          tes de la quimioterapia).
histaminérgicos, endorfínicos y serotoninérgicos),                Sus principales efectos adversos son funda-
los cuales se han visto relacionados con el reflejo del       mentalmente de tipo extrapiramidal como discine-
vómito en diversas regiones del sistema nervioso              sias tardías y espasmos en músculos de la cara y
central y periférico. Deben ser utilizados, solos o en        cuello.
asociación, con una potencia adecuada a la quimio-
terapia administrada.                                         Corticosteroides
     Los grupos farmacológicos más empleados son:                 No se conoce con exactitud su mecanismo de ac-
                                                              ción antiemético, aunque parece estar relacionado
Fenotiazinas                                                  con la inhibición de prostaglandinas en el cerebro y
    Su acción antiemética se debe al bloqueo de los re-       cambios en la permeabilidad celular. Pueden ser efec-
ceptores dopaminérgicos. Se utilizan en vómitos de in-        tivos para el tratamiento de los vómitos refractarios
tensidad moderada, no siendo eficaces como fármacos           a otros antieméticos, potenciando de forma marcada
únicos en pacientes tratados con fármacos citostáticos al-    la actividad antiemética de otros fármacos. Los fár-
tamente emetógenos. Las más empleadas son clorpro-            macos más utilizados del grupo son dexametasona
mazina (25-50 mg vía oral o i.m. cada 3-8 horas) y tietil-    (8-40 mg i.v.) y metilprednisolona (250-500 mg i.v.).
perazina (10 mg vía oral o rectal cada 8 horas).
                                                              Antihistamínicos
    La acción antiemética de las fenotiazinas es pro-              Son fármacos útiles para tratar vómitos no rela-
porcional a la dosis, aunque la aparición de efectos ad-      cionados con la quimioterapia. La difenhidramina es
versos severos limita su uso a altas dosis. Los efectos ad-   el fármaco utilizado en regímenes antieméticos aso-
versos más importantes producidos son sedación,               ciada a metoclopramida a dosis altas, ya que disminu-
sequedad de boca, hipotensión y sintomatología extra-         ye la incidencia de efectos extrapiramidales.
piramidal.
                                                              Antiserotoninérgicos (anti 5HT3)
Butirofenonas                                                     Han mostrado una mayor eficacia que la meto-
     Su mecanismo de acción es similar al de las fenotia-     clopramida a altas dosis frente a citostáticos altamen-
zinas, aunque presentan una potencia antiemética supe-        te emetógenos, y con menor incidencia de efectos ad-
rior. Son más efectivas frente a fármacos con alta activi-    versos. Su efecto se potencia con dosis altas de
dad emetógena. Los fármacos incluidos en este grupo           corticosteroides y por vía oral han demostrado ser
son haloperidol (1-5 mg vía oral o i.m. cada 4-6 horas),      tan efectivos o incluso más que por vía intravenosa(69).
droperidol (0,5-2,5 mg i.v. cada 4 horas) y domperidona       El control de náuseas y vómitos retardados es menor
(10-20 mg vía oral cada 4-8 horas).                           que para los síntomas agudos.
     Los efectos secundarios son similares a los de las           Los fármacos de este grupo utilizados en nues-
fenitiazinas, aunque con menor incidencia de efectos          tro país son ondansetrón, granisetrón y tropisetrón, los
anticolinérgicos y mayor de reacciones extrapiramida-         cuales parecen ofrecer una protección similar frente a
les (excepto domperidona, que no atraviesa la barrera         la émesis posquimioterapia según los estudios com-
hematoencefálica).                                            parativos llevados a cabo(66, 68).
1068        FARMACIA HOSPITALARIA
– Ondansetrón: las dosis recomendadas son flexi-              7.3. Control de la emesis posradioterapia
  bles, en función del poder emetógeno del proto-
  colo quimioterápico o radioterápico empleado. Se                  Se estima que aproximadamente el 50% de los pa-
  utilizan dosis de 8 mg cada 8-12 horas ó 8-24 mg ca-        cientes que reciben radioterapia fraccionada sobre el ab-
  da 24 horas por vía i.v. y 8 mg cada 8-12 horas por         domen sufren episodios de náuseas y vómitos. El me-
  vía oral, comenzando la administración 15 minu-             canismo de la émesis posradioterapia se relaciona con
                                                              la liberación de mediadores químicos tras el daño tisular
  tos antes ó 1-2 horas antes de la quimioterapia res-
                                                              local producido por la irradiación. La severidad es infe-
  pectivamente.
                                                              rior a la provocada por la quimioterapia, pero puede du-
– Granisetrón: las dosis recomendadas son de 3-9 mg
                                                              rar más tiempo.
  cada 24 horas i.v. y 1 mg cada 12 horas vía oral.
                                                                    El potencial emetógeno se considera moderado en
– Tropisetrón: la dosis es de 5 mg cada 24 horas i.v.         radioterapia del tórax, pelvis y de la mitad inferior del
  u oral.                                                     cuerpo, mientras que en la cabeza, cuello y extremidades
                                                              se considera bajo.
    La tolerancia del grupo es muy buena, siendo los
                                                                    El tratamiento antiemético está basado en la utili-
principales efectos adversos el estreñimiento y el dolor de
                                                              zación de los mismos fármacos utilizados para el control
cabeza.
                                                              de la émesis posquimioterapia, incluyendo a los anta-
Cannabinoides                                                 gonistas de la serotonina(73).
     Presentan una actividad antiemética moderada, jun-
to a una interesante acción estimulante del apetito. Pue-      8   PREVENCIÓN Y TRATAMIENTO
den ser útiles en pacientes refractarios a ciertos antie-          DE LAS INFECCIONES
méticos de actividad moderada. Su uso está limitado                EN LOS PACIENTES NEUTROPÉNICOS
por los efectos psíquicos indeseados que producen, tipo       8.1. Factores predisponentes
hilaridad y disforia.                                            y epidemiología de las infecciones
     Recientemente, se ha desarrollado un derivado sin-
tético del THC, la nabilona, que carece de dichos efectos          Las infecciones producen una elevada morbilidad
psíquicos. Ha mostrado ser tan eficaz como clorpro-           y mortalidad en el huésped inmunocomprometido, sus-
mazina y domperidona, y la dosis utilizada es de 1-2 mg       tituyendo en muchas ocasiones a la enfermedad de ba-
por vía oral cada 8-12 horas(71).                             se como causa de muerte. La neutropenia es la principal
                                                              causa de inmunodepresión en el paciente hematológico.
Antagonistas selectivos de los receptores-1                   La neutropenia predispone primariamente a la infec-
de neurocinina                                                ción bacteriana y fúngica pero no incrementa la inci-
    Se encuentran actualmente en fase de investigación,       dencia de infecciones virales o parasitarias. El número de
aunque los estudios preliminares parecen indicar que          infecciones bacterianas y fúngicas aumenta de forma
pueden ser útiles en el control de la émesis aguda y tar-     significativa dependiendo de la profundidad de la neu-
día por cis-platino, principalmente asociados con corti-      tropenia y de la duración de la misma. En relación a la se-
coides más anti 5HT3(72).                                     veridad de la neutropenia hay tres umbrales clínicos en
                                                              1.000/µl, 500 µ/l y 100 /µl neutrófilos(74). La neutrope-
7.2. Estrategias no farmacológicas                            nia se asocia a algunas neoplasias hematológicas de for-
                                                              ma constante, como la leucemia aguda mieloblástica,
   Algunas medidas que pueden tener cierta repercusión        pero con más frecuencia es secundaria al tratamiento
sobre la incidencia de vómitos tras la quimioterapia son:     quimio-radioterápico.
                                                                   Los organismos causantes de bacteriemia en el seno
– Administración de la comida 2-4 horas antes de la           de la neutropenia han variado en diferentes periodos.
  quimioterapia.                                              Los gérmenes gram negativos eran los predominantes
– Administración de la quimioterapia por la tarde o por       hace 10-20 años, mientras que los gram positivos (en su
  la noche.                                                   mayoría estafilococos), representan actualmente el 60-
– Administración de la quimioterapia durante el sueño         80% de las bacteriemias en la mayoría de los hospitales.
  nocturno.                                                   En algunos hospitales se está observando de nuevo un
HEMATOLOGÍA CLÍNICA                 1069

incremento de las infecciones por gram negativos(75).       infecciosa: fiebre asociada a fármacos, transfusión
    Entre los gérmenes gram negativos son las entero-       de hemoderivados, recurrencia tumoral, lisis tu-
bacterias (Escherichia coli, Klebsiella spp, Pseudomo-      moral, etc.
nas aeruginosa, etc.) procedentes del tracto gastrointes-       Las puertas de entradas más frecuentes en la
tinal las que se aislan con más frecuencia en los           neutropenia son los pulmones, cateter, región pe-
hemocultivos. Causan las infecciones más graves con         riodontal, mucosa orofaríngea, tercio inferior de
elevada mortalidad si no se instaura un tratamiento pre-    esófago, colon, región perianal, lugares de punción
coz. Los gérmenes gram positivos causantes de bacte-        cutánea y región periungueal. Debe hacerse una ex-
riemia suelen proceder de la mucosa oral (Estreptococos     ploración física diaria de estas puertas de entrada.
del grupo viridans) o de la piel (estafilococos coagulasa   Ante la aparición de fiebre o sospecha de infección
negativos). Son la causa más frecuente de bacteriemia       debe además realizarse como mínimo un hemogra-
pero no suelen alcanzar la gravedad de las infecciones      ma, bioquímica sérica y de orina, coagulación, he-
causadas por los gram negativos. Son muy poco fre-          mocultivos de sangre periférica y cateter, urocultivo
cuentes las infecciones por gérmenes anaerobios. La so-     y cultivos microbiológicos de cualquier posible fo-
breinfección por Clostridium difficile es muy frecuente     co y una radiografía de tórax(74, 76).
pero no produce bacteriemia, siendo un cuadro diarrei-
co la manifestación habitual.                               8.3. Elección de la terapia de la infección
    En el paciente hematológico con neutropenia                 en pacientes con neutropenia
suele haber otros factores predisponentes a la infec-
ción que pueden modificar sustancialmente el pa-                 Existe indicación de tratamiento antibiótico em-
trón de infecciones descrito más arriba. Así los pa-        pírico cuando hay neutropenia menor de 1.000 µl y
cientes con leucemia linfoide crónica y mieloma             fiebre o cualquier otro signo o síntoma sugestivo de in-
múltiple están predispuestos a la infección por gér-        fección(74).
menes encapsulados, mientras que los pacientes con               La instauración rápida ante la aparición de la fiebre,
linfoma y trasplante con inmunodepresión celular T          de una terapia empírica dirigida a los bacilos gram ne-
están predispuestos a las infecciones por bacterias         gativos constituye la base del tratamiento de la fiebre en
intracelulares, virus, hongos y protozoos. Esta múl-        los pacientes neutropénicos. Sin embargo la composición
titud de factores favorecedores de la infección obliga      específica de la terapia empírica sigue siendo materia de
a individualizar tanto la profilaxis como el trata-         controversia y sujeto a variaciones por el cambio en el pa-
miento. La siguiente exposición se refiere al paciente      trón de los patógenos, el rápido desarrollo de resistencias
con neutropenia posquimioterapia como principal             bacterianas y la emergencia de nuevas entidades clíni-
factor de riesgo para la infección.                         cas y nuevas drogas(77). Hay un gran número de antibió-
                                                            ticos beta-lactámicos de amplio espectro altamente efi-
8.2. Evaluación clínica del paciente                        caces. Durante los últimos 15 años se usó sobre todo la
    neutropénico con fiebre                                 ceftacidima, pero la eficacia de esta droga ha disminudido
                                                            por el aumento de prevalencia de estreptococos resis-
    El diagnóstico de la infección en pacientes             tentes y la baja actividad frente a los estafilococos. Por ello
neutropénicos puede ser difícil debido a la ausencia        actualmente se usan las cefalosporinas de cuarta gene-
de los signos inflamatorios. Este hecho, unido a            ración (ej.: cefepima), los carbapenems (imipenem, me-
que las pruebas diagnósticas no son lo suficiente-          ropenem) y las penicilinas antipseudomónicas más in-
mente rápidas, sensibles ni específicas, condujo a          hibidor de beta-lactamasa (ej.: piperacilina/tazobactam).
la instauración de tratamiento antibiótico empíri-          En caso de alergia a los betalactámicos suele usarse el
co precoz. Una demora en su inicio puede permitir           aztreonam. El tratamiento tradicional incluye la asocia-
el desarrollo de infecciones rápidamente fatales.           ción con un aminoglucósido (amikacina), pero la mo-
Pero que la terapéutica sea empírica y precoz no            noterapia es adecuada en muchos casos(78, 79). A cual-
exime de una completa evaluación clínica, con una           quiera de ellos puede añadirse un antibiótico
investigación minuciosa de los posibles focos de            glucopéptido (teicoplanina o vancomicina) cuando hay
infección y de la toma de muestras adecuadas para           una alta probabilidad de infección por grampositivos(80).
establecer el diagnóstico microbiológico específi-          En la Tabla 18 se muestran algunas posibles pautas an-
co. Además hay que descartar que la fiebre no sea           timicrobianas.
1070         FARMACIA HOSPITALARIA

    Tabla 18. Posibles pautas empíricas para el paciente neutropénico febril.
                                                       En monoterapia

    Penicilina antipseudomónica más inhibidor de beta-lactamasa: piperacilina/tazobactam 4-0,5 g/6 h i.v.
    Carbapenem: imipenem 0,5 g/ 6 h; meropenem 1 g/ 8 h
    Cefalosporinas antipseudomona de 4ª generación: cefepima 2 g/8 h i.v.

                                                   Terapia de combinación

    Añadir un aminoglucósido (amikacina 15 mg/kg/24 h en dosis única diaria) en paciente con sepsis grave y si los cultivos
    de vigilancia fueron positivos para un bacilo gramnegativo no fermentador (P. aeruginosa, Acinetobacter spp).
    Añadir un glucopéptido (vancomicina 1 g/12 h i.v. o teicoplanina (400 mg/24 h i.v.) si hay sospecha de infección asocia-
    da al cateter o sepsis grave.
    Betalactámico antipseudomónico más fluoroquinolona cuando desea evitarse el uso de aminoglucósidos.


     Una vez iniciado el tratamiento antibiótico empírico       aprobado para la terapia empírica de la fiebre en el pa-
se valorará su respuesta a los 3-4 días. Si el paciente que-    ciente con neutropenia. Estos preparados son mejor to-
da afebril se continuará con la misma pauta inicial, aun-       lerados, sobre todo menos nefrotóxicos, pero no más
que la pauta podrá modificarse en función de los estudios       eficaces que la anfotericina B desoxicolato. El itracona-
microbiológicos. No está establecida la duración ópti-          zol(81) y el voriconazol(82) han demostrado eficacia com-
ma del tratamiento antibiótico empírico, manteniéndo-           parable a la anfotericina B con menor toxicidad y posi-
se como norma general hasta la desaparición de la fiebre        bilidad de administración oral.
y recuperación de la neutropenia.
     La falta de respuesta (persistencia de la fiebre)          8.4. Terapia basada en el riesgo
obliga a una exhaustiva reevaluación para buscar cau-               para pacientes febriles con neutropenia
sas de infección no bacteriana (virus, hongos, proto-
zoos), infección bacteriana resistente a la terapia em-              Los pacientes con fiebre y neutropenia son un gru-
pírica (generalmente grampositivos resistentes para             po heterogéneo con subgrupos de riesgo distinto para
las combinaciones sin glucopéptidos, pero actual-               la respuesta, complicaciones y mortalidad. La identifi-
mente también gram positivos resistentes a los gluco-           cación de los pacientes con bajo riesgo abre la posibili-
péptidos), concentraciones séricas y tisulares insufi-          dad de una aproximaciones distinta al manejo de la fie-
cientes de los antibióticos administrados o difícil             bre, como el tratamiento con antibióticos por oral
acceso de los mismos a sitios avasculares (absceso,             (completo o después de una pauta con antibióticos pa-
etc.). Ante esta situación, y si los estudios microbio-         renterales) y los tratamiento ambulatorios (completos
lógicos son negativos, suele procecerse a un cambio             o después de un periodo de ingreso).
empírico de los antibióticos. El cambio empírico sue-                En general se admite que son de bajo riesgo aque-
le consistir en añadir un aminoglucósido o un gluco-            llos pacientes menores de 60-65 años con una neutro-
péptido si no lo recibían. Además el cateter debe reti-         penia esperada inferior a 7-10 días en ausencia de los
rarse si existen criterios de septis grave o embolia. Si        siguientes criterios: documentación clínica o bacterio-
estas medidas fallan se deberá añadir la anfotericina(78).      lógica de una infección seria, comorbilidad (diabetes
                                                                mellitus, insuficiencia renal, hepatopatía etc.), infección
     Añadir anfotericina B. La única modificación em-           documentada en un episodio previo de neutropenia,
pírica que ha mostrado ser efectiva en el paciente con          neoplasia no controlada, y ausencia de otras causas de in-
fiebre persistente y neutropenia es la adición de un            munodepresión. La mayoría de los pacientes neutro-
agente antifúngico(78). Se utiliza la anfotericina B desoxi-    pénicos hematológicos no entran en la categoría de ba-
colato (0,6-1 mg/kg/d), o las formulaciones lipídicas           jo riesgo. En la Tabla 19 se muestran algunas pautas
(Abelcet 5 mg/kg) o liposomales (AmBisome 3-5                   antibióticas que pueden usar en el paciente de bajo ries-
mg/kg/d) de anfotericina B. Solo el Ambisome está               go.
HEMATOLOGÍA CLÍNICA             1071

    Tabla 19. Pautas de tratamiento antimicrobiano empírico en paciente neutropénico de bajo riesgo.
                                    Sin antecedentes de tratamiento con fluoroquinolonas

    Levofloxacino 500 mg/24 h oral o i.v.
    Amoxicilina-ácido clavulánico 825-175 mg/8 h oral asociado a ciprofloxacino 750 mg/12 h oral
    Cefprozilo 500 mg/8 h asociado a ciprofloxacino 750 mg/12 h oral

                                        Tratamiento previo con fluoroquinolonas
    Ceftriaxona 1-2 g/24 h i.v.
    Ceftibuteno 400 mg/24 h oral que puede asociarse a teicoplanina 400 mg/24 h i.v.


8.5. Profilaxis de la infección                               de clorhexidina en lugar de povidona yodada para
    en la neutropenia                                         desinfección de la piel parece una medida sencilla y
                                                              eficaz. Los catéteres impregnados con antiséptico o
    Las medidas preventivas durante la neutropenia            antibióticos también han demostrado su eficacia. Al-
irán dirigidas fundamentalmente a disminuir las infec-        gunos autores aconsejan una dosis de teicoplanina
ciones bacterianas y fúngicas. La profilaxis irá dirigida a   durante la insercción del cateter.
cuatro frentes fundamentales: a) disminuir la adquisi-
ción y colonización por microrganismos provenientes de        8.5.1. Mejorar las defensas del paciente
fuentes ambientales; b) medidas para prevenir la infección
asociada al ceteter; c) mejorar las defensas del paciente y        Las inmunoglobulinas endovenosas no ejercen nin-
d) suprimir o modular la flora endógena del paciente          gún efecto protector durante la fase de neutropenia.
puesto que la mayoría de las infecciones se originan en la    Pueden tener algún efecto protector en algunas patolo-
propia flora del paciente(85,86). Este último grupo de me-    gías hematológicas como el TPH alogénico (una vez
didas constituyen la llamada quimioprofilaxis que será        pasada la fase de neutropenia) y en pacientes con mie-
expuesta con más detalle a continuación. Sin embargo          loma múltiple y leucemia linfoide crónica, pero incluso
son las medidas de aislamiento y asepsia las más impor-       en estas situaciones su indicación es discutible.
tantes para la profilaxis de la infección durante la neu-          La introducción de los factores de crecimiento de
tropenia.                                                     la granulopoyesis (filgrastim, lenograstim) ofrecen la po-
    Entre las medidas del primer grupo destaca el             sibilidad de acelerar la recuperación de los neutrófilos
uso de aire filtrado con filtros HEPA. Estos filtros          posquimioterapia y de esta manera disminuir la dura-
se han mostrado muy efectivos en reducir las infec-           ción de la neutropenia. Son de uso habitual en el contexto
ciones transmitidas por vía aérea y eliminan prácti-          del trasplante autólogo y de otras quimioterapias inten-
camente la infección por Aspergillus, recomendán-             sivas, sin embargo en los pacientes hematológicos no
dose sobre todo para situaciones de neutropenia               han conseguido una reducción significativa del núme-
prolongada. Los lavados orales con clorhexidina pa-           ro de episodios febriles ni la mortalidad.
ra disminuir el número de estreptococos en la oro-
faringe son otra medida básica.                               8.5.2. Quimioprofilaxis antibacteriana
    Los pacientes sometidos a terapias intensivas
suelen precisar de un catéter venoso central (CVC)                La gravedad y prevalencia en los años 1970-1980
por vía percutánea. El CVC es uno de los focos                de la bacteriemia por gérmenes aerobios gram nega-
principales de infección en el paciente neutropéni-           tivos hizo que la profilaxis con antibióticos se diri-
co. El correcto cuidado del cateter por un equipo es-         giera contra la flora endógena intestinal y Pseudo-
pecializado y de acuerdo con un protocolo es la me-           monas aeruginosa. Las pautas de descontaminación
dida más importante para prevenir la infección                total con antibióticos orales no absorbibles actual-
asociada al cateter. A pesar de un correcto cuidado del       mente apenas se usan o sólo en situaciones de muy al-
cateter, la infección sigue siendo problema habitual y        to riesgo y acompañadas de flujo laminar. El uso de
por ello se han ensayado medidas adicionales. El uso          antibióticos profilácticos endovenosos sistémicos
1072         FARMACIA HOSPITALARIA
tampoco es una medida de uso habitual. La quimio-            mg/d) se puede dar por vía i.v. o v.o. con alta biodis-
profilaxis más aceptada usa antibióticos orales ab-          ponibilidad. En el contexto del TPH alogénico se uti-
sorbibles que consiguen una descontaminación se-             liza el fluconazol a dosis altas (400 mg/d) y se debe
lectiva de la flora aeróbica intestinal además de un         mantener 75 días(89).
efecto profiláctico sistémico. Los fármacos ideales                El principal inconveniente del fluconazol es su li-
para conseguirlo son las fluoroquinolonas las cuales         mitado espectro. El intraconazol tiene un espectro an-
se han mostrado superiores al trimetoprim-sulfame-           tifúngico muy amplio: Candida spp, Aspergillus spp y
toxazol. Con estos antibióticos se reducen las infec-        otras levaduras y hongos filamentosos y por ello es un
ciones microbiológicamente documentadas aunque               agente muy interesante para la profilaxis. Varios ensa-
no el número de episodios febriles. La quinolona             yos randomizados han demostrado la eficacia al menos
más usada es la ciprofloxacina a 250 o 500 mg/12 h.          comparable al fluconazol. La profilaxis debe hacerse
    En algunos pacientes con alto riesgo de infección        con solución de itraconazol a 2,5 mg/kg/12 h.
por estreptococos (TPH, citarabina a dosis altas) pue-             En el paciente con aspergillosis pulmonar previa
de justificarse hacer también profilaxis con antibióticos    que precise nuevamente tratamientos mielodepreso-
activos para estreptococos (eritromicina, penicilina, le-    ras se realizará profilaxis fúngica con anfotericina B
vofloxacino).                                                intravenosa a dosis altas (1 mg/kg/día), o las formu-
    Hay que tener siempre presente las limitaciones          laciones lipídicas de anfotericina B. Quizás también el
en la eficacia de las quinolonas, por ello muchos gru-       itraconazol pueda ser eficaz.
pos sólo la consideran indicada para aquellos pacientes            Los métodos de detección de antígenos de hongos
con una neutropenia previsiblemente profunda y pro-          (ej., galactomannan por ELISA para Aspergillus) pue-
longada.
                                                             de permitir diagnosticar una micosis invasica varios
                                                             días antes de que aparezca la enfermedad(90). El uso ex-
8.5.3. Quimioprofilaxis antifúngica
                                                             tenso de estos test tal vez lleve a un enfoque tipo tera-
     La profilaxis fúngica se debe realizar cuando se        pia preventiva tal como se hace actualmente en la pre-
prevé que la neutropenia va a ser profunda (menos de         vención de la infección por citomegalovirus (véase a
100/m l neutrófi1os) y duradera (más de una semana).         continuación).
La medida más eficaz para la prevención de los hongos
filamentosos que se transmiten por inhalación de es-         8.5.4. Quimioprofilaxis antivírica
poras (ej.: Aspergillus spp) es la filtración del aire con
filtros HEPA Para la prevención de infección causada              La única infección vírica de relevancia asociada a la
por las levaduras oportunistas que forman parte de la        neutropenia posquimioterapia es la infección herpé-
flora endógena cutánea o intestinal (ej.: Candida spp),      tica oral por reactivación del virus herpes simple. Se
y para la profilaxis secundaria (paciente con antece-        ha demostrado la utilidad del aciclovir (250
dentes de aspergilosis invasiva o de candidiasis dise-       mg/m2/8-12 h ev, 200 mg/8 h vo ó 800 mg vo/12
minada crónica) deberemos recurrir a la quimioprofi-         h) en leucemia aguda y TPH. Otros agentes como el va-
laxis antifúngica(87, 88).                                   laciclovir o famciclovir son probablemente igual de
     La terapéutica tópica con agentes orales no ab-         eficaces.
sorbibles (nistatina; anfotericina B, miconazol), la an-          En el contexto del trasplante de PH alogénico son
fotericina B inhalada en aerosol nasal y las dosis bajas     frecuentes otras infecciones víricas una vez pasada la fa-
de anfotericina B i.v. son medidas abandonadas. Los          se de neutropenia y entre ellas destaca la infección por
agentes antifúngicos absorbibles por vía oral tienen la      citomegalovirus (CMV). La quimioprofilaxis de la in-
ventaja de que su efecto no está limitado al tracto di-      fección por CMV en el TPH alogénico se realiza con
gestivo, con efectos antifúngicos sistémicos. Se ha          ganciclovir o el foscarnet, y la aproximación actual no
probado su eficacia de los triazoles en la prevención        es una profilaxis sino una terapia preventiva(92). La te-
de las micosis superficiales: orofaríngea, esofágica,        rapia preventiva se basa en el tratamiento de la infección
rectal, vaginal y cutáneas, consiguiendo secundaria-         por CMV (viremia) antes de que se desarrolle la clíni-
mente una reducción de la candidiasis invasiva en el         ca (neumonía etc). El diagnóstico precoz de la infección
contexto del trasplante de médula, siendo menos efi-         se consigue con determinaciones periódicas del antí-
caz en la leucemia aguda. El fluconazol (100-400             geno (ELISA) o ADN viral (PCR) en sangre.
HEMATOLOGÍA CLÍNICA               1073

