El documento examina la relación histórica entre la naturaleza y la sociedad, señalando que el deterioro ambiental se ha intensificado desde la Revolución Industrial y demanda un acercamiento equilibrado en las políticas de desarrollo. Se enfatiza la importancia del desarrollo sostenible, que busca satisfacer las necesidades actuales sin comprometer a las futuras generaciones, y se destaca la interrelación entre salud, bienestar social y medio ambiente como claves para un enfoque de desarrollo integral. Además, menciona hitos relevantes en la evolución de la conciencia ambiental a nivel global y la necesidad de instituciones y marcos de gestión que integren estos principios.