La justicia indígena en Ecuador se basa en las tradiciones y cultura propias de los pueblos indígenas. Reconoce sus propias autoridades y procedimientos para resolver conflictos internos de acuerdo a sus costumbres, siempre que no violen la Constitución ni los derechos humanos. El objetivo es conservar la armonía en la comunidad mediante sanciones que buscan la reparación, purificación y reconciliación.