BIBLIOGRAFÍA                                                     of interferon-alpha for chronic myeloid leukaemia:
                                                                 improved survival irrespective of cytogenetic res-
Leucemias agudas                                                 ponse. Lancet 1995; 345:1392-7.
 1. Lowenberg B, Downing J, Burnett A. Acute mye-            15. Guilhot F, Chastang C, Guerci A, et al. Interferon
     loid leukemia. N Engl J Med 1999; 341:1051-62.              alpha 2b (IFN) and cytarabine (ARA-C) increase
 2. Fenaux P, Chomienne C, Degos L. Acute promye-                survival and cytogenetic response in chronic mye-
    locytic leukemia: biology and treatment. Semin On-           loid leukemia (CML). Results of a randomized trial.
    col 1997; 24:92-102.                                         [resumen]. Blood 1996; 88(Suppl 1):141.
 3. Tallman MS, Anderson JW, Schiffer CA, et al. All-        16. Druker BJ, Talpaz M, Resta DJ, et al. Efficacy and
    trans-retinoic acid in acute promyelocytic leukemia.         safety of a specific inhibitor of the bcr-abl tyrosine
    N Engl J Med 1997; 337:1021-8.                               kinase in chronic myeloid leukemia. N Engl J Med
 4. Mayer RJ, Davis RB, Schiffer CA, et al. Intensive            2001; 344:1031-7.
    post-remission chemotherapy in adults with acute         17. Van Rhee F, Szydlo RM, Hermans J, et al. Long-
    myeloid lukemia. N Engl J Med 1994; 331:896-903.             term results after allogeneic bone marrow trans-
 5. Cassileth PA, Harrington DP, Appelbaum FR, et al.            plantation for chronic myelogenous leukemia in
    Chemotherapy compared with autologous or allo-               chronic phase: a report from the Chronic Leukemia
    genic bone marrow transplantation in the manage-             Working Party of the European Group for Blood
    ment of acute myeloid leukemia in first remission.           and Marrow Transplantation. Bone Marrow Trans-
    N Engl J Med 1998; 339:1649-56.                              plant 1997; 20: 553-60.
 6. Hughes WT, Armstrong D, Bodey G, et al. 1977             18. Devergie A, Blaise D, Attal M, et al. Allogeneic bone
    guidelines for the use of antimicrobial agents in neu-       marrow transplantation for chronic myeloid leukemia
    tropenic patients with unexplained fever. Clin Infect        in first chronic phase: a randomized trial of busulfan-
    Dis 1977; 25:551-73.                                         cytoxan versus cytoxan-total body irradiation as pre-
 7. Evans WE, Relling MV, Rodman JH, et al. Conven-              parative regimen: a report from the French Society of
    tional compared with individualized chemotherapy             Bone Marrow Graft. Blood 1995; 85:2263-68.
    for childhood acute lymphoblastic leukemia. N Engl       19. Rozman C, Montserrat E. Current concepts:
    J Med 1988; 338: 499-505.                                    Chronic lymphocytic leukemia. N Engl J Med
 8. Pui Ch, Evans We. Acute lymphoblastic leukemia.              1995; 333: 1052-7.
    N Engl J Med 1998; 339:605-15.                           20. Rai KR, Sawitsky A, Cronkite EP, et al. Clinical sta-
 9. Thandla S, Aplan PD. Molecular biology of acute              ging of chronic lymphocytic leukemia. Blood 1975;
    lymphocytic leukemia. Semin Oncol 1977; 24:45-56.            46:219-34.
10. Scheinberg DA, Maslak P, Weiss M. Leucemias agu-         21. Cheson BD, Bennett JM, Grever M, et al. National
    das. En: Cáncer. Principios y Práctica de Oncología.         Cancer Institute-Sponsored Working Group Gui-
    Editores: DeVita VT, Hellman S, Rosenberg S. 5ª              delines for Chronic Lymphocytic Leukemia: Revi-
    ed. Madrid 2000.                                             sed Guidelines for Diagnosis and Treatment. Blo-
11. Solano S. Leucemias agudas. En: Oncología Clínica            od 1996; 87:4990-7.
    Básica. Editores Díaz-Rubio E, García-Conde J. 1ª ed.    22. Robertson LE, O’Brien S, Kantarjian H, et al. A 3-day
    Madrid 2000.                                                 schedule of fludarabine in previously treated chronic
                                                                 lymphocytic leukemia. Leukemia 1995; 9:1444-9.
Leucemias crónicas                                           23. Keating MJ, O’Brien S, Kantarjian H, et al. Long
12. Clift RA, Appelbaum FR, Thomas ED. Treatment of              term follow up of patients with chronic lymphocy-
    chronic myeloid leukemia by marrow tranplanta-               tic leukemia treated with fludarabine as single agent.
    tion. Blood 1993; 82:1954-6.                                 Blood 1993; 81:2878-84.
13. Hehlmann R, Heimpel H, Hasford J, et al. Rando-          24. Tallman MS, Hakimian et al. Cladribine in the treat-
    mized comparison of interferon-a with busulfan               ment of relapse or refractory chronic lymphocytic
    and hydroxyurea in chronic myelogenous leukemia.             leukemia. J Clin Oncol 1995; 13:983-8.
    Blood 1994; 84:4064-77.                                  25. Khouri IF, Przepiorka D, Besien KV, et al. Allogenic
14. Allan NC, Richards SM, Shephered PCA. UK Me-                 blood or marrow transplantation for chronic
    dical Research Council randomised, multicentre trial         lymphocytic leukemia: timing of transplantation
1074        FARMACIA HOSPITALARIA
   and potential effect of fludarabina on acute graft-           non-Hodgkin’s lymphoma.Haematologica 1999;
   versus-host disease. Br J Haematol 1997; 97:466-73.           84(Suppl 10):44-46.
                                                             39. Miller TP, Dahlberg S, Cassady JR, et al. Chemothe-
                                                                 rapy alone compared with chemotherapy plus ra-
Linfomas                                                         diothetrapy for localized intermediate- and high-
26. Bhatia S, Rosison LL. Epidemiology of leukemia               grade non-Hodgkin’s lymphoma. N Engl J Med
    and lymphoma. Curr Opin Hematol 1999; 6:201-                 1998; 339:21-26.
    204.                                                     40. Fisher RI, Gaynor ER, Dahlberg S, et al. Com-
27. Harris NL, Jaffe ES, Diebold J, et al. Lymphoma               parison of a standard regimen (CHOP) with
    classification-from controversy to consensus. The             three intensive chemotherapy regiments for ad-
    REAL and WHO classification of lymphoid neo-                  vanced non-Hodgkin’s lymphoma. N Engl Med
    plasms. Ann Oncol 2000; 11(Suppl 1):3-10.                     1993; 328:1002-1006.
28. Serrano S, Sans-Sabrafén J, Besses C, et al. Linfomas    41. Coiffier B, Lepage E, Briere J, et al. CHOP chemo-
    malignos no hodgkinianos. Bases citoevolutivas y             therapy plus rituximab compared with CHOP alone
    funcionales. Clasificación y descripción de sus dis-         in elderly patients with diffuse large-B-cell lympho-
    tintas variedades. En: Sans-Sabrafén J, Besses Raebel        ma. N Engl Med 2002; 346:235-242.
    C, Vives Corrons JL, eds. Hematología clínica, 4ª ed.    42. Brunet S. Tratamiento de acondicionamiento. En:
    Madrid: Harcourt, 2001; 428-473.                             Carreras E, Brunet S, Ortega JJ, et. al, eds. Manual
29. Lister TA, Crowther D, Sutcliffe, SB, et al. Report          de Trasplante Hematopoyético, 2ª ed. Collbató: An-
    of a commettee convened to discuss the evaluation            tares, 2000; 219-231.
    and staging of patients with Hodkin’s disease: Cos-      43. Sans-Sabrafén J, Besses C, Pedro C. Enfermedad de
    twolds meeting. J. Clin Oncol 1987; 7:1630-1636.             Hodgkin. En: Sans-Sabrafén J, Besses Raebel C, Vi-
30. Cheson DB, Horning SK, Coiffier B, et al. Report             ves Corrons JL, eds. Hematología clínica, 4ª ed. Ma-
    of an international workshop to standardize res-             drid: Harcourt, 2001; 428-473.
    ponse criteria for non-Hodgkin’s lymphoma. J Clin        44. Bocieck RG, Armitage JO. Hodgkin’s disease and
    Oncol 1999; 17:1244-1253.                                    non-Hodgkin’s lymphoma. Curr Opin Hematol
31. The International Non-Hodgkin’s Lymphoma                     1999; 6:205-215.
    Prognostic Factors Project. A predictive model for ag-   45. Aisenberg AC. Problems in Hodgkin’s disease ma-
    gressive non-Hodgkin’s lymphoma. N Engl J Med                nagement. Blood 1999; 93:761-779.
    1993; 329:987-994.                                       46. Hasenclever D, Diehl V. A prognostic score for ad-
32. Bocieck RG, Armitage JO. Hodgkin’s disease and               vanced Hodgkin’s Disease. N Engl J Med 1998;
    non-Hodgkin’s lymphoma. Curr Opin Hematol                    339:1506-1514.
    1999; 6:205-215.                                         47. Engert A, Woldf J, Diehl V. Treatment of advan-
33. Ribera JM, Batllé M. Pautas de quimioterapia en he-          ced Hodgkin’s lymphoma: Standard and Experi-
    mopatías malignas. Madrid: Acción Médica, 2001.              mental Aproaches. Semin Hematol 1999; 36:282-
34. Keating JM. Purine analogs in the management of in-          289.
    dolent lymphoproliferative disorders. Haematologi-       48. Sureda A, Rovira M. Enfermedad de Hodgkin. En:
    ca 1999; 84(Suppl 10):28-32.                                 Carreras E, Brunet S, Ortega JJ, et al, eds. Manual
35. Solal-Céligny P for the “Groupe d’etudes des lym-            de Trasplante Hemtopoyético, 2ª ed. Caollbató: An-
    phomes de l’adulte”. Interferons in the manage-              tares, 2000; 113-120.
    ment of indolent non-Hodgkin’s lymphomas. Hae-
    matologica 1999; 84(Suppl 10):38-40.                     Mieloma múltiple
36. Rai KR. New Biologic Therapies. Semin Hematol            49. Besses C, Sans-Sabrafén J. Gammapatías monoclo-
    1999; 36(Suppl 5):12-17.                                     nales. Clasificación. Métodos de detección. Gam-
37. Bocchia M, Bronte V, Colombo MP, et al. Antitu-              mapatía monoclonal de significado indeterminado.
    mor vaccination: where we stand. Haematologica               En: Hematología clínica. Editores: Sans-Sabrafén J,
    2000; 85:1172-1206.                                          Besses Raebel C, Vives Corrons JL. 4ª ed. Harcourt,
38. Tarella C, Caracciolo D, Corradini P, et al. Highdose        S.A., p: 565-573. Barcelona 2001.
    chemotherapy with PBPC autofraft in low grade            50. Bladé J. Mieloma múltiple. En: Hematología clí-
HEMATOLOGÍA CLÍNICA             1075

    nica. Eds. Sans-Sabrafén J, Besses Raebel C, Vi-             to three-times-weekly dosing. Clin Oncol 2001;
    ves Corrons JL. 4ª ed. Harcourt, S.A.; p: 574-588.           19:2875-2882.
    Barcelona 2001.                                          63. Bronchud MH. factores de colonia y hemoderiva-
51. Alegre A, Martínez C, Fernández-Rañada JM. Tra-              dos. En: González Barón M, Ordóñez A, Feliu
    tamiento del mieloma múltiple y otras gammapatías            Amora P, et al, eds. Oncología Clínica: Fundamentos
    monoclonales. En: Terapia en oncohematología.                y patología general, 2ª ed. Madrid: McGraw Hill
    Ed. Fernández-Rañada JM. Harcourt, S.A.; p: 211-             1998; 617-625.
    227. Madrid 1997.                                        64. Booth D, Potten CS. Protection against mucosal in-
52. Singhal S, Metha J, Desikan R, et al. Antitumor acti-        jury by growth factors and cytokines. J Natl Cancer
    vity of thalidomide in refractory multiple myeloma.          Inst Monogr 2001; 29:16-20.
    N Eng J Med 1999; 341:1565-71.
53. Barlogie B, Zangari M, Spencer T, et al. Thalidomi-      Náuseas y vómitos
    de in the management of multiple myeloma. Semin          65. Laszlo J. Nausea and vomiting as mayor complica-
    Hematol 2001; 38:250-9.                                      tions of cancer chemotherapy. Drugs 1983;
54. Besinger WI, Maloney D, Storb R. Allogenic hema-             25(Suppl 1): 203-8.
    topoietic cell transplantation for multiple myeloma.     66. Morrow GR, Hicckok JT, Rosenthal SN. Progress in
    Semin Hematol 2001; 38(3):243-9.                             reducing nausea and emesis. Comparisons of On-
55. Cheer SM, Noble S. Zoledronic acid. Drugs 2.001;             dansetron (Zofran), Granisretron (Kytril) and Tro-
    61: 799-805.                                                 pisetron (Navoban). Cancer 1995; 76:343-57.
56. Berenson JR. Advances in the biology and treat-          67. Joss RA, Brand BC, Buser KS, et al. The sympto-
    ment of myeloma bone disease. Am J Health Syst               matic control of cytostatic drug-induced emesis. A
    Pharm 2001; 58(S3):516-20.                                   recent history and review. Eur J Cancer 1990; 26
                                                                 (Suppl 1):2-8.
Factores de crecimiento hematopoyético                       68. Mullin S, Beckwith MC. Prevention and Manage-
57. Fetscher S, Mertelsmann R. Suportive care in he-             ment of chemotherapy-induced nausea and vomi-
    matological malignancies: hemayopoietic growth               ting, part 2. Hosp Pharm 2001; 36:280-302.
    factors, infections, transfusión therapy. Curr Opin      69. American Society of Health-System Pharmacists.
    Hematol 1999; 6:262-273.                                     ASHP Therapeutic Guidelines on the Pharmacolo-
58. Carrato A, Rodríguez-Lescure A, Gonzálvez ML.                gic Management of Nausea and Vomiting in Adult
    Factores de crecimiento hematopoyético. En: On-              and Pediatric Patients Receiving Chemotherapy or
    cología Médica. Cortés-Funes H, Díaz-Rubio E,                Radiation Therapy or Undergoing Surgery. Am J
    García-Conde J y cols. Ed. Princeps, Madrid-Barce-           Health-Syst Pharm 1999; 56:729-64.
    lona 1999; 198-215.                                      70. Martindale. The Extra Pharmacopoeia. 31 ed. Lon-
59. Ozer H, Armitage JO, Bennett CHL, et al. 2000                don: The Pharmaceutical Press.
    Update of recommendations for the use of hema-           71. Drugdex® Editoral Staff. Drugdex® Information
    topoietic colony-stimulating factors: evidence-ba-           System. Micromedex Inc. Englewood, Colorado.
    sed, clinical practice guidellines. Clini Oncol 2000;        Vol. 10, 2001. Drug Evaluation Monographs of
    18:3558-3585.                                                Nabilone.
60. Escobar I, Sevilla E, Rodríguez S, et al. Estudio mul-   72. Hesketh PJ, Gralla RJ, Webb RT, et al. Randomized
    ticéntrico de utilización de factores estimulantes de        phase II study of the neurokinin 1 receptor antago-
    crecimiento hematopoyético. Farm Hosp 1998; 22:              nist CJ-11.974 in the control of cisplatin-induced
    109-125.                                                     emesis. J Clin Oncol 1999; 17:338-43.
61. Sevilla E, Del Hoyo Gil L. Estudio de utilización de     73. Roila F, Ciccarese G, Palladino MA, et al. Preven-
    eritropoyetina en pacientes oncológicos. Farm                tion of radiotherapy-induced emesis. Tumori 1998;
    Hosp 2000; 24:398-405.                                       84: 274-8.
62. Gabonchud MH, Factoresrilove JL, Cleeland ChS, et        Prevención y tratamiento de las infecciones
    al. Clinical evaluation of once-weekly dosing of         en el paciente neutropénico
    epoetin alfa in chemotherapy patients: improve-
    ments in hemoglobin and quality of flife are similar     74. García Rodríguez JA, Gobernado M, Gomis M, et al.
1076         FARMACIA HOSPITALARIA
    Guía clínica para la evaluación y el tratamiento del           sistent fever. N Engl J Med 2002; 346:225-234.
    paciente neutropénico con fiebre. Rev Esp Qui-             83. Rolston KV. New trends in patient management:
    mioter 2001; 14:75-83.                                         risk-based therapy for febrile patients with neutro-
75. Zinner SH. Changing epidemiology of infections                 penia. Cin Infec Dis 1999; 29:515-521.
    in patients with neutropenia and cancer: emphasis          84. Mensa J, Rovira M. Infecciones bacterianas. En: Ca-
    on gram-positive and resistant bacteria. Clin Infec            rreras E, Brunet S, Ortega JJ, et al, eds. Manual de
    Dis 1999; 29:490-494.                                          Trasplante Hematopoyético, 2ª ed. Collbató: Antares,
76. Viscoli C. Planned progressive antimicrobial therapy           2000; 355-362.
    in neutropenic patients. Br J Haematol 1998;               85. Guidelines for preventing opportunistic infecions
    102:879-888.                                                   among hematopoietic stem cell transplant reci-
77. Jones RN. Contemporary antimicrobial susceptibi-               pients. MMWR Recomm Rep 2000; 49 (RR-10):1-
    lity patterns of bacterial pathogens commonly as-              125.
    sociated with febrile patients with neutropenia. Clin      86. Rovira M. Profilaxis de las infecciones. En: Carreras
    Infec Dis 1999; 29:495-502.                                    E, Brunet S, Ortega JJ, et al, eds. Manual de Tras-
78. Hughes WT, Amstrong D, Bodey GP, et al. 1997                   plante Hematopoyético, 2ª ed. Collbató: Antares,
    guidelines for the use of antimicrobial agents in              2000; 315-323.
    neutropenic patients with unexplained fever. Infec-        87. Rovira M, Fernández-Avilés. Infecciones fúngicas.
    tious Diseases Society of America. Clin Infec Dis              En: Carreras E, Brunet S, Ortega JJ, et al, eds. Manual
    1997; 25:551-573.                                              de Trasplante Hematopoyético, 2ª ed. Collbató: An-
79. Ramphal R. Is monotherapy for febrile neutropenia              tares, 2000; 369-374.
    still a viable alternative? Clin Infec Dis 1999; 29:508-   88. Ascioglu S, de Pauw BE, Meis JF. Prophylaxis and
    514.                                                           treatment of fungal infections associated with hae-
80. Feld R. Vancomycin as part of initial empirical anti-          matological malignancies. Int J Antimicrob Agents
    biotic therapy for febrile neutropenia in patients             2000;15:159-168.
    with cancer: pros and cons. Clin Infect Dis 1999;          89. Marr KA, Seidel K, Slavin MA, et al. Prolonged flu-
    29;503-507.                                                    conazole prophylaxis is associated with persistent
81. Boogaerts M, Winston DW, Bow EJ, et al. In-                    protection against candidiasis-related death in allo-
     travenous and oral intraconazole versus intra-                geneic marrow transplant recipients: long-term fo-
     venous amphotericin B deoxycholate as empi-                   llow-up of a randomized, placebo-controlled trial.
     rical antifungal therapy for persistent fever in              Blood 2000; 96:2055-2061.
     neutropenic patients with cancer who are recei-           90. Klont RR, Meis JF, Verweij PE. Critical assessment
     ving boradl-spectrum antibacterial therapy. A                 of issues in the diagnosis of invasive aspergillosis.
     randomized, controlled trial. Ann Intern med                  Clin Microbiol Infect 2001; 7(Suppl 2):32-37.
     2001; 135:412-422.                                        91. Whitley RJ, Roizman B. Herpes simplex virus in-
82. Walsh TJ, Pappas P, Winston RJ, et al. For the Na-             fections. Lancet 2001; 357:1513-1518.
    tional Institutte of Allergy and Infectious Diseases       92. Stocchi R, Ward KN, Fanin R, et al. Management
    Mycoses Study Group. Voriconazole compared                     of human cytomegalovirus infection and disease af-
    with liposomal amphotericin B for empirical anti-              ter allogeneic bone marrow transplantation. Hae-
    fungal therapy in patients with neutropenia and per-           matological 1999; 84:71-79.

Más contenido relacionado

PPT
Leucemia promielocítica aguda (seminario)
PDF
Lmaarreglado
PDF
clasificacion FAB de leucemias
PDF
LEUCEMIAS AGUDAS.PDF
PDF
Leucemias correlaciã³n 2015-a
PPTX
Morfología leucemias 2012
PPT
Leucemias agudas y_crónicas (2)
PPTX
Leucemia m3
Leucemia promielocítica aguda (seminario)
Lmaarreglado
clasificacion FAB de leucemias
LEUCEMIAS AGUDAS.PDF
Leucemias correlaciã³n 2015-a
Morfología leucemias 2012
Leucemias agudas y_crónicas (2)
Leucemia m3

La actualidad más candente (19)

PPT
Leucemia Mieloide Aguda
PPTX
Leucemias mieloides blanca
PPTX
clasificacion leucemias FAB
PDF
Leucem linfom
PPT
Archivos clases pregrado_hematologia_leucemias clinica
PPTX
1.LMA (introducción)
PPT
Leucemia mieloide
PPTX
Leucemias agudas: Mieloblásticas y Linfoblásticas
PPTX
Leucemias agudas
PPTX
Leucemia promielocitica aguda
PPT
LEUCEMIAS AGUDAS
PDF
LEUCEMIAS AGUDAS Y CRÓNICAS
PPTX
El laboratorio en el estudio del paciente hemato oncológico
PPTX
PDF
Leucemias correlación 2014-b
PPTX
LAM (generalidades)
PPTX
Sx mieloproliferativos
PPTX
LEUCEMIA MIELOIDE CRONICA
Leucemia Mieloide Aguda
Leucemias mieloides blanca
clasificacion leucemias FAB
Leucem linfom
Archivos clases pregrado_hematologia_leucemias clinica
1.LMA (introducción)
Leucemia mieloide
Leucemias agudas: Mieloblásticas y Linfoblásticas
Leucemias agudas
Leucemia promielocitica aguda
LEUCEMIAS AGUDAS
LEUCEMIAS AGUDAS Y CRÓNICAS
El laboratorio en el estudio del paciente hemato oncológico
Leucemias correlación 2014-b
LAM (generalidades)
Sx mieloproliferativos
LEUCEMIA MIELOIDE CRONICA
Publicidad

Similar a Hematologia clinica (20)

PDF
Hematología clínica
PPTX
LEUCEMIAS.pptx
PPT
3. Leucemias agudas pediatría
PPTX
Leucemias
PPTX
PPTX
leucemia EYM,.pptx
PPT
LEUCEMIAS, linfo y mieloblasticas
PPT
C.2.Leucemias Agudas L&M
PPTX
Leucemias Enfoque para médicos generales
DOCX
Leucemia linfoblastica aguda
PPTX
Leucemia Mieloblástica Aguda
PDF
Leucemias correlación 2014-b
PPTX
Dr panchito leucemia linfoblastica aguda hrdt
PPTX
Leucemia Mieloide Aguda + Leucemia Linfoide Aguda+ Leucemia crónica.pptx
PPTX
leucemias linfoide aguda
PPTX
Leucemias
PPT
Leucemias
PPT
Leucemia mieloide aguda y crónica
PPTX
Leucemias con Enfoque en Pacientes Pediatricos.pptx
PPT
Neoplasias hematopoyeticas
Hematología clínica
LEUCEMIAS.pptx
3. Leucemias agudas pediatría
Leucemias
leucemia EYM,.pptx
LEUCEMIAS, linfo y mieloblasticas
C.2.Leucemias Agudas L&M
Leucemias Enfoque para médicos generales
Leucemia linfoblastica aguda
Leucemia Mieloblástica Aguda
Leucemias correlación 2014-b
Dr panchito leucemia linfoblastica aguda hrdt
Leucemia Mieloide Aguda + Leucemia Linfoide Aguda+ Leucemia crónica.pptx
leucemias linfoide aguda
Leucemias
Leucemias
Leucemia mieloide aguda y crónica
Leucemias con Enfoque en Pacientes Pediatricos.pptx
Neoplasias hematopoyeticas
Publicidad

