El documento discute varias profecías bíblicas que se han cumplido o se están cumpliendo, como el diluvio, la destrucción de Sodoma y Gomorra, y la primera venida de Jesucristo. Luego enumera señales de los últimos tiempos como enfermedades, desastres naturales, violencia e inestabilidad geopolítica que indican que el rapto de la iglesia podría ocurrir en cualquier momento. Finalmente, exhorta a los lectores a aceptar a Jesús como su salvador personal para estar preparados.