Este documento resume la arquitectura del Renacimiento en España durante el siglo XVI. Describe tres estilos arquitectónicos: el Plateresco, caracterizado por su ornamentación excesiva; el Purismo, que enfatiza la estructura clásica sobre la decoración; y el Manierismo o Herreriano, de austeridad y sobriedad. También resalta obras significativas como la Universidad de Salamanca, el Palacio de Carlos V en Granada, y el Monasterio de El Escorial.