Hematologia clinica

  • 1. 10. Hematología clínica M. L. SALA B. BLANCO M. PÉREZ M. PÉREZ 1 LEUCEMIAS AGUDAS La patofisiología de la LMA es por transforma- ción de una celula hematopoyética mieloide en ma- 1.1. Leucemia Mieloide Aguda (LMA) ligna y la consiguiente expansión clonal de células con supresión de la hematopoyesis normal. La inves- La leucemia mieloide aguda, que también se co- tigación de anomalías en los cromosomas clónicos noce como leucemia aguda no linfocítica, es una ne- ha ayudado a entender las bases genéticas de la leu- oplasia de células mieloides que se produce por tras- cemia. En un 65% de las leucemias agudas (LA) se formación y proliferación clonal de progenitores han identificado inversiones o translocaciones cro- inmaduros que desplazan e inhiben el crecimiento de mosómicas adquiridas. Estas reorganizaciones es- la hematopoyesis normal. tructurales afectan la expresión genética y alteran el Esta patología relativamente rara, se presenta en al- funcionamiento normal de la proliferación celular, di- rededor de 2,5 pacientes, por 100.000 habitantes y ferenciación y supervivencia. año en Estados Unidos. La LMA afecta a personas mayores, con una edad media de diagnóstico de 65 1.1.2. Características clínicas y pronóstico años. El origen de la LMA es en parte desconocida, pe- ro hay factores identificados como predisponentes. La LMA se manifiesta con signos y síntomas re- Estos factores son haber estado expuesto de forma lacionados con la ineficacia de la hematopoyesis (in- accidental a radiaciones, los supervivientes de bombas fección, hemorragia y alteración de la capacidad del atómicas, la exposición a benceno o derivados, los fu- transporte de oxígeno). Los signos y síntomas co- madores de cigarrillos, algunas etiologías víricas, la rrientes en las LA (ya sea mieloblástica o linfoblástica) herencia y algunos fármacos (fenilbutazona, cloran- son dolor óseo, cansancio, fatiga, acortamiento de la fenicol, hidroxiurea, etopósido y agentes alquilantes) respiración, mialgias y sangrado de encías. En la se han asociado a leucemogénesis. LMA los datos de laboratorio incluyen un hemogra- ma completo que presenta anemia, trombocitopenia, 1.1.1. Patofisiología leucocitosis o neutropenia. Una coagulopatía pareci-
  • 2. 1032 FARMACIA HOSPITALARIA da a la intravascular diseminada, que se manifiesta podiploide; las translocaciones cromosómicas que con bajo fibrinógeno y elevación del tiempo de trom- llevan a la formación de genes de fusión transforma- boplástina parcial activado. En el examen de sangre dos o disrregulación de la expresión genética; y a la periférica se observan mieloblastos con bastones de inactivación de la función del gen supresor de tumo- Auer, que son piezas alargadas de cromatina. res. El diagnóstico de la LMA comprende una valo- ración del estado físico, los datos del hemograma, el as- 1.1.3. Clasificación pirado de la médula ósea y la biopsia. El examen de la morfología de la médula nos permite calcular el por- La forma de presentarse y las alteraciones hema- centaje de blastos en el espacio medular y datos mor- tológicas son la base para la clasificación de la LMA, fológicos que distinguen entre los blastos linfoides y pero el diagnóstico depende de la biopsia de la mé- mieloides. Se hacen tinciones específicas, inmunofe- dula ósea. Esta se hace a partir de una muestra que se notipos y análisis citogenéticos para confirmar el obtiene con una aguja que se inserta en la médula diagnóstico. Las características inmunofenotípicas y ósea en la parte posterior de la cresta ilíaca. Un aspirado anomalías citogenéticas para las LA están represen- con más de un 30% de células blásticas se diagnosti- tadas en la Tabla 1. El análisis citogenético nos permite ca como leucemia aguda. examinar los cromosomas de las células leucémicas La LMA se clasifica en base al sistema Franco- para las anomalías genéticas. Las lesiones genéticas Americano-Británico (FAB). Esta clasificación se uti- responsables de la forma de crecimiento aberrante liza para señalar subtipos morfológicos, para realizar del clon leucémico incluyen pérdidas o ganancias estudios clínicos y para determinar el pronóstico. La cromosómicas, dando lugar a un hiperdiploide o hi- clasificación FAB de las LA se muestra en la Tabla 2. Tabla 1. Leucemias agudas: características citogenéticas e inmunofenotipo. Tinciones Citoquímicas Inmunofenotipos Anomalías Citogenéticas LMA MPX (+) CD 33 (+) T (15;17) Negro Sudan (+) CD 13 (+) T (8;21) PAS (-) CD 117 (+) Inv (16) Estearasa (+) Citogenética normal Tdt (-) 5q- 7q- 11q23 LLA MPX(-) CD 10-CALLA (+)1 t (9;22) Negro Sudan (-) CD2 (+)2,3 t (4;11) PAS (+) CD3 (+)3 t (8;14) Estearasa (-) CD4 (+)3 t (1;19) Tdt (+) CD7 (+)2,3 t (11;19) CD19 (+)4,5 t (17;19) CD20 (+)4,5 1 Presente en LLA células B y T. 2 Presente en LLA con pre células T. 3 Presente en LLA con céulas T. 4 Presente en LLA con pre células P. 5 Presente en LLA con células B. MPX = Mieloperóxidasa PAS = Ácido Periódico de Shiff. Tdt = deoxinucleotidil transferasa terminal. CALLA = Leucemia linfocítica aguda común. Antígeno; (+) = presente; (-) = ausente
  • 3. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1033 Tabla 2. Clasificación de las leucemias agudas según el Grupo Franco-Americano-Británico. Categoria Comentarios LMA M0 LMA no diferenciada Pobre pronóstico M1 LMA con diferenciación mínima Bastones de Auer en blastos M2 LMA con maduración Pronóstico favorable en jóvenes M3 Leucemia promielocítica Blastos granulados; coagulopatías M4 Leucemia mielomonocítica Diferenciación mieloide/monocítica M4eo Leucemia mielomonocítica con eosinofilia Relativo buen pronóstico M5a Leucemia monocítica, poco diferenciada Enfermedad extramedular M5b Leucemia monocítica, bien diferenciada Igual que la M5a M6 Leucemia eritroide Rara; pronóstico pobre M7 Leucemia megacariocítica Rara; médula ósea fibrótica; pronóstico pobre LLA L1 LLA infantil Los blastos son células pequeñas con citoplasma pequeño L2 LLA adulto Los blastos son células grandes con citoplasma medio L3 B-células maduras Los blastos son células redondas con citoplasma basófilo LMA = leucemia mieloide aguda; LLA = leucemia linfocítica aguda. El pronóstico de la LMA es pobre, con una super- to normal de sangre periférica y por la celularidad nor- vivencia media de 12 meses, y que a los 3 años sólo viven mal de la médula ósea, con menos de un 5% de mielo- un 15% de pacientes. Los factores pronóstico que pro- blastos. Esto no demuestra que haya leucemia en sangre ducen pobre respuesta a la quimioterapia y un alto ries- y el estadio de remisión debe mantenerse durante 4 se- go de recaída son edad superior a 60 años y anomalías ci- manas. La remisión con quimioterapia de inducción, en togenéticas desfavorables, que la LMA sea secundaria a las LMA, es del 60-70%. A pesar del estado de remisión otros procesos patológicos previos a la quimioterapia, aparente, pueden encontrarse células leucémicas inde- resistencia a varios citostáticos, recuento de leucocitos tectables, que forman lo que se denomina enfermedad en el momento del diagnóstico superior a 20.000 residual mínima, que necesitará ciclos posteriores de cel/mm3, una baja remisión completa (RC), y que la to- consolidación para alcanzar la curación. lerancia a la quimioterapia de los pacientes de más de 60 años sea peor. Los cariotipos que se asocian a un 1.1.5. Tratamiento de inducción diagnóstico favorable incluyen el t (8;21), el t (15;17) y la inversión del 16. La citogenética normal predice una pa- La citarabina (arabinosido de citosina: Ara-C) es tología con un riesgo intermedio. Las anomalías citoge- el principal citostático utilizado en la quimioterapia de néticas que se asocian a un pobre pronóstico incluyen al- inducción a la remisión. Las dosis de citarabina son teraciones de los cromosomas 5, 7 o 9, inversión del 3, de 100-200 mg/m2, por vía intravenosa y en infu- o el t (11q23). sión continua durante 7 días. A ésta se añade una an- traciclina: la daunorubicina a dosis de 30-60 mg/m2 1.1.4. Tratamiento de la LMA o la idarubicina(1) 12 mg/m2, por vía intravenosa los primeros 3 días, siguiendo el acrónimo 7+3. La an- El tratamiento estándar para la LMA es la poliqui- traciclina óptima aún no se sabe cual es, ya que es- mioterapia inmediatamente después del diagnóstico. El tudios randomizados que comparaban daunorubi- tratamiento se divide en dos fases: inducción a la remi- cina e idarubicina sugieren que esta última es más sión, seguido por el de post-remisión (consolidación). eficaz en pacientes jóvenes; pero que la duración de El objetivo del tratamiento es erradicar el clon leucémi- la aplasia de la idarubicina, es más prolongada que co y así alcanzar la RC, que se manifiesta por el recuen- con daunorubicina(1). También se ha utilizado el mi-
  • 4. 1034 FARMACIA HOSPITALARIA toxantrone, una antracenodiona, pero aún no hay tos malignos. La LPA es una entidad distinta en su pre- estudios que definan su papel real. La adicción a la ci- sentación clínica, respecto a las leucemias mieloides. La tarabina de otros citostáticos como la 6-tioguanina, presencia de gránulos en los promielobastos que con- etopósido y mitoxantrone no mejora la superviven- tienen factores procoagulantes, como el tromboxano, cia si se compara con el 7+3. Los regímenes para la produce una coagulopatia intravascular diseminada con LMA se listan en la Tabla 3. episodios de sangrado y una alta mortalidad (10% en algunas series) hasta que se produce el diagnóstico. 1.2. Leucemia promielocítica aguda (LPA) Los RAR1 actuan como una diana terapéutica. La tretinoina (ácido all-trans retinoico: ATRA), es un La leucemia promielocítica aguda (LPA, LMA-M3) compuesto retinoide que se une al RAR1 para indu- es una forma de LMA caracterizada por la transloca- cir la diferenciación de los promieloblastos en una ción de los cromosomas 15 y 17(2). Esta translocación forma madura que sufre una muerte programada da como resultado la expresión de un receptor el ácido- (apoptosis). La LPA tiene un pronóstico más favora- 1 retinoico (RAR1) en la superficie de los promieloci- ble que otros subtipos de LMA, se está intentando Tabla 3. Pautas de quimioterapia para la Leucemia Mieloide Aguda (LMA). Inducción 7+3 Citarabina 100-200 mg/m2/día en infusión intravenosa contínua, días 1 a 7; Daunorubicicina 45-60 mg/m2/día, intravenosa, días 1 a 3; o Idarubicina 12 mg/m2/día, intravenoso, días 1 a 3; o Mitoxantrone 12 mg/m2/día, intravenoso, días 1 a 3. 5+2 Citarabina 100-200 mg/m2/día en infusión intravenosa continua, días 1 a 5; Daunorubicina 45-60 mg/m2/día, intravenosa, días 1 a 2. 7+3+3 Citarabina 100-200 mg/m2/día en infusión intravenosa contínua, días 1 a 7; Daunorubicina 45-60 mg/m2/día vía intravenosa, días 1 a 3; Citarabina 2-3 g/m2 intravenoso cada 12 horas, días 8 a 10. 7+3+6TG Citarabina 100 mg/m2 intravenoso cada 12 horas, días 1 a 7; 6-tioguanina 100 mg/m2 oral cada 12 horas durante 7 días Daunorubicina 60 mg/m2 intravenoso cada día, días 5, 6 y 7. 7+3+7 Citarabina 100 mg/m2/día, intravenoso en infusión continua, días 1 a 7 Daunorubicina 50 mg/ m2/día, intravenosa, días 1 a 3 Etopósido 75 mg/m2/dia, intravenosa, días 1 a 7. ATRA Tretinoína 45 mg/m2/12 horas, por vía oral. Consolidación: 5+2 Citarabina 100-200 mg/m2/día, en infusión continua, días 1 a 5 Daunorubicina 45-60 mg/m2/día, intravenosa, días 1 a 2. Dosis altas Citarabina 1-3 g/m2/12 horas, intravenoso, 8-12 dosis, durante 2-4 ciclos con o sin Etopósido 400 mg/m2, intravenoso, los días 1, 3.
  • 5. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1035 averiguar cuál es el papel de la tretinoina comparada Group B), que mostró una supervivencia libre de en- con o en adicción al 7+3. Un estudio randomizado fermedad(4) de un 40% de pacientes, durante 4 años, llevado a cabo por el Eastern Cooperative Oncology comparado con el 20% usando dosis más bajas de cita- Group (ECOG) dió una supervivencia mayor a los rabina. Los pacientes con edad inferior a los 40 años tu- pacientes que recibieron tretinoína en la inducción, vieron una supervivencia sin enfermedad mayor y ex- respecto a los que sólo recibieron 7+3(8). El trata- perimentaron menor toxicidad. Las dosis altas de miento de mantenimiento con tretinoina demostró citarabina, se asocian con toxicidad mayor respecto a las un periodo de supervivencia mayor, después de 3 dosis bajas de inducción. Esta toxicidad incluye efectos años de seguimiento. Hay quien combina tretinoína y cerebelosos, conjuntivitis química, náuseas y vómitos, 7+3 en el tratamiento de inducción de la LPA. La tre- diarrea, descamación palmar y alteración hepática. Si la tinoína actúa como inhibidor y sustrato del citocromo toxicidad cerebelosa es irreversible se ha de suspender el P450, lo que puede potenciar las interacciones entre fármaco. La toxicidad es más frecuente en personas ma- fármacos. Los alimentos aumentan la biodisponibi- yores. lidad de la tretinoína, pero aún no se conoce bien su La citarabina a dosis altas se acompaña de un au- significado clínico. Los principales problemas de la mento de la neurotoxicidad cuando se administra con an- tretinoina son la toxicidad pulmonar, neurológica fotericina-B u otros fármacos que alteran la función re- (dolor de cabeza), hepática y cutánea. La leucocito- nal, a pesar de ajustar las dosis. La conjuntivitis puede sis es otro efecto de la tretinoina, que diferencia los prevenirse con la administración de colirio de dexame- blastos promielocíticos en formas maduras. Un 25% tasona en cada ojo cada 6-8 horas. Si hay alteración he- de pacientes, en estudios randomizados, presentan pática ajustaremos la dosis de citarabina. un síndrome de estrés respiratorio llamado “síndrome ATRA” (también síndrome del RA-LPA). Este sín- 1.2.2. Trasplante de médula ósea (TMO) drome que se manifiesta con fiebre, disnea, edema periférico, ganancia de peso, efusiones pleurales y pe- El éxito de la intensificación con citarabina a do- ricárdicas puede ser mortal. El reconocimiento tem- sis altas ha abierto la posibilidad de utilizar, como prano de los signos y síntomas de la alteración respi- tratamiento curativo, dosis más altas de citostáticos, ratoria y el tratamiento con dexametasona 10 mg, si después se realiza un alo-trasplante de médula por vía intravenosa cada 12 horas, mejora este cua- ósea (TMO). El TMO se realiza después del trata- dro. La tretinoína puede reiniciarse al 75% del valor de miento mieloablativo y el acondicionamiento con o la dosis inicial, después de la resolución de los signos bien irradiación corporal total combinado con do- y síntomas del problema pulmonar. Pasados 3-5 días, sis altas de ciclofosfamida o bien una combinación de la dosis puede aumentarse hasta la dosis inicial, si los ciclofosfamida y busulfán. Una vez erradicada la síntomas respiratorios no remiten. MO, se infunden las células progenitoras hemato- poyéticas del mismo donante o de un donante com- 1.2.1. Tratamiento post-remisión r patible con antígeno leucocitario humano (HLA) no relacionado. Las células hematopoyéticas del do- El tratamiento de inducción no produce la muerte nante producen unos efectos inmunológicos que celular total, no consiguiéndose la curación, por este contribuyen a la reconstitución hematológica del motivo se han desarrollado varias estrategias para in- huésped. La enfermedad del injerto contra el huésped tensificar la quimioterapia y así eliminar las células leu- (EICH) es una complicación habitual donde las cé- cémicas que sobreviven a la inducción. De forma simi- lulas-T atacan a los epitopes en el tejido huésped, ya lar a la inducción, la citarabina es el principal citostático sea piel, mucosa gastrointestinal o hígado, produ- de la terapia post-remisión de la LMA, si comparamos ciendo una morbilidad y mortalidad asociada a esta con la inducción que utiliza dosis de 100 mg/m2, en el tra- población trasplantada. Las complicaciones del tamiento post-remisión se administran dosis del orden EICH, las infecciones, la toxicidad del régimen de de 2-3 g/m2, en combinación con una antraciclina o acondicionamiento y la hemorragia dan una morta- etopósido durante dos ciclos sucesivos para alcanzar la lidad del 40%, en el día 100 del transplante. Un fe- erradicación de la patología residual mínima y alcanzar la nómeno inmunológico que procede de las células curación. Esta hipótesis fue valorada por un estudio del del donante es el ataque de estas contra las células grupo cooperativo CALGB (Cancer and Leukemia de leucemia residual que sobreviven al régimen de
  • 6. 1036 FARMACIA HOSPITALARIA acondicionamiento llamada enfermedad residual 1.2.3. Tratamiento de la recaída de la LMA mínima, a la que nos referiremos como injerto con- tra leucemia (ICL), y que es la responsable de la ba- Los pacientes con LMA que recaen, tienen un ja recaída, de un 10 a un 20% de los alo-TMO. Es- pronóstico pobre. La reinducción con citarabina y tudios randomizados con alo-TMO versus dosis otros citostáticos a dosis convencionales no produ- altas de citarabina, como parte de las poliquimiote- cen la curación. El alo y auto TMO son los están- rapias de consolidación no han demostrado una su- dares del tratamiento y han demostrado largos pe- pervivencia mayor para el alo-TMO(5), dada la alta riodos de supervivencia sin enfermedad, en mortalidad asociada con el régimen de acondiciona- alrededor de un 30-40% de pacientes. Se están in- miento y subsiguientes complicaciones de aplasia y vestigando nuevas estrategias como utilizar fármacos EICH. Por otra parte, estos estudios han demostra- nuevos que actúan inhibiendo la resistencia a multi- do una supervivencia libre de enfermedad y una re- fármacos (MDR) expresados en las células leucé- caída menor en los brazos del alo-TMO. micas. Los genes MDR-1 producen una proteína La mayoría de centros utilizan el alo-TMO tras la transmenbrana (P-glucoproteína), que disminuye primera remisión completa. A los pacientes con bajo las concentraciones intracelulares de algunos de los riesgo citogenético, edad inferior a los 50 años y un do- fármacos quimioterápicos, tales como el etopósido, nante histocompatible se les suele ofrecer la posibili- antraciclinas y taxanos. Fármacos como la ciclos- dad de un alo-TMO para alcanzar un largo periodo li- porina, quinina y verapamil inhiben la actividad de la bre de enfermedad. La mejora de las medidas de P-glucoproteína. Más de un 70% de pacientes que re- caen o presentan enfermedad refractaria tienen soporte y la introducción de tratamientos más eficaces blastos leucémicos con el fenotipo MDR. El grupo para el EICH pueden hacer del alo-TMO una opción Southwest Oncology Group (SWOG) presentó un mejor en los pacientes con LMA. estudio de evaluación en que el hecho de añadir ci- La función del auto-TMO, después de la consoli- closporina a un tratamiento de reinducción para re- dación de la LMA, está aún en discusión. El beneficio caídas de LMA producía una supervivencia de dos de la quimioterapia, a dosis altas, sin la morbilidad que años, en el brazo de ciclosporina, a pesar de que no provoca el EICH(5), es una opción que hace dudar a los haber diferencia en la RC. En estos momentos hay pacientes sin donante histocompatible. Las células ma- varios fármacos que son inhibidores de la MDR y dres autólogas pueden obtenerse por dos vías. La opción que están en estudio para ver si mejoran la eficacia de tradicional es extraer del propio paciente una muestra la quimioterapia en la LA. de médula cuando este está en RC. Una segunda opción es utilizar la quimioterapia en combinación con facto- 1.2.4. Tratamiento de soporte res estimulantes de colonias que movilizan a las células madres pluripotenciales de la médula ósea en sangre La importante toxicidad de la poliquimioterapia periférica, permitiendo recoger estas células por afére- necesita de una aproximación multifactorial a la hora sis. La desventaja de estos dos métodos es el poder de aplicar medidas de soporte. Las medidas para evitar contaminar el injerto autólogo (células madres) con cé- el riesgo de aplasia incluyen la transfusión de concen- lulas leucémicas indetectables. Los estudios que se han trados de hematíes y plaquetas para evitar el sangrado hecho trabajando con genes marcados han confirma- y la hipoxia. La clínica marca una cifra de hemoglobina do la contaminación del injerto autólogo. inferior a 8 g/dl y plaquetas inferiores a 10000/mm3 Se utilizan varias técnicas para la descontaminación para transfundir concentrados de hematíes y plaque- del injerto, como el purgado de la médula ósea con tas. La eritropoyetina-alfa no se utiliza, ya que en estos sustancias citotóxicas, como el 4-hidroxiciclofosfamida, pacientes es urgente la transfusión. Para mujeres en técnicas inmunológicas o procedimientos más especí- edad fértil, la supresión de la menstruación está indi- ficos con que obtener células madres que reduzcan el cada por el riesgo de trombocitopenia, esto se obvia riesgo de reinfundir un autoinjerto contaminado. Es- con la administración diaria de anticonceptivos orales o tudios randomizados no han confirmado el beneficio estrógenos conjugados por vía intravenosa. La prácti- del auto-TMO, si se compara con dosis altas de citara- ca habitual es monitorizar el tiempo de protrombina bina, que es la base del tratamiento de consolidación o (PT) periódicamente (por ejemplo: cada semana), para el alo-TMO. valorar el efecto potencial de una hipoprotrombine-
  • 7. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1037 mia. Estos pacientes reciben tratamientos con antibió- mento rápido del potasio sérico puede inducir disrrit- ticos que alteran la flora gastrointestinal y esto altera la mias y el aumento del fosfato que se une al calcio pro- absorción de la fitomenadiona(6) (vitamina K). La ad- duciendo un precipitado de fosfato cálcico en los ri- ministración de fitomenadiona exógena, evita la vía in- ñones y causando fallo renal. La administración de tramuscular, que puede causar sangrado y corrige rá- poliestireno sulfonato cálcico que se une al potasio o la pidamente un elevación del PT debido a la deficiencia administración de 1 g de gluconato cálcico, 10 unidades de vitamina K. de insulina rápida y una ampolla de glucosa al 50% (25 En el paciente neutropénico con fiebre, se utilizan g de glucosa en 50 ml) para reintroducir el potasio in- antibióticos de amplio espectro, cubriendo especial- tracelularmente, se administran si se producen cam- mente a los microorganismos gram negativos, como bios en el electrocardiograma (ECG). El calcio o el la Pseudomona aeruginosa. Si la fiebre persiste, a pesar aluminio, por vía oral, se unen al exceso de fósforo, de los antibióticos, se requiere la utilización empírica dando lugar a una hiperfosfatemia que es de corta du- de antifúngicos, generalmente anfotericina-B. Factores ración en ausencia de fallo renal. como la resistencia de los gérmenes, presente en los Los pacientes con LPA y en menor grado otros centros hospitalarios y los costes de adquisición, dic- subtipos de LMA, presentan un riesgo elevado de pre- tan la elección de los antibióticos que se usan como sentar episodios de sangrado debidos a la coagulopatía tratamiento empírico. DIC. El riesgo de muerte por sangrado es de un 10- La quimioterapia que se utiliza para la inducción y 15% con LPA de novo. La patofisiología de este sín- el tratamiento post-remisión puede variar de ser mo- drome se produce por la liberación de factores proco- derada a altamente emetógena; por este motivo los pa- agulantes, como el tromboxano que se libera de los cientes deben recibir profilaxis con antagonistas de los gránulos de los promielocitos, esto se acompaña de 5-HT3 (ondansetrón, granisetrón) u otros antieméti- trombocitopenia. La monitorización de este síndrome cos que precisen para evitar las nauseas y los vómitos. incluye valores de tiempo de protrombina (TP), INK, La dexametasona, un antiemético eficaz, se utiliza con tiempo de tromboplastina parcial activado (aPTT), fi- precaución en pacientes con periodos prolongados de brinógeno y productos derivados de la fibrina. La ma- aplasia, para evitar enmascarar la fiebre que se presen- yoría de centros evitan la utilización de heparina y en ta durante el periodo de neutropenia y para no produ- cambio confían en la utilización de plaquetas, criopre- cir un riesgo añadido de infección fúngica. cipitados y plasma fresco. Cuando se inicia el trata- Una complicación durante la quimioterapia inicial miento contra los promieloblastos el síndrome empie- en los pacientes a los que se les acaba de diagnosticar una za a solucionarse. leucemia aguda es el síndrome de lisis tumoral, que se La introducción de la utilización clínica de los presenta en pacientes con cifras altas de leucocitos. Es- factores de crecimiento mieloides (CSFs) ha dado te síndrome es una urgencia oncológica y requiere una lugar a la investigación de su uso en la LMA tanto intervención rápida y adecuada. La muerte rápida de como tratamiento de soporte como para potenciar las células leucémicas inducida por la quimioterapia da los efectos de la quimioterapia. La administración lugar a la liberación del contenido intracelular en la cir- de los factores de crecimiento antes de la quimio- culación sistémica, aumentando de forma importante terapia para estimular el reclutamiento de blastos el ácido úrico, potasio y fosfato. El ácido úrico se de- leucémicos de la fase G0 y G1 de los ciclos celulares posita en las articulaciones dando lugar a artritis goto- en la fase S. El aumento del número de células en fa- sa o bien se deposita en el parenquima renal produ- se S podría optimizar teoricamente la incorpora- ciendo fallo renal. El riesgo más grave es que se ción intracelular del ara-CTP dentro de los blastos produzca el síndrome de lisis tumoral en las primeras 48 leucémicos, resultando en un incremento de la ci- horas de haber iniciado la quimioterapia. Durante las 24 totoxicidad. Otros beneficios de esta aproximación horas de la primera dosis de quimioterapia es funda- incluyen el promocionar la apoptosis inducida por mental una buena hidratación para mantener la pro- quimioterapia, un aumento de la expresión de la ducción de orina por encima de 150 ml/h, otro factor Topoisomerasa II y la infra regulación del gen a tener en cuenta es la alcalinización de la orina con bi- MDR-1. Varios grupos cooperativos han llevado a carbonato para favorecer la eliminación de fármacos y cabo estudios randomizados para valorar el bene- la administración de alopurinol (300-900 mg/día). El au- ficio del filgrastín en el acortamiento de la duración
  • 8. 1038 FARMACIA HOSPITALARIA de la neutropenia, durante el tratamiento de induc- Las características morfológicas e inmunofenotípi- ción de la LMA. cas se utilizan para clasificar a los pacientes con LLA. La FAB las clasifica en tres subtipos: L1, L2 y L3 como 1.3. Leucemia linfocítica aguda (LLA) se muestra en la Tabla 2. El subtipo L1 está formado por linfoblastos pequeños y uniformes y es el más co- La LLA es una proliferación neoplásica clónica de cé- rriente en niños, si bien un 25-30% de casos de adultos lulas linfoides inmaduras del sistema hematopoyético. son clasificados como L1. El subtipo L2 consta de La incidencia de la LLA es de 1,3 casos por 100.000 ha- grandes linfoblastos pleomórfos, es el más corriente en bitantes y año, o de alrededor de 4.000 pacientes por adultos e implica a un 70% de casos. El subtipo L3, cu- año en USA. Es una enfermedad básicamente infantil, ya estructura es similar al linfoma de Burkitt, es la LLA con una edad media de diagnóstico de 10 años; la LLA de células B cuyos blastos expresan inmunoglobulinas de puede presentarse a cualquier edad en los adultos y tie- superficie. ne un pequeño aumento de incidencia en personas de El pronóstico de las LLA es diferente según nos re- más de 70 años. firamos a niños o adultos. La quimioterapia actual pro- porciona una curación de casi el 80% de niños, mien- 1.3.1. Características clínicas y pronóstico tras que los adultos se curan en un 25%. El análisis citogenético de los blastos linfoides da anomalías en un La presentación clínica de la LLA es similar a la 60-75% de pacientes con LLA. Estas alteraciones cro- LMA, pero la infiltración en diferentes tejidos, la invasión mosómicas se utilizan para investigar la patogénesis de la del sistema nervioso central (SNC), masa mediastínica o enfermedad y dar información respecto al pronóstico. En líquido pleural, y la implicación testicular son caracterís- adultos, la diferencia en supervivencia resulta de la pre- ticas de la LLA. De forma similar a los linfomas, la LLA sencia de citogenética de riesgo bajo. Las anomalías ci- puede presentarse en el momento del diagnóstico con es- togenéticas asociadas con un pobre pronóstico inclu- plenomegalia y linfadenopatía en la mitad de los pa- yen LLA con T(9;22) (cromosoma Filadelfia), hecho cientes. El diagnóstico de LLA requiere una valoración que se observa en un 30% de pacientes L2, t(4;11) y similar a la de la LMA respecto al examen físico, pruebas t(8;14) diagnosticado como L3. Otros indicadores de de laboratorio, aspirado medular y biopsia. En la LLA el pobre pronóstico para la LLA incluyen un recuento de inmunofenotipo es el principal medio de diagnóstico leucocitos superior a 30.000/mm3 en el momento del debido a la falta de distinción citoquímica y morfológi- diagnóstico, edad superior a 35 años, inmunofenotipo de ca. Las anomalías de la LLA inmunofenotípicas y cito- células B maduras y un largo periodo de tiempo para al- genéticas se muestran en la Tabla 1. canzar la remisión completa. En la LLA de células pre-B, el subtipo más fre- cuente, con un 70% de pacientes. El nombre de pre-B se 1.3.2. Tratamiento de la LLA refiere al hecho que el clon de células leucémicas esta destinado al linaje de células B, como se pone de mani- El tratamiento de la LLA se divide en cuatro fases: fiesto por los marcadores tempranos, CD10 (el antíge- inducción, intensificación (consolidación), manteni- no común de la LLA: CALLA) y el CD19, y reagrupa- miento y profilaxis del SNC. Los tratamientos se pueden ciones genéticas de inmunoglobulinas de superficie. La ver en la Tabla 4. Como en la LMA, el objetivo del tra- LLA de células -T es el segundo subtipo de LLA. Esta tamiento de inducción es erradicar el clon leucémico y al- patología no se distingue del linfoma linfoblástico, un canzar la RC, mientras se restaura la hematopoyesis nor- linfoma no Hodgkin (LNH) de grado alto. Los pacien- mal. La remisión se alcanza en el 98% de niños y en el tes con menos del 30% de médula ósea se clasifican co- 90% de adultos. Pero en el caso de los adultos hay un mo estadio IV del linfoma linfoblástico. Inversamente, riesgo importante de recaída, después de los siguientes una implicación medular de más del 30% le confiere le ciclos de quimioterapia. El riesgo de recaída tiene en designación de LLA de célulasT. El último subtipo de cuenta factores de pobre pronóstico como edad, pre- LLA es el de célula B madura que representa un 5% de sencia del cromosoma Filadelfia, alto recuento de leu- las LLA del adulto. Esta enfermedad se clasifica como lin- cocitos en el momento del diagnóstico, inmunofenotipo foma de Burkitt, en ausencia de implicación medular, de células leucémicas, tiempo para llegar a la RC, también mientras cualquier implicación de médula le confiere la se tendrán en cuenta estos factores para determinar el tra- designación de LLA de células B maduras. tamiento post-remisión.
