El documento describe cómo las células del cuerpo se comunican y trabajan juntas en el proceso de curación tras una lesión, usando señales químicas. Las células sanguíneas, fibroblastos y plaquetas juegan roles clave en la formación de coágulos y la reparación de tejidos mediante la activación de factores de crecimiento que estimulan la proliferación celular. A través de una serie de vías de señalización, las células transmiten señales del exterior al núcleo, donde se inicia la síntesis de proteínas necesarias para la cicatrización.