El documento analiza la importancia de la gestión escolar en el logro de objetivos educativos, abarcando aspectos como la optimización de recursos, mejora de la calidad educativa y liderazgo efectivo. Se detalla que una buena gestión permite la adaptación al cambio y la evaluación continua de estrategias, contribuyendo así a un entorno escolar más eficiente. Finalmente, se concluye que la creación de estructuras organizativas adecuadas es esencial para fomentar la participación en la toma de decisiones dentro de las instituciones educativas.