  • 9. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1039 Tabla 4. Poliquimioterapias utilizadas en la Leucemia Linfocítica Aguda (LLA). – Hiper-CVAD: Ciclofosfamida 300 mg/m2, intravenosa, cada 12 horas, días 1 a 3. Doxorubicina 50 mg/m2, intravenosa, día 1. Vincristina 1.4 mg/m2, intravenosa, días 1 y 11. Dexametasona 40 mg, oral, cada día, días 1 a 4, 11 a 14. Metotrexato 15 mg, intratecal, día 2. Citarabina 30 mg, intratecal, día 2. Hidrocortisona 15 mg, intratecal, día 2. Los fármacos anteriores en ciclos de 1, 3, 5, 7 días. Metotrexato 1000 mg/m2, intravenosa durante 24 horas, día 1. Citarabina 3000 mg/m2, intravenosa, cada 12 horas, días 2, 3. Leucovorín 25 mg, intravenoso, durante 1 día y luego 25 mg, oral, cada 6 horas, durante 7 dosis. Metotrexato 15 mg intratecal, día 2. Los fármacos anteriores se administran en ciclos de 2, 4, 6 y 8 días. – Inducción: Vincristina 1.4 mg/m2 (dosis máxima 2 mg), intravenoso, cada semana, durante 4 semanas. Prednisona 40 a 60 mg/m2, oral, cada día, días 1 a 28. o Dexametasona 6,5 mg/m2, oral, cada día, días 1 a 28. Daunorubicina 45-60 mg/m2, intravenosa, cada semana, durante 4 semanas. Ciclofosfamida 600 mg/m2, intravenoso, semanal, durante 4 semanas. L-asparaginasa 10.000 U/m2, intravenoso, cada 48 horas o bien del día 17 al 28. – Intensificación: Metotrexato 1 a 5 g/m2, intravenoso, semanas 1, 2, 4 (rescate con leucovorín) Etopósido 100 mg/m2, intravenoso, cada día, durante 5 días. Citarabina 75 mg/m2, intravenoso, días 1 a 4, 8 a 11, 15 a 18, 22 a 25. 6-tioguanina 60 mg/m2, oral, cada día, días 29 a 42. – Intratecal: Metotrexato: menos de 1 año 15 mg (con o sín 1-2 años: 20 mg citarabina, 2-3 años: 25 mg hidrocortisona) más de 3 años: 30 mg Citarabina: menos de 1 año 15 mg 1-2 años: 20 mg 2-3 años: 25 mg más de 3 años 30 mg Hidrocortisona menos de 1 año: 5 mg 1-2 años: 7,5 mg 2-3 años: 10 mg más de 3 años: 12,5 mg – Mantenimiento: Metotrexato 20 mg/m2, oral, cada semana. Mercaptopurina 75 mg/m2, oral, cada día,
  • 10. 1040 FARMACIA HOSPITALARIA 1.3.3. Tratamiento de inducción sente en un 10-25% de pacientes tratados con vin- cristina y prednisona. La utilización de dosis altas El tratamiento de inducción de la LLA en adul- de citarabina o metotrexato(7) se combina con anti- tos y niños, utiliza la vincristina más los corticoides. metabolitos como la 6-mercaptopurina o 6-tiogua- Esta combinación produce la RC en la mitad de los nina, L-asparaginasa, ciclofosfamida o antraciclinas. pacientes. Para aumentar la tasa de RC se han adi- La dosis de metotrexato es del orden de 1 a 5 g/m2 cionado fármacos como la ciclofosfamida, antraci- y requiere rescate con ácido folínico, para evitar la to- clínas y la L-asparaginasa. Estudios no randomiza- xicidad que suele ser fatal. La retención de fluidos dos han demostrado la superioridad de 4 versus 5 (ascitis, líquido pleural, edema) enlentece el aclara- fármacos combinados que contienen vincristina y miento de metotrexato del compartimento central, un corticoide en el tratamiento de inducción. La to- debido a su distribución al agua corporal extracelu- xicidad más habitual con el tratamiento de induc- lar. La alteración renal produce una alta exposición ción son la neuropatía y estreñimiento debidas a la al metotrexato, dando toxicidades como citopenias vincristina; la hiperglicemia e hiperexcitabilidad o mucositis importantes. La monitorización seria- causadas por los corticoides; la extravasación y náu- da de los niveles de metotrexato y la administración seas/vómitos debidos a las antra- de ácido folínico están justificadas. Las dosis altas ciclinas; la cistitis hemorrágica y náuseas/vómitos de citarabina necesitan un control especial como ya debidos a la ciclofosfamida; la DIC y pancratitis de- se observaba en la LMA. bidos a la L-asparaginasa. La monitorización de la li- pasa, amilasa, fibrinógeno, PT, y el aPTT son los 1.3.5. Tratamiento de mantenimiento que garantizan la duración del tratamiento con L- asparaginasa. La L-asparaginasa puede dar lugar a El tratamiento de la LLA es único por su pro- reacciones anafilácticas, por lo que antes de iniciar- longada administración de dosis bajas de quimiote- la administraremos una dosis test al paciente por rapia para optimizar la oportunidad de curación. vía intradérmica. Para casos de intolerancia impor- Mientras la patofisiología que requiere tratamiento tante, se puede cambiar de L-asparaginasa, derivada de mantenimiento es desconocida, la corriente ra- de Escherichia coli (E. coli), a pegasparaginasa que cional es que la constante exposición a los agentes es un conjugado de polietilenglicol y asparaginasa quimioterápicos de las células leucémicas sinergiza- y tiene menos potencial inmunogénico. La aspara- rá con el sistema inmune del huésped para inducir ginasa, derivada de la Erwinia carotovora, puede apoptosis. El tratamiento de mantenimiento du- utilizarse en pacientes con reacciones de hipersen- rante periodos de más de 2 años con mercaptopurina sibilidad previas debidas a la L-asparaginasa de E. diaria y metotrexato semanal es estándar. Se aconseja coli. la monitorización de metotrexato para evitar la to- Los pacientes que reciben tratamiento con cor- xicidad hepática que produce. Algunos pacientes ticoides durante largo tiempo, se aconseja que reci- tienen una deficiencia de la enzima tiopurina s-me- ban profilaxis para la prevención de la pneumonia tiltransferasa, que es el responsable de catalizar la por Pneumocystis carinii con cotrimoxazol, dapso- inactivación de la mercaptopurina. En niños con na o pentamidina dependiendo de las alergias de los una deficiencia de esta enzima, la dosis estándar de pacientes y del protocolo del centro. Los suple- mentos con calcio deben tenerse en cuenta para mercaptopurina causa una toxicidad hematológica prevenir la necrosis aséptica inducida por corticoi- mayor, que puede ser mortal. La identificación des. prospectiva de estos niños permitirá reducir la dosis y evitar la toxicidad. 1.3.4. Tratamiento de intensificación Si bien en niños es importante seguir con el tra- tamiento de mantenimiento, la eficaciadel mismo La fase de intensificación de la quimioterapia de es menos clara en adultos. Las poblaciones adultas la LLA es esencial para exponer a las células leucé- difícilmente se beneficiarán del tratamiento de micas que quedan, a dosis altas de citostáticos con mantenimiento, incluyendo pacientes con LLA de varios mecanismos de acción antineoplásica, para células-B maduras y pacientes con el cromosoma superar la resistencia a los fármacos que está pre- Filadelfia.
  • 11. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1041 1.3.6. Tratamiento del sistema nervioso tas reinducciones es de algo menos de 6 meses. Los pa- central (SNC) cientes que recaen durante la poliquimioterapia de man- tenimiento tienen un pobre pronóstico si se compara La leucemia en el SNC está presente en un con los pacientes que lo hacen después del manteni- 10% de pacientes adultos con LLA. Los pacientes miento. con más riesgo son los que tienen cifras altas de La quimioterapia con altas dosis altas es una opción leucocitos, los que presentan enfermedad de las de tratamiento para pacientes en recaída o leucemia re- células-T y los del subtipo L3. La profilaxis en es- fractaria o enfermedad con factores de pobre pronósti- tos casos se hace administrando por via intratecal co, como es el caso de los que tienen cromosoma Fila- citostáticos, como el metotrexato y la citarabina. delfia. Los pacientes con LLA en recaída pueden Las características farmacocinéticas de la dexame- esperar una supervivencia de un 10-20% con un alo- tasona, incluida la penetración en el líquido cefa- TMO. Los pacientes LLA con cromosoma Filadelfia + lorraquideo y una larga vida media pueden prote- a los que se les administra la quimioterapia estándar tie- ger contra la recaída del SNC. El metotrexato se nen una supervivencia de un 10 %, si bien hay quien ha administra a dosis de 6 mg/m2 (máximo 15 mg), citado una supervivencia libre de enfermedad tan alta con o sin citarabina 30 mg e hidrocortisona 15 como de un 40% a los 2 años con alo-TMO. No menor, mg; ambos se administran intratecalmente y sin es la mortalidad y morbilidad asociadas al alo-TMO que conservantes: la toxicidad de los citostáticos por limita la utilidad de esta aproximación en algunos pa- vía intratecal son dolor de cabeza y aracnoiditis cientes. El papel del auto-TMO no está claro en la LLA, química. Los diluyentes que llevan alcohol benzílico dado el alto potencial para la contaminación leucémica y metilhidroxibenzoato conservantes causan para- de las células madre, a pesar de las técnicas de selección plejía y deben evitarse en la administración de ci- positivas o negativas. tostáticos por vía intratecal. La recaída del SNC después de haber hecho una profilaxis adecuada 1.3.8. Retos del tratamiento disminuye a un 10%, de una recaída esperada del 40%, sin profilaxis. Otro sistema es la irradiación En los niños que sobreviven a la LLA, las últi- craneal que se utilizó para disminuir la recaída en mas complicaciones pueden transformarse en un SNC, pero la falta de un incremento en la super- desafío médico. La exposición a las radiaciones da vivencia cuando se combina esta con quimiotera- lugar a un aumento de tumores cerebrales, estatura pia intratecal y el riesgo de toxicidad retardada con baja, obesidad, pubertad precoz y osteoporosis. La pérdida de función cognitiva ha limitado su utili- administración de hormona del crecimiento permi- zación. te alcanzar la altura adecuada en estos pacientes; pe- ro es en estos casos donde se ha registrado una ma- 1.3.7. Tratamiento de las recaídas yor asociación entre hormona del crecimiento y un nuevo inicio de leucemia aguda, que coloca a estos La recaída de la LLA se combate con dos estrate- pacientes en alto riesgo de recaída. El metotrexato in- gias diferentes: la reinducción de la LLA con quimiote- duce encefalopatía, las antraciclínas inducen cardio- rapia convencional o el alo-TMO con dosis altas de qui- miopatía tardía y la topoisomerasa II induce la mioterapia. Una segunda remisión puede conseguirse LMA, que son consideradas como toxicidades tardías en aproximadamente la mitad de pacientes que recaen, . con los mismos fármacos utilizados para alcanzar la RC Mientras los avances de las nuevas quimioterapias inicial o con una combinación de quimioterapia alter- en niños, dan ánimos, la falta de resultados paralelos nativa, que incluye dosis altas de metotrexato que van y la recaída en adultos, pone de manifiesto la nece- de los 200 mg/m2 a los 6 g/m2. Este régimen presenta sidad de nuevos tratamientos en adultos. La indivi- una importante toxicidad hematológica y gastrointesti- dualización de las dosis de quimioterapia, la inmu- nal, a pesar del rescate con ácido folínico. Otros regí- noterapia dirigida hacia células diana, el tratamiento menes incluyen combinaciones de dosis altas de citara- dirigido a la diferenciación celular, los inhibidores bina con amsacrina y prednisona, o dosis intermedias de la angiogénesis y la terapia génica son nuevas es- de citarabina, con mitoxantrone y etopósido. La duración trategias de investigación en niños y adultos con media de las remisiones para los pacientes que reciben es- LLA.
  • 12. 1042 FARMACIA HOSPITALARIA 2 LEUCEMIAS CRÓNICAS 2.1.2. Tratamiento 2.1. Leucemia mieloide crónica (LMC) El objetivo inicial del tratamiento conservador es conseguir un control de la enfermedad, mejorar la cali- Es un síndrome mieloproliferativo crónico caracte- dad de vida y la supervivencia. Pero el objetivo final de- rizado por una proliferación monoclonal mieloide que in- be ser la curación, lo cual solo puede conseguirse con volucra a la “stem cell”, lo cual significa que además de el trasplante de precursores hematopoyéticos (TPH) una marcada leucocitosis en sangre periférica a base de alogénico. neutrófilos, eosinófilos y basófilos, se ven afectadas Se estima que el 50-75% de pacientes en fase cróni- otras líneas celulares sanguíneas: megacariocitos, pre- ca con donante adecuado pueden ser curados por el cursores de hematíes e, incluso, linfocitos B y T. TPH. Sin embargo, es fundamental determinar el mo- Fue la primera neoplasia en la que se descubrió una mento ideal para llevarlo a cabo, puesto que la probabi- alteración cromosómica característica, el cromosoma lidad de éxito disminuye al aumentar el tiempo entre el Philadelphia (Ph). Este cromosoma, que aparece en un diagnóstico y el trasplante y sobre todo si la LMC no 85% de los pacientes, es producto de una translocación está en fase crónica. En general se debe hacer en el pri- adquirida entre los cromosomas 9 y 22. El punto de mer año y se consideraría urgente en la fase acelerada(12). ruptura en el cromosoma 22 está en la región bcr (bre- Desde el momento del diagnóstico hasta la realiza- akpoint cluster region) y en el cromosoma 9 implica al ción del TPH y en aquellos pacientes que no sean sub- protooncogén abl. El resultado es un oncogén bcr-abl. sidiarios de un TPH, hay que administrar un tratamien- La LMC representa entre el 7% y el 15% de todas las to convencional: leucemias, con una prevalencia de 1-1,5 casos/100.000 – Busulfán. Se utiliza únicamente cuando no se toleran habitantes y año. Es más frecuente en varones que en o no son eficaces otros tratamientos La dosis es de mujeres (2:1), y la mediana de edad en el momento del 0,1 mg/kg/día por vía oral, hasta que la cifra de leu- diagnóstico es de 45 años. No obstante, puede apare- cocitos se reduce al 50%. Después, la dosis se reduce cer a cualquier edad, incluso en niños (3% de las leuce- a la mitad hasta alcanzar los 20 x 109 /l y se suspende. mias infantiles). Presenta efectos adversos muy importantes como No se conoce la causa de la LMC, aunque la expo- mielosupresión potencialmente mortal y fibrosis en sición a radiaciones ionizantes aumenta su incidencia. pulmón y corazón. Está contraindicado en potencia- También se ha relacionado con ciertos HLA (CW3 y les candidatos a un TPH, porque aumenta la toxici- CW4). No se conocen factores hereditarios. dad orgánica del trasplante. – Hidroxiurea. Se considera el tratamiento inicial de 2.1.1. Características clínicas elección para reducir la cifra inicial de leucocitos, ya que produce menos efectos adversos que el bu- – Fase crónica. Tradicionalmente dura entre 3 y 5 sulfán, prolonga la duración de la fase crónica, in- años, pero con el interferón se ha alargado. Un ter- crementa la supervivencia global comparado con cio de los pacientes no presenta ningún síntoma. el busulfán y además no compromete el éxito de El resto de pacientes presenta astenia, anorexia, su- un posible TPH(13). La dosis es de 40 mg/kg/día dores, fiebre y fundamentalmente esplenomegalia. por vía oral hasta alcanzar los 20 x 109/l leucoci- – Fase acelerada. La presenta un 60-70% de los pacien- tos, y después se reduce la dosis para mantener una tes tras la fase crónica y se caracteriza por una leuco- cifra de leucocitos entre 2 y 5 x 109/l. Los efectos ad- citosis progresiva y resistente al tratamiento, acompa- versos de la hidroxiurea son citopenias, ezcemas, ñada por fiebre, sudor nocturno y esplenomegalia úlceras en mucosas y piel, náuseas y macrocitosis. progresiva. Esta fase dura, habitualmente, varios me- – Interferón alfa (2a y 2b). Es el tratamiento de elec- ses. ción una vez reducida la cifra inicial de leucocitos – Crisis blástica. Puede aparecer con o sin fase acelerada con hidroxiurea. Se emplea a dosis de 2 a 5 x 106 previa y se caracteriza por la presencia de síndrome unidades/m2/día por vía subcutánea de manera anémico, infecciones, hemorragias, malestar general, continua. El tratamiento debe iniciarse dentro del dolores óseos y esplenomegalia progresiva. La super- primer año que sigue al diagnóstico para obtener ta- vivencia en esta fase es de 3 a 6 meses. sas de respuesta elevadas (70% de remisión com-
  • 13. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1043 pleta hematológica y 25% de remisión completa centros con prolongada experiencia. La superviven- citogenética) ya que así se retrasa la llegada de la cia libre de enfermedad a largo plazo se sitúa en el 40- crisis blástica(14). El tratamiento con IFN alarga la su- 70% si el TPH se efectúa en la fase crónica, pero des- pervivencia comparado con la hydroxiurea, sobre ciende al 15-30% en la fase acelerada y al 10-20% en la todo en los pacientes que alcanzan alguna res- fase blástica(17). puesta citogenética. Los regímenes de acondicionamiento más utilizados Los efectos adversos agudos del interferón alfa con- son ciclofosfamida más irradiación corporal total y sisten en un cuadro seudogripal, mielosupresión y ele- busulfán más ciclofosfamida(18). Las dosis utilizadas vación de transaminasas. Los principales efectos a lar- son: ciclofosfamida 60 mg/kg/día durante dos días, go plazo son depresión, neuropatía periférica, busulfán 4 mg/kg/día durante 4 días y radioterapia 2 hipertrigliceridemia e hipotiroidismo autoinmunita- Gy/día durante 6 días. rio. Las complicaciones más graves derivadas del TPH Parece que la asociación de interferón alfa con hi- son la enfermedad del injerto contra el huésped y las in- droxiurea o con citarabina puede incrementar la ta- fecciones, siendo la mortalidad derivada del TPH de un sa de respuesta y la supervivencia respecto a inter- 20-30% en la fase crónica y de un 50% en la fase ace- ferón solo(15). lerada. La mortalidad y las complicaciones son más Debido al elevado coste del interferón, algunos estudios altas cuando el donante no es un familiar o no hay de coste-eficacia sugieren suspender el tratamiento si identidad HLA. no se alcanza la respuesta citogenética en los dos pri- La recaída postrasplante no es infrecuente. La opción meros años. más habitual en la recaída es el interferón, siendo otras – Imatinib. Es un inhibidor de la bcr-abl tirosin ki- alternativas disminuir o suspender la ciclosporina uti- nasa, indicado para el tratamiento de la LMC so- lizada como profilaxis de la enfermedad del injerto bre todo en fase crónica tras fracaso del interferón contra el huésped, y la infusión de linfocitos del do- alfa, aunque también puede conseguir respuestas nante. en crisis blástica y en fase acelerada. Se administra El minialotrasplante consiste en un trasplante alo- por vía oral a dosis de 400 mg/día en la fase cróni- génico con un acondicionamiento de intensidad reducida generalmente con fludarabina y busul- ca y de 600 mg/día en la fase acelerada y en crisis fán. Es un procedimiento muy bien tolerado pero blásticas. En la fase crónica se han conseguido más no exento de complicaciones. Su eficacia a largo de un 95% de remisiones completas hematológi- plazo no se conoce. cas y un 30% de respuestas citogenéticas comple- tas(16). En fase acelerada y crisis blásticas mieloides Tratamiento de la crisis blástica las tasas de respuestas hematológica y citogenética Se trata con quimioterapia intensiva, con los regí- completas han sido inferiores (28% y 14% respec- menes empleados en las leucemias agudas. La elección del tivamente en fase acelerada y 4% y 5% respectiva- esquema dependerá del fenotipo mieloide o linfoide de mente en crisis blástica). De momento se desco- las células transformadas, alcanzándose remisión com- noce si puede mejorar la supervivencia. Es bien pleta en un 60 % de los pacientes con crisis blástica lin- tolerado en general, siendo sus efectos adversos foide y en un 20% de los pacientes con crisis blástica más frecuentes neutropenia, trombocitopenia, mieloide. En ambos tipos de crisis debe ensayarse el náuseas, vómitos, diarrea, espasmos y calambres TMO alogénico, a pesar de los pobres resultados obte- musculares, edemas superficiales y retención de lí- nidos. quidos. – TPH alogénico. Los mejores resultados se consiguen 2.2. Leucemia linfoide crónica (LLC) con un donante familiar HLA idéntico. Como fuente de células se puede utilizar la médula ósea o la sangre Es un síndrome linfoproliferativo crónico que se periférica (movilización de precursores hematopoyé- caracteriza por la proliferación y acumulación de ticos con G-CSF). Si el paciente no dispone de un do- linfocitos B de aspecto morfológico maduro y nante familiar adecuado puede usarse un donante no biológicamente inmaduros. Las manifestaciones clí- familiar y células de cordón umbilical. El límite de nicas dependen de la acumulación progresiva de edad se sitúa en los 45 años o en 55 años en algunos linfocitos B en la médula ósea, ganglios linfáticos y
  • 14. 1044 FARMACIA HOSPITALARIA otros tejidos, así como de las alteraciones inmuni- con fines curativos. La estrategia del tratamiento debe tarias secundarias asociadas. tener en cuenta, además, los diferentes grupos de riesgo La LLC es la forma más frecuente de leucemia, re- establecidos según el pronóstico. Así, en los pacientes presentando alrededor del 30% de todas las leucemias en de bajo riesgo, cuya mediana de supervivencia es ma- los países occidentales. Presenta una incidencia en es- yor de 10 años, el tratamiento debe ser conservador y tos países de 1,5 casos/100.000 habitantes y año, y la muchos pacientes nunca necesitarán tratamiento. Los mediana de edad de aparición es de unos 60 años. pacientes de riesgo intermedio tienen una mediana de su- Se desconoce la causa de la LLC, no estando rela- pervivencia de 5 años, pudiendo no necesitar trata- cionada con radiación ni agentes químicos. Es una en- miento si tienen escasa sintomatología y baja masa tu- fermedad adquirida, no habiéndose observado un patrón moral o necesitando tratamiento si la masa tumoral es de herencia reproducible(19). elevada. Por último, en los pacientes de alto riesgo, cuya mediana de supervivencia es de 2 a 4 años, el trata- 2.2.1. Características clínicas miento es obligado. El diagnóstico es casual en la mitad de los casos, por 2.2.2.1. Tratamiento inicial(21) hemogramas de rutina. En un 30% de los pacientes la causa de consulta es la aparición de adenopatías, y en el – Clorambucilo. Es el tratamiento clásico de la LLC. resto de ellos la causa es variada: astenia, anorexia, in- La pauta continua es de 0,07-0,2 mg/kg/día (6 fecciones, etc. El hallazgo más frecuente en la exploración mg/m2) por vía oral durante 3-6 semanas, dismi- son las adenopatías (en un 90% de los pacientes), de ca- nuyendo progresivamente hasta 2 mg/día cuando rácter moderado generalmente e indoloras. El bazo se obtiene respuesta. Se usa más la pauta intermi- puede palparse en un 60% de los casos en fases avan- tente de 20-30 mg/m2 por vía oral cada 14 días, zadas y en un 20-30% en el momento del diagnóstico. En repartido en 2 días y asociando un corticoide oral ocasiones pueden detectarse alteraciones secundarias a a dosis de 40-60 mg/m2 durante los mismos días. la infiltración por tejido linfoide de diversos órganos y te- Las tasas de respuesta son de un 20-60% para la jidos, siendo la infiltración cutánea la más frecuente. pauta continua y de un 80% para la intermitente El hallazgo de laboratorio más característico es la con corticoide. La duración del tratamiento suele leucocitosis, habitualmente entre 20 y 50 x 109/l, con ser de 12 ciclos o 1 año. linfocitosis superior al 75%. La anemia se observa ini- – Ciclofosfamida. Pauta continua: 2-4 mg/kg/día (80- cialmente en un 15-20% de los pacientes, siendo la 120 mg/m2) vía oral durante 10 días, reduciendo pos- trombopenia menos frecuente. En fases avanzadas la teriormente la dosis hasta alcanzar la dosis mínima neutropenia puede ser grave, favoreciendo la aparición eficaz. Pauta intermitente: 600 mg/m2 vía intraveno- de complicaciones infecciosas. sa el día 1 con prednisona 40-60 mg/m2 vía oral du- Los pacientes pueden clasificarse, de acuerdo a los ha- rante 4-5 días. Los ciclos se repiten cada 14-28 días. La llazgos analíticos y de exploración en tres grandes grupos aparición de cistitis hemorrágica es el principal efec- pronósticos: de bajo riesgo (30% de los pacientes, lin- to tóxico. focitosis), de riesgo intermedio (60% de los pacientes, lin- – CVP. Ciclofosfamida 400 mg/m2 intravenosa los dí- focitosis más adenopatías o más organomegalia) y de as 1 al 5, Vincristina 1,4 mg/m2 (máximo 2 mg) in- alto riesgo (10% de los pacientes, linfocitosis más anemia travenosa el día 1 y Prednisona 100 mg/m2 vía oral los con o sin trombopenia)(20). días 1 al 5. Los ciclos son cada 3 semanas, aunque posteriormente pueden ser cada 6 semanas para re- 2.2.2. Tratamiento ducir la toxicidad, que consiste en mielosupresión, al- teraciones gastrointestinales y neuropatía periférica. Actualmente la LLC no tiene tratamiento curativo, En caso de neutropenia, pueden asociarse los facto- lo que unido al hecho de que suele tener un curso crónico res estimulantes de colonias G-CSF o GM-CSF. La indolente y a la edad avanzada de la mayoría de los pa- duración del tratamiento CVP suele ser de entre 6 y 12 cientes, hace que un objetivo terapéutico razonable sea ciclos. la paliación de los síntomas y la prolongación de la su- – CHOP y mini-CHOP. Ciclofosfamida 750 mg/m2 pervivencia. No obstante, los pacientes jóvenes con fac- intravenosa el día 1, Adriamicina 50 mg/m2 (25 tores de mal pronóstico deberán recibir un tratamiento mg/m2 en el mini-CHOP) intravenosa el día 1, Vin-
  • 15. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1045 cristina 1,4 mg/m2 (máximo 2 mg) intravenosa el día – Otros tratamientos. En ocasiones es necesario re- 1 y Prednisona 100 mg/m2 vía oral los días 1 al 5. Los currir a la radioterapia o a la esplenectomía, es- ciclos son cada 21-28 días y suelen administrarse de 6 pecialmente en caso de esplenomegalia progre- a 8 ciclos. El principal efecto tóxico es la mielosupre- siva gigante. Los anticuerpos monoclonales sión, apareciendo también toxicidad gastrointestinal pueden conseguir alguna respuesta. Los mejores y neurológica. resultados se han informado con Campath-1H – Protocolo M-2. Melfalán 0,25 mg/kg/día vía oral los pero con una toxicidad significativa (reacciones días 1 al 4, Carmustina (BCNU) 0,5 mg/kg intrave- asociadas a la infusión, infecciones, etc). Tam- nosa el día 1, Ciclofosfamida 10 mg/kg intravenosa el bién se ha utilizado en algunos casos el trasplan- día 1, Vincristina 1 mg/m2 (máximo 2 mg) intrave- te de células progenitoras hematopoyéticas (au- nosa el día 1 y Prednisona 1mg/kg vía oral los días 1 tólogo, alogénico, mini-alotrasplante) pero la al 7 y 0,5 mg/kg vía oral los días 8 al 14. Los ciclos experiencia es escasa pues la mayoría de los pa- se repiten cada 6 semanas y la toxicidad más grave cientes no son candidatos a estas terapias por lo que se produce es la mielosupresión. avanzado de la edad(25). 2.2.2.2. Tratamiento de segunda línea 3 LINFOMA NO HODGKIN – Fludarabina. Se utiliza a dosis de 25 mg/m2 intra- venosa durante 5 días consecutivos cada 28 días. Los linfomas no hodgkinianos (LNH) consti- La misma dosis se ha utilizado durante 3 días tuyen un grupo muy heterogéneo de neoplasias lin- con resultados similares y menor toxicidad(22). La foides. La incidencia del LNH se situa entre 3 y 6 tasa de respuesta oscila entre un 17 y un 74% en casos por 100.000 habitantes/año. En general es pacientes previamente tratados, y en pacientes una enfermedad de los adultos, aunque algunos no tratados se han alcanzado remisiones com- subtipos son más comunes en niños y adultos jó- pletas en el 33%(23). También se utiliza asociada a venes. La etiología en la mayoría de los casos es otros fármacos como el mitoxantrone y la ciclo- desconocida. Algunos casos se asocian a estados de fosfamida. La toxicidad principal deriva de la inmunodeficiencia congénita o adquirida, exposi- mielosupresión producida, observándose rara- ción a ciertos productos químicos, exposición a ra- mente toxicidad neurológica y síndrome de lisis diación ionizante, y ciertos virus(26). tumoral graves. Debe hacerse profilaxis antiin- fecciosa con cotrimoxazol. En ensayos clínicos 3.1. Linfoma no Hodgkin: clasificación se ha usado como terapia de primera línea, con- siguiendo una tasa de respuestas más alta que el Las clasificaciones usadas actualmente son la clorambucilo pero no alarga la supervivencia. REAL (Revised European-American Lymphoma – Cladribina (2-CDA). Se usa habitualmente a do- Classification) que apareció en el año 1994 y la re- sis de 0,05-0,2 mg/kg (2-8 mg/m2) intravenosa ciente clasisficación patrocinada por la Organiza- durante 5 días, aunque también se utilizan pau- ción Mundial de la Salud (OMS) que se muestra en tas de 7 días en perfusión continua. Las tasas de la Tabla 5(27). Ambas se basan en definir entidades respuesta obtenidas en pacientes refractarios son clínico-patológicas por estudios multiparamétricos similares a las obtenidas con fludarabina, aunque (morfología, inmunofenotipo, cariotipo y estudios algunos pacientes refractarios a esta última tu- moleculares). La mayoría de los linfomas son de lí- vieron alguna respuesta con cladribina(24). La to- nea celular B. xicidad más importante es la mielosupresión, siendo frecuentes las infecciones como conse- 3.2. Linfoma no Hodgkin: clínica cuencia dicho efecto. – Pentostatina. La dosis es de 2-4 mg/m2 intraveno- Sería muy extenso hacer una descripción para cada sa cada 14 días. Las respuestas obtenidas en pa- tipo de linfoma. Desde el punto de vista práctico tiene cientes refractarios oscilan entre un 25-30%. Sus más interés enfocar la clínica en relación al pronóstico y principales efectos tóxicos son mielosupresión, es tradicional hablar de linfomas indolentes y linfomas hapatopatía, nefropatía y neurotoxicidad. agresivos(28).
  • 16. 1046 FARMACIA HOSPITALARIA Tabla 5. Clasificación OMS de las neoplasias linfoides(27). Neoplasia de células B Neoplasia de células precursoras B Leucemia/linfoma linfoblástico de células precursoras B Neoplasia de células B madura (periférica) Leucemia linfocítica crónica B/Linfoma linfocítico de célula pequeña B Leucemia prolinfocítica de células B Linfoma linfoplasmacítico Linfoma de célula B de la zona marginal esplénico (+/- linfocitos vellosos) Leucemia de células peludas (tricoleucemia) Mieloma/Plasmacitoma Linfoma de célula B de la zona marginal extranodal-Linfoma tipo MALT Linfoma de células B de la zona marginal nodal [+/- células B monocitoide] Linfoma folicular Linfoma de células del manto Linfoma difuso de células B grandes Linfoma de células B grande mediastínico Linfoma primario de efusiones/cavidades Linfoma de Burkitt y de célula tipo Burkitt Neoplasia de célula T y célula NK Neoplasia de células precursoras T Leucemia/linfoma linfoblástico de células T precursoras Neoplasias de células T maduras (periférica) Leucemia prolinfocítica de células T Leucemia linfocitica de células T granular Leucemia de células NK agresiva Linfoma/leucemia de células T del adulto (HTLV+) Linfoma de células T/NK extranodal, tipo nasal Linfoma de células T tipo enteropatía Linfoma de células T gamma-delta hepatoesplénico Linfoma de células T subcutáneo seudopaniculítico Micosis fungoide/síndrome de Sézary Linfoma anaplásico de células grandes CD30+, primario cutáneo Linfoma de células T periférico, sin especificar Linfoma de células T angioinmunoblástico Linfoma anaplásico de célula grandes, primario de tipo sistémico Linfoma de Hodgkin (Enfermedad de Hodgkin) Linfoma de Hodgkin nodular predominantemente linfocítico Linfoma de Hodgkin Clásico Linfoma de Hodgkin esclerosis nodular Linfoma de Hodgkin clásico rico en linfocitos Linfoma de Hodgkin celularidad mixta Linfoma de Hodgkin deplección linfocitaria Sólo se han incluido las categorías principales. Las formas más frecuentes se muestran en negrita. HTLV1: human T-cell leukemia virus; MALT: mucosa associated lymphoid tissue; NK: natural killer
