el jugador del centro es el guardia y tiene en su poder el objeto. Su misión es cuidarlo
para que no se lo roben. El resto de los jugadores son los ladrones que intentarán quitarle el
objeto al guardia sin que los descubra. El guardia no puede moverse de su lugar, solo puede
girar la cabeza y los brazos para vigilar. Los ladrones se mueven sigilosamente para acercarse al
guardia. Cuando uno logra quitarle el objeto, debe correr a su lugar sin ser atrapado. Si el
guardia logra atraparlo, cambian de