El gobierno de Oaxaca anunció la cancelación del parque eólico San Dionisio en la barra de Santa Teresa, lo que representa una victoria parcial para las comunidades indígenas que exigen respeto a su derecho a consulta. La decisión se debe a la presión de protestas y una orden judicial, aunque los activistas enfatizan la necesidad de una resolución formal por escrito. Las comunidades continúan movilizándose contra otros proyectos eólicos, citando violaciones de derechos y la falta de consultas adecuadas conforme al convenio 169 de la OIT.