Alemania produce principalmente vinos blancos de alta calidad. La vid se cultiva en las regiones del oeste y sur del país, siguiendo los valles de ríos como el Rin. Las variedades más importantes son Riesling, Müller-Thurgau y Silvaner. Los vinos alemanes se dividen en de mesa y de calidad, siendo esta última categoría la más prestigiosa e incluyendo denominaciones como Kabinett, Spätlese y Eiswein.