En el año 884, el Conde Diego Porcelos fundó la ciudad de Burgos mientras los Reinos Cristianos avanzaban hacia el sur. Burgos sufrió ataques árabes en el siglo X, incluyendo uno en 934 en el que los árabes destruyeron cosechas y el Monasterio de San Pedro de Cardeña. En el siglo XI, la sede episcopal se trasladó a Burgos y en 1074 las hermanas del rey Alfonso VI donaron la iglesia de Sta. María de Gamonal para que sirviera como sede.