Este documento describe el contexto intelectual y cultural de Alemania en el siglo XVIII. En ese momento, Alemania no era un estado unificado sino una colección de estados independientes. La cultura universitaria enfatizaba la libertad de pensamiento. Filósofos como Kant y Herder promovieron nuevas ideas sobre el sujeto, la razón y la historia que influyeron en el romanticismo alemán.