El documento discute las prácticas de lectura, escritura y oralidad en el contexto académico. Explica que estas prácticas son sociales e intelectuales, y toman diferentes formas según el contexto sociocultural. También describe los géneros discursivos complejos usados en la academia y señala que todos los estudiantes necesitan aprender estas prácticas a través de comunidades de práctica para acceder plenamente a la formación universitaria.