La norma establece un código de colores para el almacenamiento de residuos sólidos, asignando un color distinto a cada tipo de residuo para facilitar su clasificación y posterior gestión. Define términos clave como almacenamiento, aprovechamiento, generador, reciclaje, residuos municipales y residuos sólidos no aprovechables. Establece su aplicación a todos los residuos sólidos generados excepto residuos radiactivos, residuos militares, residuos líquidos y emisiones gaseosas.