El documento resume la evolución de la actividad económica chilena en el segundo trimestre de 2016. El PIB registró un alza de 1,5% interanual, acumulando un crecimiento de 1,9% en el primer semestre. La demanda interna creció 1,4% impulsada por el consumo, mientras que la inversión cayó. Sectores como servicios personales y comercio contribuyeron al crecimiento, mientras que minería e industria lo redujeron.