  • 17. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1047 – Linfomas indolentes. La naturaleza indolente de células grandes B (LDCG-B), siendo este último el un linfoma se traduce en un largo periodo de más frecuente de todos los linfomas (33-40%). A di- tiempo desde la aparición del tumor hasta su ferencia de los linfomas indolentes que suelen estar diagnóstico, a veces con regresiones espontáne- extendidos, casi la mitad de los LDCG-B de novo es- as, a menudo con linfocitosis, y una relativa larga tán localizados (estadio I-II). Sin tratamiento son supervivencia. Sin embargo, son casi siempre in- mortales, pero con tratamiento se consiguen remisio- curables y el paciente finalmente fallecerá por el nes en un 60-80% y de estos pueden curarse un 45- linfoma. Se consideran linfomas indolentes el 50%. linfoma folicular (22% de todos los linfomas), el linfoma de la zona marginal (10%), el linfoma de El linfoma de células del manto (8%) es una enti- linfocitos pequeños (5-7%), el linfoma linfo- dad dificil de asignar a un grupo de linfomas. Por su plasmacítico (1%) y la tricoleucemia (<1%). La corta supervivencia debería ser incluido entre los linfo- leucemia linfocítica crónica (LLC) y el linfoma mas agresivos pero con la salvedad de ser normalmen- linfocítico de célula pequeña (LLP) son a nivel te incurables. Los linfomas T son poco frecuentes, tam- biológico la misma enfermedad. Todos los lin- bién son un grupo muy heterogéneo y pueden tener un fomas indolentes pueden en algún momento curso indolente o agresivo. transformarse a un linfoma agresivo lo cual em- peora su pronóstico. En las actuales clasificacio- 3.3. Linfoma no Hodgkin: nes (REAL, OMS) la Enfermedad de Waldens- estudio de extensión y pronóstico tröm no aparece categorizada, y puede corresponder a linfomas con pico M dentro de Junto a un diagnóstico correcto, el estudio de la categoría de linfoma de la zona marginal, lin- extensión es un requisito previo fundamental antes foplasmacítico o de linfocito pequeño. de iniciar el tratamiento de los pacientes con LNH. – Linfomas agresivos. Son un grupo diverso de linfo- El estadiaje permite conocer la extensión de la en- mas que tienen en común su comportamiento clínico fermedad, pero también los factores pronósticos. agresivo y al mismo tiempo su sensibilidad a los ci- Sigue utilizandose el sistema de Ann Arbor (Tabla 6) tostáticos, lo cual hace que una buena proporción se a pesar de las muchas limitaciones pronósticas que puedan curar. Los principales tipos son el linfoma lin- tiene para los LNH(29). La mayoría de los pacientes es- foblástico, el linfoma de Burkitt y el linfoma difuso de tán en estadio III o IV en el momento del diagnós- Tabla 6. Clasificación de Ann Arbor Estadio Descripción I Una única región ganglionar o un único órgano extralinfático (IE). II Dos o más regiones linfáticas en el mismo lado del diafragma, o de un órgano extranodal (IIE) y una o más re- giones linfáticas en el mismo lado del diafragma. III Afección de regiones linfáticas a ambos lados del diafragma, las cuales pueden estar acompañadas por una afec- ción localizada de un órgano o sitio extralinfática (IIIE) , bazo (IIIS), o ambas (IIISE). IV Afección difusa o diseminada de uno o más órganos extralinfáticos distantes con o sin afección de gánglios lin- fáticos asociada. Se subdividen en A o B. B cuando hay síntomas B: fiebre inexplicada con temperatura superior a38 ºC, sudoración nocturna y/o pérdida de peso superior al 10% en 6 meses precedentes sin causa conocida Para la enfermedad de Hodgkin se usa la Clasificación de Cotswolds(29), basada en de Ann Arbor con algunas novedades. La más impor- tante es la introducción del sufijo X para masas voluminosas (bulky).
  • 18. 1048 FARMACIA HOSPITALARIA tico, especialmente en los linfomas considerados 3.4.1. Tratamiento de los linfomas indolentes indolentes. Las pruebas mínimas para estadiar a un pacien- 3.4.1.1. Estadios localizados te son la historia clínica y el exámen físico, radio- (I y II sin masa voluminosa) grafía de tórax, electrocardiograma, tomografía computarizada (TC) abdominal y pélvico, pruebas La radioterapia es el tratamiento de elección de bioquímicas de función hepática, renal, calcio, los estadios localizados lo cual supone menos del LDH y ácido úrico, b2 microglobulina sérica, pará- 20% de los linfomas indolentes. Cuando el estadia- metros hematológicos, biopsia y aspirado de la mé- je es exhaustivo la radioterapia obtiene un 50-75% de dula ósea en crestas ilíacas (bilateral)(30). supervivencia libre de progresión (SLP) a los 10 Además del estadio hay otras variables pretrata- años, la mayoría de los cuales pueden considerarse cu- miento que se asocian con el pronóstico. La Tabla 7 rados. El añadir quimioterapia no mejora la super- muestra el denominado International Prognostic Index vivencia global (SG). Algunos linfomas localizados (IPI) diseñado para los pacientes con LNH agresivos(31), pueden ser curados con cirugía especialmente los de pero también puede aplicarse a otros linfomas. Según localización gastrointestinal. el número de factores pronósticos adversos se indenti- fican cuatro grupos de riesgo. Este índice se usa para 3.4.1.2. Estadios avanzados desarrollar estrategias terapéuticas diferentes según el No hay ningún tratamiento que cure los linfo- riesgo. mas de bajo grado en estadios avanzados (III-IV) ni 3.4. Linfoma no Hodgkin: tratamiento que modifique sustancialmente la evolución clínica. Este hecho justifica la actitud de vigilancia sin trata- La elección del tratamiento en los linfomas no miento, sobre todo en los pacientes asintomáticos hodgkiniano depende de la histología del tumor, de mayor edad, sin adenopatías voluminosas ni sig- su grado de extensión, el estado general del pa- nos de progresión. En los pacientes más jóvenes o ciente, la edad y otros factores pronósticos, pero la cuando hay síntomas o factores de mal pronóstico, mayoría de las decisiones terapéuticas dependen está indicado el tratamiento con quimioterapia. Los de la adscripción del paciente a un grupo de los si- linfomas de bajo grado responden a una variedad de guientes: los linfomas indolentes, los linfomas agentes como alquilantes únicos o poliquimiotera- agresivos y los linfomas agresivos con extensión pia. al sistema nervioso central (linfomas linfoblásti- Cuando la enfermedad tiene una progresión cos y linfoma de Burkitt)(32). Al final de este apar- lenta se recomienda el uso de agentes alquilantes tado se describen algunos tratamientos más espe- únicos como el clorambucilo o la ciclofosfamida. cíficos. Generalmente se prefiere el clorambucilo bien en pauta continua (2-10 mg/día) o intermitente (16 mg/m2/día durante 5 días cada mes). En pacientes Tabla 7. Índice pronóstico internacional(31). con progresión rápida, síntomas B, masas adenopá- ticas compresivas, o cuando se necesita una res- Grupos Nº RC SG 5 años puesta rápida se emplea la poliquimioterapia, habi- de riesgo factores (%) (%) tualmente el esquema CVP o CHOP (Tabla 8). El linfoma folicular es el más quimiosensible entre los Bajo 0-1 87 73 linfomas indolentes, consiguendo la poliquimiote- Bajo-intermedio 2 67 50 rapia remisiones en el 54-88%. Con estos esquemas Alta-intermedia 3 55 43 Alta 4-5 44 26 se consigue un mejor control de la enfermedad que con la monoterapia pero sin ventajas en la super- viencia. Factores pronósticos adversos: edad > 60 años, estadio III-IV, En los linfomas foliculares mixtos (tipo III), y LDH sérica alta, Performance estatus (ECOG) el linfoma indolente transformado a un linfoma de 2 ó mayor, y número de localizaciones extralinfáticos ma- agresivo deben tratarse siempre con un esquema ti- yor de 1. po CHOP.
  • 19. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1049 Tabla 8. Esquemas de quimioterapia más usados en el LNH(33). Esquema Dosis Comentarios Ciclofosfamida 750 mg/m2 i.v. días 1º en 1 h CVP cada 21 días Vincristina 1,4 mg/m2 (máx 2) i.v. día 1º en 10 m Uso: linfomas indolentes. Prednisiona 100 mg/m2 v.o/i.v./i.m. días 1º al 5º Puede asociarse con Rituximab Ciclofosfamida 750 mg/m2 i.v. día 1º en 1 h CHOP cada 21 días Adriamicina 50 mg/m2 i.v. día 1º en 30 m CHOP cada 14 días con FEC-G desde el día +5 Vincristina 1,4 mg/m2 (máx 2) i.v. día 1º en 10 m Puede asociarse con Rituximab Prednisona 60 mg/m2 i.v./v.o días 1º al 5º Uso: linfomas agresivos; LNH indolentes de mal pronóstico Ciclofosfamida 750 mg/m2 i.v. día 1º en 1 h CNOP cada 28 días Mitoxantrona 12 mg/m2 i.v. día 1º en 30 m Uso: linfomas agresivos; LNH Vincristina 1,4 mg/m2 (máx 2) i.v. día 1º en 10 m indolentes de mal pronóstico Prednisona 60 mg/m2 i.v./v.o días 1º al 5º Fludarabina 25 mg/m2 ev días 1º al 5º Uso: LLC recaída/resistente a alquilantes. Ciclos cada 28 días. 2-CDA 0,1 mg/kg i.v. x 7 días Uso: tricoleucemia un solo ciclo. (cladribina) En LLC (2ª línea) cada 28 días DCF (pentostatina) 4 mg/m2 ev cada 14 días, 4-6 ciclos Uso: tricoleucemia, 4-6 ciclos Fludarabina 25 mg/m2 i.v. en 30 m días 1º al 3º FCM cada 28 días. Ciclofosfamida 200 mg/m2 i.v. en 30 m días 1º al 3º Uso: LLC y linfomas indolentes. Mitoxantrona 6 mg/m2 i.v. en 30 m día 1 Orden de administración FÆCÆM Fludarabina 25 mg/m2 i.v. en 30 m días 1º al 3º FMD cada 28 días sólo o alternando con FC Mitoxantrona 10 mg/m2 i.v. en 30 m día 1º Uso: linfomas indolentes Dexametasona 20 mg i.v. o v.o. días 1º al 5º Fludarabina 25 mg/m2 i.v. en 30 m días 1º al 3º FC cada 28 días Ciclofosfamida 250 mg/m2 i.v. en 30 m días 1º al 3º Uso: linfomas indolentes Ciclofosfamida 1500 mg/m2 i.v. día 1 en 1 h + MESNA Mega CHOP. Ciclos cada 21 días. Adriamicina 65 mg/m2 i.v. día 1º en 30 m MESNA: 150% dosis de CFM Vincristina 1,4 mg/m2 (máx 2) i.v. día 1º en 10 m repartida a 1, 4 y 8 horas Prednisona 60 mg/m2 i.v./v.o. días 1º al 5º Uso: LDCG-B con IPI intermedio/alto y alto. Metotrexato 400 mg/m2 i.v en 4 horas S 2ª,6ª,10ª. MACOP-B. El tratamiento dura 12 Semanas Adriamicina 50 mg/m2 i.v. en 30 m S 1ª,3ª,5ª,7ª,9ª,11ª El 25% del MTX en bolus y el resto en 4 horas. Ciclofosfamida 350 mg/m2 i.v. en 1 h S 1ª,3ª,5ª,7ª,9ª,11ª A las 24 horas del MTX se da Folínico: Vincristina 1,4 mg/m2 (máx 2) i.v. S 2ª,4ª,6ª,8ª,10ª,12ª 10 mg/m2/6 h x 6 dosis Prednisona 75 mg v.o./i.v. (dosis total) diaria Uso: LNH agresivos. Bleomicina 10 mg/m2 i.v. en 45 m S 4ª, 6ª, 11ª Con los análogos de las purinas se hará profilaxis para infecciones oportunistas al menos con cotrimoxazol (Septrim Forte 1 /12 h v.o. dos o tres días a la semana más ácido fólico) manteniéndola pos tratamiento hasta la recuperación del número de linfocitos CD4+.
  • 20. 1050 FARMACIA HOSPITALARIA 3.4.1.3. Nuevas aproximaciones al tratamiento una severa inmunodepresión. Se están ensayando de los linfomas indolentes anticuerpos monoclonales anti CD20 conjugados con 90Yttrium (90Y) or 111Indium (111In), con Análogos de las purinas(34). Agentes como la cladri- resultados muy interesantes en términos de res- bina, la pentostatina o la fludarabina consiguen tasas de puesta. respuestas más altas que los tratamientos clásicos. Sin Vacunas(37). Las vacunas con idiotipos de inmuno- embargo la mediana de duración de la respuesta y tasa de globulinas u otros antígenos asociados al linfoma está progresión no parece ser diferente y no es esperable que dando buenos resultados en el linfoma folicular. Por sí so- modifiquen la superviencia. Se usan previo a un tras- las pueden inducir remisiones, pero el mayor interés pa- plante autólogo como método de “purging” y también rece estar en alargar la remisión conseguida con la qui- pueden utilizarse cuando otros tratamientos han fraca- mioterapia, administrando la vacuna al finalizar la sado. La droga más usada es la fludarabina, general- quimioterapia. mente en combinación con otros agentes, como el es- Quimioterapia en altas dosis(38). La quimioterapia en quema FMD y FMC (Tabla 8). altas dosis o trasplante de precursors hematopoyéticos au- Interferón(35). Muchos estudios randomizados tólogo (TPH autólogo) se ha ensayado en el linfoma fo- han mostrado el beneficio del IFN en la terapia pri- licular en segúnda o posterior remisión. De todas for- maria del linfoma folicular. Las aproximaciones han mas el impacto del TPH en la superviencia global no incluido el uso de interferón asociado con la qui- está claro y por ello esta terapia sólo debería hacerse mioterapia o bien como terapia de mantenimiento dentro de ensayos clínicos. La única indicación clara del con 2-5 millones tres veces a la semana durante 18- TPH autólogo es el linfoma indolente trasformado a 24 meses. El IFN prolonga la duración de la res- linfoma agresivo. El trasplante alogénico y el minialo- puesta, y quizás la SG. El principal problema del trasplante pueden plantearse en casos concretos. IFN es la mala tolerancia. Anticuerpos monoclonales(36). Los mejores resulta- 3.4.2. Tratamiento del linfoma dos se han conseguido con rituximab (anti CD20). La in- de células grandes dicación autorizada del rituximab es el linfoma folicu- lar como terapia de segunda línea. La dosis estandar es 3.4.2.1. Estadio precoz: la radioterapia 375 mg/m2 semanalmente x 4. La toxicidad suele aso- ciarse con la primera infusión: fiebre, escalofrios, astenia La combinación de la radioterapia con un curso etc. En pacientes con alta carga tumoral y con alto re- corto de quimioterapia (CHOP x 3-4) es el tratamiento cuento linfocitario puede producirse un síndrome de li- de elección consiguiendo la curación en el 80% de los ca- sis tumoral y una forma severa de síndrome de liberación sos(39). de citocinas (hipotensión y broncoespasmo). En el lin- foma folicular (LF) como terapia de segunda línea el ri- 3.4.2.2. Estadio avanzado tuximab consigue remisiones en el 46% de los pacientes (II con masa voluminosa y estadio III-IV) con una mediana de duración de la remisión de 10-13 meses. La tasa de respuestas es más alta cuando se usa co- El régimen CHOP y CHOP intensificados. El mo terapia de primera línea y cuando se asocia a CHOP. tratamiento del linfoma agresivo avanzado debe ser Es muy interesante la alta frecuencia de remisiones con quimioterapia. El CHOP es el tratamiento es- completas (RC) y remisiones moleculares en el LF pero tándar (Tabla 8), es de fácil manejo y aceptable to- de momento se desconoce si este progreso se traduce en xicidad. Con 6-8 ciclos de CHOP administrados una mejor supervivencia. La tasa de respuesta en la LLC cada 21 días se consiguen un 40-60% de remisio- y el LLP es baja (<15%). En el Linfoma de la zona mar- nes, de los cuales un 60% permanecerán sin enfer- ginal (LZM) no hay experiencia. En el linfoma de célu- medad lo cual da una tasa de curación en torno al las del manto (LCM) consigue una alta tasa de remisio- 35%. Durante los años 70 y 80 se desarrollaron es- nes pero no está claro que mejore la superviviencia. quemás más complejos denominados de segunda y Recientemente se dispone del Campath 1H tercera generación. Aunque inicialmente parecían (alentuzumab), un monoclonal humanizado dirigi- obtener un mayor porcentaje de respuestas, no se do contra el antígeno CD52. Parece tener eficacia han demostrado más efectivos que el CHOP, pero si en la LLC pero no en los linfomas. Puede causar más tóxicos(40).
  • 21. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1051 Las aproximaciones actuales exploran la inten- RC pos trasplante y en el 36-44% la respuesta será sificación del régimen CHOP. Un estudio rando- duradera. En paciente con linfoma refractario ini- mizado parece demostrar la superioridad del cial y la recaída quimiorresistente el pronóstico es CHOP dado cada 14 días sobre el clásico CHOP-21 muy malo. El acondicionamiento suele realizarse en pacientes de más de 60 años. También parece con esquemas como BEAC, BEAM o CBV (Tabla ser superior el CHOEP (CHOP más etopósido) 10)(42). También puede usarse la irradiación corporal frente al CHOP en pacientes de menos de 60 años. total. El uso de anticuerpos monoclonales unidos En pacientes jóvenes y datos de muy mal pronósti- a radioisótopos como parte del acondicionamien- co suele usarse el mega-CHOP (dosis aumentadas de to es una aproximación experimental que parece adriamicina y ciclofosfamida) seguido o no de TPH dar buenos resultados. El trasplante alogénico de autólogo. Con estas intensificaciones es necesario precursores hematopoyéticos y el denominado mi- asociar la quimioterapia con FEC-G. ni-alotrasplante puede estar indicados en casos Inmunoterapia. Actualmente hay varios estudios concretos. randomizados comparando CHOP con CHOP más ri- 3.4.3. Situaciones especiales tuximab como terapia inicial en pacientes con linfoma de en el tratamiento de los linfomas células grandes. Un estudio ha demostrado una mayor ta- sa de RC y de supervivencia(41). Profilaxis neuromeníngea: en los linfomas agresi- Tratamiento de la recaída: el trasplante de pro- vos y el LCM debe hacerse neuroprofilaxis cuando hay genitores hematopoyéticos. En el paciente que no infiltración de la médula ósea, testículo o senos cranea- responde o que recae puede conseguirse otra res- les. En el linfoma linfoblástico y Burkitt debe hacerse puesta con esquemas de quimioterapia de segunda en todos los casos. Suele utilizarse metotrexato intrate- línea como DHAP, ESHAP, MINE, MINE-ES- cal (12 mg), junto a citarabina intratecal (30 mg) e hi- HAP o mini-BEAM (Tabla 9), o con rituximab. Sin drocortisona intratecal (20 mg). embargo todos los pacientes terminarán recayendo Prevención de la lisis tumoral: fundamental en todos, si no se realiza a continuación una terapia de inten- pero muy especialmente en el linfoma de Burkitt. Se re- sificación con altas dosis. En la recaída quimiosen- aliza con hidratación, alopurinol, control de iones, fun- sible el 85% de los pacientes alcanzan una nueva ción renal, diuresis y pH en orina. También se dispone de Tabla 9. Esquemas más utilizados para linfomas agresivos en recaída y refractarios(33). Esquema Dosis Comentarios Dexametasona 20 mg/12 h i.v./v.o. días 1º al 4º DHAP. cada 21-24 días. Citarabina 2 g/m2/12 h (2 dosis) i.v.en 3 h día 2º Administrar vit B6 y colirio dexa. Cisplatino 100 mg/m2 i.v. en 24 h día 1º Uso: LNH y LH Ifosfamida 1,33 g/m2 i.v. en 1 h días 1º al 3º Mitoxantrone 8 mg/m2 i.v. día 1 Etopósido 65 mg/m2 i.v. en 1 h días 1º al 3º MINE/ESHAP. Se alternan cada 28 días. Administar mesna simultáneo a la ifosfamida Etopósido 60 mg/m2 i.v. en 1 h días 1º al 4º a (100% de dosis) y 500 mg vo 4 horas después Metilprednisolona 500 mg i.v. en 15 m días 1º al 4º Vitamina B6 y colirio dexa con el Ara-C Citarabina 2 g/m2 i.v. en 2 h día 5º Cisplatino 25 mg/m2 e.v. en 24 h días 1º al 4º BCNU 60 mg/m2 i.v. en 1 h día 1º Mini-BEAM Ara-C 800 mg/m2 i.v. en 2 h día 1º Uso: previo a TPH para reducir la masa tumoral. VP-16 300 mg/m2 i.v. en 1 h día 1º Melfalán 30 mg/m2 i.v. en bolus día 1º
  • 22. 1052 FARMACIA HOSPITALARIA Tabla 10. Esquemas más usados para el tratamiento de la Enfermedad de Hodgkin(47). Esquema Dosis Días ABVD: esquema estandar. Ciclos cada 28 días Adriamicina 25 mg/m2 i.v. en 30 m 1 y 15 Bleomicina 10 mg/m2 i.v. en 45 m 1 y 15 Vinblastina 6 mg/m2 i.v. en 10 m 1 y 15 DTIC 375 mg/m2 i.v. en 45 m 1 y 15 Stanford V. No hay ensayos multicéntricos randomizados Doxorrubicina 25 mg/m2 i.v. en 30 m 1, 15, 29, 43, 57, 71 Vinblastina 6 mg/m2 i.v. en 10 m 1, 15, 29, 43, 57, 71 Mostaza nitrogenada 6 mg/m2 i.v. en 30 m 1, 29, 57 Vincristina 1,4 mg/m2 (máx 2) i.v. en 10 m 8, 22, 36, 50, 64, 78 Bleomicina 5 mg/m2 i.v. en 45 m 8, 22, 36, 50, 64, 78 Etopósido 60 mg/m2 i.v. en 60 m 15, 43, 71 Prednisona 40 mg/m2 v.o. A días alternos 12 semanas BEACOPP (básico) .Cada 22 días. En ensayo. Bleomicina 10 mg/m2 i.v. en 45 m 8 Etopósido 100 mg/m2 i.v.en 60 m 1-3 Doxorrubicina 25 mg/m2 i.v. en 30 m 1 Ciclofosfamida 650 mg/m2 i.v. en 60 m 1 Vincristina 1,4 mg/m2 i.v. en 10 m 8 Procarbacina 100 mg/m2 v.o. 1-7 Prednisona 40 mg/m2 v.o. 1-14 BEACOPP (escalado). Precisa FEC-G desde el día +8. En ensayo. Bleomicina 10 mg/m2 i.v. en 45 m 8 Etopósido 200 mg/m2 i.v. en 60 m 1-3 Doxorrubicina 35 mg/m2 i.v. en 30 m 1 Ciclofosfamida 1250 mg/m2 i.v. en 60 m 1. Administrar MESNA Vincristina 1,4 mg/m2 (máx 2) en 10 m 8 Procarbacina100 mg/m2 v.o. 1-7 Prednisona 40 mg/m2 v.o. 1-14 la rasburicasa para una inmediata corrección de la hipe- cuente. Se tratan inicalmente con fotoquimioterapia con ruricemia. metoxaleno oral seguido de luz ultravioleta (puvoterapia) Cirugía: esencial en el linfoma de Burkitt con gran o con radiototerapia de electrones. Actualmente se usa masa abdominal resecable y en los linfomas intestina- menos la mostaza tópica. Cuando la enfermedad es sis- les primarios localizados. témica se usa una amplia variedad de agentes, como el in- Linfoma MALT gástrico. Tiene la peculiaridad de terferón, quimioterapia sistémica, fotoquimioterapia ex- estar causado la mayoría de las veces por el Helycobac- tracorpórea y los retinoides sistémicos. ter pylori.La terapia erradicativa del H. pylori consigue re- Linfomas primarios cerebrales. El pronóstico es misiones en la mayoría de los pacientes con largas su- muy malo. Se utiliza la dexametasona, la radioterapia y pervivencias y se ha convertido en el tratamiento de drogas que atraviesan la barrera hematoencefálica co- elección. mo las altas dosis de citarabina, metotrexato y las nitro- La micosis fungoide es el linfoma cutáneo más fre- soureas.
  • 23. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1053 Linfoma linfoblástico: los mejores resultados se han del LH(28). conseguido en niños con protocolos tipo leucemia agu- Es un linfoma poco frecuente con una de inci- da linfoblástica, con curaciones en el 50-70%. En los dencia de 3,2 por 100.000 habitantes y año. Repre- adultos los resultados son inferiores. senta un tercio del total de los linfomas. Hay bas- Linfoma de Burkitt: se usan protocolos expresa- tante evidencia que señala al virus de Epstein-Barr mente diseñados para este linfoma. Estos esquemas in- como causa de alrededor del 40% de los casos de cluyen siempre ciclofosfamida, metotrexato y trata- LH que se observan en el mundo occidental(26). miento intratecal, y se administran de modo intensivo El motivo de consulta suele ser una adenopatía durante un corto periodo de tiempo. En los niños los indolora, generalmente cervical o axilar. Otras veces resultados son excelentes con curaciones en más del se consulta por los denominados síntomas B (25- 90% de los casos. 30%): fiebre tumoral, sudores nocturnos, pérdida Linfomas en el paciente VIH positivo. La aparición de peso significativa. La anemia, linfopenia, au- de un linfoma refleja una severa inmunodepresión. Se tra- mento de la velocidad de sedimentación globular, tan combinando la terapia antirretroviral con quimiote- elevación de la fosfatasa alcalina y elevación de la rapia, apoyada con FEC-G. La intensidad de la quimio- LDH son las anomalías analíticas más habituales(43). terapia se adapta al pronóstico del paciente y al número de linfocitos CD4. Si el número de CD4 es >0,2 x 109/l 4.2. Linfoma de Hodgkin: la terapia estandar es bien tolerada y puede producir re- estadio y factores pronósticos misiones El objetivo de la terapia en la enfermedad de Linfomas en el paciente sometido a trasplante de Hodgkin es la curación. La curación puede conse- órganos. Su frecuencia se asocia con la severidad de guirse con varias estrategias, eligiendo la más ade- la inmunosupresión. La primera etapa del trata- cuada para cada paciente en función del subtipo miento es reducir la inmunosupresión lo más posible. pronóstico. El estadio es el parámetro fundamen- Si esto falla el uso de anticuerpos monoclonales (ri- tal y por ello el linfoma de Hodgkin se clasifica en tuximab) puede ser la terapia de elección. El interfe- enfermedad localizada cuando se tratan con radio- rón en algunas ocasiones también consigue remisio- terapia (+/- quimioterapia) e incluye los estadios I- nes. Si lo anterior falla se usará la quimioterapia, pero II sin síntomas B; y enfermedad extensa cuando se el pronóstico es malo. El tratamiento de elección en tratan con quimioterapia (+/- radioterapia) e inclu- el paciente con linfoma pos trasplante alogénico de ye los estadios III-IV, y cualquier estadio con sín- PH es la infusión de linfocitos T del donante espe- tomas B(43, 44). cíficos para el VEB. Para estadiar se usa la clasificación de Ann Arbor (Tabla 6) con algunas modificaciones conocidas co- 4 LINFOMA DE HODGKIN. mo Clasificación de Cotswolds(29). La metodología MANIFESTACIONES CLÍNICAS para el estudio es similar a la descrita para los LNH. Y TRATAMIENTO Es muy importante idenficiar las masas volumino- 4.1. Linfoma de Hodgkin: sas (bulky), que son aquellas con un tamaño de 10 epidemiología y clínica cm o más y las masas mediastínicas que superan en un tercio el diámetro torácico. La laparotomía ac- Las clasificaciones REAL y OMS por vez pri- tualmente no se aconseja, en su lugar se usan los mera incluyen la enfermedad o linfoma de Hodg- factores pronósticos para predecir el riesgo de en- kin (LH) en la misma clasificación que los linfomas fermedad abdominal oculta. no hodgkinianos. Ahora se sabe que la célula para- El conocimiento de los factores pronósticos es digmática de esta enfermedad, conocida como célula otro aspecto fundamental en el estudio previo al de Sternberg, se origina a partir de los linfocitos B de tratamiento. Son factores de mal pronóstico la edad los ganglios linfáticos. En la Tabla 5 se muestran las mayor de 45 años, VSG >50 mm/h, histología ce- entidades agrupadas con el nombre de LH según la lularidad mixta, más de tres ganglios enfermos, ma- clasificación OMS. Cada entidad muestra una mor- sas voluminosas, síntomas B, estadio IV, hipoalbu- fología distinta pero también se asocia con datos minemia, anemia, sexo varón, leucocitosis y clínicos y pronósticos reflejando la heterogeneidad linfopenia(43, 45, 46).
  • 24. 1054 FARMACIA HOSPITALARIA 4.3. Linfoma de Hodgkin: 4.4. Linfoma de Hodgkin: tratamiento de los estadios localizados tratamiento de la enfermedad extensa Ningún método, radioterapia limitada o extensa, El primer avance en el tratamiento de la enfermedad quimioterapia o tratamiento combinado (quimioterapia de Hodgkin extensa vino de De Vita et al en los años más radioterapia) ha mostrado diferencias en la SG. Los 60 con el régimen MOPP. Con este régimen el 84% de tratamientos que no incluyen quimioterapia se asocian los pacientes en estadio avanzado alcanzaron la RC y el con alta tasa de recaída (20-40%) pero esto no afecta a la 64% de estos seguían libres de enfermedad 20 años supervivencia global pues en el momento de la recaída la después. El régimen MOPP (mecloretamina, vincristina, enfermedad sigue siendo quimiosensible. Actualmente procarbacina, prednisona) fue el estandar durante mu- se curan el 75-95% dependiendo de los subgrupos pro- chos años pero tiene notable toxicidad de tipo neuro- nósticos(45, 46). lógico, esterilidad y neoplasias secundarias. Además hay En los pacientes con ningún factor pronóstico un 20% de pacientes que no alcanzan la remisión y otro desfavorable (una minoría) suelen tratarse sólo con 20% van a recaer. Para solventar estos problemas surgió radioterapia y el resto (la mayoría) suelen recibir radio- el ABVD (Tabla 10) que mostró ser superior al MOPP terapia más quimioterapia. El esquema de quimioterapia en primera línea tanto en RC como en SLP, y probable- mente también en la SG(47). Sin embargo la principal más utilizado es el ABVD, pero se han desarrollado ventaja del ABVD sobre el MOPP no es la mayor eficacia otros que prescinden de agentes alquilantes con el ob- sino la menor toxicidad. Suelen administrarse entre 6 y jetivo de minimizar el riesgo de neoplasias secundarias 8 ciclos. (VBM, NOVP). Los resultados del ABVD son buenos pero mu- Los pacientes con enfermedad mediastínica chos pacientes todavía no responderán o van a recaer. Por grande (>10 cm) deben recibir siempre terapia ello han investigado otros regímenes sobre todo para combinada, es decir quimioterapia más radioterapia. los pacientes con muchos factores pronósticos adver- Aquellos con síntomas B se tratarán como los es- sos. Primero aparecieron los denominados regímenes tadios avanzados, es decir con quimioterapia. Otra alternantes (MOPP/ABVD o similares) y los regíme- opción terapéutica es usar solo quimioterapia. Se nes híbridos (MOPP/ABV o similares) pero no son usa en niños para evitar los efectos adversos de la ra- claramente superiores al ABVD y sí más tóxicos. Ac- dioterapia sobre el crecimiento. En las series pu- tualmente el esquemás más prometedor es el BEA- blicada en niños los resultados son excelentes pero COPP (Tabla 11). Este esquema se ha mostrado muy en los adultos hay poca experiencia. eficaz en un estudio randomizado, pero no parece que es- Tabla 11. Protocolos de acondicionamiento más utilizados para el trasplante en el LNH y LH(42). Protocolo Dosis Comentarios Ciclofosfamida 1,5 g/m2 i.v. en 2 h días -6, -5, -4, -3 CBV. BCNU 300 mg/m2 i.v. en 2 h día -6 Uso en el LH VP-16 150 mg/m2 i.v. en 1 h/12 h días -6, -5, -4 BCNU 300 mg/m2 i.v. en 2 h día -6 BEAM. VP-16 200 mg/m2 i.v. en 2 h días -5, -4, -3, -2 Uso en LH y LNH Ara-C 200 mg/m2 i.v. en 2 h días -5, -4, -3, -2 Melfalán 140 mg/m2 i.v. en 1 h día –1 Ciclofosfamida 60 mg/kg i.v. en 1 h días -6, -5 Uso: LNH indolente y Linfoblástico Irradiación CT 10-12 Gy en fracciones, días -3, -2, -1 * Hay numerosas variantes de estos protocolos.
