El documento describe el surgimiento de la Revolución Industrial en Inglaterra y sus efectos a largo plazo. Cambió las formas de producción al introducir las fábricas, la concentración, división y mecanización del trabajo. Esto llevó a la transición de una economía agrícola a una basada en la industria, con trabajadores migrando de las áreas rurales a las ciudades. Sin embargo, también trajo consigo malas condiciones laborales y conflictos sociales.