Ezequiel Moreno profesó como fraile agustino recolecto en 1864. Fue ordenado sacerdote en 1871 y sirvió como misionero, vicario apostólico y obispo de Pinara y Pasto entre 1893 y 1906. Realizó obras de caridad y fue canonizado en 1992 por sus virtudes y dos milagros atribuidos a su intercesión. Murió en 1908 en Monteagudo tras una vida dedicada a Dios, la Iglesia y los demás.