  • 25. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1055 té exento de causar neoplasias secundarias. También se tratamiento(43). Estas muertes son asociadas con tu- ha informado de buenos resultados con el denominado mores, pero también por infarto agudo de miocar- régimen Stanford V. En relación a nuevas drogas, la vi- dio, y por infecciones. norelbina, la gemcitabina, la bendamustina y la idarubi- El riesgo de desarrollar un leucemia mieloide aguda cina se han mostrado activas en LH y tal vez se incor- y un SMD en pacientes tratados con MOPP es de 0,3- poren a los esquemas de poliquimioterapia en futuros 4% por año para los primeros 10 años. El riesgo se aso- ensayos. cia al uso de alquilantes, a la necesidad de retratamiento y la realización de trasplante de PH por recaída. No es- 4.5. Linfoma de Hodgkin: tá claro que el ABVD sea leucemógeno. tratamiento de la recaída En relación a los tumores sólidos parece que es más carcinogénica la radioterapia que la quimioterapia pero Aproximadamente el 30-45% de los pacientes ambos se asocian con el desarrollo de estos tumores. El con LH en estadio avanzado que alcanzan la RC más claramente aumentado respecto a la población con quimioterapia van a recaen, generalmente en normal es el LNH (4-5% a los 10 años) pero el riesgo ab- los 3 años que siguen al tratamiento. La duración soluto es pequeño. Son el cancer de pulmón y de mama de la primera remisión es un aspecto fundamental: los más frecuentes en términos absolutos, pero no los si la recaída es tardía (> 1 año) y no se acompaña únicos que se incrementan. El riesgo de aparición de es- de datos de muy mal pronóstico, puede conseguir- tos tumores continua incluso después de los 15 años del se una nueva remisión en un 60-80% de los pacien- tratamiento. tes, bien con el mismo régimen usado al diagnósti- La patología cardiaca consituye la segunda causa de co o bien con un esquema alternativo y la mitad de muerte tóxica después de las neoplasias. El riesgo aparece estos pacientes no volverán a recaer(43). a partir de los 5 años, es mayor en varón y se asocia so- Los pacientes refractarios iniciales (10-15% de la bre todo con el infarto de miocardio. EH avanzada) y las recaídas precoces tienen mal Toxicidad pulmonar severa debida a la bleomicina se pronóstico con quimioterapia convencional y de- ve en el 1-3% de pacientes que han recibido 6 ciclos de ben tratarse siempre con quimioterapia en altas do- ABVD. El hipotiroidismo clínico se ve en el 6-25% de los sis: TPH autólogo generalmente a partir de sangre pacientes radiados. periférica. Los regímenes de acondicionamiento La infertilidad es un problema con el MOPP y el más usados son el BEAM y el CVB (Tabla 10) An- TPH. La quimioterapia tipo MOPP produce azoosper- tes del trasplante se intentará conseguir una remi- mia completa en todos los pacientes y menos de un sión al menos parcial, bien con un esquema estandar 10% se recuperan con los años. El MOPP produce (ABVD, MOPP, BEACOPP, Stanford V) o con es- amenorrea en el 40% de las mujeres. El ABVD da me- quemas de segunda línea como el DHAP y el mini- nor daño gonadal tanto en el varón como la mujer y el BEAM (Tabla 9). daño suele ser reversible. Los trasplantes habitualmente La eficacia del trasplante también depende de dan esterilidad irreversible tanto en el varón como la la calidad y duración de la respuesta al primer trata- mujer. La irradiación infradiafragmática puede dar es- miento. En remisión inicial menor de 12 meses, terilidad irreversible pero puede ser evitada con técni- con trasplante se consigue una SLP de 40-65%; si la cas de protección. remisión inicial fue superior al año la SLP pos tras- plante es del 75%; en la refractariedad primaria es del 5 GAMMAPATÍAS MONOCLONALES. 20-40%; y en segundas o posteriores recidivas del MIELOMA MÚLTIPLE 20%(48). Las gammapatías monoclonales representan un 4.6. Efectos adversos tardíos grupo de diversos trastornos caracterizados por una clona de linfocitos o células plasmáticas que tienen ca- La mortalidad relacionada con el tratamiento pacidad de producir una inmunoglobulina o un frag- es un problema enorme. A los 15 años del diag- mento de ella, que puede detectarse en sangre y/o orina nóstico la mortalidad no relacionada con la enfer- en forma de una banda o componente monoclonal medad de Hodgkin supera a la provocada por pro- (CM). La Tabla 12 muestra la clasificación actual de las gresión tumoral, y ello se debe a la toxicidad del gammapatías monoclonales(49).
  • 26. 1056 FARMACIA HOSPITALARIA Khaler, constituye el prototipo de gammapatía mo- Tabla 12. Clasificación de las gammapatías mo- noclonal maligna. Se caracteriza por la proliferación noclonales. neoplásica de una clona de células plasmáticas con – Gammapatía monoclonal de significado producción de una inmunoglobulina de carácter indeterminado monoclonal y lesión orgánica. Dicha proliferación Mieloma múltiple da lugar a destrucción esquelética con osteoporosis Mieloma quiescente y/o osteolisis, hipercalcemia, anemia y, en ocasio- Mieloma no secretor nes, plasmocitomas extramedulares. De otro lado, Mieloma osteosclerótico el exceso de producción de la proteína monoclonal Plasmocitoma óseo solitario puede conducir a una insuficiencia renal, infeccio- Plasmocitoma extramedular nes bacterianas de repetición o a un síndrome de hi- Leucemia de células plasmáticas perviscosidad. El componente monoclonal es de ti- – Macroglobulinemia de Waldenström po IgG en el 53% de los casos, IgA en el 25% e IgD o IgE en menos del 3%. El 20% de los MM no pre- – Enfermedades de las cadenas pesadas sentan CM detectable en suero, pero se detectan ca- – Amiloidosis primaria denas ligeras monoclonales en orina de tipo kappa o lambda, denominándose MM tipo Bence-Jones. Respecto a la distribución por enfermedad se estima La incidencia anual del MM es de 4 casos nuevos que el 70% de los componentes monoclonales detec- por 100.000 habitantes y año. El MM representa el 1% tados en una población son gammapatías monoclonales de todas las neoplasias y algo más del 10% de todas las de significado indeterminado (GMSI) y el resto se dis- hemopatías malignas. Se produce en todas las razas y tribuye de la siguiente forma: el 17% para mieloma múl- áreas geográficas, con una menor incidencia en las po- tiple (MM), el 8% para la amiloidosis, el 8% linfomas y blaciones asiáticas. Su incidencia en negros americanos leucosis linfática crónica, el 2% plasmocitomas solita- es el doble que en los blancos. No existe un claro pre- rios y el 2% macroglobulinemia de Waldenström. dominio sexual. La mediana de edad se sitúa alrededor de los 65 años. Únicamente el 12 y el 2% de los pacien- 5.1. Gammapatía monoclonal de significado tes tienen menos de 50 y 40 años, respectivamente. En indeterminado menores de 30 años el MM es excepcional (0,3 % de los casos)(50). El hallazgo de una proteína monoclonal (PM) en el suero o en la orina de una paciente no implica necesa- 5.2.1. Manifestaciones clínicas riamente la presencia de una gammapatía monoclonal maligna. La GMSI constituye el principal ejemplo al Las principales manifestaciones clínicas se resumen respecto. La GMSI se caracteriza por la presencia en de la siguiente forma: suero de un pico M <30 g/l, ausencia o mínimas canti- dades de proteína M en orina (<50 mg/día), una plas- 1) Cuadro constitucional. Incluye la astenia, anorexia y mocitosis medular inferior al 10% y ausencia de lesiones pérdida de peso. Son frecuentes al inicio del proceso líticas, anemia, hipercalcemia e insuficiencia renal. Su o en algún momento de la evolución en la mayoría frecuencia en la población normal se establece en un de los pacientes. 3% de los individuos mayores de 70 años y en un 0,7- 2) Manifestaciones esqueléticas. Es la sintomatología 1,7% en estudios poblacionales amplios. La GMSI se más frecuente (el 90% de los casos), y se debe a la transforma en MM a un ritmo del 2% anual, con una destrucción de la masa ósea debida a la proliferación mediana de 10 años. De esta forma, a los 10 años del de las células plasmáticas y al aumento de la actividad diagnóstico un 15% de las GMSI serán MM y a los 20 de los osteoclastos. La sintomatología esquelética años un 30%(49). más frecuente consiste en dolor óseo (70%), defor- midades (60%) y fracturas patológicas (50%). El do- 5.2. Mieloma múltiple lor generalmente se localiza en columna vertebral y parrilla costal y con menor frecuencia en extremida- El MM, también denominada enfermedad de des; es de características mecánicas, y aumenta con los movimientos. La altura del paciente acostumbra a
  • 27. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1057 disminuir a lo largo de la evolución debido a aplasta- meros meses tras inicio del tratamiento y en fases mientos vertebrales. En excepcionales ocasiones se avanzadas de la enfermedad. Los gérmenes suelen observan lesiones osteoscleróticas, lo que se asocia ser bacterias (90%) encapsuladas y gram-negativos, con frecuencia a polineuropatía, integrando el sín- de localización respiratoria y urinaria; la infección por drome de POEMS (polineuropatía, osteosclerosis, el virus herpes- zóster aparece en el 50% de los ca- endocrinopatía, pico monoclonal y lesiones cutáneas). sos. 3) Manifestaciones hematológicas. Este cuadro incluye anemia (80-90%), leucopenia y trombopenia. La ane- 5.2.2. Tratamiento mia es la alteración hematológica más constante, y puede ser severa y sintomática. Es una anemia multi- La mediana de supervivencia de los pacientes con factorial, que además de relacionarse con la infiltra- MM se sitúa entre 2 y 3 años. Sin embargo la supervi- ción medular, presenta un déficit de producción de vencia varía mucho de unos pacientes a otros, ya que eritropoyetina (EPO). La anemia severa casi siempre mientras algunos fallecen poco después del diagnósti- se corrige al alcanzar la remisión del mieloma, de mo- co, otros gozan de una supervivencia superior a los 5 do que la persistencia sugiere otras causas como déficit años y una minoría sobreviven 10 o más años. de hierro, enfermedad crónica o insuficiencia renal. El cuidado del paciente con MM es, a menudo, más La neutropenia, habitualmente leve, persiste incluso en un arte que una ciencia. No hay una terapia curativa y la población de riesgo es típicamente mayor y con poca fase de remisión y el mecanismo no está claro. La co- tolerancia al tratamiento quimioterápico. Por ello, un agulopatía se observa en el 15-20% de los pacientes y objetivo importante es mejorar la calidad de vida del pa- es debida a la interacción del componente M con pla- ciente. La excepción está en los pacientes jóvenes, en quetas y factores de coagulación. los que es razonable el uso de terapéuticas intensivas, 4) Manifestaciones renales. El 50% de los pacientes pre- incluyendo el trasplante de progenitores hematopoyé- sentan insuficiencia renal al diagnóstico que puede ticos. ser plurietiológica: infiltración, excreción de cadenas li- Un concepto importante que debe tenerse en cuen- geras, hipercalcemia, hiperuricemia, etc. Suele ser de ti- ta es que los pacientes con mieloma quiescente (pacien- po crónico y excepcionalmente se origina fallo renal te que cumple criterios de mieloma pero que está asin- agudo. El 80% de los pacientes excreta proteína de tomático o con mínimos síntomas) no deben recibir Bence-Jones. tratamiento hasta que presenten datos inequívocos de 5) Manifestaciones neurológicas. Son frecuentes las progresión de la enfermedad. Estos pacientes deben ser neuralgias y radiculalgias por afectación vertebral. sometidos a controles periódicos frecuentes en los pri- Menos frecuentes son los cuadros de polineuropatía. meros meses. La progresión en el conducto raquídeo de las masas La valoración de la respuesta terapéutica en los mielomatosas puede originar un cuadro de compre- pacientes con MM es difícil, ya que con quimioterapia sión medular, verdadera emergencia debido al riesgo convencional casi nunca se consiguen remisiones de paraplejía secundaria. completas, sino diversos grados de remisión parcial. 6) Alteraciones metabólicas. Entre ellas destaca un Los agentes alquilantes son los principales fármacos, síndrome de hiperviscosidad (5-10%) debido a la hi- siendo melfalán el de elección, pudiéndose sustituir perproteinemia, hipercalcemia con cuadro carac- por ciclofosfamida en casos de insuficiencia renal o terístico de deshidratación, estreñimiento, naúseas pancitopenia. Los corticoides aumentan la tasa de y estupor e hiperuricemia por elevada replicación ce- respuesta de los anteriores, pero no prolongan la su- lular, pudiendo originar litiasis renal por depósito de pervivencia(50, 51). uratos. 7) Infecciones. Las infecciones recurrentes, sobre todo 5.2.2.1. Tratamiento citostático inicial bacterianas, son una de las mayores causas de mor- bi-mortalidad. Se asocia con la inmunodeficiencia de- Antes de disponer de los agentes alquilantes, la bido a hipogammaglobulinemia, pero también influ- mediana de supervivencia de los pacientes con MM ye la neutropenia, la quimioterapia, edad avanzada y era inferior a 1 año. La introducción del melfalán re- fallo renal. La incidencia es de 0,5-3 episodios/pa- presentó el primer avance en el tratamiento de la en- ciente/año. Los periodos de más riesgo son los 2-3 pri- fermedad. La proporción de respuestas se sitúa alre-
  • 28. 1058 FARMACIA HOSPITALARIA dedor del 50% y la mediana de supervivencia desde el melfalán y prednisona. Los esquemas de poliquimiote- inicio del tratamiento oscila entre 2 y 3 años. Estos re- rapia más empleados en el tratamiento del MM se resu- sultados se han intentado mejorar empleando pau- men en la Tabla 14. La duración de la quimioterapia de- tas poliquimioterápicas en las que se combinan los pende del plan terapéutico. Si el paciente es candidato agentes alquilantes con vincristina y prednisona, con a trasplante deben darse 4 ciclos de quimioterapia se- o sin adriamicina. Sin embargo, la supervivencia es guido del trasplante. En caso contrario se mantiene el similar a la de los pacientes tratados con otros tipos de tratamiento durante largo tiempo, incluso un año. La quimioterapia. elección de uno u otro régimen debe basarse en carac- En la Tabla 13 se expone la pauta terapéutica de terísticas individuales de los pacientes y en el plan global de tratamiento. Se aconseja poliquimioterapia en pa- cientes no ancianos que serán sometidos a un trasplan- Tabla 13. Pauta terapéutica de melfalán te de progenitores hematopoyéticos (TPH). El VAD es y prednisona*. la terapia de elección en el paciente con insuficiencia re- Melfalán 0,25 mg/kg v.o. días 1-4 nal y cuando interesa una reducción rápida de la masa Prednisona 60 mg/m2 v.o. días 1-4 tumoral. Cada 4-6 semanas según tolerancia hematológica 5.2.2.2. Tratamiento de mantenimiento La mayoría de pacientes con MM que responden al * En los pacientes de edad muy avanzada y en los que pre- tratamiento inicial entran en la denominada fase de me- sentan neutropenia y/o plaquetopenia se iniciará el trata- seta, caracterizada por un periodo de estabilidad clínica miento con melfalán a dosis 2/3. y biológica en la que la masa tumoral permanece estable a pesar de la persistencia del componente monoclonal y Tabla 14. Pautas poliquimioterapéuticas más utilizadas en el mieloma múltiple. Poliquimioterapia VCMP/VBAP (ciclos alternantes cada 4 semanas) VCMP VBAP Vincristina 1 mg i.v. día 1 Vincristina 1 mg i.v. día 1 Ciclofosfamida 500 mg/m2 i.v. día 1 BCNU 30 mg/m2 i.v. día 1 Melfalán 6 mg/m2 días 1-4 Adriamicina 30 mg/m2 i.v. día 1 Prednisona 60 mg/m2 v.o. días 1-4 Prednisona 60 mg/m2 v.o. días 1-4 Protocolo M-2 o VBMCP (cada 5 semanas) Vincristina 0,03 mg/kg (máximo 2 mg) i.v. día 1 BCNU 0,5 mg/kg v.o. día 1 Melfalán 0,25 mg/kg v.o. días 1-4 Ciclofosfamida 10 mg/kg i.v. día 1 Prednisona 1 mg/kg v.o. días 1-4, 0,5 mg/kg días 5-8 y 0,25 mg/kg días 9-12 VAD (cada 4 semanas) Vincristina 0,4 mg/día en perfusión continua días 1-4 Adriamicina 9 mg/m2/día en perfusión continua días 1-4 Dexametasona 40 mg v.o. días 1-4 y 9-12 VBAD (cada 4 semanas) Vincristina 1 mg i.v. día 1 BCNU 30 mg/m2 i.v. día 1 Adriamicina 30 mg/m2/día i.v. día 1 Dexametasona 40 mg v.o. días 1-4 y 9-12
  • 29. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1059 células plasmáticas mielomatosas en la médula ósea. trarse ciclofosfamida (800 a 1200 mg) cada 3 semanas Una vez que se ha alcanzado esta fase, el tratamiento de junto a prednisona (30 a 50 mg) a días alternos. Aunque mantenimiento con quimioterapia no es útil. El único este tratamiento produce respuestas objetivas en muy fármaco que puede retrasar la progresión de la enfer- pocos pacientes, constituye un excelente tratamiento medad es el interferón alfa. La dosis habitual de inter- paliativo que puede controlar temporalmente la enfer- ferón como tratamiento de mantenimiento en el MM medad con una toxicidad muy baja. consiste en 3 millones de unidades por vía subcutánea 3 Un agente muy prometedor, con el que se han referido entre veces por semana. Sin embargo, no está bien demos- un 30 y un 40% de respuestas objetivas en pacientes con MM re- trada la eficacia de este tratamiento, la toxicidad es sig- sistente o en recaída, es la talidomida a través de un mecanismo su- nificativa y el coste alto. Además, sólo parece ser efecti- puestamente antiangiogénico. Se usa a dosis entre 200-400 mg al vo cuando se ha conseguido una respuesta completa día. Sin embargo, este tratamiento debe estar sometido a una es- con quimioterapia y no parece que alargue la supervi- trecha vigilancia por sus efectos tóxicos, neurológicos (75%), gas- vencia. Por ello, no es un tratamiento rutinario en el trointestinales (66%) y constitucionales (60%). A pesar de esta to- postrasplante. xicidad debe ofrecerse a todos los pacientes con mieloma quimiorresistente o con múltiples recaídas. Actualmente se está 5.2.2.3. Tratamiento de las recaídas ensayando su combinación con quimioterapia como terapia de primera línea(52, 53). En los pacientes que recaen una vez que se ha sus- pendido el tratamiento, la tasa de respuestas cuando se ad- ministra de nuevo el tratamiento inicial se sitúa entre el 5.2.2.5. Trasplante de progenitores 50 y el 70% pero la duración de la segunda respuesta es hematopoyéticos (TPH autólogo) menor que la primera. En pacientes con mieloma en re- La limitada eficacia del tratamiento convencional ha caída sensible a quimioterapia, la intensificación con au- propiciado el empleo de tratamientos más intensivos totrasplante constituye la mejor opción terapéutica que incluyen quimioterapia a dosis elevadas, combinada siempre que la edad y las condiciones del paciente lo o no con irradiación corporal total (ICT), seguida de permitan. rescate con progenitores hematopoyéticos(54). El TPH autólogo a partir de progenitores obteni- 5.2.2.4. Tratamiento del mieloma dos de sangre periférica se puede ampliar incluso hasta primariamente resistente y del mieloma los 70 años. Con este tipo de trasplante como terapia de en fase avanzada primera línea (consolidación postquimioterapia inicial) se La mediana de supervivencia de los pacientes con logran tasas de respuesta de hasta el 80%, y lo que es MM primariamente resistente a la quimioterapia es de 15 más importante, un 25-50% de remisiones completas. meses. En esta situación el tratamiento de rescate más efi- Por otra parte, la mortalidad relacionada con el proce- caz es el autotrasplante, si bien su eficacia es menor que dimiento es inferior al 5%. Sin embargo, el beneficio en en recaída quimiosensible o como terapia de consolida- términos de supervivencia es discreto. El tratamiento ción. Cuando el autotrasplante no es factible, el trata- de intensificación consiste, en general, en dosis eleva- miento con VAD o con dosis elevadas de dexametaso- das de melfalán asociadas o no a irradiación corporal na produce una tasa de respuestas alrededor del 25%. total (ICT), o bien en la asociación de melfalán/busulfán. Los inconvenientes del tratamiento con VAD radican La recogida de progenitores autólogos de sangre peri- en la necesidad de colocación de una vía central y una to- férica (movilización) se puede realizar con esquemas de xicidad significativa debido al tratamiento con gluco- quimioterapia (ciclofosfamida a dosis de 1,5-4 g/m2) se- corticoides, particularmente en forma de infecciones y guidos de factores de crecimiento o bien sólo con fac- miopatía esteroidea. No obstante, con este régimen la tores. duración de la respuesta es muy limitada, con medianas En los casos de respuesta favorable el manteni- que no superan los 9 meses. miento con interferón alfa a bajas dosis por vía subcu- Si el paciente con MM es resistente a todas las ac- tánea hasta recidiva o progresión, se ha mostrado efi- tuaciones terapéuticas descritas así como en aquellos caz para alargar la supervivencia y el tiempo libre de pacientes en que estos tratamientos no son factibles se re- recidiva tanto en el trasplante autólogo como en el alo- comienda un tratamiento conservador. Puede adminis- génico.
  • 30. 1060 FARMACIA HOSPITALARIA Las limitaciones de edad y de disponibilidad de mg en perfusión de 2 horas administrado cada 4 sema- donante hacen que el trasplante alogénico sólo sea nas) reduce la pérdida de masa ósea, el número de le- aplicable a una minoría de pacientes. Además la siones líticas, el número de fracturas y el dolor. Se ad- mortalidad por toxicidad es muy elevada y la tasa ministra junto a calcio y vitamina D oral(56). de recaída normal, consiguiendo la curación sólo La analgesia con AINE u opiáceos constituye una un 10%. parte esencial del tratamiento. Además de aliviar el dolor permite la movilización del paciente, lo cual es muy im- 5.2.2.6. Terapia de soporte y manejo portante para disminuir la pérdida de masa ósea. También de las complicaciones puede indicarse radioterapia local para tratar el dolor. Puede ser aconsejable la utilización de corsés ortopédi- Incluye la hidratación, prevención de la lesión cos y la pérdida de peso. renal, analgesia, tratamiento de la anemia y de las La eritropoyetina humana (EPO) es eficaz en el tra- infecciones. tamiento de la anemia, particularmente en los pacien- Una cuarta parte de los pacientes presentan in- tes con valores bajos de EPO endógena. suficiencia renal. La insuficiencia renal moderada Las infecciones constituyen una causa importante puede ser revertido con una adecuada hidratación y de morbilidad y mortalidad en los pacientes con MM. Las con el tratamiento de la hipercalcemia e hiperurice- complicaciones infecciosas requieren un tratamiento mia. Aproximadamente el 10% de los pacientes enérgico y precoz, particularmente cuando el paciente se con MM tienen una insuficiencia renal lo suficien- encuentra granulocitopénico tras la quimioterapia. En temente avanzada como para requerir tratamiento los pacientes que presentan infecciones de repetición, sustitutivo con diálisis. puede resultar útil la profilaxis con penicilina oral, ci- El tratamiento de la hipercalcemia consiste en hidratación con suero fisiológico (3-4 litros al día), profloxacino o cotrimoxazol. La vacuna antineumocó- furosemida y glucocorticoides (1-1,5 mg/kg/día). cica está controvertida resultando útil en algunos pa- Las medidas previas deben instaurarse en todos los cientes. casos, pero cuando la calcemia es superior a 14 La compresión medular ocurre en un 5-10% de los mg/dl están indicadas otras medidas como el tra- pacientes, en algún momento de la evolución, y requie- tamiento con calcitonina o bifosfonatos. La calci- re un tratamiento urgente. El tratamiento consiste en la tonina (4 U/kg/12 h) tiene la ventaja sobre otras administración inmediata de dosis elevadas de dexame- medidas de su rapidez de acción, ya que reduce la tasona (dosis inicial de 100 mg IV seguida de 25 mg ca- calcemia en 2-4 h. Tiene el incoveniente de que su da 6 horas) junto a radioterapia urgente. eficacia sólo dura 48 h. Por ello, las indicaciones de este fármaco son el tratamiento de las hipercalce- 6 FACTORES DE CRECIMIENTO mias superiores a 16 mg/dl y sintomáticas, y siem- HEMATOPOYÉTICO pre asociada a otros agentes como los bifosfonatos. Los bifosfonatos son fármacos muy eficaces y se- Uno de los principales progresos de los últimos guros, su acción no empieza hasta el segundo o ter- años en el área onco-hematológica está relacionado cer día pero tienen la gran ventaja de ejercer un con el tratamiento de soporte hematológico con efecto muy prolongado (superior a 3 semanas). De factores de crecimiento hematopoyético. Los facto- los bifosfonatos disponibles en la actualidad para el res de crecimiento hematopoyético (FCH o CSF, del tratamiento de la hipercalcemia inducida por tumor inglés colony stimulating factors) son una familia de el más utilizado y considerado hasta ahora de refe- citocinas que regulan la proliferación, diferenciación rencia es el pamidronato. Recientemente se ha co- y viabilidad de las células de la sangre y de sus pre- mercializado un nuevo bifosfonato, el ácido zole- cursores en la médula ósea (MO). Se ha demostrado drónico, caracterizado por un efecto más potente y la existencia de más de 20 citocinas diferentes que rápido, así como por su fácil administración. Pue- actúan sobre el sistema hematopoyético(57, 58). Ac- de administrarse en administración intravenosa de 15 tualmente se dispone en la práctica clínica diaria de minutos de duración, lo que contrasta con las dos factores estimulantes de colonias de granulocitos horas necesarias en el caso del pamidronato(55). (G-CSF, filgrastim, lenograstim) y de granulocitos y El uso del pamidronato durante largo tiempo (90 macrófagos (GM-CSF, molgramostim, sargramos-
  • 31. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1061 tim), y de factores estimulantes de la eritropoyesis, Tabla 15. Características generales eritropoyetina (EPO).También ha sido aprobado de los factores de crecimiento por la FDA la interleucina 11 como factor estimu- mieloides y linfoides. lador de la trombopoyesis, y en el futuro se prevé la aprobación de otros FCH. En la Figura 1 se es- 1. Glucoproteínas activas a muy bajas quematiza la regulación de la hematopoyesis por concentraciones. factores de crecimiento. En la Tabla 15 se muestran 2. Activas in vitro e in vivo. las características generales de los FCH. 3. Producidos por muchos tipos celulares. 4. Generalmente influyen en más de una línea 6.1. Factores estimulantes de colonias 5. Generalmente activas a nivel de células proge- de granulocitos y macrófagos nitoras y de células funcionales finales. Los FCH inducen la proliferación y diferenciación de 6. Generalmente muestran sinergismo las células progenitoras de granulocitos y macrófagos. o interacciones aditivas con otros factores Se agrupan bajo esta denominación cuatro citocinas de crecimiento. principales: 7. Frecuentemente actúan como contrapartida neoplásica de las células normales. – G-CSF: Factor estimulante de granulocitos. – M-CSF: Factor estimulantes de macrófagos. – GM-CSF: Factor estimulante de granulocitos- recogidos en la Tabla 16. macrófagos. Poseen una estructura glicoproteíca diferente, actú- – Multi-CSF: Factor multifuncional (también llamado an a través de diferentes receptores de membrana y son interleukina 3: IL-3). obtenidos por técnicas de ADN recombinante. Su gen responsable se localiza en el cromosoma 17 para el G- En España, actualmente están registrados los FCH CSF y en el cromosoma 5 para el GM-CSF. Filgrastim es- Figura 1. Esquema de la regulación de la hematopoyesis por factores de crecimiento. BFU-E, unidad formado- ra de brotes eritropoyetin-dependientes; CFU-GM, unidad formadora de colonias granulocíticas y macrofágicas; CFU-Mega, unidad formadora de colonias megacariocíticas. Autorrenovación Células madre hematopoyéticas Steel F FIK2 lig IL-3, IL-1 Células progenitoras Células progenitoras Células progenitoras BFU-E CFU-GM CFU-Mega G-GSF GM-CSF ? TPO EPO IL-4 ? IL-11 ? IL-5 ? Neutrófilos Hematíes Plaquetas Eosinófilos Basófilos Monocitos
  • 32. 1062 FARMACIA HOSPITALARIA Tabla 16. Factores de crecimiento de colonias registrados en España (2001). Medicamento Origen Naturaleza Factores estimulantes de granulocitos (G-CSF) Filgrastim ADN recombinante en E. Coli Proteína Lenograstim Cultivo de células de ovario de hamster Glucoproteína Factores estimulantes de granulocitos-macrófagos (GM-CSF) Molgramostim ADN recombinante en E.coli Proteína tá constituido por 175 aminoácidos y no está glicosilado. un gran impacto en la terapia oncohematológica. Re- Lenograstim contiene 174 aminoácidos y se encuentra cientemente la Sociedad Americana de Oncología Clínica glicosilado en el aminoácido 133. Molgramostim es el (ASCO) ha actualizado una serie de recomendaciones en factor estimulante de colonias de granulocitos y macró- forma de guía de práctica clínica, basadas en la evidencia fago (GM-CSF), constituido por 127 aminoácidos y no científica, para su uso en pacientes no incluidos en en- glicosilado. Se obtiene de una cepa de E.coli que posee sayos clínicos controlados(59). Sería deseable que todas un plásmido obtenido por ingeniería genética que con- las indicaciones de G-CSF se ajustaran a criterios basa- tiene un gen del GM-CSF humano. dos en la evidencia como los mostrados en la Tabla 17. Aunque se está investigando su uso en muchas in- La indicación más habitual del G-CSF es la prevención dicaciones, en España se encuentran autorizadas las si- de la neutropenia febril postquimioterapia(60). Sin em- guientes: bargo, igualmente puede conseguirse con una reduc- ción en la intensidad de la quimioterapia siempre que – Neutropenia: para reducir la duración de la neu- no afecte al pronóstico del paciente. Además la mayoría tropenia y la incidencia de neutropenia febril en de los tratamientos estándar no se asocian a tasas altas de pacientes con enfermedades malignas (con la ex- neutropenia febril y el uso rutinario de G-CSF sería in- cepción de leucemia mieloide crónica y síndromes necesario. En algunos tumores se ha analizado el posible mielodisplásicos) tratados con quimioterapia con- impacto del G-CSF en la supervivencia sin encontrar vencional y en la reducción de la duración de la mejora en la tasa de cura. Hasta ahora ningún estudio neutropenia en los pacientes sometidos a trata- ha demostrado con claridad que el uso de G-CSF pre- miento mieloablativo seguido de trasplante de mé- ventivo mejore la supervivencia en ninguna neoplasia. No dula ósea y que se considere que presenten un ma- obstante, dentro de ensayos clínicos de aumento de in- yor riesgo de experimentar neutropenia grave tensidad de dosis de la quimioterapia está plenamente prolongada. – Movilización de células progenitoras de sangre peri- justificado el uso de FCH profiláctico. También parece férica autóloga para acelerar la recuperación hemato- justificado en circunstancias especiales como el linfoma poyética mediante la infusión de dichas células, tras el en pacientes con sida, linfoma en el anciano aunque tratamiento de supresión o ablación de la médula también puede optarse por reducir la intensidad de do- ósea. sis de la quimioterapia. – En pacientes, tanto niños como adultos, con neutro- El G-CSF es el método de elección para movilizar penia congénita grave, cíclica o idiopática grave, con un precursores hematopoyéticos necesarios para realizar recuento de neutrófilos 0,5 x 109/l, y con una historia un trasplante de sangre periférica y es una de las prin- de infecciones severas o recurrentes. cipales indicaciones en oncohematología. La movili- zación se puede realizar con G-CSF (trasplante alo- Los CSF suponen un grupo de medicamentos de génico o autólogo) o combinado con quimioterapia origen biotecnológico, de coste relativamente elevado, (trasplante autólogo). La combinación de quimiote- con una amplia gama de indicaciones, que han provocado rapia y G-CSF es más eficaz que únicamente con G-
