El cambio climático en El Salvador está causando efectos severos, incluyendo un aumento en la temperatura, intensidad de eventos climáticos extremos y reducción de recursos hídricos, lo que provoca pérdidas económicas significativas y desafíos para el desarrollo sostenible. Se estima que las pérdidas anuales ascienden a aproximadamente el 1.3% del PIB, con sectores como agricultura y salud gravemente afectados. El país necesita implementar acciones urgentes y coherentes en su primer Plan Nacional de Cambio Climático para adaptarse y mitigar estos impactos.