El servicio al cliente va más allá de la amabilidad y sonrisas; se basa en un proceso que incluye la selección cuidadosa de empleados con competencias adecuadas, capacitación integral, y la creación de manuales de procesos y objeciones. Es fundamental que los empleados estén empoderados en la toma de decisiones y entiendan el valor de satisfacer las necesidades del cliente para fomentar la fidelización. La empatía y el conocimiento del producto son esenciales para brindar un servicio al cliente excepcional.