La identidad digital se construye a través de la actividad del usuario en Internet, como publicar contenido en blogs, redes sociales y otros sitios web. Para gestionar la identidad digital, es importante homogeneizar la presencia en línea a través de herramientas como OpenID y Facebook Connect, y proteger la información personal mediante contraseñas seguras y privacidad en la configuración. También se deben seguir consejos como evitar publicar fotos comprometidas y ser consciente de que el contenido compartido puede permanecer en línea.