Platón propuso la teoría de las ideas, según la cual existen dos mundos, el sensible y el inteligible. En el mundo inteligible habitan las ideas eternas e inmutables que son la verdadera realidad, mientras que el mundo sensible contiene objetos cambiantes que son copias imperfectas de las ideas. Platón también defendió que el alma humana está formada por tres partes y que la virtud consiste en el conocimiento del bien, y que los filósofos deben gobernar el Estado ideal aplicando dicho conocimiento.