Este documento presenta una clasificación de los productos agrícolas en tres categorías: morfológica, comercial y según su grado de perecibilidad. La clasificación morfológica divide los productos en raíces, tallos, hojas y frutos. La clasificación comercial incluye hortalizas, tubérculos, frutas, cereales y legumbres. Finalmente, la clasificación por grado de perecibilidad distingue entre productos altamente perecederos y menos perecederos.