La Ley Orgánica de Bienestar Animal busca regular las relaciones entre humanos y animales basándose en argumentos éticos, sociales, económicos y científicos. Numerosos estudios demuestran una relación entre la violencia hacia animales y la violencia interpersonal, por lo que proteger a los animales puede reducir la violencia social. Además, los avances científicos muestran que los animales son seres conscientes capaces de sentir dolor y emociones, por lo que merecen protección. La ley se propone cambiar la visión