  • 33. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1063 Tabla 17. Recomendaciones para el uso de FCH (ASCO, 2000). 1. Profilaxis primaria La administración de FCH como profilaxis primaria debe reservarse para pacientes sometidos a tratamientos de quimioterapia que presenten una incidencia de neutropenia febril mayor o igual al 40% con respecto al grupo control. Si la incidencia es infe- rior al 40%, la ASCO recomienda la administración de FCH si existe alguno de los siguientes factores de riesgo: radioterapia en previa >20% de médula ósea, neutropenia >1.500/µl el día 0, LNH en paciente VIH, estado general desfavorable y enfermedad tumoral avanzada. Por tanto, para pacientes previamente no tratados que reciben la mayoría de los regímenes de quimioterapia no se recomienda la administración primaria de FCH. 2. Profilaxis secundaria La administración de FCH puede disminuir la probabilidad de neutropenia febril en pacientes que hayan presentado episodios de neutropenia febril en el anterior ciclo de tratamiento o que hayan sufrido un retraso o descenso de dosis por neutropenia prolongada. Sin embargo, aún no se ha demostrado una reducción en la mortalidad asociada a fiebre y neutropenia, ni tampo- co en la respuesta tumoral ni en la supervivencia cuando se mantiene la misma dosis de quimioterapia y sólo se realiza profilaxis secundaria. La ASCO recomienda que los clínicos consideren una reducción de dosis después de fiebre o neutropenia severa o prolongada tras un ciclo anterior de tratamiento, y que sólo se utilicen los FCH en situaciones donde es esencial mantener la do- sis de quimioterapia y su intensidad. 3. Tratamiento con FCH A. Paciente afebril. Los FCH no deberían ser rutinariamente utilizados en estos pacientes. B. Paciente febril. La utilización de FCH en pacientes de alto riesgo debe ser considerada, ya que los beneficios en estas cir- cunstancias no han sido probados. Los factores de riesgo incluyen: neutropenia profunda (recuento absoluto de neutrófilos >100/m l), enfermedad primaria no controlada, infección fúngica invasiva, neumonía, hipotensión e indicadores clínicos de sepsis. 4. Utilización de FCH para aumentar la intensidad de dosis No hay evidencia que apoye el uso de FCH para incrementar la intensidad de dosis de quimioterapia o el esquema o ambos fuera de un ensayo clínico. 5. Utilización de FCH como adyuvante en trasplante de células progenitoras Se recomienda el uso de FCH para la movilización de células progenitoras periféricas y después de la infusión de éstas. La dosis óptima de FCH para movilización está en investigación, pero se recomienda una dosis de10 µg/kg/día para G-CSF. 6. FCH en pacientes con leucemia aguda y síndrome mielodisplásico A. Leucemia mieloide aguda (LMA). El uso de FCH puede ser considerado en esta situación si el beneficio en términos de acor- tamiento de la estancia hospitalaria supera el coste del factor. Ningún estudio ha demostrado una mejoría significativa en la ta- sa de respuesta completa o en el resultado a largo tiempo. Si parece obtenerse algún beneficio (acortamiento de la duración de la neutropenia) después de una quimioterapia de consolidación para pacientes con LMA en remisión. La evidencia disponi- ble indica que los FCH pueden ser recomendados después de completar la quimioterapia de consolidación. B. Síndrome mielodisplásico. Indicado sólo en el subgrupo de pacientes con neutropenia grave e infecciones recurrentes. C. Leucemia linfoblástica aguda (LLA). Los datos son suficientes para recomendar la administración de G-CSF empezando después de completar los primeros días de quimioterapia de la inducción inicial o del primer curso postremisión, ya que acorta la duración de la neutropenia a menos que 1000/mm3 en una semana. D. Leucemia en recaída. Los datos disponibles no son suficientes para recomendar o no el uso de FCH en pacientes con LLA en recaída. Como no hay evidencia, deberían ser juiciosamente utilizados en subgrupos de pacientes. 7. FCH en pacientes que reciben quimioterapia y radioterapia conjuntamente Deberían evitarse en pacientes que reciben conjuntamente quimioterapia y radioterapia. En ausencia de quimioterapia, el uso te- rapéutico de FCH puede considerarse en pacientes que reciben radioterapia que implique grandes áreas, si se esperan retrasos pro- longados secundarios a la neutropenia. 8. Uso de FCH en población pediátrica Las guías recomendadas para adultos son generalmente aplicables para la población pediátrica. No obstante, las dosis óptimas no han sido establecidas. 9. Dosis/vía y régimen de administración En adultos la dosis recomendada de G-CSF es 5 µg/kg/día y 250 µg/m2/día para GM-CSF (sargramostin). Para la movilización de células progenitoras hematopoyéticas se recomienda administrar 10 µg/kg/día para G-CSF. No está aconsejada la escalada de dosis y se recomienda ajustar la administración al contenido del vial como estrategia apropiada para maximizar la relación cos- te-beneficio. La vía preferida de administración es la subcutánea, aunque es aceptable, si las condiciones clínicas lo exigen, el empleo de la vía intravenosa. 10. Inicio y duración de la administración de FCH El tiempo de inicio y la duración óptima está todavía en investigación. Las recomendaciones de la ASCO de 1996 sugerían ini- ciar la ad ministración entre 24 y 72 horas después de la quimioterapia y continuar hasta que las cifras de neutrófilos sean igua- les o superiores a 10.000/µL. Sin embargo, una duración más corta puede ser suficiente para conseguir una adecuada recupera- ción clínica, considerando la conveniencia del paciente y el coste. Iniciar la administración de FCH 5 días después de la infusión de células progenitoras es razonable y está basado en estudios clínicos.
  • 34. 1064 FARMACIA HOSPITALARIA CSF pero tiene una toxicidad significativa. El G-CSF vo la eritropoyesis y tiene importantes aplicaciones clínicas se administra a una dosis de 5 µg/kg desde el día +2 en situaciones de déficit de eritropoyesis atribuible a una ó 5 y el momento de la citaféresis se decide según el producción defectuosa de eritropoyetina, especialmen- número de precursores hematopoyéticos en sangre te en la anemia asociada a la insuficiencia renal. La defi- monitorizados por citometría. La movilización con nición de una producción de EPO defectuosa se basa en G-CSF es sencilla y habitualmente eficaz. Se admi- el bajo nivel de EPO para una hemoglobina en compa- nistra G-CSF a 10-20 µg/kg/día durante 4 días y al ración con la curva de referencia. Las condiciones clí- quinto día se recogen por citaféresis los precursores nicas con defectuosa producción de EPO son aparte movilizados desde la médula a la sangre. La combi- de la uremia las siguientes: anemia de la prematuridad, nación de citocinas para mejorar la movilización se anemia de la inflamación (artritis reumatoidea, enfer- encuentra en investigación, sobre todo la asociación de medad inflamatoria intestinal, infección crónica y sida) y factor de célula stem con G-CSF. El G-CSF adminis- anemia de la neoplasia (tumor sólido, mieloma, linfo- trado postrasplante (10 µg/kg/día desde el día +5) ma)(61). consigue acortar la duración de la neutropenia pero La anemia asociada al cáncer es una de las manifes- el beneficio clínico es discreto puesto que no reduce taciones que más negativamente inciden en la calidad significativamente la incidencia de episodios febriles. de vida del paciente oncológico. La etiología de la anemia Los efectos secundarios de los G-CSF recom- es multifactorial. Por una parte está la toxicidad hema- binantes son leves y de corta duración. El más ca- tológica por los tratamientos de quimioterapia y radio- racterístico es el dolor óseo, muchas veces generali- terapia. Por otro lado asociados al tumor como puede ser zado y normalmente de intensidad leve-moderada. el sangrado, alteración en la ingesta de alimentos, pobre El dolor no implica gravedad alguna y responde estado nutricional o la infiltración tumoral de la médula bien al tratamiento sintomático con analgésicos de ósea. Pero además el propio proceso oncológico se aso- potencia baja-moderada. La fiebre, el exantema y el cia con anemia de modo intrínseco, asociado a una pro- aumento de peso son efectos secundarios muy po- ducción relativamente baja de EPO causada por citoci- co frecuentes. Son características ciertas alteracio- nas liberadas por el tumor o por monocitos activados. nes bioquímicas como la elevación de la fosfatasa El tratamiento clásico de la anemia en el paciente alcalina. Los efectos tóxicos de los GM-CSF son oncológico es la administración de concentrados de he- más frecuentes y severos que los de los G-CSF. matíes, pero este tratamiento presenta los riesgos aso- La eficacia de las citocinas no está totalmente ciados a los tratamientos con derivados de la sangre, así optimizada, debido a su rápida eliminación por vía como la necesidad de la vía endovenosa y la atención renal o a la proteólisis a nivel tisular. En el objetivo hospitalaria. En estos casos la administración subcutánea de mejorar las propiedades cinéticas se están inves- de EPO humana recombinante (rHuEPO) se presenta tigando ciertas modificaciones de la molécula con el como una alternativa terapéutica y los ensayos realizados fin de conseguir un efecto más prolongado. Los han demostrado que eleva los niveles de hemoglobina, mejores resultados se han conseguido mediante la disminuye los síntomas asociados a la anemia y reduce las conjugación con el polímero sintético soluble en necesidades de transfusiones de hematíes. La eficacia de agua: polietilenglicol (PEG) y mediante la hipergli- cosilación. El pegfilgrastim podría ser aprobado la rHuEPO no se asocia al tipo de tumor pero sí a la efi- con las mismas indicaciones que la forma no pegi- cacia de la quimioterapia sobre todo en las neoplasias lada. Una sola dosis de pegfilgrastim por ciclo de hematológicas (mieloma múltiple y linfoma). quimioterapía consigue un efecto equivalente a las Entre las indicaciones autorizadas en España, se re- administraciones diarias de filgrastim en la mejoría coge su uso para pacientes oncohematológicos: “trata- de la neutropenia asociada a la quimioterapia. miento de la anemia y reducción de los requerimientos transfusionales en pacientes adultos que reciben qui- 6.2. Factor estimulador de colonias mioterapia para el tratamiento de tumores sólidos, lin- eritrocíticas: eritropoyetina foma maligno o mieloma múltiple y en los que la valo- ración del estado general (ej.: estado cardiovascular, La EPO es una glucoproteína que estimula la for- anemia previa al inicio de la quimioterapia) indique ries- mación de eritrocitos a partir de los precursores del go de transfusión sanguínea”. compartimento de células progenitoras. Estimula in vi- La dosis ideal y la pauta de administración de EPO
  • 35. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1065 para el tratamiento de la anemia asociada al cáncer se 6.3. Trombopoyetina ha establecido a lo largo de los últimos años. La posología inicial recomendada se sitúa en las 150 UI/kg adminis- La transfusión de concentrados de plaquetas es trada por vía subcutánea 3 veces por semana. Se puede el tratamiento del paciente con sangrado causado duplicar la dosis si, tras 4 semanas de tratamiento, no se por trombopenia postquimioterapia así como la objetiva respuesta. En caso de producirse descensos de profilaxis para pacientes con trombopenia severa (<10 ó 20 x 109/l). La transfusión de plaquetas hemoglobina superiores a 1 g/dl con el primer ciclo de presenta una serie de problemas como la alta fre- quimioterapia no se recomienda continuar con el trata- cuencia de refractariedad y el riesgo de transmisión miento. Si se producen incrementos mensuales supe- de infecciones. Además el amplio uso del trasplan- riores a los 2 g/dl se recomienda reducir la dosis al 50%. te de médula y de órganos sólidos ha disparado las El tratamiento debe mantenerse hasta 3 semanas de ha- necesidades de este producto sanguíneo lo cual lle- ber terminado la quimioterapia y no se recomienda su va a frecuentes situaciones de desabastecimiento. continuación en caso de sobrepasar los 14 g/l de he- Estos problemas justifican la investigación en los moglobina. En este último caso se reiniciará el trata- factores estimuladores de la trombopoyesis. La miento con el 50% de la dosis una vez que la hemoglo- producción de plaquetas la realiza el megacariocito, bina descienda por debajo de los 11-12 g/dl(58). Al igual el cual deriva como de células precursoras dirigi- que en la anemia de la insuficiencia renal, cuando se usa das y ésta de la célula stem. Esta producción está rHuEPO hay que asegurar un control o aporte de hierro. controlada por varios factores de crecimiento: IL- Se han usado otras pautas de administración de rHuE- 3, IL-6, GM-CSF, IL-11 y un factor específico de lí- PO, y un estudio reciente ha demostrado la eficacia y nea: la trombopoyetina (TPO) o c-Mpl. La TPO tolerabilidad de la administración de ésta en dosis única endógena es capaz de estimular el crecimiento de los semanal de 40.000 UI(62). megacariocitos, la maduración de su citoplasma y la Las tasas de respuesta informadas varían del 32 al liberación de plaquetas(63). Por el momento, existen 85% probablemente como reflejo de los diferentes cri- dos moléculas de trombopoyetina recombinante terios usados para definir la respuesta. El alto costo de es- en desarrollo clínico: el factor de desarrollo y cre- te tratamiento hace deseable establecer unos crierios cimiento de megacariocito humano recombiante predictivos. Sin embargo, no se ha podido determinar un pegilado que es una molécula de TPO truncada y modo seguro de predecir la respuesta antes de iniciar el pegilada (PEG-rHuMGDF, Amgen Inc) y una for- tratamiento. Quizás el mejor criterio de baja probabilidad ma completa de la TPO glicosilada (rhTPO, Ge- de respuesta sea una subida de la Hb menor de 0,5 g/dl nentech Inc). Hay varios ensayos con PEG- a las dos semanas junto a un nivel de EPO sérico > 100 rHuMGDF administrados pre o U/l. postquimioterapia no mieloablativa mostrando un acortamiento del periodo de trombopenia y un Los efectos secundarios parecen iguales que en la menor nadir de trombopenia. Sin embargo con te- población renal y por ello van asociados a excesivos au- rapias mieloablativas, como en pacientes con leu- mentos de la hemoglobina cemia mieloblástica aguda no se ha demostrado La administración de rHuEPO en el trasplante beneficio clínico. El PEG-rHuMGDF también se alogénico de médula ósea produce una recupera- ha ensayado en donantes consiguiendo aumentar ción eritrocitaria más rápida y asegura un periodo de la recogida de plaquetas en las aféresis, lo cual se dependencia transfusional más corto. En el tras- traduce en una mayor incremento de la cifra de plante autólogo, no aporta ventajas significativas plaquetas postransfusión y reducción del número de en la recuperación eritrocitaria ni en los requeri- transfusiones necesarias para la profilaxis del san- mientos transfusionales. grado. Se ha comprobado la aparición de anticuer- Recientemente se ha comercializado una nueva pos antitrombopoyetina endógena en voluntarios proteína estimuladora de la eritropoyesis: darbepotin al- sanos tras la administración de PEG-rHuMGDF, fa con una semivida más larga, que implica que puede ad- complicación que puede limitar el desarrollo de es- ministrarse con menor frecuencia que rHuEPO. En la ac- te fármaco. La forma completa de TPO (rhTPO) tualidad, en España, no está aprobada para el parece ser más eficaz y segura pero la experiencia to- tratamiento de la anemia asociada al cáncer. davía es escasa.
  • 36. 1066 FARMACIA HOSPITALARIA 6.4. Otras citocinas provocar incluso el rechazo a un tratamiento poten- cialmente curativo. Además, conlleva una serie de La capacidad aislada de la interleucina 3 (IL-3), efectos colaterales indeseables como lesiones mecá- también denominada factor multifactorial, sobre la nicas, trastornos hidroelectrolíticos y metabólicos, estimulación hematopoyética en humanos es míni- efectos psíquicos, neumonía por aspiración y mal- ma en el contexto clínico-terapéutico, aunque en nutrición(65). combinación con otros factores de crecimiento parece Se desconoce el mecanismo exacto del vómito ser más efectivo. Por ejemplo, la administración de inducido por quimioterapia, pero se ha atribuido a la IL-3 junto a GM-CSF aumenta la movilización de estimulación directa de la zona gatillo quimiorre- células progenitoras de la hematopoyesis. Sin em- ceptora por el fármaco citostático, así como a qui- bargo, la toxicidad de la IL-3 limita su desarrollo clí- miorreceptores del tracto gastrointestinal que actú- nico. an en el centro del vómito vía vagal . La FDA, recientemente ha aprobado el uso de En función del momento de su aparición res- interleukina 11 (IL11) para la profilaxis secundaria pecto a la quimioterapia, la émesis se clasifica en tres de la trombocitopenia después de quimioterapia. Sin tipos(66): embargo la eficacia es sólo moderada y la toxicidad significativa. Quizás pueda ser más atractiva la com- – Émesis anticipatoria. Es la que precede a la ad- binación con rhTPO. ministración de quimioterapia en pacientes que Estudios en animales han demostrado que el fac- previamente habían presentado vómitos en ciclos tor de crecimiento keratinocítico (FCK), un miem- anteriores. bro de la familia de factores de crecimiento fibro- – Émesis aguda o inmediata. Ocurre dentro de las blásticos, es capaz de proteger las células primeras 24 horas tras la administración de la qui- epidérmicas, uroteliales y gastrointestinales de los mioterapia. efectos de la radiación y quimioterapia. Es una cito- – Émesis tardía o retardada. Aparece después de 24 cina de gran interés pero no se dispone de ensayos horas tras la quimioterapia, siendo de mayor in- en humanos(64). tensidad a los 2-3 días y persistiendo general- El factor de células stem o ligando del receptor c- mente 6-7 días. kit está implicado en la regulación de las fases más precoces de la hematopoyesis. La forma recombi- El correcto control de la émesis en el paciente nante del factor de células stem o r-metHuSCF (An- hematológico es complejo ya que existen una serie de cestim, Amgen Inc) está en una fase de investigación factores condicionantes: relacionados con el enfermo clínica en dos campos, para la movilización asociada (previa émesis posquimioterapia, previa émesis gra- al trasplante de progenitores hematopoyéticos y en vídica, susceptibilidad a la cinetosis, sexo, edad e in- la insuficiencia medular: anemia aplásica, enferme- gesta crónica de alcohol), relacionados con el trata- dad de Diamond-Blackfan, fallo de injerto y en la miento quimioterápico (capacidad emetógena del neutropenia crónica grave. Se administra asociado fármaco antineoplásico, dosis, pauta y tiempo de in- con filgrastim. Parece que puede conseguir una bue- fusión) y relacionados con el tratamiento antiemé- na movilización en casi la mitad de los pacientes que tico (fármaco seleccionado, esquema de administra- habían fracasado con el método habitual de movili- ción y asociación de fármacos sinérgicos)(67). zación. El principal efecto secundario es la reacción Destacar que los citostáticos con mayor poder eme- alérgica. tógeno (cis-platino y ciclofosfamida a dosis altas, dacarbacina y mecloretamina) son empleados habi- 7 TRATAMIENTO DE LAS NÁUSEAS tualmente en los protocolos de hematología. Y VÓMITOS RELACIONADOS CON LA Las estadísticas más optimistas consideran que QUIMIOTERAPIA Y RADIOTERAPIA se ha pasado de una émesis posquimioterapia del 80% a un control aproximado del 75%, lo cual su- Las náuseas y vómitos posquimioterapia cons- pone un gran avance. Sin embargo, los pacientes tituyen el efecto adverso más frecuente e indeseable sometidos a múltiples ciclos y durante tratamientos que sufre el paciente oncohematológico. La émesis intensivos, en una gran mayoría presentarán vómi- disminuye la calidad de vida del paciente, pudiendo tos a pesar del tratamiento antiemético preventivo.
  • 37. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1067 7.1. Estrategias farmacológicas(68, 69, 70) Ortopramidas Bloquean los receptores dopamina y serotonina Si existe una causa desencadenante debe tratar- inhibiendo el vómito tanto a nivel central como pe- se la misma o corregirse el trastorno subyacente, pu- riférico, presentando además efecto procinético. El diendo, en cualquier caso, utilizarse un tratamiento fármaco más representativo del grupo es la meto- sintomático. El objetivo final debe ser prevenir la clopramida, que fue el primero utilizado y el más aparición del vómito postquimioterapia mediante documentado. Hasta la aparición de los antagonis- tratamiento profiláctico. tas de la serotonina, la metoclopramida era consi- Existen muchos grupos de fármacos que han derada el fármaco más efectivo frente a la quimio- demostrado eficacia en el control de la émesis pos- terapia altamente emetógena. Las dosis quimioterapia. Su mecanismo de acción básico está re- recomendadas son: 2 mg/kg vía oral y 1-2 mg/kg i.v. lacionado con la inhibición de ciertos subtipos de re- cada 2 horas (2 a 5 dosis, la primera 30 minutos an- ceptores (muscarínicos, dopaminérgicos, tes de la quimioterapia). histaminérgicos, endorfínicos y serotoninérgicos), Sus principales efectos adversos son funda- los cuales se han visto relacionados con el reflejo del mentalmente de tipo extrapiramidal como discine- vómito en diversas regiones del sistema nervioso sias tardías y espasmos en músculos de la cara y central y periférico. Deben ser utilizados, solos o en cuello. asociación, con una potencia adecuada a la quimio- terapia administrada. Corticosteroides Los grupos farmacológicos más empleados son: No se conoce con exactitud su mecanismo de ac- ción antiemético, aunque parece estar relacionado Fenotiazinas con la inhibición de prostaglandinas en el cerebro y Su acción antiemética se debe al bloqueo de los re- cambios en la permeabilidad celular. Pueden ser efec- ceptores dopaminérgicos. Se utilizan en vómitos de in- tivos para el tratamiento de los vómitos refractarios tensidad moderada, no siendo eficaces como fármacos a otros antieméticos, potenciando de forma marcada únicos en pacientes tratados con fármacos citostáticos al- la actividad antiemética de otros fármacos. Los fár- tamente emetógenos. Las más empleadas son clorpro- macos más utilizados del grupo son dexametasona mazina (25-50 mg vía oral o i.m. cada 3-8 horas) y tietil- (8-40 mg i.v.) y metilprednisolona (250-500 mg i.v.). perazina (10 mg vía oral o rectal cada 8 horas). Antihistamínicos La acción antiemética de las fenotiazinas es pro- Son fármacos útiles para tratar vómitos no rela- porcional a la dosis, aunque la aparición de efectos ad- cionados con la quimioterapia. La difenhidramina es versos severos limita su uso a altas dosis. Los efectos ad- el fármaco utilizado en regímenes antieméticos aso- versos más importantes producidos son sedación, ciada a metoclopramida a dosis altas, ya que disminu- sequedad de boca, hipotensión y sintomatología extra- ye la incidencia de efectos extrapiramidales. piramidal. Antiserotoninérgicos (anti 5HT3) Butirofenonas Han mostrado una mayor eficacia que la meto- Su mecanismo de acción es similar al de las fenotia- clopramida a altas dosis frente a citostáticos altamen- zinas, aunque presentan una potencia antiemética supe- te emetógenos, y con menor incidencia de efectos ad- rior. Son más efectivas frente a fármacos con alta activi- versos. Su efecto se potencia con dosis altas de dad emetógena. Los fármacos incluidos en este grupo corticosteroides y por vía oral han demostrado ser son haloperidol (1-5 mg vía oral o i.m. cada 4-6 horas), tan efectivos o incluso más que por vía intravenosa(69). droperidol (0,5-2,5 mg i.v. cada 4 horas) y domperidona El control de náuseas y vómitos retardados es menor (10-20 mg vía oral cada 4-8 horas). que para los síntomas agudos. Los efectos secundarios son similares a los de las Los fármacos de este grupo utilizados en nues- fenitiazinas, aunque con menor incidencia de efectos tro país son ondansetrón, granisetrón y tropisetrón, los anticolinérgicos y mayor de reacciones extrapiramida- cuales parecen ofrecer una protección similar frente a les (excepto domperidona, que no atraviesa la barrera la émesis posquimioterapia según los estudios com- hematoencefálica). parativos llevados a cabo(66, 68).
  • 38. 1068 FARMACIA HOSPITALARIA – Ondansetrón: las dosis recomendadas son flexi- 7.3. Control de la emesis posradioterapia bles, en función del poder emetógeno del proto- colo quimioterápico o radioterápico empleado. Se Se estima que aproximadamente el 50% de los pa- utilizan dosis de 8 mg cada 8-12 horas ó 8-24 mg ca- cientes que reciben radioterapia fraccionada sobre el ab- da 24 horas por vía i.v. y 8 mg cada 8-12 horas por domen sufren episodios de náuseas y vómitos. El me- vía oral, comenzando la administración 15 minu- canismo de la émesis posradioterapia se relaciona con la liberación de mediadores químicos tras el daño tisular tos antes ó 1-2 horas antes de la quimioterapia res- local producido por la irradiación. La severidad es infe- pectivamente. rior a la provocada por la quimioterapia, pero puede du- – Granisetrón: las dosis recomendadas son de 3-9 mg rar más tiempo. cada 24 horas i.v. y 1 mg cada 12 horas vía oral. El potencial emetógeno se considera moderado en – Tropisetrón: la dosis es de 5 mg cada 24 horas i.v. radioterapia del tórax, pelvis y de la mitad inferior del u oral. cuerpo, mientras que en la cabeza, cuello y extremidades se considera bajo. La tolerancia del grupo es muy buena, siendo los El tratamiento antiemético está basado en la utili- principales efectos adversos el estreñimiento y el dolor de zación de los mismos fármacos utilizados para el control cabeza. de la émesis posquimioterapia, incluyendo a los anta- Cannabinoides gonistas de la serotonina(73). Presentan una actividad antiemética moderada, jun- to a una interesante acción estimulante del apetito. Pue- 8 PREVENCIÓN Y TRATAMIENTO den ser útiles en pacientes refractarios a ciertos antie- DE LAS INFECCIONES méticos de actividad moderada. Su uso está limitado EN LOS PACIENTES NEUTROPÉNICOS por los efectos psíquicos indeseados que producen, tipo 8.1. Factores predisponentes hilaridad y disforia. y epidemiología de las infecciones Recientemente, se ha desarrollado un derivado sin- tético del THC, la nabilona, que carece de dichos efectos Las infecciones producen una elevada morbilidad psíquicos. Ha mostrado ser tan eficaz como clorpro- y mortalidad en el huésped inmunocomprometido, sus- mazina y domperidona, y la dosis utilizada es de 1-2 mg tituyendo en muchas ocasiones a la enfermedad de ba- por vía oral cada 8-12 horas(71). se como causa de muerte. La neutropenia es la principal causa de inmunodepresión en el paciente hematológico. Antagonistas selectivos de los receptores-1 La neutropenia predispone primariamente a la infec- de neurocinina ción bacteriana y fúngica pero no incrementa la inci- Se encuentran actualmente en fase de investigación, dencia de infecciones virales o parasitarias. El número de aunque los estudios preliminares parecen indicar que infecciones bacterianas y fúngicas aumenta de forma pueden ser útiles en el control de la émesis aguda y tar- significativa dependiendo de la profundidad de la neu- día por cis-platino, principalmente asociados con corti- tropenia y de la duración de la misma. En relación a la se- coides más anti 5HT3(72). veridad de la neutropenia hay tres umbrales clínicos en 1.000/µl, 500 µ/l y 100 /µl neutrófilos(74). La neutrope- 7.2. Estrategias no farmacológicas nia se asocia a algunas neoplasias hematológicas de for- ma constante, como la leucemia aguda mieloblástica, Algunas medidas que pueden tener cierta repercusión pero con más frecuencia es secundaria al tratamiento sobre la incidencia de vómitos tras la quimioterapia son: quimio-radioterápico. Los organismos causantes de bacteriemia en el seno – Administración de la comida 2-4 horas antes de la de la neutropenia han variado en diferentes periodos. quimioterapia. Los gérmenes gram negativos eran los predominantes – Administración de la quimioterapia por la tarde o por hace 10-20 años, mientras que los gram positivos (en su la noche. mayoría estafilococos), representan actualmente el 60- – Administración de la quimioterapia durante el sueño 80% de las bacteriemias en la mayoría de los hospitales. nocturno. En algunos hospitales se está observando de nuevo un
  • 39. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1069 incremento de las infecciones por gram negativos(75). infecciosa: fiebre asociada a fármacos, transfusión Entre los gérmenes gram negativos son las entero- de hemoderivados, recurrencia tumoral, lisis tu- bacterias (Escherichia coli, Klebsiella spp, Pseudomo- moral, etc. nas aeruginosa, etc.) procedentes del tracto gastrointes- Las puertas de entradas más frecuentes en la tinal las que se aislan con más frecuencia en los neutropenia son los pulmones, cateter, región pe- hemocultivos. Causan las infecciones más graves con riodontal, mucosa orofaríngea, tercio inferior de elevada mortalidad si no se instaura un tratamiento pre- esófago, colon, región perianal, lugares de punción coz. Los gérmenes gram positivos causantes de bacte- cutánea y región periungueal. Debe hacerse una ex- riemia suelen proceder de la mucosa oral (Estreptococos ploración física diaria de estas puertas de entrada. del grupo viridans) o de la piel (estafilococos coagulasa Ante la aparición de fiebre o sospecha de infección negativos). Son la causa más frecuente de bacteriemia debe además realizarse como mínimo un hemogra- pero no suelen alcanzar la gravedad de las infecciones ma, bioquímica sérica y de orina, coagulación, he- causadas por los gram negativos. Son muy poco fre- mocultivos de sangre periférica y cateter, urocultivo cuentes las infecciones por gérmenes anaerobios. La so- y cultivos microbiológicos de cualquier posible fo- breinfección por Clostridium difficile es muy frecuente co y una radiografía de tórax(74, 76). pero no produce bacteriemia, siendo un cuadro diarrei- co la manifestación habitual. 8.3. Elección de la terapia de la infección En el paciente hematológico con neutropenia en pacientes con neutropenia suele haber otros factores predisponentes a la infec- ción que pueden modificar sustancialmente el pa- Existe indicación de tratamiento antibiótico em- trón de infecciones descrito más arriba. Así los pa- pírico cuando hay neutropenia menor de 1.000 µl y cientes con leucemia linfoide crónica y mieloma fiebre o cualquier otro signo o síntoma sugestivo de in- múltiple están predispuestos a la infección por gér- fección(74). menes encapsulados, mientras que los pacientes con La instauración rápida ante la aparición de la fiebre, linfoma y trasplante con inmunodepresión celular T de una terapia empírica dirigida a los bacilos gram ne- están predispuestos a las infecciones por bacterias gativos constituye la base del tratamiento de la fiebre en intracelulares, virus, hongos y protozoos. Esta múl- los pacientes neutropénicos. Sin embargo la composición titud de factores favorecedores de la infección obliga específica de la terapia empírica sigue siendo materia de a individualizar tanto la profilaxis como el trata- controversia y sujeto a variaciones por el cambio en el pa- miento. La siguiente exposición se refiere al paciente trón de los patógenos, el rápido desarrollo de resistencias con neutropenia posquimioterapia como principal bacterianas y la emergencia de nuevas entidades clíni- factor de riesgo para la infección. cas y nuevas drogas(77). Hay un gran número de antibió- ticos beta-lactámicos de amplio espectro altamente efi- 8.2. Evaluación clínica del paciente caces. Durante los últimos 15 años se usó sobre todo la neutropénico con fiebre ceftacidima, pero la eficacia de esta droga ha disminudido por el aumento de prevalencia de estreptococos resis- El diagnóstico de la infección en pacientes tentes y la baja actividad frente a los estafilococos. Por ello neutropénicos puede ser difícil debido a la ausencia actualmente se usan las cefalosporinas de cuarta gene- de los signos inflamatorios. Este hecho, unido a ración (ej.: cefepima), los carbapenems (imipenem, me- que las pruebas diagnósticas no son lo suficiente- ropenem) y las penicilinas antipseudomónicas más in- mente rápidas, sensibles ni específicas, condujo a hibidor de beta-lactamasa (ej.: piperacilina/tazobactam). la instauración de tratamiento antibiótico empíri- En caso de alergia a los betalactámicos suele usarse el co precoz. Una demora en su inicio puede permitir aztreonam. El tratamiento tradicional incluye la asocia- el desarrollo de infecciones rápidamente fatales. ción con un aminoglucósido (amikacina), pero la mo- Pero que la terapéutica sea empírica y precoz no noterapia es adecuada en muchos casos(78, 79). A cual- exime de una completa evaluación clínica, con una quiera de ellos puede añadirse un antibiótico investigación minuciosa de los posibles focos de glucopéptido (teicoplanina o vancomicina) cuando hay infección y de la toma de muestras adecuadas para una alta probabilidad de infección por grampositivos(80). establecer el diagnóstico microbiológico específi- En la Tabla 18 se muestran algunas posibles pautas an- co. Además hay que descartar que la fiebre no sea timicrobianas.
