El síndrome coronario agudo (SICA) incluye infarto agudo al miocardio con y sin elevación del segmento ST, así como angina inestable, y se basa en la evidencia de necrosis miocárdica con síntomas característicos. El diagnóstico y tratamiento inicial requiere un electrocardiograma, biomarcadores cardíacos y medidas pre-hospitalarias como administración de oxígeno y antiagregantes, mientras que el manejo intrahospitalario comprende analgesia, nitratos y bloqueadores beta, además de consideraciones de riesgo. Para el tratamiento a largo plazo, es fundamental cambios en el estilo de vida, así como una terapia farmacológica adecuada para prevenir recaídas.