Un viejo profesor les enseñó a un grupo de ejecutivos sobre la planificación del tiempo a través de un experimento con piedras y arena en un tarro. El profesor llenó el tarro primero con grandes piedras, luego con piedras más pequeñas y arena, demostrando que siempre hay espacio si se priorizan primero los elementos más importantes. La lección clave es que es necesario enfocarse primero en las "piedras grandes" de la vida como la salud, familia y sueños para no arriesgarse a no lograr la