  • 40. 1070 FARMACIA HOSPITALARIA Tabla 18. Posibles pautas empíricas para el paciente neutropénico febril. En monoterapia Penicilina antipseudomónica más inhibidor de beta-lactamasa: piperacilina/tazobactam 4-0,5 g/6 h i.v. Carbapenem: imipenem 0,5 g/ 6 h; meropenem 1 g/ 8 h Cefalosporinas antipseudomona de 4ª generación: cefepima 2 g/8 h i.v. Terapia de combinación Añadir un aminoglucósido (amikacina 15 mg/kg/24 h en dosis única diaria) en paciente con sepsis grave y si los cultivos de vigilancia fueron positivos para un bacilo gramnegativo no fermentador (P. aeruginosa, Acinetobacter spp). Añadir un glucopéptido (vancomicina 1 g/12 h i.v. o teicoplanina (400 mg/24 h i.v.) si hay sospecha de infección asocia- da al cateter o sepsis grave. Betalactámico antipseudomónico más fluoroquinolona cuando desea evitarse el uso de aminoglucósidos. Una vez iniciado el tratamiento antibiótico empírico aprobado para la terapia empírica de la fiebre en el pa- se valorará su respuesta a los 3-4 días. Si el paciente que- ciente con neutropenia. Estos preparados son mejor to- da afebril se continuará con la misma pauta inicial, aun- lerados, sobre todo menos nefrotóxicos, pero no más que la pauta podrá modificarse en función de los estudios eficaces que la anfotericina B desoxicolato. El itracona- microbiológicos. No está establecida la duración ópti- zol(81) y el voriconazol(82) han demostrado eficacia com- ma del tratamiento antibiótico empírico, manteniéndo- parable a la anfotericina B con menor toxicidad y posi- se como norma general hasta la desaparición de la fiebre bilidad de administración oral. y recuperación de la neutropenia. La falta de respuesta (persistencia de la fiebre) 8.4. Terapia basada en el riesgo obliga a una exhaustiva reevaluación para buscar cau- para pacientes febriles con neutropenia sas de infección no bacteriana (virus, hongos, proto- zoos), infección bacteriana resistente a la terapia em- Los pacientes con fiebre y neutropenia son un gru- pírica (generalmente grampositivos resistentes para po heterogéneo con subgrupos de riesgo distinto para las combinaciones sin glucopéptidos, pero actual- la respuesta, complicaciones y mortalidad. La identifi- mente también gram positivos resistentes a los gluco- cación de los pacientes con bajo riesgo abre la posibili- péptidos), concentraciones séricas y tisulares insufi- dad de una aproximaciones distinta al manejo de la fie- cientes de los antibióticos administrados o difícil bre, como el tratamiento con antibióticos por oral acceso de los mismos a sitios avasculares (absceso, (completo o después de una pauta con antibióticos pa- etc.). Ante esta situación, y si los estudios microbio- renterales) y los tratamiento ambulatorios (completos lógicos son negativos, suele procecerse a un cambio o después de un periodo de ingreso). empírico de los antibióticos. El cambio empírico sue- En general se admite que son de bajo riesgo aque- le consistir en añadir un aminoglucósido o un gluco- llos pacientes menores de 60-65 años con una neutro- péptido si no lo recibían. Además el cateter debe reti- penia esperada inferior a 7-10 días en ausencia de los rarse si existen criterios de septis grave o embolia. Si siguientes criterios: documentación clínica o bacterio- estas medidas fallan se deberá añadir la anfotericina(78). lógica de una infección seria, comorbilidad (diabetes mellitus, insuficiencia renal, hepatopatía etc.), infección Añadir anfotericina B. La única modificación em- documentada en un episodio previo de neutropenia, pírica que ha mostrado ser efectiva en el paciente con neoplasia no controlada, y ausencia de otras causas de in- fiebre persistente y neutropenia es la adición de un munodepresión. La mayoría de los pacientes neutro- agente antifúngico(78). Se utiliza la anfotericina B desoxi- pénicos hematológicos no entran en la categoría de ba- colato (0,6-1 mg/kg/d), o las formulaciones lipídicas jo riesgo. En la Tabla 19 se muestran algunas pautas (Abelcet 5 mg/kg) o liposomales (AmBisome 3-5 antibióticas que pueden usar en el paciente de bajo ries- mg/kg/d) de anfotericina B. Solo el Ambisome está go.
  • 41. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1071 Tabla 19. Pautas de tratamiento antimicrobiano empírico en paciente neutropénico de bajo riesgo. Sin antecedentes de tratamiento con fluoroquinolonas Levofloxacino 500 mg/24 h oral o i.v. Amoxicilina-ácido clavulánico 825-175 mg/8 h oral asociado a ciprofloxacino 750 mg/12 h oral Cefprozilo 500 mg/8 h asociado a ciprofloxacino 750 mg/12 h oral Tratamiento previo con fluoroquinolonas Ceftriaxona 1-2 g/24 h i.v. Ceftibuteno 400 mg/24 h oral que puede asociarse a teicoplanina 400 mg/24 h i.v. 8.5. Profilaxis de la infección de clorhexidina en lugar de povidona yodada para en la neutropenia desinfección de la piel parece una medida sencilla y eficaz. Los catéteres impregnados con antiséptico o Las medidas preventivas durante la neutropenia antibióticos también han demostrado su eficacia. Al- irán dirigidas fundamentalmente a disminuir las infec- gunos autores aconsejan una dosis de teicoplanina ciones bacterianas y fúngicas. La profilaxis irá dirigida a durante la insercción del cateter. cuatro frentes fundamentales: a) disminuir la adquisi- ción y colonización por microrganismos provenientes de 8.5.1. Mejorar las defensas del paciente fuentes ambientales; b) medidas para prevenir la infección asociada al ceteter; c) mejorar las defensas del paciente y Las inmunoglobulinas endovenosas no ejercen nin- d) suprimir o modular la flora endógena del paciente gún efecto protector durante la fase de neutropenia. puesto que la mayoría de las infecciones se originan en la Pueden tener algún efecto protector en algunas patolo- propia flora del paciente(85,86). Este último grupo de me- gías hematológicas como el TPH alogénico (una vez didas constituyen la llamada quimioprofilaxis que será pasada la fase de neutropenia) y en pacientes con mie- expuesta con más detalle a continuación. Sin embargo loma múltiple y leucemia linfoide crónica, pero incluso son las medidas de aislamiento y asepsia las más impor- en estas situaciones su indicación es discutible. tantes para la profilaxis de la infección durante la neu- La introducción de los factores de crecimiento de tropenia. la granulopoyesis (filgrastim, lenograstim) ofrecen la po- Entre las medidas del primer grupo destaca el sibilidad de acelerar la recuperación de los neutrófilos uso de aire filtrado con filtros HEPA. Estos filtros posquimioterapia y de esta manera disminuir la dura- se han mostrado muy efectivos en reducir las infec- ción de la neutropenia. Son de uso habitual en el contexto ciones transmitidas por vía aérea y eliminan prácti- del trasplante autólogo y de otras quimioterapias inten- camente la infección por Aspergillus, recomendán- sivas, sin embargo en los pacientes hematológicos no dose sobre todo para situaciones de neutropenia han conseguido una reducción significativa del núme- prolongada. Los lavados orales con clorhexidina pa- ro de episodios febriles ni la mortalidad. ra disminuir el número de estreptococos en la oro- faringe son otra medida básica. 8.5.2. Quimioprofilaxis antibacteriana Los pacientes sometidos a terapias intensivas suelen precisar de un catéter venoso central (CVC) La gravedad y prevalencia en los años 1970-1980 por vía percutánea. El CVC es uno de los focos de la bacteriemia por gérmenes aerobios gram nega- principales de infección en el paciente neutropéni- tivos hizo que la profilaxis con antibióticos se diri- co. El correcto cuidado del cateter por un equipo es- giera contra la flora endógena intestinal y Pseudo- pecializado y de acuerdo con un protocolo es la me- monas aeruginosa. Las pautas de descontaminación dida más importante para prevenir la infección total con antibióticos orales no absorbibles actual- asociada al cateter. A pesar de un correcto cuidado del mente apenas se usan o sólo en situaciones de muy al- cateter, la infección sigue siendo problema habitual y to riesgo y acompañadas de flujo laminar. El uso de por ello se han ensayado medidas adicionales. El uso antibióticos profilácticos endovenosos sistémicos
  • 42. 1072 FARMACIA HOSPITALARIA tampoco es una medida de uso habitual. La quimio- mg/d) se puede dar por vía i.v. o v.o. con alta biodis- profilaxis más aceptada usa antibióticos orales ab- ponibilidad. En el contexto del TPH alogénico se uti- sorbibles que consiguen una descontaminación se- liza el fluconazol a dosis altas (400 mg/d) y se debe lectiva de la flora aeróbica intestinal además de un mantener 75 días(89). efecto profiláctico sistémico. Los fármacos ideales El principal inconveniente del fluconazol es su li- para conseguirlo son las fluoroquinolonas las cuales mitado espectro. El intraconazol tiene un espectro an- se han mostrado superiores al trimetoprim-sulfame- tifúngico muy amplio: Candida spp, Aspergillus spp y toxazol. Con estos antibióticos se reducen las infec- otras levaduras y hongos filamentosos y por ello es un ciones microbiológicamente documentadas aunque agente muy interesante para la profilaxis. Varios ensa- no el número de episodios febriles. La quinolona yos randomizados han demostrado la eficacia al menos más usada es la ciprofloxacina a 250 o 500 mg/12 h. comparable al fluconazol. La profilaxis debe hacerse En algunos pacientes con alto riesgo de infección con solución de itraconazol a 2,5 mg/kg/12 h. por estreptococos (TPH, citarabina a dosis altas) pue- En el paciente con aspergillosis pulmonar previa de justificarse hacer también profilaxis con antibióticos que precise nuevamente tratamientos mielodepreso- activos para estreptococos (eritromicina, penicilina, le- ras se realizará profilaxis fúngica con anfotericina B vofloxacino). intravenosa a dosis altas (1 mg/kg/día), o las formu- Hay que tener siempre presente las limitaciones laciones lipídicas de anfotericina B. Quizás también el en la eficacia de las quinolonas, por ello muchos gru- itraconazol pueda ser eficaz. pos sólo la consideran indicada para aquellos pacientes Los métodos de detección de antígenos de hongos con una neutropenia previsiblemente profunda y pro- (ej., galactomannan por ELISA para Aspergillus) pue- longada. de permitir diagnosticar una micosis invasica varios días antes de que aparezca la enfermedad(90). El uso ex- 8.5.3. Quimioprofilaxis antifúngica tenso de estos test tal vez lleve a un enfoque tipo tera- La profilaxis fúngica se debe realizar cuando se pia preventiva tal como se hace actualmente en la pre- prevé que la neutropenia va a ser profunda (menos de vención de la infección por citomegalovirus (véase a 100/m l neutrófi1os) y duradera (más de una semana). continuación). La medida más eficaz para la prevención de los hongos filamentosos que se transmiten por inhalación de es- 8.5.4. Quimioprofilaxis antivírica poras (ej.: Aspergillus spp) es la filtración del aire con filtros HEPA Para la prevención de infección causada La única infección vírica de relevancia asociada a la por las levaduras oportunistas que forman parte de la neutropenia posquimioterapia es la infección herpé- flora endógena cutánea o intestinal (ej.: Candida spp), tica oral por reactivación del virus herpes simple. Se y para la profilaxis secundaria (paciente con antece- ha demostrado la utilidad del aciclovir (250 dentes de aspergilosis invasiva o de candidiasis dise- mg/m2/8-12 h ev, 200 mg/8 h vo ó 800 mg vo/12 minada crónica) deberemos recurrir a la quimioprofi- h) en leucemia aguda y TPH. Otros agentes como el va- laxis antifúngica(87, 88). laciclovir o famciclovir son probablemente igual de La terapéutica tópica con agentes orales no ab- eficaces. sorbibles (nistatina; anfotericina B, miconazol), la an- En el contexto del trasplante de PH alogénico son fotericina B inhalada en aerosol nasal y las dosis bajas frecuentes otras infecciones víricas una vez pasada la fa- de anfotericina B i.v. son medidas abandonadas. Los se de neutropenia y entre ellas destaca la infección por agentes antifúngicos absorbibles por vía oral tienen la citomegalovirus (CMV). La quimioprofilaxis de la in- ventaja de que su efecto no está limitado al tracto di- fección por CMV en el TPH alogénico se realiza con gestivo, con efectos antifúngicos sistémicos. Se ha ganciclovir o el foscarnet, y la aproximación actual no probado su eficacia de los triazoles en la prevención es una profilaxis sino una terapia preventiva(92). La te- de las micosis superficiales: orofaríngea, esofágica, rapia preventiva se basa en el tratamiento de la infección rectal, vaginal y cutáneas, consiguiendo secundaria- por CMV (viremia) antes de que se desarrolle la clíni- mente una reducción de la candidiasis invasiva en el ca (neumonía etc). El diagnóstico precoz de la infección contexto del trasplante de médula, siendo menos efi- se consigue con determinaciones periódicas del antí- caz en la leucemia aguda. El fluconazol (100-400 geno (ELISA) o ADN viral (PCR) en sangre.
  • 43. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1073 BIBLIOGRAFÍA of interferon-alpha for chronic myeloid leukaemia: improved survival irrespective of cytogenetic res- Leucemias agudas ponse. Lancet 1995; 345:1392-7. 1. Lowenberg B, Downing J, Burnett A. Acute mye- 15. Guilhot F, Chastang C, Guerci A, et al. Interferon loid leukemia. N Engl J Med 1999; 341:1051-62. alpha 2b (IFN) and cytarabine (ARA-C) increase 2. Fenaux P, Chomienne C, Degos L. Acute promye- survival and cytogenetic response in chronic mye- locytic leukemia: biology and treatment. Semin On- loid leukemia (CML). Results of a randomized trial. col 1997; 24:92-102. [resumen]. Blood 1996; 88(Suppl 1):141. 3. Tallman MS, Anderson JW, Schiffer CA, et al. All- 16. Druker BJ, Talpaz M, Resta DJ, et al. Efficacy and trans-retinoic acid in acute promyelocytic leukemia. safety of a specific inhibitor of the bcr-abl tyrosine N Engl J Med 1997; 337:1021-8. kinase in chronic myeloid leukemia. N Engl J Med 4. Mayer RJ, Davis RB, Schiffer CA, et al. Intensive 2001; 344:1031-7. post-remission chemotherapy in adults with acute 17. Van Rhee F, Szydlo RM, Hermans J, et al. Long- myeloid lukemia. N Engl J Med 1994; 331:896-903. term results after allogeneic bone marrow trans- 5. Cassileth PA, Harrington DP, Appelbaum FR, et al. plantation for chronic myelogenous leukemia in Chemotherapy compared with autologous or allo- chronic phase: a report from the Chronic Leukemia genic bone marrow transplantation in the manage- Working Party of the European Group for Blood ment of acute myeloid leukemia in first remission. and Marrow Transplantation. Bone Marrow Trans- N Engl J Med 1998; 339:1649-56. plant 1997; 20: 553-60. 6. Hughes WT, Armstrong D, Bodey G, et al. 1977 18. Devergie A, Blaise D, Attal M, et al. Allogeneic bone guidelines for the use of antimicrobial agents in neu- marrow transplantation for chronic myeloid leukemia tropenic patients with unexplained fever. Clin Infect in first chronic phase: a randomized trial of busulfan- Dis 1977; 25:551-73. cytoxan versus cytoxan-total body irradiation as pre- 7. Evans WE, Relling MV, Rodman JH, et al. Conven- parative regimen: a report from the French Society of tional compared with individualized chemotherapy Bone Marrow Graft. Blood 1995; 85:2263-68. for childhood acute lymphoblastic leukemia. N Engl 19. Rozman C, Montserrat E. Current concepts: J Med 1988; 338: 499-505. Chronic lymphocytic leukemia. N Engl J Med 8. Pui Ch, Evans We. Acute lymphoblastic leukemia. 1995; 333: 1052-7. N Engl J Med 1998; 339:605-15. 20. Rai KR, Sawitsky A, Cronkite EP, et al. Clinical sta- 9. Thandla S, Aplan PD. Molecular biology of acute ging of chronic lymphocytic leukemia. Blood 1975; lymphocytic leukemia. Semin Oncol 1977; 24:45-56. 46:219-34. 10. Scheinberg DA, Maslak P, Weiss M. Leucemias agu- 21. Cheson BD, Bennett JM, Grever M, et al. National das. En: Cáncer. Principios y Práctica de Oncología. Cancer Institute-Sponsored Working Group Gui- Editores: DeVita VT, Hellman S, Rosenberg S. 5ª delines for Chronic Lymphocytic Leukemia: Revi- ed. Madrid 2000. sed Guidelines for Diagnosis and Treatment. Blo- 11. Solano S. Leucemias agudas. En: Oncología Clínica od 1996; 87:4990-7. Básica. Editores Díaz-Rubio E, García-Conde J. 1ª ed. 22. Robertson LE, O’Brien S, Kantarjian H, et al. A 3-day Madrid 2000. schedule of fludarabine in previously treated chronic lymphocytic leukemia. Leukemia 1995; 9:1444-9. Leucemias crónicas 23. Keating MJ, O’Brien S, Kantarjian H, et al. Long 12. Clift RA, Appelbaum FR, Thomas ED. Treatment of term follow up of patients with chronic lymphocy- chronic myeloid leukemia by marrow tranplanta- tic leukemia treated with fludarabine as single agent. tion. Blood 1993; 82:1954-6. Blood 1993; 81:2878-84. 13. Hehlmann R, Heimpel H, Hasford J, et al. Rando- 24. Tallman MS, Hakimian et al. Cladribine in the treat- mized comparison of interferon-a with busulfan ment of relapse or refractory chronic lymphocytic and hydroxyurea in chronic myelogenous leukemia. leukemia. J Clin Oncol 1995; 13:983-8. Blood 1994; 84:4064-77. 25. Khouri IF, Przepiorka D, Besien KV, et al. Allogenic 14. Allan NC, Richards SM, Shephered PCA. UK Me- blood or marrow transplantation for chronic dical Research Council randomised, multicentre trial lymphocytic leukemia: timing of transplantation
  • 44. 1074 FARMACIA HOSPITALARIA and potential effect of fludarabina on acute graft- non-Hodgkin’s lymphoma.Haematologica 1999; versus-host disease. Br J Haematol 1997; 97:466-73. 84(Suppl 10):44-46. 39. Miller TP, Dahlberg S, Cassady JR, et al. Chemothe- rapy alone compared with chemotherapy plus ra- Linfomas diothetrapy for localized intermediate- and high- 26. Bhatia S, Rosison LL. Epidemiology of leukemia grade non-Hodgkin’s lymphoma. N Engl J Med and lymphoma. Curr Opin Hematol 1999; 6:201- 1998; 339:21-26. 204. 40. Fisher RI, Gaynor ER, Dahlberg S, et al. Com- 27. Harris NL, Jaffe ES, Diebold J, et al. Lymphoma parison of a standard regimen (CHOP) with classification-from controversy to consensus. The three intensive chemotherapy regiments for ad- REAL and WHO classification of lymphoid neo- vanced non-Hodgkin’s lymphoma. N Engl Med plasms. Ann Oncol 2000; 11(Suppl 1):3-10. 1993; 328:1002-1006. 28. Serrano S, Sans-Sabrafén J, Besses C, et al. Linfomas 41. Coiffier B, Lepage E, Briere J, et al. CHOP chemo- malignos no hodgkinianos. Bases citoevolutivas y therapy plus rituximab compared with CHOP alone funcionales. Clasificación y descripción de sus dis- in elderly patients with diffuse large-B-cell lympho- tintas variedades. En: Sans-Sabrafén J, Besses Raebel ma. N Engl Med 2002; 346:235-242. C, Vives Corrons JL, eds. Hematología clínica, 4ª ed. 42. Brunet S. Tratamiento de acondicionamiento. En: Madrid: Harcourt, 2001; 428-473. Carreras E, Brunet S, Ortega JJ, et. al, eds. Manual 29. Lister TA, Crowther D, Sutcliffe, SB, et al. Report de Trasplante Hematopoyético, 2ª ed. Collbató: An- of a commettee convened to discuss the evaluation tares, 2000; 219-231. and staging of patients with Hodkin’s disease: Cos- 43. Sans-Sabrafén J, Besses C, Pedro C. Enfermedad de twolds meeting. J. Clin Oncol 1987; 7:1630-1636. Hodgkin. En: Sans-Sabrafén J, Besses Raebel C, Vi- 30. Cheson DB, Horning SK, Coiffier B, et al. Report ves Corrons JL, eds. Hematología clínica, 4ª ed. Ma- of an international workshop to standardize res- drid: Harcourt, 2001; 428-473. ponse criteria for non-Hodgkin’s lymphoma. J Clin 44. Bocieck RG, Armitage JO. Hodgkin’s disease and Oncol 1999; 17:1244-1253. non-Hodgkin’s lymphoma. Curr Opin Hematol 31. The International Non-Hodgkin’s Lymphoma 1999; 6:205-215. Prognostic Factors Project. A predictive model for ag- 45. Aisenberg AC. Problems in Hodgkin’s disease ma- gressive non-Hodgkin’s lymphoma. N Engl J Med nagement. Blood 1999; 93:761-779. 1993; 329:987-994. 46. Hasenclever D, Diehl V. A prognostic score for ad- 32. Bocieck RG, Armitage JO. Hodgkin’s disease and vanced Hodgkin’s Disease. N Engl J Med 1998; non-Hodgkin’s lymphoma. Curr Opin Hematol 339:1506-1514. 1999; 6:205-215. 47. Engert A, Woldf J, Diehl V. Treatment of advan- 33. Ribera JM, Batllé M. Pautas de quimioterapia en he- ced Hodgkin’s lymphoma: Standard and Experi- mopatías malignas. Madrid: Acción Médica, 2001. mental Aproaches. Semin Hematol 1999; 36:282- 34. Keating JM. Purine analogs in the management of in- 289. dolent lymphoproliferative disorders. Haematologi- 48. Sureda A, Rovira M. Enfermedad de Hodgkin. En: ca 1999; 84(Suppl 10):28-32. Carreras E, Brunet S, Ortega JJ, et al, eds. Manual 35. Solal-Céligny P for the “Groupe d’etudes des lym- de Trasplante Hemtopoyético, 2ª ed. Caollbató: An- phomes de l’adulte”. Interferons in the manage- tares, 2000; 113-120. ment of indolent non-Hodgkin’s lymphomas. Hae- matologica 1999; 84(Suppl 10):38-40. Mieloma múltiple 36. Rai KR. New Biologic Therapies. Semin Hematol 49. Besses C, Sans-Sabrafén J. Gammapatías monoclo- 1999; 36(Suppl 5):12-17. nales. Clasificación. Métodos de detección. Gam- 37. Bocchia M, Bronte V, Colombo MP, et al. Antitu- mapatía monoclonal de significado indeterminado. mor vaccination: where we stand. Haematologica En: Hematología clínica. Editores: Sans-Sabrafén J, 2000; 85:1172-1206. Besses Raebel C, Vives Corrons JL. 4ª ed. Harcourt, 38. Tarella C, Caracciolo D, Corradini P, et al. Highdose S.A., p: 565-573. Barcelona 2001. chemotherapy with PBPC autofraft in low grade 50. Bladé J. Mieloma múltiple. En: Hematología clí-
  • 45. HEMATOLOGÍA CLÍNICA 1075 nica. Eds. Sans-Sabrafén J, Besses Raebel C, Vi- to three-times-weekly dosing. Clin Oncol 2001; ves Corrons JL. 4ª ed. Harcourt, S.A.; p: 574-588. 19:2875-2882. Barcelona 2001. 63. Bronchud MH. factores de colonia y hemoderiva- 51. Alegre A, Martínez C, Fernández-Rañada JM. Tra- dos. En: González Barón M, Ordóñez A, Feliu tamiento del mieloma múltiple y otras gammapatías Amora P, et al, eds. Oncología Clínica: Fundamentos monoclonales. En: Terapia en oncohematología. y patología general, 2ª ed. Madrid: McGraw Hill Ed. Fernández-Rañada JM. Harcourt, S.A.; p: 211- 1998; 617-625. 227. Madrid 1997. 64. Booth D, Potten CS. Protection against mucosal in- 52. Singhal S, Metha J, Desikan R, et al. Antitumor acti- jury by growth factors and cytokines. J Natl Cancer vity of thalidomide in refractory multiple myeloma. Inst Monogr 2001; 29:16-20. N Eng J Med 1999; 341:1565-71. 53. Barlogie B, Zangari M, Spencer T, et al. Thalidomi- Náuseas y vómitos de in the management of multiple myeloma. Semin 65. Laszlo J. Nausea and vomiting as mayor complica- Hematol 2001; 38:250-9. tions of cancer chemotherapy. Drugs 1983; 54. Besinger WI, Maloney D, Storb R. Allogenic hema- 25(Suppl 1): 203-8. topoietic cell transplantation for multiple myeloma. 66. Morrow GR, Hicckok JT, Rosenthal SN. Progress in Semin Hematol 2001; 38(3):243-9. reducing nausea and emesis. Comparisons of On- 55. Cheer SM, Noble S. Zoledronic acid. Drugs 2.001; dansetron (Zofran), Granisretron (Kytril) and Tro- 61: 799-805. pisetron (Navoban). Cancer 1995; 76:343-57. 56. Berenson JR. Advances in the biology and treat- 67. Joss RA, Brand BC, Buser KS, et al. The sympto- ment of myeloma bone disease. Am J Health Syst matic control of cytostatic drug-induced emesis. A Pharm 2001; 58(S3):516-20. recent history and review. Eur J Cancer 1990; 26 (Suppl 1):2-8. Factores de crecimiento hematopoyético 68. Mullin S, Beckwith MC. Prevention and Manage- 57. Fetscher S, Mertelsmann R. Suportive care in he- ment of chemotherapy-induced nausea and vomi- matological malignancies: hemayopoietic growth ting, part 2. Hosp Pharm 2001; 36:280-302. factors, infections, transfusión therapy. Curr Opin 69. American Society of Health-System Pharmacists. Hematol 1999; 6:262-273. ASHP Therapeutic Guidelines on the Pharmacolo- 58. Carrato A, Rodríguez-Lescure A, Gonzálvez ML. gic Management of Nausea and Vomiting in Adult Factores de crecimiento hematopoyético. En: On- and Pediatric Patients Receiving Chemotherapy or cología Médica. Cortés-Funes H, Díaz-Rubio E, Radiation Therapy or Undergoing Surgery. Am J García-Conde J y cols. Ed. Princeps, Madrid-Barce- Health-Syst Pharm 1999; 56:729-64. lona 1999; 198-215. 70. Martindale. The Extra Pharmacopoeia. 31 ed. Lon- 59. Ozer H, Armitage JO, Bennett CHL, et al. 2000 don: The Pharmaceutical Press. Update of recommendations for the use of hema- 71. Drugdex® Editoral Staff. Drugdex® Information topoietic colony-stimulating factors: evidence-ba- System. Micromedex Inc. Englewood, Colorado. sed, clinical practice guidellines. Clini Oncol 2000; Vol. 10, 2001. Drug Evaluation Monographs of 18:3558-3585. Nabilone. 60. Escobar I, Sevilla E, Rodríguez S, et al. Estudio mul- 72. Hesketh PJ, Gralla RJ, Webb RT, et al. Randomized ticéntrico de utilización de factores estimulantes de phase II study of the neurokinin 1 receptor antago- crecimiento hematopoyético. Farm Hosp 1998; 22: nist CJ-11.974 in the control of cisplatin-induced 109-125. emesis. J Clin Oncol 1999; 17:338-43. 61. Sevilla E, Del Hoyo Gil L. Estudio de utilización de 73. Roila F, Ciccarese G, Palladino MA, et al. Preven- eritropoyetina en pacientes oncológicos. Farm tion of radiotherapy-induced emesis. Tumori 1998; Hosp 2000; 24:398-405. 84: 274-8. 62. Gabonchud MH, Factoresrilove JL, Cleeland ChS, et Prevención y tratamiento de las infecciones al. Clinical evaluation of once-weekly dosing of en el paciente neutropénico epoetin alfa in chemotherapy patients: improve- ments in hemoglobin and quality of flife are similar 74. García Rodríguez JA, Gobernado M, Gomis M, et al.
  • 46. 1076 FARMACIA HOSPITALARIA Guía clínica para la evaluación y el tratamiento del sistent fever. N Engl J Med 2002; 346:225-234. paciente neutropénico con fiebre. Rev Esp Qui- 83. Rolston KV. New trends in patient management: mioter 2001; 14:75-83. risk-based therapy for febrile patients with neutro- 75. Zinner SH. Changing epidemiology of infections penia. Cin Infec Dis 1999; 29:515-521. in patients with neutropenia and cancer: emphasis 84. Mensa J, Rovira M. Infecciones bacterianas. En: Ca- on gram-positive and resistant bacteria. Clin Infec rreras E, Brunet S, Ortega JJ, et al, eds. Manual de Dis 1999; 29:490-494. Trasplante Hematopoyético, 2ª ed. Collbató: Antares, 76. Viscoli C. Planned progressive antimicrobial therapy 2000; 355-362. in neutropenic patients. Br J Haematol 1998; 85. Guidelines for preventing opportunistic infecions 102:879-888. among hematopoietic stem cell transplant reci- 77. Jones RN. Contemporary antimicrobial susceptibi- pients. MMWR Recomm Rep 2000; 49 (RR-10):1- lity patterns of bacterial pathogens commonly as- 125. sociated with febrile patients with neutropenia. Clin 86. Rovira M. Profilaxis de las infecciones. En: Carreras Infec Dis 1999; 29:495-502. E, Brunet S, Ortega JJ, et al, eds. Manual de Tras- 78. Hughes WT, Amstrong D, Bodey GP, et al. 1997 plante Hematopoyético, 2ª ed. Collbató: Antares, guidelines for the use of antimicrobial agents in 2000; 315-323. neutropenic patients with unexplained fever. Infec- 87. Rovira M, Fernández-Avilés. Infecciones fúngicas. tious Diseases Society of America. Clin Infec Dis En: Carreras E, Brunet S, Ortega JJ, et al, eds. Manual 1997; 25:551-573. de Trasplante Hematopoyético, 2ª ed. Collbató: An- 79. Ramphal R. Is monotherapy for febrile neutropenia tares, 2000; 369-374. still a viable alternative? Clin Infec Dis 1999; 29:508- 88. Ascioglu S, de Pauw BE, Meis JF. Prophylaxis and 514. treatment of fungal infections associated with hae- 80. Feld R. Vancomycin as part of initial empirical anti- matological malignancies. Int J Antimicrob Agents biotic therapy for febrile neutropenia in patients 2000;15:159-168. with cancer: pros and cons. Clin Infect Dis 1999; 89. Marr KA, Seidel K, Slavin MA, et al. Prolonged flu- 29;503-507. conazole prophylaxis is associated with persistent 81. Boogaerts M, Winston DW, Bow EJ, et al. In- protection against candidiasis-related death in allo- travenous and oral intraconazole versus intra- geneic marrow transplant recipients: long-term fo- venous amphotericin B deoxycholate as empi- llow-up of a randomized, placebo-controlled trial. rical antifungal therapy for persistent fever in Blood 2000; 96:2055-2061. neutropenic patients with cancer who are recei- 90. Klont RR, Meis JF, Verweij PE. Critical assessment ving boradl-spectrum antibacterial therapy. A of issues in the diagnosis of invasive aspergillosis. randomized, controlled trial. Ann Intern med Clin Microbiol Infect 2001; 7(Suppl 2):32-37. 2001; 135:412-422. 91. Whitley RJ, Roizman B. Herpes simplex virus in- 82. Walsh TJ, Pappas P, Winston RJ, et al. For the Na- fections. Lancet 2001; 357:1513-1518. tional Institutte of Allergy and Infectious Diseases 92. Stocchi R, Ward KN, Fanin R, et al. Management Mycoses Study Group. Voriconazole compared of human cytomegalovirus infection and disease af- with liposomal amphotericin B for empirical anti- ter allogeneic bone marrow transplantation. Hae- fungal therapy in patients with neutropenia and per- matological 1999; 84:71-79.